A Luchar Barrancabermeja - Un espacio por la vida

A LUCHAR BARRANCABERMEJA
Es conveniente por diversas razones, ilustrativas entre otras, iniciar con un marco
muy general de lo que fue A Luchar.
A Luchar existió, con diferentes énfasis y desarrollos, en otros lugares de
Colombia, aquí, aunque, se tome una caracterización nacional de lo que fue este
movimiento, aplica perfectamente para Barrancabermeja dadas sus condiciones y
unidad al núcleo general. Este invaluable aporte para la reconstrucción de la
memoria histórica se ha tomado, mayormente, de los escritos realizados por John
Freddy Caicedo Álvarez para el proyecto Colombia Nunca Más, Zona III, titulado
“A Luchar deudas con nuestra memoria”, de una tesis a Magister realizada por
María Fernanda Espinosa y por diversos testimonios de quienes fueron miembros
de A Luchar a nivel regional.
QUÉ FUE A LUCHAR
Desde la Primera Convención, A Luchar se alinderó políticamente con los
sectores de izquierda revolucionaria1, aunque no negaba relaciones con los
sectores democráticos, pero fue más allá al anunciar públicamente su oposición a
los diálogos de paz con el gobierno de Belisario, lo que de paso llevaba a una
identificación política con las insurgencias que no establecieron diálogos con el
gobierno.
A Luchar, en tal sentido, era una organización de izquierda revolucionaria no
armada, que reconociendo como legítima a la insurgencia armada, ella misma no
lo estaba, aunque sí hacia un llamado a la movilización como elemento central de
la lucha política del pueblo y sus organizaciones; es decir, que además de
oponerse a los diálogos insurgencia – gobierno, se oponía a la conciliación y a la
negociación entre sectores sociales y estado o entre organizaciones sindicales y
patronos, de allí su insistencia en que dichos acercamientos solo pueden hacerse
como producto de la movilización social y no para evitarla.
1 Para el presente documento asumo, después de conocer directamente a la izquierda
por muchos años, que en ella se pueden identificar diversas tendencias estratégicas y
sobre, diferentes concepciones sobre los medios para alcanzar dichos fines, diversidad de
la cual solo quiero retomar dos aspectos de gran calado, primero una tendencia que
considera que dentro del marco institucional formal de la democracia se pueden
alcanzar progresivamente las aspiraciones, a esa le denomino como izquierda
democrática, frente a la cual se erige otra izquierda cuya concepción sobre los medios
de alcanzar los fines estratégicos concibe que la fuerza fundamental esta en la
capacidad de confrontación que el pueblo tenga frente a las elites, lo que implica una
lucha contra dichas elites, de donde las aspiraciones estratégicas necesariamente deben
contemplar la construcción de un marco institucional distinto, donde la democracia
como factor formal se subordina a una democracia real en un nuevo marco institucional
denominado socialista, donde las elites capitalistas pierden el poder y toda capacidad
de negociación estratégica.
A Luchar señalaba que su proyección estratégica era el socialismo, en un marco
de solidaridad internacional y de unidad nacional, sin pretensiones vanguardistas
sus demandas por derechos y garantías dentro del modelo capitalista, se procuran
solo en la medida en que las mismas posibiliten avances en el proyecto de poder
para el pueblo y sus organizaciones en un marco socialista, anti – imperialista y
anti – capitalista.
Si bien A Luchar adelantaba procesos de lucha dentro del sistema democrático
formal colombiano y dentro del sistema capitalista dependiente colombiano, estos
procesos procuraban mejorar las condiciones actuales (reformas), pero no eran el
fin último, sino puentes que ayudarían a dar pasos más seguros hacia la
destrucción de esa democracia formal y de ese sistema capitalista dependiente,
para ser sustituidos por una democracia real en un sistema cuyo marco económico
sea socialista.
Durante su existencia logró mantener una significativa fuerza y participación de la
movilización colectiva en todo el país a partir de una estrategia de construcción de
unidad del movimiento social, en el plano de las búsquedas de unidad política y de
acción de los sectores obreros, campesinos y populares, denominaciones bajo las
cuales se procura incluir a los diferentes componentes del pueblo colombiano.
“A Luchar es una organización autónoma que está abierta a todas las
organizaciones que estén interesadas en un cambio real y que se decidan a
trabajar por la revolución, así sea en la más sencilla de las actividades. Por eso,
es una organización decidida a promover la más amplia iniciativa de sus miembros
y a respetar la dinámica de las organizaciones, acudiendo a la consulta
permanente y a la resolución de las contradicciones en un marco amplio y
fraternal: esto es la práctica de la democracia interna”.
A Luchar fue también una propuesta de unidad que logró reunir vertientes muy
distintas del pensamiento político de izquierda. En este movimiento se juntaron
sectores de formación marxista, leninista, algunos de tradición maoísta, trotskistas,
camilista, algunos con influencia de la revolución cubana y otros por la revolución
china. Se trataba de la concentración de distintas vertientes del pensamiento
político de la izquierda, que históricamente habían estado separadas.
Adicionalmente A Luchar junto con la Unión Patriótica y el Frente Popular
participaron en la creación de un espacio unitario de las principales fuerzas de
izquierda de este periodo”
INICIOS DE A LUCHAR EN BARRANCABERMEJA Y MAGDALENA MEDIO,
¿POR QUÉ NACIÓ, CUÁLES ERAN SUS APUESTAS?
A LUCHAR en Barrancabermeja inicia como en todas las partes de Colombia
donde tuvo expresión, es decir, con un marcado énfasis de lo sindical y con el
paso de los años, aproximadamente hacia 1986, llegan sectores representativos
del campesinado, del estudiantado y desde luego del sector popular. La necesidad
de sobrevivir obliga a que aún, no se puede hablar de nombres, por lo tanto, de su
estructura solo se menciona que existían comités que lideraban el área de las
comunicaciones, de la formación política, de lo ideológico, entre otros, y que a su
vez estos se desplegaban o reproducían a partir de grupos que recibían por
nombres, células y de estos, existían algunos representantes que interactuaban
con los siete que conformaban la dirección nacional para la coordinación de todo
el accionar de A LUCHAR. Se procuraba una estructura horizontal, deliberativa y
muy participativa.
Dice María Fernanda Espinosa, otra de nuestras aportantes teóricas, en su tesis
sobre A Luchar para optar al título de Magister en estudios políticos en la
Universidad Nacional de Colombia, facultad de estudios políticos y relaciones
internacionales: “A Luchar surge en el año de 1984, como un agrupamiento
sindical que posteriormente decide ampliarse quedando integrado por campesinos
e indígenas, así como por organizaciones de mujeres, estudiantes y cristianos de
base.
