ANEURISMAS VISCERALES: ANEURISMA DE ARTERIA HEPATICA REPORTE DE UN CASO Y REVISION DE LA LITERATURA TAKOSUBO EN MUJER DE POBLACION RURAL POR STRESS DEL CONFLICTO AGRARIO ARGENTINO Y LA SEQUIA DOPPLER RENAL SINDROME DE EISENMENGER RIESGO DE CANCER EN LOS ESTUDIOS DIAGNOSTICOS EMISORES DE RADIACIONES IONIZANTES CLINICA Revista de la SOCIEDAD DE CARDIOLOGIA DE CORRIENTES AÑO 6 - Nº 17 JUL - AGO - SEP 2009 SOCIEDAD DE CARDIOLOGIA DE CORRIENTES REVISTA DE LA SOCIEDAD DE CARDIOLOGIA DE CORRIENTES AÑO 6 - Nº 17 JULIO - AGOSTO - SEPTIEMBRE 2009 Publicación Oficial de la Sociedad de Cardiología de Corrientes Sede en Corrientes Bolívar 1334 - (3400) Corrientes Tel. (03783) - 410000 interno 118. SUMARIO Colegio Médico de Corrientes Pellegrini 1785 - (3400) - Corrientes Director Dr. Domingo Luis Pozzer E-mail: [email protected] Director Asociado Eduardo Francisco Farías Comité Editorial Stella Macin Joaquín García Julio Andrés Vallejos Ignacio Reyes Walter García Jorge Parras Mariano Romero Secretaria de Redacción Celina García Matta Diseño y Diagramación María Celeste Balbastro www.socacorr.org.ar Distribución gratuita entre sus asociados. Las colaboraciones firmadas expresan la opinión de sus autores y no reflejan necesariamente el pensamiento de esta publicación. Secretaría Permanente Bulnes 1004 (1176) Buenos Aires Tel/Fax: (011) 4862 0935 / 4866 5910 E-mail [email protected] http://www.fac.org.ar EDITORIAL. TIEMPOS DE ACCION PARA RECUPERAR EL RUMBO Dr. Pozzer, Domingo Luis ANEURISMAS VISCERALES: ANEURISMA DE ARTERIA HEPATICA REPORTE DE UN CASO Y REVISION DE LA LITERATURA Escalante, José Manuel; Babi, Carlos; Collantes, José; Cacheda, Horacio; Riera Stilval, Jorge PRESIDENTE Dr. Edgar Horacio García VICEPRESIDENTE Dr. Juan Pablo Cimbaro Canella SECRETARIA Dra. Eva Griselda Fernandez PROSECRETARIO Dr. Abel Colomba TESORERO Dr. Eduardo Roque Perna PROTESORERO Dr. Guillermo Alejandro Amarilla PAG. 3 TAKOSUBO EN MUJER DE POBLACION RURAL POR STRESS DEL CONFLICTO AGRARIO ARGENTINO Y LA SEQUIA Taua, Walter F.; Guglielmone, Ramiro Sanatorio Curuzú Cuatía SRL. Corrientes – Argentina PAG. 9 DOPPLER RENAL Dra. Titievsky, Laura Instituto de Cardiología de Corrientes PAG. 12 SINDROME DE EISENMENGER Dra. Kotlirevsky, Eliana C. Servicio de Cardiología.Hospital Escuela “Gral San Martín”. COMISION DIRECTIVA PAG. 2 PAG. 18 RIESGO DE CANCER EN LOS ESTUDIOS DIAGNOSTICOS EMISORES DE RADIACIONES IONIZANTES. VISION DESDE LA CARDIOLOGIA CLINICA. Taua, Walter F. Guglielmone, Ramiro Sanatorio Curuzú Cuatía SRL. Corrientes –Argentina PAG. 25 GRANDES PERSONALIDADES DE LA MEDICINA MODERNA. RENE THEOPHILE HYACINTHE LAENNEC Dr. Manzolillo, Héctor Santiago PAG. 31 VOCALES Dra. Hebe Ruth Vidomlansky Dr. Saúl Navarro Dra. Leticia Matta ORGANO DE FISCALIZACION Miembros Titulares Dr. Erasmo Alejandro De Cerchio Dr. Jorge Riera Stival Miembro Suplente Dr. Rolando Esteban Pantich CONSEJO CONSULTIVO Dr. Reyes Ignacio (Área informática) Dr. Raúl Romero (Área de enlace) Dr. Pozzer Domingo (Área Revista) Dr. Farias Eduardo (Área Docencia) Dr. Rasmussen Ricardo (Área de Eventos) Dr. Vallejos Julio (Área Workshop) PAG 1 AUTORES SOCIEDAD DE CARDIOLOGIA DE CORRIENTES SOCIEDAD DE CARDIOLOGIA DE CORRIENTES Escalante, José Manuel Babi, Carlos Collantes, José Cacheda, Horacio Riera Stilval, Jorge EDITORIAL TIEMPOS DE ACCION PARA RECUPERAR EL RUMBO La Federación, desde su creación tuvo un fuerte y sostenido crecimiento en relación a las conquistas que logramos los cardiólogos del interior del país. Sin embargo, hoy más que nunca necesitamos trabajar en la consolidación Institucional, mejorar las fuentes de financiamiento y generar mayor producción científica. A pocos meses de asumir la presidencia de la federación, encuentro una FAC desfinanciada, con pocas sociedades activas y otras con mínima o sin actividad, con los comités científicos con irregular actividad (menos del 50% están realmente activos). La FAC necesita el aporte de sus miembros para no tener absoluta necesidad financiera sobre el resultado económico del congreso nacional, como ocurre en la actualidad. Oportunamente el confederal aprobó una actualización del aporte que hacen las sociedades a la Federación por cada socio, de la insignificante cifra de 10 pesos por año, a un aporte mínimamente coherente de 10 pesos mensuales, lo que implica 120 pesos al año. Una cifra que cualquier médico puede pagar por su sociedad madre, monto por otra parte, significativamente menor de los que cobran otras sociedades. Sin embargo, muchas sociedades, incluso las grandes, las más importantes, que presidieron la federación en varias oportunidades, cumplen con este aporte en menos del 20% de sus padrón de socios. Aporte que de cumplirse, permitiría tener mejores congresos, con mayor cantidad de invitados extranjeros y especialmente se podría mejorar la oferta científica a los miembros como accesos a full text de revistas y otros servicios. PAG 2 Destaco en este momento tan especial de la vida de la federación, el rol de nuestra sociedad que resulta un ejemplo a imitar en el contexto nacional, con sus aportes actualizados a la federación por la totalidad de los socios, manteniendo activas las propuestas científicas de excelencia como el reciente workshop, el nuevo curso de formación continua que comenzará el año que viene, esta revista, la lista, la recertificación y las distintas reuniones científicas entre otras cosas. Los convoco a trabajar por la federación, acercándome propuestas, y comentarios que permitan optimizar mi futura gestión, que será en definitiva la de nuestra sociedad. En los próximos días les enviaré una encuesta para conocer vuestras inquietudes a fin de encarar convenientemente la misma y sobre todo recuperar el espíritu que llevó a la creación de la federación que al igual que muchos de los sueños que llevaron nuestros antecesores se han ido olvidando, ayudados por el excesivo individualismo. Dr. Domingo Luis Pozzer ANEURISMAS VISCERALES: ANEURISMA DE ARTERIA HEPATICA REPORTE DE UN CASO Y REVISION DE LA LITERATURA RESUMEN Los aneurismas viscerales aislados son una patología infrecuente pero dado el actual avance de tecnología en cuanto a los métodos de imagenología en los últimos años se ha constatado un aumento de frecuencia en el diagnóstico. Se presenta el caso de una mujer hipertensa de 68 años, a la cual se le diagnostica aneurisma de arteria hepática aislado que fue sometido a tratamiento quirúrgico en primer tiempo y luego se le realiza tratamiento endovascular con embolización en un segundo tiempo. La paciente evoluciona favorablemente y es dada de alta médica. Los aneurismas de arteria hepática son la variedad que se encuentra en tercer lugar en cuanto a frecuencia luego de los aneurismas de la arteria esplénica y las renales. Se discute el manejo en cuanto al diagnóstico y al tratamiento teniendo en cuenta que la mayoría de las veces depende la localización, de la morfología del aneurisma y del estado clínico del paciente. Algunas escuelas de cirugía y de angiología adoptan el tratamiento quirúrgico para los extrahepáticos y el tratamiento endovascular para los intrahepáticos, siendo escaso el reporte de un abordaje combinado. Se concluye que la terapéutica combinada (quirúrgica y endovascular) en esta paciente fue exitosa y es una opción para casos futuros en nuestro centro. Palabras clave: Aneurisma arteria hepáticatratamiento quirúrgico-tratamiento endovascular. ABSTRACT The isolated visceral aneurysms are rare but given the advance of technology in terms of imaging methods in recent years have seen an increase in the frequency of diagnosis. PAG 3 SOCIEDAD DE CARDIOLOGIA DE CORRIENTES