VENTA DE ALCOHOL A MENORES El alcohol en los niños y los adolescentes interﬁere con las percepciones de la realidad. Esto puede ser peligroso ya que a edades tempranas, se tiene menos experiencia en la resolución de problemas y en la toma de decisiones. Esto aumenta las posibilidades de caer en un comportamiento de riesgo. Beber en exceso durante la adolescencia, cuando la susceptibilidad está a flor de piel, puede llevar a tomar decisiones que causen daño. Las estadísticas del consumo de alcohol en los jóvenes son preocupantes: en nuestro país mueren al año, en accidentes y actos violentos relacionados con el alcohol, 10,000 adolescentes. Ningún bar debe permitir la entrada a menores de edad y los restaurantes deben exigir la de credencial de elector para la consumición de bebidas con alcohol. El consumo de alcohol en etapas de crecimiento puede llevar a problemas de comportamiento y daño permanente a la memoria, el pensamiento y el juicio. Aunque la venta de alcohol está regulada por ley, es común que tiendas y establecimientos no acaten la normatividad.