“Las primeras reuniones de coordinación se realizaron a partir del 4 de agosto de
1984, después de dieciocho meses de intenso trabajo, aparece públicamente el
movimiento ¡A Luchar!, en el Encuentro Obrero, Campesino y Popular, realizado
entre el 16 y 17 de marzo de 1985, organizado como uno de los eventos
conmemorativos de la muerte del líder comunero José Antonio Galán”
¡A Luchar! se presenta públicamente como un Acuerdo Político Sindical de las
fuerzas que estaban en contra de la política de Tregua, Concertación y Diálogo
Nacional ofrecida por el gobierno de Belisario Betancur y contra sus reformas
económicas y que empezaban a orientar su trabajo hacia el Paro Cívico Nacional
del 20 de junio de 1985. Después de este evento, el trabajo de consolidación de ¡A
Luchar!, duraría más de un año.
A LUCHAR nace, a decir de las fuentes, como una iniciativa que tiene su razón
interna, en el hecho de que sus fundadores sentían que no encajaban dentro de
las propuestas y accionar de las organizaciones de izquierda existentes en el
mapa político nacional y veían que esta situación también existía en el pueblo, tal
vez esto explica un poco que luego de su surgimiento A LUCHAR tuviera una
aceptación y expansión rápida en la ciudad y la región
“Nacimos en medio de un agudo conflicto político, social y armado, siendo
partícipes en las luchas de clases donde nuestro actuar fue lo que nos impulsó en
el ascenso de la lucha política”. A LUCHAR tuvo acción directa en cuanta
expresión de descontento social y popular que se dio en la región, participaba
activamente, liderando, coordinando, auto gestionando directamente con la gente,
sin delegar, sino entrelazados con el pueblo que sufría el rigor de la adversidad,
algunas de estas expresiones fueron:
a) Huelgas obreras,
b) Paros de trabajadores del Estado toma de tierras rurales y urbanas, en
Barrancabermeja son conocidos los barrios Pablo Acuña, las granjas, entre
otros.
c) Movilizaciones como los paros populares del nororiente realizados en 1987
y 1988 donde participó un enorme número de manifestantes
d) Mítines.
Al principio hubo limitaciones en al accionar político por su carácter que, como se
dijo atrás fue fundamentalmente sindical debido a que surgió como un proyecto
político-sindical. Y también porque: “nos tocaba ser doblemente clandestinos,
clandestinos ante el enemigo que confrontábamos, que eso se entendía como
normal, pero nos tocaba ser clandestinos frente a los que considerábamos de la
misma orilla ideológica, porque estos nos consideraban de alguna forma traidores
y con ideas más que socialistas, anarquistas”
Dice otra fuente: “Nos unió la lucha contra los imperialistas y oligarcas y nos
consolido el debate político e ideológico a nuestro interior”.
A LUCHAR Barrancabermeja al regionalizar las líneas nacionales definía sus
guías de acción hacia un nuevo camino de unidad así:
a) Organizar la resistencia, unir voluntades, mujeres, hombres y prepararse en
mejores condiciones para la lucha irreconciliable contra todas las medidas
del gobierno y la institucionalidad del Estado capitalista.
b) Unificados por la independencia del movimiento Obrero, Campesino y
Popular.
c) En ser solidarios internacionalistas y con nuestros hermanos de clase en
Colombia.
d) En mantener la bandera de lucha anti-imperialista
e) Y la política de lograr la unidad de los diferentes sectores del pueblo.
APUESTAS DE A LUCHAR
De lo encontrado y los testimonios recogidos sobre A Luchar, resalta la
coherencia, la integralidad, el enraizamiento y el desarrollo de sus propuestas, de
modo que las propuestas de A Luchar a nivel nacional surgían por los insumos
que desde las regiones se llevaban, de esta forma se creaban las líneas gruesas
del accionar nacional y se irrigaban, desde la convención nacional a las regiones
quienes posteriormente confluían y sumaban en el trabajo desde el sentir y
acatamiento de la voluntad popular.
Como expresión política y social en la ciudad fuimos desarrollando nuestra acción
política hacia las transformaciones sociales y la construcción de un nuevo
proyecto alternativo de ciudad, mediante la influencia política a importantes y
activos sectores sociales, buscando su articulación y confluencia principalmente
alrededor de la consiga de la unidad obrero, campesina y popular. Desarrollando
como estrategia principal la movilización social como método de lucha y
reivindicación de los diferentes sectores sociales. Y la lucha extra-institucional
como instrumento de confrontación a la clase política que ostentaba el poder y
profundizaba los niveles de marginalidad, exclusión y represión en contra de
nuestro pueblo.
Pero también éramos conscientes de la necesidad de fortalecer un gran frente
amplio con otros sectores sociales y políticos para profundizar los niveles de
unidad, resistencia y lucha política a través de la creación de la Coordinadora
Popular de Barrancabermeja, instancia que buscaba una amplia participación
popular en la búsqueda de solucionar nuestras problemáticas e incidir en la
construcción de la vida de la ciudad, a través de procesos de integración y unidad.
Y teniendo como referente nuestra consigna del “EL PUEBLO HABLA Y EL
PUEBLO MANDA”.
Recuerda un testimoniante: “En la convención nacional realizada en el teatro
Jorge Eliecer Gaitán de Bogotá en donde asistieron más de 750 delegados de
todo el país, se definieron las principales guías políticas para la acción de A
Luchar” y en sus escritos John Freddy Caicedo lo recoge de la siguiente forma:
Guías Políticas
En estas guías, de gran importancia por ser las primeras definiciones
sistematizadas y comunicadas a las personas de A Luchar, se habla de la
abolición del Estado Capitalista y de la dominación del imperialismo
norteamericano, buscando ser poder en escenarios contrarios a la democracia
burguesa, aprendiendo a auto–gobernarse y auto–organizarse para implantar un
Nuevo Estado Obrero y Popular con representatividad de organizaciones y
movimientos políticos, con una irrestricta y amplia democracia para los de abajo,
se dice:
1.
Luchamos contra el capitalismo, contra la oligarquía y los capitalistas
colombianos, es decir, por la liberación nacional y social, por la
construcción de un Poder Obrero y Popular y por el Socialismo.
2.
Luchamos por los principios de la independencia de clase, que quiere
decir que la clase obrera y los sectores populares deben tener su propio
programa, absolutamente independiente de la burguesía y sus partidos,
del Estado y los patronos, del imperialismo y sus agentes, así como
todas las formas de concertación, pacto social y cogobierno que ellos
generen.
Nuevamente se enfatiza en la importancia de la lucha en la movilización política,
esto es en acciones de hecho y no en acciones de negociación.
3.
Para el desarrollo y logro de los objetivos que nos proponemos,
privilegiamos desde ya la acción directa de masas, con sus huelgas,
paros, tomas de tierra, paros cívicos, enfrentamientos, autodefensa de
masas y todas las demás formas de organización que las masas adopten
en su proceso revolucionario. Luchamos contra el burocratismo en el
movimiento obrero y por la democracia obrera.
4.