A case of a hypertensive 68-year-old woman, which is diagnosed of isolated hepatic artery aneurysm that underwent surgical treatment at the first time and then was performed with endovascular embolization treatment in a second time. The patient is discharged care. Hepatic artery aneurysms are the second variety in frequency after the splenic artery. We discuss the management with regard to diagnosis and treatment given that most of the time dependent location of the aneurysm morphology and the clinical status of the patient. Some schools take surgical treatment for extrahepatic and intrahepatic for endovascular treatment. We conclude that the combined treatment (surgical and endovascular) in this patient was successful and is an option for future cases in our center. Key words: Heaptic Artery Aneurysm- Surgical treatment- Endovascular treatment. INTRODUCCION Los aneurismas de las ramas viscerales de la aorta abdominal son hallazgos poco frecuentes. Con el desarrollo de los métodos de angiodiagnóstico (aortografía, arteriografía selectiva, arteriografía por substracción digital, tomografía y resonancia nuclear magnética) estos hallazgos son cada día mas frecuentes, transformando las series, que en décadas pasadas eran casi siempre recopilaciones de datos de necropsias, en series de casos diagnosticados y tratados con éxito (1). La localización más frecuente de los aneurismas de arterias viscerales es la de la arteria esplénica aproximadamente en un 50% de los casos, más a menudo en las grandes multíparas, en la etiología se atribuyen ro l e s i m p o r t a nt e s a fa c t o re s ho r mo na l e s y hemodinámicos. Spitell y col. en un estudio recopilativo de 50.000 casos de informes de necropsias, encontraron aneurismas esplénicos en un 0.07% (2). Le siguen los aneurismas de arterias renales, en cuanto a la etiología: arteriosclerosis, congénitos, y asociados a la hipertensión arterial en un 75% de los extrarrenales y un 15% intrarrenales. Por orden de frecuencia están los aneurismas de la arteria hepática. Dentro de este grupo los micóticos eran frecuentes, y desde 1960 ha descendido su frecuencia hasta un 16%, aumentando los falsos aneurismas que se relacionan con traumatismos e PAG 4 SOCIEDAD DE CARDIOLOGIA DE CORRIENTES iatrogénicos (procedimientos realizados con cirugía laparoscópica y percutáneos transhepáticos) (3). Aunque el diagnóstico suele ser accidental, no debemos olvidar que cerca del 80% de los casos se presenta como una complicación que es la ruptura del aneurisma y que en ese caso la mortalidad es del 35-45% según las series reportadas (4-5). La especial localización de los aneurismas del territorio esplácnico, en lugares muchas veces inaccesibles o comprometidos por su anatomía representa un desafío para su tratamiento quirúrgico, en parte soslayado por el auge del intervencionismo endovascular, que en algunos casos por la situación clínica del paciente o por las dificultades técnicas para un correcto manejo hace de esta técnica no sólo un tratamiento de recurso sino un tratamiento de elección. FIGURA 1 Y 2 Figura 1. Tomografía de abdomen con contraste donde se evidencia aneurisma de arteria hepática que nace directamente de la arteria aorta con agenesia del tronco celíaco con cuello de menos de 3 mm de longitud. Figura 2. Reconstrucción volumétrica donde se evidencia pared de aneurisma y se planifica abordaje quirúrgico. CASO CLINICO Se presenta el caso de una paciente de 68 años que como único antecedente cardiovascular presenta hipertensión arterial esencial (tratada en forma irregular con inhibidores de la enzima convertidora de angiotensinaenalapril 10 mg día por vía oral). La paciente consulta por dispepsia en otro centro, por medio de ecografía abdominal: se evidencia dilatación aneurismática de la arteria hepática, se realiza tomografía de tórax y abdomen que confirma el diagnóstico: aneurisma de la arteria hepática común (AAH) con agenesia del tronco celíaco con diámetro máximo de 70 mm y se decide como tratamiento la cirugía. En el laboratorio de ingreso presenta: hematocrito 46%, glóbulos blancos 6.400 por mm3 uremia 0.46 mg%, creatininemia 0.80 mg%, plaquetas 239000 por mm3, ionograma, coagulograma y hepatograma normal. En cuanto a los otros estudios complementarios: 1. electrocardiograma: ritmo sinusal, con sobrecarga de aurícula izquierda con necrosis inferior. 2. radiografía de tórax: no presenta cardiomegalia, índice cardiotorácico 0.48. Sin otras particularidades en partes blandas ni óseas. 3. ecografía cardíaca presenta función ventricular de 78% sin áreas de aquinesia sin presentar ninguna valvulopatía concomitante. FIGURA 3 Y 4 Figura 3. Tomografía de reconstrucción donde se evidencia aneurisma de arteria hepática que presenta flujo luego de exclusión distal y bypass termino-terminal a la arteria hepática común con flujo conservado. Figura 4. Arteriografía luego de embolización con coils dístales y proximales. Se realiza cirugía con abordaje abdominal por acceso de Kocher, se constata aneurisma de arteria hepática común con escaso cuello proximal adherido, vascularizado PAG 5 SOCIEDAD DE CARDIOLOGIA DE CORRIENTES con diámetro máximo de 70 mm. Se realiza en primer lugar bypass termino-lateral entre la arteria hepática propia y la arteria gástrica izquierda para preservar irrigación arterial de la víscera y evitar complicaciones isquémicas del procedimiento y luego se realiza exclusión distal. En el postoperatorio mediato se evidencia como única alteración la elevación de enzimas hepáticas GOT y GPT (de 18 UI y 22 UI basal y 48 horas luego de cirugía a 178 UI y 217 UI respectivamente). En el cuarto día del postoperatorio se produce descenso espontáneo de las mismas enzimas hepáticas a valores normales, asumiendo el cuadro como hepatitis isquémica. Se programa la realización de tomografía de abdomen con contraste de control donde se evidencia: Bypass termino-lateral entre arteria hepática propia y la arteria gástrica izquierda permeable Se evidencia flujo dentro de aneurismas por lo que se programa la realización de embolización de aneurisma por ambulatorio. En angiografía selectiva 15 días después de la cirugía se realiza: embolización con coils a nivel distal y se coloca dispositivo proximal hasta conseguir oclusión completa. Se evidencia flujo a través del by pass previo entre arteria hepática propia y gástrica izquierda. La paciente es dada de alta a las 24 horas del procedimiento. DISCUCION Nos encontramos ante un caso de una aneurisma aislada de arteria hepática con agenesia del tronco celíaco. En las descripciones de la anatomía de la arteria hepática los autores citan hasta 11 variedades anatómicas, pero la mayoría coincide que la aplicabilidad clínicoquirúrgica se basa en las 5 mas frecuentes: 1. 2. 3. PAG 6 Tipo I: Arteria hepática común con sus ramas derecha e izquierda. Es la disposición inicial descrita por Haller; corresponde al tronco hepatogastro-esplénico, presente en el 55 % de los casos. Tipo II: La arteria hepática da origen a la gastroduodenal, cística y hepática derecha. La arteria hepática izquierda se origina de la arteria gástrica izquierda; 10% de los casos Tipo III: La arteria hepática derecha es aberrante, originada de la mesentérica superior, en un 10 24% de los casos 4. 5. 6. SOCIEDAD DE CARDIOLOGIA DE CORRIENTES Tipo IV: La arteria hepática derecha se origina de la arteria mesentérica superior y la arteria hepática izquierda se origina de la arteria gástrica izquierda. La arteria hepática común no está presente (1%). Tipo V: La arteria hepática común se origina de la mesentérica superior. Se encuentra en un 1.5%2,5%. Tipo VI: La arteria hepática común se origina directamente de la aorta. Ocurre en 0.2 - 2%, la agenesia del tronco celíaco. Como queda evidenciado la presentación anatómica de nuestra paciente es una de las menos frecuentes. A su vez de todos los aneurismas de arterias viscerales el de la arteria hepática es el tercero en frecuencia, luego del de la arteria esplénica y de las arterias renales. El primer caso fue descripto por Wilson en el año 1819, como hallazgo de una autopsia pero fue Kher en 1903 quien realizó la primera ligadura en una arteria hepática aneurismática (6). Para su estudio los han clasificado en: Únicos o múltiples Intrahepáticos o extrahepáticos (1:4) Extrahepática: representa el 66% de los casos, en la hepática derecha el 47%, hepática común el 22%, hepática propia 16%, cística 1%, mayoría de causa aterosclerótica. Intrahepático: son generalmente de origen traumático (7). Con respecto a la historia natural de la enfermedad, en la clínica Mayo en Rochester se revisó en forma retrospectiva la serie de aneurismas de arterias hepáticas desde el año 1988 hasta el año 1998, se identificaron 36 casos de aneurismas verdaderos. La edad media de presentación fue de 62.2 años y la condición comórbida mas frecuente en los pacientes fue la hipertensión arterial (72%), el 78% de los casos fueron extrahepáticos con una incidencia estimada de 0.002%, ya que desde el año 1980 un total de 2091965 pacientes fueron evaluados reportándose solo 36 casos. En su mayoría fueron aneurismas aislados y solo el 8% de los casos fueron múltiples. El diámetro medio de presentación fue de 3.6 cm (1.5-14cm) con una tasa de ruptura en la presentación del 14% (5 pacientes). La mortalidad de los casos que se presentaron con ruptura fue del 40% y todos eran de causa no aterosclerótica (tres tenían fibrodisplasia muscular y dos tenían poliarteritis nodosa. En esta serie publicada en el año 2003: el seguimiento fue de 47.6 meses en el grupo quirúrgico y 7 pacientes fue sometidos a cirugía en la cual se practicó bypass con vena, tres fueron sometidos a excisión y bypass con dacron, 2 fueron sometidos a excisión solamente y dos embolización percutánea. En el seguimiento: dos bypass con vena y un bypass con dacron se ocluyeron al año, y dentro de los factores de ruptura que se identificaron se encontraban la causa no aterosclerótica y el hecho de ser múltiples aneurismas. Como conclusión final los autores proponen que todos los pacientes con síntomas o con algunos de estos factores de riesgo de ruptura deben ser considerados para intervenciones terapéuticas; los menores a 2 cm de diámetro pueden ser monitoreado en forma segura y los mayores a 5 cm deben ser sometidos a reparación quirúrgica, ligadura o embolización (8). En España la incidencia reportada en autopsias es del 0.01%, en el hospital general Vall d´ Hebron desde el año 1989 hasta el año 1996 se publicaron 12 aneurismas viscerales en 11 pacientes, de los cuales el 45% eran de la arteria hepática. El 80% de ellos fueron fusiformes, y en este centro el diámetro promedio de presentación de de 35 mm (15-50 mm) y todos ellos fueron tratados en forma quirúrgica ya que afectaban la arteria hepática extrahepática (9). En nuestro país se publica previamente un caso de aneurisma visceral de arteria hepática que se presenta como síndrome coledociano. Se produce en un paciente de 66 años diabético, hipertenso e insuficiente renal que se presenta como síndrome coledociano, en este paciente se realizó cirugía con tratamiento en dos tiempos: un primero con resección y puente a la rama izquierda de la hepática común y un segundo tiempo en el cual se realiza aneurismorrafia de la rama derecha con colecistectomía y descompresión de la vía biliar con tubo en T siendo dado de alta a los 10 días de la cirugía (10). En el año 2005 se publica otro caso de aneurisma visceral en nuestro país pero en el Hospital Ramos Mejía y se trataba de un aneurisma gigante de la arteria esplénica, en un paciente de sexo masculino de 66 años de edad que presentaba 4,2 cm en su diámetro mayor y que fue resecado con inevitable esplenectomía en bloque por las adherencias y fibrosis perianeurismática que comprometían el estómago, el páncreas y el bazo (11). Con respecto a la complicación del postquirúrgico de nuestra paciente en una presentación en el año 1997 se reportó la elevación enzimática tanto de las transaminasas (AST: 3512 U/l y ALT: 2082 U/l) y de la CPK 1233 U/l que fueron máximas a las 48 horas de la cirugía. Luego de esto se produjo un descenso gradual hasta normalizarse junto con la bilirrubina en 10 días (12). Otros autores aconsejan el dosaje de la alfaglutation-S-transferasa en conjunto con las enzimas hepáticas convencionales para valorar la extensión de cualquier daño isquémico hepático en el postoperatorio inmediato y mediato. La alfa-glutation-S-transferasa se encuentra en elevada concentración en los hepatocitos y se libera luego isquemia hepática presentando una vida media relativamente corta de 90 minutos aproximadamente. Es superior en comparación con los biomarcadores tradicionales que tienen vida media mayor, ya que mientras estos permanecen elevados la alfa-GST retorna a su valor normal (13,15). Se observó que monitorear la alfa-GST en el paciente transplantado resultaba en un aumento de la sobrevida del injerto con un descenso en la morbilidad y la mortalidad dentro de los 100 días del postoperatorio (14). Dentro de las pruebas diagnósticas contamos con: ecografía que ayuda al diagnóstico inicial y comprueba la vascularización hepática, tomografía axial computada helicoidal mide las dimensiones del aneurisma y ayuda a diferenciar luz/trombo para ver fisuras/roturas iniciales, y estructuras vecinas, angiografía para comprobar la existencia de anomalías anatómicas, circulación colateral y la presencia de múltiples aneurismas, radiología simple de abdomen para visualizar las calcificaciones de la pared, colangiografía y endoscopía para determinar la compresión de las venas de salida y del arbol biliar y la resonancia magnética para el estudio del flujo. En cuanto al manejo endovascular son escasos los reportes de casos tratados con esta modalidad, en la Cleveland Clinic (16) se llevó a cabo la revisión de los aneurismas viscerales desde el año 1997 hasta el año 2005, fueron 48 los pacientes tratados con ablación endoluminal por vía endovascular. Solo 12 de los casos fueron aneurismas de la arteria hepática, la técnica más frecuente fue la PAG 7 AUTORES SOCIEDAD DE CARDIOLOGIA DE CORRIENTES embolización con coils. En el seguimiento, la mortalidad fue del 8.4% a los 30 días. Imágenes postprocedimiento se llevaron a cabo en el 77% de las intervenciones a una media de 16 meses, constatándose la oclusión en el 95%. Tres pacientes desarrollaron síndrome postembolización pero todos de la arteria esplénica, ninguno desarrollo isquemia o insuficiencia hepática o compromiso del territorio irrigado por la arteria mesentérica. Con respecto al tratamiento combinado, las series reportadas incluyen casos de emergencia los cuales se sometió en un primer tiempo al procedimiento quirúrgico y por alguna complicación los pacientes debieron ser sometidos a angiografía y embolización de urgencia cuando fue posible con resultados no muy buenos. En Noviembre de 2007 cirujanos alemanes publican un caso el cual se combinó en forma programada tratamiento endovascular con cirugía convencional con buenos resultados (17). CONCLUSION Los aneurismas de arterias viscerales son lesiones raras con complicaciones mortales. Determinar la localización de los aneurismas y el estado de la circulación colateral hepática, es esencial a la hora de plantear la estrategia terapéutica, recordemos que el objetivo del tratamiento es evitar su rotura y las complicaciones derivadas. La terapia endovascular plantea alternativas actuales, sin embrago a pesar de contar con la ventaja de acarrear menor invasividad del procedimiento, menor isquemia hepática y menor morbilidad hasta el momento no existen estudios comparativos que muestren la superioridad de una terapéutica sobre otra. Finalmente la elección de la estrategia va a depender del protocolo de cada institución, estado general del paciente, las características del aneurisma (sacular/fusiforme, con o sin cuello) y de la localización de anatómica de la lesión. Se concluye que la terapéutica combinada (quirúrgica y endovascular) en el caso presentado fue exitosa y es una opción para casos futuros en nuestro centro. PAG 8 BIBLIOGRAFIA Silveira P - A. Martorell Lossius - J. M. Callelas Perez - E. Viver 1. Manresa Servicio de Angiologia y Cirugía Vascular Hospital Gerrmans frias i Pujol. Múltiples aneurismas de ramas viscerales de aorta abdominal. 