Nos reclamamos internacionalistas proletarios y apoyamos todas las
luchas de los pueblos del mundo por su autodeterminación y liberación
definitiva. En particular impulsamos la unidad de los pueblos
latinoamericanos y de los revolucionarios de América Latina en su lucha
contra el imperialismo norteamericano. Defendemos la independencia y
autonomía de nuestro proceso revolucionario y de nuestra organización
con respecto a los centros de poder que se reclaman del socialismo, a la
vez que declaramos nuestra solidaridad con todos los procesos
revolucionarios.
Unidad a nivel nacional e internacional. En cuanto a lo internacional sin perder
autonomía y soberanía, a nivel nacional la expectativa se enmarca en la unidad
política y de acción de los sectores obrero, campesino, popular, indígena,
estudiantil, mujer y afro-colombiano5.
Estamos por la articulación de todas las luchas obreras y populares y por
la Alianza obrera, campesina y popular, bajo las banderas y dirección
proletaria. Apoyamos los distintos procesos de centralización que se dan
al interior del movimiento sindical, cívico, popular, campesino e indígena
y de las organizaciones revolucionarias. Propugnamos por la
construcción de una Coordinadora de Masas, que sea la confluencia de
los distintos procesos de unidad y centralización gremial del movimiento
de masas y de las expresiones políticas revolucionarias que luchan
contra el régimen.
6.
Estamos por una Asamblea Nacional Popular a la cual se integren las
amplias mayorías nacionales obreras, populares y democráticas, que
adopte las medidas alternativas que el pueblo reclama y convoque a
acciones definitivas de masas contra el régimen, por mejorar las
condiciones de vida del pueblo y hacerlo partícipe de las decisiones que
lo afectan.
Plataforma de Lucha
La Plataforma de Lucha como documento político que sintetiza las búsquedas
políticas de A Luchar y del movimiento social que pueda construir, está
compuesta por doce grandes aspectos.
•
No al pago de la deuda externa: ruptura de tratados internacionales que
atentan contra la independencia, la soberanía nacional y el derecho a la
autodeterminación de los pueblos.
•
Defensa de los recursos naturales: nacionalización sin indemnización
de los monopolios extranjeros y nacionales.
•
Por la expropiación sin indemnización: de la propiedad terrateniente,
haciendo realidad la consigna: “tierra para el que la trabaja”. Garantías
de crédito y asistencia técnica al campesinado.
•
Alza general de los salarios: por encima del costo de vida. Derecho al
trabajo y mejoramiento de las condiciones de vida. Plenos derechos de
organización. movilización y huelga.
•
Congelamiento de las tarifas: de los servicios públicos y del transporte,
por la mejora y extensión de estos servicios y por construcción y mejora
de todas las vías de acceso en las regiones apartadas del país.
•
Por las libertades y derechos políticos: respeto al derecho a la vida. Por
la libertad de los presos políticos, contra la tortura, asesinatos y
desapariciones. Por la disolución de los organismos paramilitares, por
el levantamiento del Estado de Sitio, la desmilitarización de los campos
y ciudades y contra la aplicación de la doctrina de la “Seguridad
Nacional”.
•
Por vivienda, educación, salud, recreación y deporte: así como la
promoción de todas las actividades que desarrollen la cultura, el arte y
la creatividad del pueblo.
•
Abolición del concordato: y respeto a las creencias y prácticas
religiosas del pueblo.
•
Devolución y respeto a los resguardos: territorios y formas organizativas
de las comunidades indígenas. Por su unidad, tierra, cultura y
autonomía.
•
Plenos derechos para la mujer: y contra todas las formas de opresión
que la discriminan.
•
Contra la discriminación: racial, política, económica y religiosa.
•
Por la protección a la niñez y los derechos de la juventud.
CONTEXTO: NECESIDADES, SITUACIÓN POLÍTICA, SOCIAL, ECONÓMICA,
MAPA DE CONFLICTO.
Algunas de las circunstancias recordadas que caracterizaban ese momento son:
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Las FARC firmaba los acuerdos de la Uribe Meta: cese al fuego de sus
27 frentes de guerra
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El Ministro de Defensa Gral. Landazábal, en una entrevista televisada
desautoriza toda la política de paz del Gobierno y afirma que no será
acatada por las fuerzas Armadas; propone cambiarla por una política de
guerra total contra la insurgencia
EPL da a conocer públicamente su propuesta de una tregua multilateral
que implique: cese de fuego; debate político que concluya en una
reunión decisoria sobre apertura democrática; plenas garantías a
libertades políticas; amnistía general; investigaciones
A los maestros se les reprimía salvajemente por mantener un paro
desde principios de mes.
Se imponía un tope salarial del 15% a todos los trabajadores
Se fortalecían las fuerzas militares y cometían cientos de crímenes
contra la población.
Los grupos paramilitares afloraban con mayor fuerza.
Seguía la implementación del terrorismo de Estado.
El movimiento obrero y popular apoya el cese al fuego, tregua y dialogo
nacional impulsado por organizaciones guerrilleras y otros sectores de
oposición.
Por sugerencia de la FARC y para integrar en la lucha legal a
guerrilleros desmovilizados en unión de otras personas que asuman
compromisos por cambios sociales, se constituye el movimiento político
UNIÓN PATRIOTICA.
Una declaración conjunta del M-19, el ELN, el EPL, EPL, QL, PRT,
Patria Libre y el Comando “Ricardo Franco” llama a un paro nacional
para el 20 de junio, lo que evidencia el deterioro extremo del proceso de
paz.
Se realiza en la Uribe (Meta) la cumbre constitutiva de la Coordinadora
Guerrillera Simón Bolívar, agrupando a todos los movimientos
insurgentes activos. Su resolución política incluye 6 puntos:
Compromiso con el derecho Internacional Humanitario.
1987 Virgilio Barco Presidente de Colombia. Congreso de Unidad
Nacional por una nueva Colombia Convocado por: A luchar, la revista
"Debates" los impulsores del frente popular y el partido socialista
revolucionario.
1988. La UP, el Frente Popular y el Movimiento A Luchar reviven la
discusión sobre la creación de un Frente Político Amplio, como forme de
contrarrestar la guerra sucia en mejores condiciones de fuerza
Beatriz Elena Monsalve secretaria de relaciones internacionales del
Frente Popular e integrante de la CUT junto con su secretaria Luz Mila
Collantes, son desaparecidas en Bogotá y posteriormente encontradas
con impactos de bala y señales de tortura.
El gobierno prohíbe manifestaciones; censura a la radio y militarizada el
país.