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Se caracteriza por un déficit transitorio de la motilidad del ápex del VI, probablemente inducido por el exceso de actividad simpática ante una situación estresante. Es mucho más frecuente en el sexo femenino. Su pronóstico es favorable, sin mortalidad hospitalaria y recuperación total de los trastornos eléctricos y ecocardiográficos. Paciente de sexo femenino de 62 años de edad. Tabaquista de 5 cigarrillos día. Sin antecedentes cardiovasculares. Consulta por dolor opresivo precordial de 12 horas de evolución de intensidad 8/10. Refiere que vive en el campo, estar muy preocupada por la sequía y por su marido ciego. Al examen físico se encuentra con TA 120/70 mmHg y frecuencia cardíaca de 70 lpm, soplo sistólico aórtico de 2/6, sin signos de insuficiencia cardíaca. Peso 55 kg y altura de 170 m. El ECG de ingreso presenta ritmo sinusal con T negativas en derivaciones precordiales (V1 a V6) y DIII y AVF. Se medica con AAS, clopidogrel, atenolol, y NTG endovenosa. El laboratorio presenta enzimas CK, MB, y troponina T normales. Evoluciona con dolor de menor intensidad que persiste durante las siguientes 24 hs, y desarrolla signos de insuficiencia cardíaca: rales crepitantes basales y disnea, por lo que se agrega furosemida al tratamiento. El ECG presenta profundización de las ondas T en todas las derivaciones con QT prolongado de 680 ms ( QTc … ms). Fig. 1. En el ecocardiograma doppler color se observa aquinesia y expansión de todos los segementos apicales, anteromedial, y lateromedial, con fracción de eyección de 40%. Fig. 2. Luego del tercer día de internación evoluciona sin signos de insuficiencia cardíaca, asintomática y en el ECG persisten las T negativas aunque con QT normal. La coronariografía evidencia coronarias angiográficamente normales. Fig. 3 y 4. En el control a los 30 días del alta se encuentra asintomática, con buena capacidad funcional, y el ECG presenta persistencia de T negativas aunque menos profundas, en tratamiento con AAS y carvedilol. DISCUSION Varios estudios (1) han reportada una nueva entidad médica, llamada “Tako-Tsubo”. Se trata de una disfunción transitoria de la movilidad del ápex “punta” del ventrículo izquierdo, la cual se caracteriza por: 1. Agudo dolor precordial con alteraciones electrocardiográficas del ST-T. 2. Presencia de factor desencadenante “gatillo”, el cual se trata de un incidente estresante de tipo físico, psíquico, emocional y/o ambiental. 3. Mínima o nula elevación de enzimas cardíacas. 4. Ausencia de lesiones coronarias en vasos epicárdicos. Sato y Dote fueron los primeros en describir este síndrome en el año 1990 y llamarlo Tako-Tsubo, pues el PAG 9 SOCIEDAD DE CARDIOLOGIA DE CORRIENTES SOCIEDAD DE CARDIOLOGIA DE CORRIENTES FIGURA 1 FIGURA 3 Y 4 FIGURA 2 Jasmin Ortak et al (3) hipotetizaron que un exceso de actividad simpática debido al factor gatillo “estrés” induce una alteración reversible en la motilidad parietal del ápex del ventrículo izquierdo: “Respuesta miocárdica exagerada a la actividad simpática”. Esto tiene aún más soporte debido a que no se encuentran datos clínicos y de laboratorio que soporten que probabilidad de un proceso inflamatorio (miocarditis) y que las pruebas de espasmo coronario realizadas en sala de hemodinamia no muestran correlación entre anatomía y trastorno de la motilidad, por lo que ambas hipótesis, inflamatorio y vasoespasmo, quedarían descartadas como responsables de la génesis de este síndrome. ventrículo afectado adopta la forma de un pulpo. También se lo conoce con el nombre de síndrome del “ballooning” apical del ventrículo izquierdo. Rémy Pillière et al (1), reportan una prevalencia del 0,7% en el contexto de todos los síndromes coronarios y enfatizan la probabilidad de su infraestimación, de este novel cuadro cínico el cual debe ser sospechado clínicamente ante un dolor precordial usando la ayuda inicial del examen ecocardiográfico en conjunción con el electrocardiograma, laboratorio y datos clínico (2). La prevalencia de esta cardiomiopatía está íntimamente en relación con el estrés, por lo que podría ser más frecuente su hallazgo en las grandes poblaciones urbanas (1). ETIOLOGIA Este síndrome quizás encuentre su mayor explicación debido a una exagerada actividad simpática. PAG 10 CARACTERISTICAS CLINICAS Yoshiteru Abe et al (4) reportan en su serie, y coincidente con las demás que la mayoría son mujeres postmenospáusicas con edad promedio de 74 años. El electrocardiograma de estos pacientes muestran elevación transitoria del segmento ST durante la fase aguada en más del 80% de los casos, seguido generalmente de inversión de la onda T a partir del día 4, (rango de 2 a 18) días de iniciado los síntomas. Una prolongación del QTc fue siempre observada en todos los pacientes con un promedio de 500 ms. El ecocardiograma muestra la anormalidad de la motilidad del apex con hipercontracción de los segmentos basales. Dichas anormalidades desaparecen a mediados del día 18 (rango 9 a 53 días) después del inicio de los síntomas. La EF promedio en la fase aguda es del 43% . La angiografía coronaria es normal o con mínimas lesiones que no justifican los trastornos en la motilidad del ventrículo izquierdo. Ahamad A. et al (5) analizaron la concomitancia de la afectación del apex del ventrículo derecho en el contexto del Tako-Tsubo, significativa disfunción del ventrículo derecho fue hallada en su serie en alrededor de 1/3 de los pacientes (confirmados por ecocardiograma y resonancia magnética). La concomitancia de la afectación del ventrículo derecho tiene implicancias clínicas y hemodinámicas: peor clase funcional y mayor estancia hospitalaria. D. Hagui et al (6) al igual que Pablo Robles (7) en sus series describen diferentes variantes del Tako-Tsubo que afectan otras porciones del ventrículo izquierdo (regiones basales, pared posterior, otras), que no involucran la punta o apex, llamadas formas atípicas o variantes de Tako-Tsubo. El pronóstico de esta patología es bueno, sin mortalidad hospitalaria y con restauración de los cambios eléctricos y ecocardiográficos. CONCLUSION Ante una mujer postmenospáusica que consulta por dolor precordial con cambios electrocardiográficos en el ST- T y sin factores de riesgos vasculares clásicos, y más aun, si se cuenta con un ecocardiograma precoz, podemos incrementar nuestro nivel de sospecha de esta entidad clinica que nos obliga a la comunidad cardiológica abordar a su diagnóstico correcto. BIBLIOGRAFIA Rémy Pillière, MDa, Nicolas Mansecal, MDa, Franch Digne, MDa, 1. Pascal Lacombe, MDb, Thierry Joseph, MD, PhDa, and Oliver Dubourg, MDa “Prevalence of Tako-Tsubo Síndrome in a Large Urban Agglomeration”. (Am J Cardiol 2006.03.048). Daniel Donohue, MD, Chowdhury Ahsan, MD, PhD, Mohammad 2. Sanaei-Ardekani, MD, and Mohammad-Reza Movahed, MD, PhD, FACC, FSCAI, FCCP. “Early Dianosis of Stress-Induced Apical Ballooning Syndrome Based on Classic Echocardiographic Findings and Correlation with Cardiac Catheterization”. J Am Soc Echocardiogr 2005; 18:1423.e15-e22) Jasmin Ortak, Volkhard Kurowski, Uwe K.H. 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El ultrasonido bidimensional y las técnicas de doppler en sus distintas modalidades: pulsado, color y doppler de amplitud ("power angio"), se han convertido en herramientas fundamentales en el estudio tanto del aparato urinario y del árbol renovascular. Inicialmente los esfuerzos fueron dirigidos al diagnóstico de la estenosis de la arteria renal principal (EAR) y sólo después fue considerada su utilidad para evaluar el estado de las arterias renales intraparenquimatosas. En la actualidad ha cobrado trascendencia su utilidad como marcador pronóstico y predictor de mejoría terapéutica. Las alteraciones vasculares del riñón pueden producirse a nivel de las grandes o de las pequeñas arterias renales. La alteración vascular intrarrenal o intraparenquimatosa, a su vez, puede darse en el contexto de una obstrucción o sin la presencia de EAR. Los aportes del USDR son fundamentales, tanto desde el punto de vista diagnóstico y pronóstico de la evolución natural como de los resultados de las intervenciones terapéuticas, para la HTA esencial, la HTA renovascular y las alteraciones vasculares intraparenquimatosas. En la población general de hipertensos, la prevalencia de HTA renovascular oscila entre el 1% y el 5% según las series. La EAR puede producirse con o sin HTA y ésta puede ser esencial o renovascular. La fisiopatología de la HTA renovascular se basa en que la disminución de la presión de perfusión renal produce una activación del sistema renina-angiotensina II, con efectos directos sobre la excreción de sodio, la actividad del sistema simpático, la PAG 12 concentración intrarrenal de prostaglandina y la producción de óxido nítrico. En la evolución, la distinción entre HTA renovascular y esencial no es fácil porque con el estímulo sostenido la actividad de la renina plasmática disminuye por taquifilaxia reversa, lo cual explica las limitaciones de la medición de la renina para identificar la HTA renovascular. En pacientes ancianos con EAR aterosclerótica coexisten ambos tipos de HTA (esencial y renovascular). Por lo general la HTA no es reninodependiente y la curación total es rara, por lo cual resultan menos valiosos las pruebas funcionales. Además, en estos pacientes tampoco son recomendables las pruebas funcionales, como la medición de la actividad de renina plasmática en vena renal antes y después de la administración de captopril o el radiorrenograma con captopril, porque la HTA es "no reninodependiente" y los resultados no predicen el curso de la HTA ni de la función renal después de la revascularización. Por lo tanto en estos pacientes son preferibles las técnicas de imágenes para identificar la severidad de la estenosis. Por este motivo puede ser más importante categorizar por USDR los beneficios de la angioplastia transluminal renal (ATR) que identificar el componente funcional de la EAR. En los pacientes con estenosis por DFM los estudios funcionales tienen mayor utilidad porque esta alteración es "reninodependiente" y, en general, se produce la curación con la revascularización. En la actualización sobre la utilidad del USDR realizada por Ingaramo, se destaca el uso del índice de resistencia (IR) para evaluar la nefropatía en la HTA y para predecir el riesgo de eventos cardiovasculares. La HTA, tanto la esencial como la renovascular, tiene estrecha relación con las alteraciones estructurales y funcionales del riñón. Inicialmente el aumento de las resistencias renales se debe a un proceso reversible de aumento del tono vascular pero con el progreso de la enfermedad se producen cambios estructurales irreversibles (nefroesclerosis). En definitiva, la HTA establecida se caracteriza por una elevada resistencia vascular y una disminución del flujo sanguíneo renal. La correlación del índice de resistencia obtenido por USDR con las resistencias vasculares renales, con el flujo plasmático efectivo y con la fracción de filtración es ampliamente aceptada. El IR elevado está asociado con mal pronóstico renal en los pacientes con estenosis de la arteria renal, y un IR superior a 0,80 es predictor independiente de progresión de la enfermedad renal en los pacientes sin estenosis renal. Ingaramo también destaca la probable utilidad del IR elevado como predictor de riesgo cardiovascular en la HTA. El IR elevado se correlaciona con la edad, con el aumento de la presión arterial sistólica y el de la enfermedad coronaria. También existen evidencias de la relación entre el IR elevado y la presencia de hipertrofia del ventrículo izquierdo, y con el aumento de espesor de la íntima media y la ateroesclerosis carotídea, lo cual evidencia daño subclínico aterosclerótico. Todo lo cual indica que el IR elevado es un marcador de riesgo de lesión de órgano blanco y predictor de eventos cardiovasculares. La angioplastia transluminal renal (ATR) con colocación de stent representa una técnica de revascularización con alta probabilidad de corrección de la estenosis. No obstante, algunos estudios multicéntricos no han encontrado diferencias sobre los registros de presión arterial y la fracción de filtración glomerular comparando la ATR con el tratamiento médico. Ramos y colaboradores, en Flujo de baja resistencia (riñon) estudios con pacientes con criterios estrictos de estenosis de la arteria renal (> 70%) por USDR, y no con criterios comunes (>50%), de acuerdo con la fracción de filtración glomerular (FFG) inicial calculada desde los valores séricos de creatinina, separaron dos grupos: FFG < 50 ml . min-1 y FFG > 50 ml . min-1. Observaron una disminución significativa de la PAS y la PAD con escasa mejoría en la FFG en el grupo con función renal conservada o con disminución leve (FFG > 50), y obtuvieron un escaso descenso en los niveles de PAS y PAD con una mejoría significativa de la FFG o función renal en el grupo con función renal más alterada (FFG < 50). Un sistema duplex es aquel que permite obtener simultáneamente una imagen morfológica bidimensional y un registro de la curva de doppler del vaso estudiado. El efecto doppler determina, a través de un cálculo matemático, la velocidad de un objeto que se mueve, en este caso la sangre. Es así como se obtienen curvas de velocidad versus tiempo, que nos permiten evaluar hemodinámicamente el vaso. En relación a las curvas de velocidad, se diferencian dos tipos principales. Una de baja resistencia caracterizada por un flujo anterógrado continuo, tanto en sístole como en diástole, reflejando una baja resistencia vascular distal (vasodilatación). Se encuentra en arterias que irrigan a cerebro (carótida interna) y riñón (arteria renal). Otra es la de alta resistencia que presenta un componente diastólico reverso dado por un aumento de la impedancia (resistencia) distal (vasoconstricción). Se encuentra en arterias periféricas, como la arteria femoral común. Las arterias renales se originan de la aorta. Al llegar al hilio se dividen en una rama anterior y posterior y Flujo de alta resistencia (MI) PAG 13 SOCIEDAD DE CARDIOLOGIA DE CORRIENTES luego en las segmentarias. De estas se originan las interlobares y arcuatas y luego las interlobulillares de las que nacen las arteriolas aferentes del glomérulo renal. Existen vasos anastomóticos entre arterias capsulares y las corticales. Un 20% de los pacientes tiene arterias accesorias, que son segmentarias que nacen directamente de la aorta. Las curvas de doppler registradas a nivel de arteria renal y vasos intrarrenales se caracterizan por: 1. Curva de baja resistencia, lo que refleja la baja impedancia (resistencia) intrarrenal. 