Es decir, el surgimiento de A Luchar se enmarca dentro de un periodo
extremadamente agitado tanto nacional como internacionalmente, a nivel interno
el terrorismo de estado no cesa en los asesinatos selectivos y por el otro se
publicita la existencia de un momento de diálogos y treguas con las insurgencias,
los procesos de paz marcaran la política del momento. A Luchar plantea una
postura de oposición al diálogo y la tregua, sosteniendo que Belisario Betancur
buscaba con el diálogo mediatizar la lucha social y desarmar política y
militarmente al movimiento guerrillero
A nivel externo la convulsión social y política no era menor, el nacimiento de A
Luchar estuvo acompañado de por una enorme agitación en Centroamérica, a tal
punto que hacían pensar que los grandes cambios eran posibles y necesarios. En
Nicaragua, tras una actividad guerrillera enfocada en la educación de las masas y
la agitación en zonas urbanas, el Frente Sandinista de Liberación Nacional
(FSLN), con un importante apoyo de las zonas urbanas, de los intelectuales
latinoamericanos y una amplia red de contactos, se toma el poder. En el Salvador
a partir de 1977, las movilizaciones populares y la violencia espontánea se
convirtieron en una auténtica guerra. Los grupos guerrilleros se reforzaron y
establecieron vínculos con organizaciones populares mientras el estado aumentó
la represión y apoyó la aparición de paramilitares. Así mismo surgió el Frente
Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN).
El modelo utilizado tanto en Nicaragua como en El Salvador fue el Frente Nacional
de Masas, en el cual se da una coordinación de la movilización social por vías
legales e ilegales. El modelo de frente se consolidó como un ejemplo para la
izquierda Latinoamérica. En Nicaragua además se integró con el trabajo de la
iglesia progresista y los intelectuales, lo cual permitió que desde la teología de la
liberación las personas se vincularan a un proceso popular organizativo. La lucha
armada fue un apoyo de la lucha popular. Fue el levantamiento popular en las
ciudades lo que logró derrotar al gobierno, aunque contó con las guerrillas como
catalizadores A Luchar estaba influido por este modelo de la revolución
centroamericana, se trataba de un experimento de lucha política y con la
pretensión de consolidar una organización política de masas. Gran parte de las
propuestas de A Luchar, también adoptaban la idea de construcción de poder
popular. De ahí surgirá la propuesta de cabildos populares, en los cuales se
esperaba que la población participara directamente, de forma similar a lo que
había ocurrido en El Salvador.
PROPUESTAS DE A LUCHAR
Poco se conocen las propuestas populares que se dieron paralelas al proceso de
paz de Belisario Betancur y a la constituyente, sobre las cuales se ha centrado la
mayoría de la historiografía. Una propuesta de trabajo utilizada por A Luchar
fueron los cabildos populares, que buscaban ser espacios de poder desde los
sectores sociales, generando una fuerte organización social con autonomía. Estos
cabildos populares aunque efímeros, funcionaron en Barrancabermeja - Santander
y Pailitas- Cesar, entre otros municipios del país. Se trataba de una suerte de
espacio donde la población podía participar y tomar decisiones frente aproblemas
locales, desconociendo la presencia estatal y fomentando el desacato civil a la
autoridad imperante.
Otras propuestas de trabajo, fueron:
Poder obrero y popular y por el socialismo
Independencia de clase
Acción directa de masas
Internacionalistas proletarios y solidarios con todas las luchas de los
pueblos
• Alianza obrera, campesina y popular bajo las banderas y dirección
proletaria
• Coordinadora de masas
• Asamblea nacional popular
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•
ESTRUCTURA Y NORMAS DE FUNCIONAMIENTO EN A LUCHAR
Su estructura organizativa era elemental, que tenía como base las asambleas y
las direcciones Locales, una dirección Nacional y un Comité Ejecutivo.
En cuanto a su estructura y a sus normas de funcionamiento A Luchar planteaba
que la participación se definía desde el plano local hacia el regional y el
nacional, esto en calidad de personas o como organizaciones, compartiendo los
criterios y la plataforma política, de allí que la vinculación práctica se hacía por
medio de comisiones de trabajo.
Dos principios enmarcaron la estructura organizativa de A Luchar: el primero, de
tipo político, se refiere a la condición de que las decisiones estratégicas se definen
colectivamente, a esto se le denominó Dirección Colectiva; el segundo aspecto, de
tipo organizativo, se refiere a la necesidad de funcionar con una estructura
centralizada que procurara la concreción de las definiciones tomadas por la
colectividad.
Se señalan unos criterios éticos correspondientes al deber ser de la actuación de
la militancia en su quehacer individual y colectivo, a partir de un ejercicio de crítica
y autocrítica, de división de tareas y de respeto mutuo.
La Convención Nacional se convocaba cada tres años, en ella participaban
delegados elegidos por localidad, con la facultad de definir la plataforma de lucha
y las políticas del periodo. A su vez contaba con una Dirección Nacional2 integrada
2 “Entre los Colectivos de Trabajo Sindical (una organización político – sindical marxista que
seguía las tesis de Camilo), el Movimiento Pan y Libertad (MPL: movimiento político de
masas maoísta), la Corriente de Integración (CIS: una corriente del campo M-L en el
movimiento sindical) y el Partido Socialista de los Trabajadores (PST: partido trotskista) que
se convertirán en los fundadores de A Luchar”. En: HARNECKER, Marta. Entrevista con la
Nueva Izquierda. Editorial Colombia Nueva Ltda. Centro de Documentación y Ediciones
Latinoamericanas. 1 de Mayo de 1989. Managua. Pág. 142.
6. Tomado de A Luchar, deudas con la Memoria de John Freddy Caicedo Álvarez por cinco delegados, incluyendo las diferentes fuerzas políticas y de
funcionamiento bimensual, con la facultad de orientar la realización de las
decisiones tomadas por la Convención Nacional y obligada a consultar a todas las
regionales para la toma de decisiones importantes.
El Comité Ejecutivo permanente ubicado en Bogotá, integrado por un miembro
principal y un suplente de cada una de las fuerzas nacionales de A Luchar, le
correspondía aplicar a diario las definiciones de la Convención y Dirección
Nacional, igualmente podía designar representantes a eventos o ante
organizaciones y bajo su responsabilidad política quedaba el periódico de A
Luchar, contando para todo ello con el apoyo de dos comisiones de trabajo: la de
Prensa y Propaganda, y la de Finanzas.
Tenían una Asamblea Local en la cual participaban todos los miembros de A
Luchar del área, después de ella las direcciones locales con representación de las
fuerzas políticas presentes en A Luchar. Para todos los frentes de trabajo,
formación política y organizativa de las comunidades, enfatizaban en los criterios
de coordinación y unidad en las diferentes actuaciones.
En relación con el funcionamiento y manejo de la prensa y las financias se
estableció como fuente principal de ingreso el aporte de la militancia, recursos que
se administraban sobre un presupuesto administrativo o de funcionamiento.
LÍNEA DE TIEMPO, LOGROS O ACCIONES IMPORTANTES CUÁLES FUERON
LOS VOCEROS, ¿QUIÉNES HICIERON PARTE?