2. Presencia de ventana sistólica a nivel de la arteria renal, es decir, ausencia de turbulencia. 3. Aceleración sistólica rápida. La aceleración sistólica se mide a través del tiempo de aceleración (TA) y del índice de aceleración (IA). 4. Presencia de ESP: (early sistolic peak). Corresponde a un primer peak sistólico, angosto, seguido por un segundo componente sistólico de mayor duración. Se encuentra sólo en 50% de las personas normales (6). 5. Velocidad: Se considera como límite máximo 180 cm / seg. 6. Indice de Resistencia (IR) El índice de resistencia (Pico sistólico- diastólica final / pico sistólico) medido a nivel de arcuatas o interlobares debe ser menor de 0,7(19). Es un índice de la resistencia vascular intrarrenal, inespecífico, que se altera por distintas patologías. En presencia de ciertos criterios clínicos, la prevalencia oscila entre el 20% y el 30% . Sin embargo, con el avance y la difusión de los métodos de diagnóstico por imágenes, actualmente se reconoce que entre el 40% y el 50% de los pacientes con enfermedad obstructiva de los miembros inferiores y entre el 15% y el 30% de los pacientes con enfermedad coronaria PAG 14 SOCIEDAD DE CARDIOLOGIA DE CORRIENTES 1. Representación esquemática de las arterias viscerales: a. Aorta abdominal; b. tronco celiaco; c. art hepatica; d. art esplenica; e. mesenterica sup, f.mesenterica inf; g. art renal; h art iliacas. presentan EAR. La prevalencia de EAR aumenta con la edad, especialmente en pacientes diabéticos y aquellos con otras manifestaciones de ateroesclerosis, como la enfermedad aortoilíaca y la patología coronaria. De modo que la EAR de causa aterosclerótica es una enfermedad común y progresiva. Las etiologías más frecuentes de la EAR son la ateroesclerosis y la displasia fibromuscular. La ateroesclerosis representa el 90% de los casos de EAR y afecta principalmente al ostium y al tercio proximal de la arteria renal principal. Se trata de una enfermedad progresiva: a los 5 años del diagnóstico se observó oclusión entre el 3% y el 16% de los casos y desarrollo de atrofia renal en el 21% de los pacientes con una estenosis superior al 60%. La displasia fibromuscular (DFM) es la causa de aproximadamente el 10% de las EAR, se observa en mujeres jóvenes (entre 15 y 50 años). Puede afectar la capa íntima, la media o la periarterial, pero en el 90% de los casos afecta la media de la arteria renal principal. Con frecuencia altera los dos tercios distales de las arterias renales y raramente lleva a la oclusión. Los parámetros del USDR utilizados para valorar la severidad de la estenosis arterial se clasifican en: Directos (extrarrenales o extraparenquimatosos), si se toman los registros en la arteria renal principal, Indirectos (intraparenquimatosos) cuando las mediciones se realizan a nivel de las arterias intrarrenales. 2. 3. Los parámetros directos son: Velocidad sistólica pico renal (VSPR). Es la velocidad sistólica pico de la arteria renal principal a nivel de la estenosis; se considera estenosis severa cuando supera los 200 cm/seg. La sensibilidad y la especificidad varían entre el 75% y el 97%, respectivamente. Indice renal/aórtico (I R/AO). Resulta del cociente entre la velocidad sistólica pico renal y la velocidad sistólica pico de la aorta abdominal (VSPR/VSPAO). Se considera estenosis severa cuando el índice es superior a 3.6 La sensibilidad y la especificidad varían entre el 83% y el 95%, y entre el 62% y el 100%, respectivamente. Indice renal/hiliar extraparenquimatoso (I R/HE). este nuevo índice para la valoración de la severidad de la estenosis renal. Resulta del cociente entre la VSPR a nivel de la estenosis de la arteria renal principal y la VSPR a nivel del hilio renal. PAG 15 SOCIEDAD DE CARDIOLOGIA DE CORRIENTES La medición en el hilio es extraparenquimatosa para que el diámetro sea similar al del tronco de la arteria renal principal, de manera que se puedan minimizar los factores de error al aplicar la ecuación de la continuidad. Se considera estenosis severa si el índice es superior a 2,7. Este índice presentó una sensibilidad del 96% y una especificidad del 95% para el diagnóstico de EAR, valores significativamente superiores a los de la VSPR y a los de la I R/AO (p < 0,001). Los parámetros indirectos son: 1. El índice de aceleración sistólica (estenosis significativa: < 3 m/seg). 2. El tiempo de aceleración (estenosis significativa: < 0,08 ms). 3. La presencia de una diferencia entre los índices de resistencia intraparenquimatosa del riñón derecho y los del izquierdo superior al 5%. Debido a que la factibilidad de visualización directa de la arteria renal principal con los viejos ecógrafos no era la ideal, se inició la investigación de parámetros indirectos para llegar al diagnóstico de EAR. Recientes estudios comparativos de la eficacia diagnóstica de los parámetros directos versus los indirectos mostraron una sensibilidad de entre el 91% y el 97%, con una especificidad que oscila entre el 75% y el 92% para la VSPR, y una sensibilidad de entre el 72% y el 88% con una especificidad de entre el 88% y el 92% para el I R/AO, ambos parámetros directos. Para los parámetros indirectos, la sensibilidad y la especificidad fueron de entre el 36% y el 50% y de entre el 86% al 99%, respectivamente, encontrando diferencias significativas a favor de los parámetros directos o extrarrenales. Por lo tanto, para el diagnóstico de EAR actualmente se considera el uso de los parámetros directos, dada su mayor sensibilidad y especificidad. Los parámetros indirectos o intrarrenales tienen escasa sensibilidad a pesar de presentar una elevada especificidad. La obtención e interpretación de la onda de flujo intrarrenal tiene un gran componente subjetivo, además de estar sometida a factores de variabilidad como la edad y los valores de presión arterial. Con el uso de ecorrealzadores mejoró la posibilidad de visualización directa de las arterias renales. En una serie con 77 pacientes que fueron estudiados con contraste ecográfico RHU 508A, la factibilidad de visualización fue del 100%, descartando el PAG 16 SOCIEDAD DE CARDIOLOGIA DE CORRIENTES diagnóstico de oclusión de la arteria renal y evitando la angiografía renal en 4 pacientes. Melany y colaboradores también observaron un incremento de la sensibilidad del 75% al 100% y una especificidad del 94% con el uso de ecorrealzadores. Algunos trabajos actuales utilizando ecógrafos de alta tecnología refieren una sensibilidad y una especificidad del 97%, aun sin el uso de ecorrealzador. En la etapa actual del desarrollo del ultrasonido, con las nuevas tecnologías, la imagen ecográfica ha ganado en nitidez y calidad. Los equipos actuales incluyen la posibilidad de uso de la armónica tisular (THI), una recepción selectiva a nivel del transductor de un tipo de ultrasonido (las armónicas) que permite eliminar ruido para mejorar la imagen. Las ondas de ultrasonido emitidas tienen una frecuencia fundamental, también denominada primera armónica. Estas ondas, cuando son transmitidas a través de los tejidos, se distorsionan formando ondas adicionales, a las que se denomina armónicas, que tienen frecuencias que son múltiplo de la frecuencia fundamental. La segunda armónica tiene una frecuencia que es el doble de la frecuencia fundamental. En los ecógrafos actuales, cuando el sistema de ultrasonido funciona en modo de segunda armónica, filtra la frecuencia fundamental y recibe sólo las armónicas generadas. Actualmente la segunda armónica es la forma más empleada de armónica tisular. La segunda armónica sin el uso de contraste ecográfico para evaluar la señal Doppler color de las arterias renales, especialmente en pacientes con ventanas ecográficas subóptimas. Esta posibilidad de mejorar la visualización de las arterias renales con el uso de segunda armónica es muy interesante por el ahorro de tiempo y medios económicos. CONCLUSION Con el paso del tiempo el Doppler renal mantiene vigencia en el diagnóstico de estenosis de la arteria renal. Su precisión para valorar la severidad de la obstrucción arterial ha mejorado con los avances tecnológicos y con el empleo de los parámetros directos: VSPR, I R/AO e I R/HE. También, a partir del IR, el Doppler renal permite estimar las resistencias vasculares renales y la presencia de nefroesclerosis, en íntima relación con el pronóstico nefrológico, el riesgo de eventos cardiovasculares y el beneficio del tratamiento medico y de la angioplastía renal. Parece cumplirse la profecía de los pioneros del Doppler renal quienes se mantuvieron firmes en la esperanza de que los avances tecnológicos lo convertirían en una gran herramienta para el diagnóstico y el pronóstico de la HTA. BIBLIOGRAFIA 1. Schoenberg SO, Knoopp MV, Bock M y col: Renal artery stenosis: grading of hemodynamic changes with cine phase-contrast MR blood flow measurements. 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Kotlirevsky, Eliana C. Servicio de Cardiología. Hospital Escuela “Gral San Martín”. SINDROME DE EISENMENGER Paciente de 20 años de edad que refiere antecedente de soplo cardíaco desde el nacimiento, acrocianosis al esfuerzo hace 12 años, hace 5 años presenta disnea CF II que evoluciona a disnea CF II-III 3 meses antes de la consulta, acompañado de episodios de dolor precordial y palpitaciones, evoluciona sintomático, hace un mes refiere presentar ortopnea, DPN, tos y expectoración hemoptoica, cianosis central y periférica, y una semana antes de la internacion vuelve a presentar hemoptisis por lo que consulta y se interna, al Examen Físico presenta TA: MSD: 110/60 mmHg MSI: 110/70mmhg, FC: 82 pm, FR: 20 pm, T: 36º, Peso: 69 Kg., Talla: 1.65 mts. A nivel Cardiovascular presentaba ápex en 6 EI LAA, R1 Y R2 hiperfonéticos, soplo sistólico 2/6 int. En mesocardio que se irradia a axila, aparato respiratorio buena entrada bilateral de aire, pulsos periféricos conservados en miembro superior presenta dedos en palillo de tambor, uñas en vidrio de reloj. ECG de ingreso: Ritmo Sinusal, FC: 68., Eje QRS: 130º, QRS: 120 mseg., QTm: 360 mseg .SAD, SAI, HVI, HVD, TSR. Rx Tórax de Ingreso: ICT: 0,40, Configuración Mixta, Campos pulmonares radiolucidos, hilios congestivos. Laboratorios: Hto 65,4%, GB 9200mm3, Glucemia 74 mg/dl, Urea 36 mg/dl, Creat. 0,85mg/dl, ALT 39 UI/L AST 27 UI/L, BT 0,39 mg/dl, Colesterol: 119mg/dl, TG 131mg/dl, HDL 19 mg/dl, LDL 74 mg/dl, VDRL (-), Chagas (), PT 7,4. Albúmina: 4,0. TP 19”, CP45%, RIN: 1,8, KPTT 40”, Na: 136 mEq/ l, K: 4,1 mEq/l. EAB: PH: 7,47, PCO2: 20, PO2: 57, BIC: 15, SAT.: 92%. ECO Cardiograma Doppler: AO: 25, AI: 30, VIDS: 25, VIDD: 37, FA: 32 Presión Pulmonar calculada: 114 mmHg, Shunt de derecha a izquierda a través de CIV. Conclusiones: Eisenmenger, CIV Musc. Media, Comunicación no restrictiva. PAG 18 DISCUSION La población de pacientes adultos con complicaciones cardiacas congénitas esta en crecimiento, se espera para el 2020 una población de 1.400.000 pacientes en Estados Unidos. Aproximadamente la mitad tiene riesgo de morir en forma prematura, de sufrir complicaciones de la enfermedad o del tratamiento de las mismas. No es sencillo tratar en forma adecuada a cada uno de ellos, muchas veces no se cuenta con la infraestructura necesaria ni el personal adecuadamente formado (22). La CIV es la cardiopatía congénita mas frecuente en niños y lactantes, la segunda en adultos (20 %),el 2540% cierra durante los dos primeros años de vida, el restante 90% a los 10 años, de estas aproximadamente el 70% es membranosa y el 20 % muscular. Las consecuencias fisiológicas dependen del tamaño , el tipo del defecto y de la presión de la arteria pulmonar. Las pautas de intervención son: Ausencia de HTP irreversible, Derivación de izq. A derecha: 1,5 a 1,0 y Reacción pulmonar ante vasodilatadores (10,14). La hipertensión pulmonar es parte de la historia natural de muchas cardiopatías congénitas con cortocircuitos de izquierda a derecha, los mecanismos fisiopatológicos no están aún totalmente aclarados, aunque un factor relevante es el contacto casi directo de los vasos pulmonares con una cámara de alta presión (este cuadro es mucho más frecuente en aquellas cardiopatías con cortocircuitos infratricuspídeos) lo cual provocaría una injuria microvascular con estimulación de enzimas como expresión de una disfunción endotelial (12). En 1897, Víctor Eisenmenger describió el caso de un paciente que padecía cianosis y disnea desde la infancia, Imagen ecocardiográfica de Eje Corto Paraesternal donde se observa la solución de continuidad en el septum interventricular. (CIV). quien murió a los 32 años por una hemoptisis masiva. La autopsia reveló la presencia de una CIV con severas lesiones vasculares pulmonares (19). En 1958, Paúl Word (18) al describir un cuadro de hipertensión pulmonar a nivel sistémico, originado por un aumento de las resistencias vasculares pulmonares con cortocircuito bidireccional a nivel de una CIV, definió un nuevo concepto fisiopatológico: el "complejo de Eisenmenger", que comprendería diferentes defectos congénitos asociados con presión pulmonar elevada por aumento de la resistencia, y que provocan la inversión del cortocircuito. Luego ha sido utilizado el término "Síndrome de Eisenmenger" es una enfermedad vascular pulmonar de PAG 19 SOCIEDAD DE CARDIOLOGIA DE CORRIENTES tipo obstructivo que se desarrolla a partir de la existencia previa de una desviación de izquierda a derecha, cuando las presiones pulmonares se acercan a las sistémicas se invierte de derecha a izq. O bidireccional, los pacientes pueden estar asintomáticos durante muchos años; los síntomas aparecen generalmente en la segunda o en la tercera década de la vida y son originados por el bajo volumen minuto cardíaco, anomalías neurológicas secundarias a la eritrocitosis e hiperviscosidad, arritmias, diátesis hemorrágicas o insuficiencia cardiaca derecha, tales como disnea, fatiga, cianosis, mareo y sincope, la prevalencia de la enfermedad a disminuido un 50% en los ultimos 50 años por los avances en el diagnostico de las cardiopatias congenitas y en la cirugía pediátrica (21). La sobrevida es de 80% a los 10 años, 77% a los 15 años y 42% a los 25 años. Las principales causas de muerte son: Muerte súbita (arritmias) 30 %, falla cardiaca 25%, hemoptisis masiva 15%, y las restantes son absceso cerebral, ACV y endocarditis (11). En el seguimiento de estos pacientes se evalúa la necesidad de flebotomía, profilaxis de endocarditis infecciosa, evitando las depleciones de volumen, ejercicios extenuantes, las alturas, el embarazo y el monitoreo de cirugías no cardiacas. Como predictores de mortalidad se encuentran: Cardiopatías Complejas, los valores de Creatinina, la Disfunción de VD, Edad de presentación de los síntomas, Insuficiencia cardiaca y Arritmias (6). Siendo el cuadro de características irreversibles, el tratamiento históricamente estaba basado en cuidados paliativos o transplante