Existían varios niveles de compromiso al interior de A Luchar, como la militancia,
simpatizantes y amigos que se identificaban con la causa, objetivos y propósitos
que perseguíamos.
El Magdalena Medio y en particular Barrancabermeja fue escenario de múltiples
jornadas, en donde la Coordinadora Popular era el referente conductor de las
actividades del movimiento social en la ciudad. Destacamos el Paro del Nororiente
en 1987, las marchas de mayo en 1988, las huelgas de los trabajadores
petroleros, los paros cívicos por los servicios públicos domiciliarios y la defensa de
la vida y los derechos humanos.
Dentro de sus principales acciones podríamos destacar las luchas obreras por la
defensa de los recursos naturales, los paros y movilizaciones campesinas, los
paros cívicos de los sectores populares por servicios básicos, las de estudiantes
y el magisterio por la defensa de la educación pública y la defensa de la vida ante
la permanente y sistemática violencia Estatal desatada contra el movimiento
político, social y popular.
23 de Mayo de 1987 más de 1000 campesinos marcharon hacia Convención
Provincia de Ocaña Santander. Más de 25 mil campesinos marcharon hacia
Ocaña, en el Glorioso Paro del Nororiente Colombiano, además se menciona una
marcha hacia Bucaramanga. Todas con la conducción de AL.
Las Jornadas de Mayo de 1988
Por encima de todo, a pesar de la guerra declarada desde los palacios y cuarteles,
más de cien mil hombres y mujeres, campesinos y pobladores en 11
departamentos se pusieron en marcha la última semana del pasado mes de mayo.
El país entero fue sacudido por la protesta popular. Ante el mundo quedó
patentizada la verdad de la tragedia nacional: una oligarquía que se empecina en
detener a sangre y fuego, la marcha de un pueblo que le camina en contravía.
Las páginas siguientes quieren ser testimonio y homenaje. Testimonio de una
jornada rica en enseñanza y heroísmo. Homenaje a los 26 hijos del pueblo que
cayeron masacrados. Por ellos, por todos los que luchan y sueñan, quiéranlo o no,
seguiremos adelante.
Mayo 22: En el inicio mismo de las marchas campesinas el ejército bombardeó la
vereda Alguacil, municipio de Trinidad, en Norte de Santander, en donde resultó
muerto un campesino y heridos seis más.
Mayo 23: Quinto día del Paro Cívico en Remedios y Segovia por el asesinato del
Alcalde de la U.P. ELKIN DE JESÚS MARTINEZ.
Se inician las marchas campesinas con el hostigamiento constante de las fuerzas
armadas, que tiene orden de impedir el desarrollo de la jornada. La prensa estima
en 80 mil los campesinos que se han vinculado a ellas.
La Coordinadora Nacional de Movimiento Cívicos y la Organización Política A
LUCHAR. AL, denuncian a las Fuerzas Armadas por parar las marchas, decomisar
los alimentos, dañar los medios de transporte de los campesinos y por detener a
sus dirigentes.
Mayo 24: Bloqueadas la mayoría de las marchas por el Ejército. La prensa
asegura que fracasaron y que hay grupos guerrilleros infiltrados.
El Tiempo asegura en su editorial que las marchas tienen objetivos políticos y que
están prohibidas. Amenazan con aplicar el estatuto para la defensa de la
democracia. A Luchar denuncia que han sido detenidos decenas de campesinos.
En el sitio La Fortuna, Santander, el ejército lanzó granadas contra los marchistas,
causando la muerte a 5 e hiriendo a 8.
Las organizaciones que dirigen las marchas denuncian la tergiversación de la
información suministrada por las fuerzas militares tendientes a confundir a la
opinión pública, asimilando las acciones de los grupos guerrilleros con las
pacíficas jornadas de los campesinos, para justificar la represión a cualquier
precio.
Mayo 25: En Remedios fracasaron las primeras negociaciones entre los
organizadores del Paro Cívico y la comisión envida por el gobernador de
Antioquia.
Ocho muertos y 26 heridos es el saldo trágico, según la prensa, pero las
organizaciones que dirigen la marcha denuncian una cifra mayor, a la que agregan
los detenidos y desaparecidos.
Mayo 26: Detenidas las marchas en Santander y Arauca. Disturbios en
Barrancabermeja. Herida la secretaria de la USO Doris Molina. Tres mil
campesinos son obstaculizados por el Batallón D´Lúyer en San Vicente del
Chucurí, Santander, siendo detenidos diez de ellos.
En Santander hay veinte mil labriegos dispuestos a marchar a Bucaramanga.
En Barranca fue asesinado el dirigente de la USO Jameth Consuegra por un
motorizado que se escudó con una tanqueta, lo que dio origen a un paro petrolero.
El gobierno nacional dispuso que los gobernadores y los delegados del Plan
Nacional de Rehabilitación, dialogaran con los campesinos del Magdalena Medio
santandereano, que se encontraban concentrados en El Cerrito, San Vicente de
Chucurí y Tienda Nueva.
Incomunicados y paralizados se encuentran el Nordeste Antioqueño y
Barrancabermeja donde Al paro laboral de 48 horas decretado por la USO, se
sumó un Paro Cívico declarado por la Coordinadora Popular. El Tiempo carga otra
vez contra las marchas en su editorial.
Mayo 29: En Llana Caliente, jurisdicción de San Vicente de Chucurí un
colaborador civil del ejército hizo fuego contra los militares y éstos respondieron
baleando la marcha; hay numerosos heridos.
Mayo 31: Los campesinos comienzan a regresar a sus lugares de origen en medio
del hostigamiento militar.
MOTIVOS Y JUSTIFICACIONES POR LOS CUALES SE REPRIMIÓ ALUCHAR
Su proyección política, A Luchar se presenta al escenario nacional como una
organización política que procura la movilización social, privilegiándola, a otras
formas de construcción del proceso y en oposición a la búsqueda o concreción de
acuerdos con el gobierno. Por ello, ese primer evento nacional denominado
Convención Nacional dictará reflexiones muy precisas sobre el poder y sobre
cómo hacerse a él, que demarcan una manera de proyectar las actuaciones de A
Luchar.
Los paros del nororiente de 1987 y 1988 le dieron a entender al gobierno nacional
que A LUCHAR era un movimiento político y social que, se debía frenar porque
estaba tomando dimensiones peligrosas para el establecimiento, que no era tan
inofensivo como se pretendía y si bien las acciones conducentes a la eliminación
física del movimiento ya venían en camino, después de estos importantísimos
paros se intensificó ferozmente.
El estado y sus instrumentos paraestatales no eliminan a quien les resulta
inofensivo, con estos se estable una especie de pacto subterráneo, invisible o
informal porque a su vez el estatus quo se beneficia de ellos al utilizarlos como
excusa para su accionar, pero sabe que estos nunca podrán afectar el “equilibrio”
entre explotadores y explotados, entre opresores y oprimidos, pero cuando surge
algún actor que ponga en cuestión dicho equilibrio, lo elimina antes que sus alas
levanten vuelo. A los dirigentes de la izquierda mañosos nunca el estatus quo los
verá como enemigos pues identifica que son simples parásitos que hasta
funcionales les son, pero cuando germina un dirigente o un movimiento de
izquierda con verdadera vocación de transformación, lo elimina antes que florezca.
Eso pasó con A Luchar, su accionar era comprometido, legitimo, transformador y
por lo tanto amenazante, intimidador del estatus quo. Conclusión, obvia, sencilla y
efectiva, eliminarlo y así fue.
Dice el escritor y analista político Demarest, En algún punto, su liderazgo puede
ser visto como una amenaza para la seguridad nacional en vez de una simple
amenaza a la seguridad pública. Es ahí donde reside su importancia geopolítica.
Ser pobre y organizar tu comunidad para sobrevivir por sus propios medios,
ejercer auto-determinación, es ser una amenaza para los intereses políticos y
económicos del neoliberalismo, este fue el pecado de A Luchar
Los grandes hitos de la movilización social relacionada con A Luchar son el paro
del nororiente de 1987 y las marchas de mayo de 1988, las cuales aún no han
sido estudias ni recogidas para la memoria de la movilización social en Colombia a
pesar de la masiva participación que tuvieron. En el ―Paro del Nororiente
Colombiano en 1987 participaron aproximadamente 53 mil campesinos en los
Departamentos de Cesar, Norte de Santander, Huila, Santander, Arauca y
Antioquia. En Mayo de 1988 aproximadamente más de 80.000 campesinos
marcharon en el Magdalena, Cesar, Norte de Santander, Bolívar, Córdoba,
Antioquia, Santander, Arauca. Ambas movilizaciones se dieron con la conducción
de A Luchar. Posterior a estás grandes movilizaciones se dio una fuerte
arremetida militar y paramilitar que costó la vida de los dirigentes y algunos
participantes de ellas.
Sobre el final de A Luchar sabemos que el movimiento se convirtió en objetivo
militar del paramilitarismo y de las fuerzas estatales. Se trata de un caso de
genocidio político en el que buena parte de sus militantes fueron asesinados,
desaparecidos o torturados. Una primera causa del declive de A Luchar señala
que fue este nivel de represión estatal y paramilitar que llevó a la desarticulación
del movimiento. La operación relámpago llevada a cabo en 1990 por el Ejército
Nacional contra militantes de A Luchar, que incluyó detenciones masivas,
allanamientos, desapariciones y torturas, ha sido catalogada como crímenes de
lesa humanidad por organizaciones como el colectivo de abogados José Alvear
Restrepo, humanidad vigente y Colombia nunca mas
Una segunda razón sobre el final del movimiento ha sido planteada por algunos de
sus antiguos militantes, quienes señalan que las discusiones internas de A Luchar
llevaron a su desintegración. La diversidad de sectores sociales, posiciones
políticas existentes dentro del proyecto y la multiplicidad de prácticas desgastaron
los espacios de discusión y la unidad entre sus miembros. Algunas discusiones
políticas llevaron a la salida de varios de los grupos que lo conformaban, incluso
previo a que se diera por terminado el proyecto. El debate central fue si continuar
con una política abstencionista o participar en elecciones, esto generó fuertes
debates internos que hicieron imposible continuar con el movimiento. Esta
discusión partía de explorar su participación o no en la ANC o mantener
únicamente su propuesta ANP.
Una tercera hipótesis sobre el fin de A Luchar (AL), está referida al conflicto
armado y su posible relación con la insurgencia. Algunos militantes del ELN
participaron en este movimiento político, pero es importante aclarar que esto no
era conocido por todos sus militantes ni tampoco podemos entender AL como el
brazo político del ELN. Esta relación generó grandes debates tanto dentro del ELN
como para AL, que se expresan también en el declive del movimiento. En
particular con la desmovilización de una fracción del ELN conocida como la
Corriente de Renovación Socialista (CRS).
Los Crímenes de lesa humanidad no serían posibles sin la acción, concurso y
complicidad de los Estados. Además como actores del genocidio contra AL
encontramos a grupos paramilitares y sicarios, ligados a los grandes intereses
económicos regionales. Estas acciones del genocidio político contra AL deben ser
entendidas también en un panorama mundial de cierre de la guerra fría, que en
América Latina se expresó en estigmatización y persecución a quienes pudieran
ser considerados a favor de la Unión Soviética.
PRIMERA ACCIÓN EN CONTRA DE A LUCHAR EN BARRANCABERMEJA
(MUCHA RELEVANCIA) Y ACCIONES SIGUIENTES.
Sobre A Luchar se ha impuesto el olvido de sus propuestas, acciones y
protagonistas, el ocultamiento de sus lecturas de la realidad y sus miradas de
país, así como la profundización de la impunidad de los crímenes que llevaron a
su debilitamiento y posterior desaparición de los escenarios locales, regionales y
nacionales.
Son cuantiosas las victimas dejadas por el genocidio político desatado por las
fuerzas del estado, no solo en contra de A Luchar sino de todo el movimiento
social y popular, para nosotros el asesinato de Manuel Gustavo Chacón se
constituyó en un duro golpe propinado al movimiento obrero e importante
referente de violencia en contra de nuestro movimiento, por lo que representaba
Manuel para el movimiento obrero, campesino y popular en la ciudad y la región.
El 15 de en ero de 1988, fue asesinado MANUEL GUSTAVO CHACON
SARMIENTO, miembro de la Subdirectiva de la Unión Sindical Obrera de la
Industria del Petróleo en la Refinería de Barrancabermeja y militante del
movimiento político A Luchar.
Amenazas contra la Coordinadora Popular de Barrancabermeja (AL),
específicamente contra las personas Fernando Acuña, David Ravelo, Álvaro
Solano Carrillo y Wilson Ferrer.
Mayo 24 de 1988 A Luchar denuncia detención de decenas de campesinos,
además de la muerte de cinco marchistas y heridas a ocho más en el sitio la
Fortuna Santander, por una granada lanzada por el ejército. Hasta este momento
la prensa oficial habla de ocho personas y más de veinte seis heridos en las
movilizaciones.
Mayo 26 de 1988 Detenida Doris Molina secretaria de la USO, detenciones en
todos los puntos de las marchas. En Barrancabermeja es asesinado Jameth
Consuegra Dirigente de la USO.
24 de Mayo – José Joaquín Lozano – Hugo Garavito – Francisco Luís – José del
C Arriaga – Hugo Pérez – La Fortuna Santander
25 de Mayo – Jamet Consuegra – Orlando Rojas – Barrancabermeja.
29 de Mayo – José Méndez – Arnulfo Ramírez – Nelson Otero – Esperanza de
Uribe – José Velandia – Pablo Hernández – Luís Archiva – Alfredo Ríos – José
Zambrano – Luís E. Sánchez – Llano Caliente Santander
Heridos:
Llano Caliente 30 – La Fortuna 8 – Barrancabermeja 3 –
Gerardo Jerez Quiroga, militante de AL terriblemente torturado y asesinado el 11
de julio de 1988 en Barrancabermeja. Tesorero de SINTRAEMPOSAN
¿Chucho Peña militante AL asesinado?
En Santander se informa de desapariciones y masacres, de manera específica se
menciona al grupo paramilitar Rogelio Correa Campos.
Arquímedes Peña, Pablo Mora, Mariela Waldran, Torturados en la Vereda La
Putana San Vicente.
José A. Bohórquez, desaparecido el 11 de marzo de 1988, trabajador de la UIS,
vinculado a SINTRAUIS.
Nelson Sierra Gómez, desaparecido el 23 de mayo de 1988, director de la escuela
José Celestino Mutis, en el barrio Café Madrid Bucaramanga.
Leonardo Amaya desaparecido el 23 de mayo de 1988 junto a Nilson Sierra
Gómez, Educador de la Escuela José Celestino Mutis, estudiante de medicina de
la UIS.
Juan Hernández y Luís Martínez de la USO, asesinados el 28 de julio de 1988 en
Barrancabermeja.
En Santander se informa de desapariciones y masacres, de manera específica se
menciona al grupo paramilitar Rogelio Correa Campos.
Masacre de quince personas en la vereda Los Tres Amigos, corregimiento El
Centenario, municipio El Carmen, departamento de Santander, por el grupo
Paramilitar Rogelio Correa Campos. En la casa de Miguel Rincón fueron
asesinadas la esposa, una hija de 15 años y dos hijos de 14 y 9 años, también 3
trabajadores, 2 maestros de construcción, un hijo adoptivo de 13 años y Álvaro
Oces.
Evangelina Marín, militante de AL detenida, maestra integrante de la Coordinadora
Municipal de AL en Barranca.
Ministro de Defensa General Guerrero Paz expidió orden de captura contra AL, el
25 de Octubre con Orden de Policía, SIJIN – No. 3216. Capturas militantes de AL,
incluyendo 3 del Comité Ejecutivo.
Amenaza contra Vicente Villegas de A Luchar en el Sur de Bolívar, está implicado
el capitán de policía Henry Coronado, municipios de San Pablo y Simiti.
Detenidos Nelson Berrío, Antonio López del Ejecutivo Nacional de A Luchar y
Manuel Barrero el conductor
El 24 de mayo de 1988 ORLANDO ROJAS, militante del partido político A Luchar,
fue acribillado a tiros por dos sujetos que se movilizaban en una moto, en
momentos en que se encontraba en una peluquería.
El 12 de julio de 1988, GERARDO JEREZ QUIROGA, de 35 años, obrero de la
Empresa de Obras Sanitarias de Santander, EMPOSAN S.A., tesorero de
SINTRAEMPOSAN y militante de A Luchar, fue desaparecido y asesinado en
Barrancabermeja. Gerardo se dirigía en motocicleta hacia el barrio Cincuentenario
a realizar sus labores habituales de trabajo cuando fue interceptado por cuatro
individuos armados con ametralladoras quienes se movilizaban en un vehículo y
se lo llevaron a la fuerza dejando la motocicleta en el sitio de su rapto. Según
testimonios, la motocicleta fue recogida a las tres horas por agentes de la policía
uniformados, pero después nunca se supo de ésta.
En protesta por la desaparición de su compañero, el 14 de julio de 1988 se realizó
un paro de los trabajadores a nivel departamental. Se recibieron llamadas
telefónicas por medio de las cuales el grupo paramilitar MAS se adjudicaba los
hechos y expresaban que entregarían a Gerardo muerto en las próximas horas.
Su cadáver fue encontrado semienterrado en el sitio campo Nº 45, pozo de
explotación petrolera dentro de un área restringida, ubicado en el corregimiento El
Centro; el cuerpo presentó muestras graves de tortura: amarrado de pies y manos
con alambre de púas, las uñas arrancadas, la cabeza sin cabello, un brazo partido
al parecer con machete, heridas con cuchillo, una varilla introducida en el recto,
sus testículos arrancados, lo ahorcaron y le propinaron varios impactos de bala.
En la espalda del cadáver de Gerardo aparecieron las letras CCCC, Comando
Coronel Correa Campos, organización paramilitar formada luego de la muerte de
dicho coronel. Como antecedente al asesinato de Gerardo, debe mencionarse su
detención, en marzo de 1987, por participar en un mitin dentro de las instalaciones
de la empresa EMPOSAN, durante la negociación de un pliego de peticiones.
El 4 de junio de 1990, los cuerpos de CESAR AUGUSTO HERNANDEZ SUBA y
ALBA PEREZ, fueron encontrados en la vía que conduce a la ciudad de
Bucaramanga. Cesar Augusto era abogado, miembro de la organización política A
Luchar, ex personero del municipio de Concepción, integrante del equipo jurídico
de la Coordinadora de Derechos Humanos de Bucaramanga y asesor de la
Asociación de Adjudicatarios del ICT. Las versiones militares afirmaron que Cesar
Augusto era un guerrillero del ELN muerto en enfrentamiento con tropas de la II
División.
A fines de noviembre de 1989, HERNANDO MAYORGA CALDERON, exdirigente
sindical de Sintrabanca fue víctima de un atentado en la vía que de
Barrancabermeja conduce a la ciudad de Bucaramanga. Previamente, Hernando
había recibido amenazas. Días después del atentado, el 12 de diciembre del mes
siguiente, fue desaparecido por civiles armados y su cadáver encontrado en el
cementerio de Curití, departamento de Santander, donde fue sepultado como NN.
Hernando estaba casado con Libia Monrroy y era padre de cuatro hijos, Había
sido dirigente nacional del sindicato del Banco Cafetero y estaba dedicado el
comercio en Barrancabermeja.
Detenido Daniel Libreros, del Ejecutivo Nacional de A Luchar, el 27 de marzo de
1990 en el aeropuerto de Cali
El 17 de abril de 1990 en Barrancabermeja sufrieron un atentado Luís Galvis de la
dirección nacional de A Luchar, Nilsón Dávila un líder campesino de A Luchar, los
hermanos Serna y Carlos Mejía militantes de A Luchar. Nilson estuvo herido de
gravedad.
El 19 de marzo de 1991 el defensor de derechos humanos y antiguo dirigente de
la Unión Sindical Obrera (USO) JOSE HUMBERTO HERNANDEZ GABANZO fue
asesinado por dos hombres que le dispararon cuando se encontraba en la
urbanización popular El Paraíso en la ciudad de Barrancabermeja. Ese día la
organización sindical votaba la realización o no de la huelga en ECOPETROL.
José Humberto se bajaba de un bus cerca de su casa cuando los dos hombres le
dispararon cinco veces por la espalda, luego fue trasladado aún con vida al
hospital Ismael Darío Rincón donde posteriormente murió.
José Humberto se había jubilado de ECOPETROL y en el momento de su
asesinato era miembro del Comité Regional para la Defensa de los Derechos
Humanos. José Humberto había recibido constantes amenazas contra su vida y
planeaba abandonar la región. Era el padre de Hernando Hernández, quien
también forma parte de la organización obrera y ha recibido amenazas y atentados
contra su vida.
El 4 de mayo de 1991, GABRIEL MARTINEZ MARTINEZ, de 32 años y trabajador
de ECOPETROL, quien había sido miembro de la ANUC y activista del grupo
político A Luchar, fue asesinado de 5 disparos de arma 9mm., cuando se
encontraba en el barrio Nueve de Abril
NELSON MANUEL TAMARA NIÑO, de 36 años, asistente del Departamento de
Operaciones de Ecopetrol y afiliado a la Unión Sindical Obrera y JULIO CARLOS
CASTRO, obrero de Fertilizantes Colombianos S.A, fueron asesinados por 2
miembros de la red de inteligencia Nº 7 de la armada bajo las órdenes del director
de inteligencia de la armada nacional, Coronel Rodrigo Alfonso Quiñónez
Cárdenas, en el interior de los Billares "La Sede", ubicados en el barrio El Cerro
hacia las 7 de la noche. Los disparos se hicieron a la cabeza y por la espalda
principalmente. Varias personas declararon haber visto una moto con dos
ocupantes que dispararon contra las víctimas y huyeron del lugar posteriormente,
sin embargo la oscuridad no les permitió reconocer a los autores materiales del
hecho. Se hizo evidente que los responsables del crimen pertenecían a la Red 07
de inteligencia de la armada nacional, por la delación hecha por el ex agente de
esta organización Carlos David López.
El 15 de junio de 1992, es asesinado OSCAR DARIO MEJIA SIERRA, de 32 años
y conductor de Ecopetrol, por desconocidos que le propinaron tres impactos de
bala en la cabeza, cuando se encontraba en el sitio conocido como "Pozo 7".
El 30 de julio de 1992, LIGIA PATRICIA CORTES COLMENARES Licenciada en
Filosofía, investigadora del Comité Regional de Derechos Humanos, fue
asesinada en compañía de PARMENIO RUIZ SUAREZ, Presidente del Sindicato
de Choferes de la empresa Transportes San Silvestre y de RENE ALBERTO
TABERA SOSA, de 20 años, miembro de la Asociación Nacional de Usuarios
Campesinos ANUC, por agentes de la Red 07 de la Armada según orden del
Director de Inteligencia de la Armada Nacional, Coronel Rodrigo Alfonso Quiñónez
Cárdenas, cuando se encontraban frente al Restaurante “La Shanon”, ubicado en
la calle 50 con carrera 11 de Barrancabermeja.
Éstos son algunos de nuestros muertos. Los que no nombramos no son menos
importantes. Sus familias, sus amigos y sus compañeros tienen la certeza que
ellos hacen parte de nuestra historia y que vivirán por siempre en nuestros
corazones, en nuestra memoria y en nuestra lucha
Tanto en el caso de la UP como el de A Luchar hay tres rasgos centrales que
configuran la especificidad de la persecución sistemática a la izquierda
colombiana. En primer lugar, la intencionalidad de los autores de acabar con
grupos políticos, o al menos de expulsar de la vida pública a sus sobrevivientes y
a las bases sociales que han resistido la ola de violencia. En segunda instancia, es
notorio que se trata de un proceso de exterminio de fuerzas políticas legales en
condiciones de un Estado considerado democrático y en el que se supone la
existencia de una institucionalidad ajustada a las normas del derecho. La
perpetración del genocidio en sí misma pone en duda tal condición democrática, y
cuestiona seriamente esa institucionalidad toda vez que las modalidades de
persecución utilizadas han conjugado tanto formas legales -a través de
disposiciones de carácter jurídico y administrativo- como medidas ilegales -“guerra
sucia”, operaciones encubiertas, campañas de estigmatización oficial, acción
paramilitar, etc. En tercer lugar, cabe destacar que los graves hechos de
persecución se han llevado a cabo durante un prolongado período, lo que
demuestra que la intencionalidad persecutoria ha perdurado en el tiempo y que
tenía el propósito de exterminar todo movimiento alternativo.
¿QUÉ HA PASADO DESPUÉS CON A LUCHAR?
Entrevistar a las fuentes que pueden reconstruir la historia sobre A LUCHAR,
escucharlos y luego escribirlo, se convierte en una experiencia que sacude los
sentimientos hasta que se desprenden las emociones traducidas en tristes e
impotentes lagrimas; notar como van hilando recuerdos, despacio al inicio, como si
atrás de este supuesto olvido se escondiera un mecanismo de afrontamiento ante
el dolor, como si olvidar ayudara a seguir recorriendo un camino que implica no
mirar atrás, aun sabiendo que a cada paso algo se va quedando, alguien se cae,
pero el ritmo de la marcha obliga a continuar sin levantarlo, y luego, poco a poco,
se sale lo que estaba guardado y lo que se pensaba olvidado surge, y surge con
fuerza, el dialogo fluye, las historias, las anécdotas van y vienen una tras otra, los
amigos, la compañera, el viaje aquel, el ataque, etc. Son actores que a fuerza de
las circunstancias se apagaron, se volvieron invisibles, anónimos, hombres de ojos
azules intensos que renunciaron al brillo de sus ojos para que el enemigo no los
descubriera y los eliminara, pero al recordar lo que fue su ilusión, lailusión de su
vida y de muchas otras vidas, esos ojos se ponen inquietos, ya no como en la
primavera de ese sueño que fue A LUCHAR, sino como un hombre que recuerda
orgulloso un pasado en que vivió y hasta pensó en morir por unas ideas, las ideas
de A LUCHAR.
A Luchar luchó hasta donde la sensatez lo permitió, hasta donde la necesidad de
conservar la vida lo permitió, hasta donde la fuerza del sueño condujo a hombres y
mujeres a poner la vida en manos del poder omnímodo de los señores de la
muerte y luego, los que siguieron vivos se mimetizaron en otras organizaciones,
en grupos de la iglesia, cambiando de lugar de residencia y de actividades, pero
sepan cerdos de la cochina infamia que la esperanza persiste.
La militancia que logró sobrevivir a la sistemática y permanente violencia Estatal
de extermino del movimiento político, social y popular, debimos afrontar acciones
jurídicas que nos sindicalizaban de tener vínculos con la insurgencia, otros
debieron salir de la ciudad ante las constantes amenazas de muerte, algunos
militantes de bajo perfil se mantuvieron activos al frente de sus organizaciones
sociales, lo que permitió su continuidad, resistencia y permanencia hasta el día de
hoy.