cardiopulmonar, lo que era posible para una minoría de los pacientes, en el tratamiento estándar farmacológico el uso de Digoxina en caso de arritmias no tiene suficiente evidencia, en el caso del uso de diuréticos por los signos de congestión pueden usarse con el cuidado de no producir depleción de volumen, que empeoraría la hiperviscocidad, el uso de anticoagulantes y antiagregantes es controversial por el riesgo de hemoptisis, ACV y hemorragias, deben usarse SOCIEDAD DE CARDIOLOGIA DE CORRIENTES Imagen ecocardiográfica de cinco cámaras con la imagen de la CIV. Imagen ecocardiográfica de Eje Largo Paraesternal con la imágen de solución de continuidad en el septum interventricular. (CIV). solo en caso de indicaciones precisas, la terapia de oxigeno domiciliario demostró mejoría de los síntomas, sin cambios en la sobrevida, en los casos de hiperviscocidad sintomática se indicaría flebotomía con adecuada reposición de volumen (1). Dentro de las medidas generales la actividad física, prevención de infecciones, evitar la hipotensión y la hipovolemia. En cuanto al tratamiento farmacológico Dirigido o Avanzado estudios no controlados sugieren que la administración a largo plazo de bloqueadores de los canales del calcio (BCC) prolonga la supervivencia en los pocos casos de pacientes que responden de forma aguda la identificación definitiva de los pacientes que pueden beneficiarse del tratamiento con BCC requiere la demostración de una respuesta vasorreactiva aguda positiva como la confirmación de una respuesta a largo plazo al tratamiento con BCC (2,7,9). La terapia con Prostaciclina sintética y análogos de la prostaciclina (Prostaciclina IV, Treprostinil SC, Beraprost VO e Iloprost aerosol) los estudios son en poblaciones chicas o en casos reportes, PAG 20 demostraron mejorar la clase funcional, la saturación de oxigeno y la tolerancia al ejercicio, con una importante desventaja en cuanto al costo y la disponibilidad del tratamiento. Otra opción terapéutica son los Antagonistas de los receptores de endotelina 1, la ET-1, un péptido producido fundamentalmente por cel. endoteliales vasculares, se caracteriza su poder vasoconstrictor y mitógeno para el músculo liso La ET-1 se une a 2 tipos de receptores ETA y ETB, la activación de los receptores ETA y ETB de las células musculares lisas intervienen los efectos vasoconstrictores y mitógenos de ET-1. La estimulación de los receptores endoteliales ETB promueve el aclaramiento de la ET-1, la activación del NO y la producción de prostaciclina dentro de estos bosentán es un antagonista oral, dual y activo de receptores ETA y ETB y es la primera molécula de esta clase de fármacos que demostró mejorar los parámetros hemodinámicos y la capacidad al ejercicio sin modificar la saturación de oxigeno a corto y largo plazo (BREATHE-5) (8,21). PAG 21 SOCIEDAD DE CARDIOLOGIA DE CORRIENTES Imagen de Resonancia Nuclear Magnética donde se observa la CIV. SOCIEDAD DE CARDIOLOGIA DE CORRIENTES Imagen de TC Multislice donde se observa la dilatación de la Arteria Pulmonar. Imagen de TC Multislice donde se observa la gran dilatación de la Arteria Pulmonar. Imagen de TC Multislice donde se observa la CIV y la gran dilatación del Ventrículo Derecho. Imagenes de Resonancia Nuclear Magnética donde se observa la CIV y la dilatación del Ventrículo Derecho. El uso del sitaxsentan, un antagonista selectivo oralmente activo del receptor ETA, ha sido sintetizada, ambrisentan, un antagonista selectivo oralmente activo del receptor ETA, esta siendo evaluado. El sildenafil es un potente y selectivo inhibidor de GMP cíclica de la fosfodiesterasa tipo 5 (FDE-5) oralmente activo, que ejerce su efecto farmacológico por el aumento de la concentración intracelular de lacGMP151. El aumento de este nucleótido induce efectos de relajación y antiproliferación en las células musculares lisas vasculares en este momento se debe considerar el PAG 22 tratamiento con sildenafil en pacientes con HAP en los que las terapias aprobadas no han surtido efecto o que no son candidatos para ellas, el sildenafil demostró mejorar la clase funcional, la saturación de oxigeno y los parámetros hemodinámicos (5). La terapia combinada es una opción atractiva para el manejo de los múltiples mecanismos fisiopatológicos están presentes en la HAP. La terapia combinada consiste en la iniciación simultánea de 2 (o más) tratamiento o en la adición de un segundo (o tercer) tratamiento a una terapia previa si ésta se considera insuficiente (13). Trabajos retrospectivos han demostrado que el uso de terapias dirigidas en pacientes con estas características tendrían significativamente mayor sobrevida y retrasarían la necesidad de transplante comparado a pacientes que reciben tratamientos estándares (20). En la actualidad existe la posibilidad del trasplante, cardiopulmonar o sólo pulmonar, con la concomitante reparación cardiaca, las indicaciones según las guías son: Enfermedad sintomática progresiva ( IC Derecha, Cianosis Severa y NYHA III o IV con tratamiento medico) los Parámetros Hemodinámicos son Gasto Cardiaco < 2,PAD > 15 mmHg, PMAP > 55 mmHg , dado que el pronóstico de vida de estos pacientes es superior, en el momento actual, al de los trasplantes, el transplante pulmonar tiene una sobrevida al año de 70-80% y alos 4 años < 50% y el transplante cardiopulmonar al año 60-80% y a los 10 años 30%, por lo que su indicación estaría reservada sólo para aquellos pacientes con mal pronóstico como, por ejemplo, con insuficiencia cardíaca refractaria, severa hipoxemia o síncope (15,16). PAG 23 SOCIEDAD DE CARDIOLOGIA DE CORRIENTES CONCLUSION Hasta hace pocos años poco o nada podía ofrecerse a los pacientes con síndrome de Eisenmenger, fuera de modificar su estilo de vida (limitando ejercicio y exposición a la altitud, evitando deshidratación y cirugías innecesarias) o dar alivio sintomático con flebotomía. Los resultados del trasplante de corazón-pulmón o de pulmón único con cierre del defecto, no han sido satisfactorios; además de la dificultad para la disponibilidad de órganos, limitan seriamente la utilidad de este procedimiento. El síndrome de Eisenmenger fue considerado terminal en tres o cuatro años hasta que en 1982 el Dr. Reitz y colaboradores introdujeron la posibilidad de efectuar trasplante cardiopulmonar en estos enfermos. En 1990, El Dr. Fremes y colaboradores comunicaron la realización exitosa de un trasplante pulmonar con cierre de un ductus arterioso. Actualmente el trasplante cardiopulmonar representa el único tratamiento definitivo para enfermos con este síndrome. Teniendo en cuenta la morbilidad, mortalidad y la mala calidad de vida de los Adultos con Cardiopatías congénitas que han seguido su evolución natural se debería poner especial atención en la sospecha, diagnostico adecuado y tratamiento quirúrgico temprano. AGRADECIMIENTOS Dr. Ricardo Obregón, Instituto de Cardiología de Corrientes. Dr. Julio Ibáñez, Hospital Escuela General “San Martín”. Dr . Pablo Bayol, Instituto de Cardiología de Corrientes. Dr. Walter García, Instituto de Cardiología de Corrientes. BIBLIOGRAFIA 1. Michael J. Landzberg, MD. Congenital Heart Disease Associated Pulmonary Arterial Hypertension. Clin Chest Med 28 (2007) 243–253. 2. Nazzareno Galiè, Adam Torbicki , Robyn Barst, Philippe Dartevelle ,Sheila Haworth, Tim Higenbottam, Horst Olschewski ,Giuseppe Pietra ,Lewis J. Rubin y Gerald Simonneau, .Rev Esp Cardiol. 2005;58(5):523-66. 3. Florencio B. 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Pulmonary Arterial Hypertension. Clin Chest Med 28 (2007) 243–253. Marc Humbert, M.D., Ph.D., Olivier Sitbon, M.D., and Gérald 9. Simonneau, M.D. Treatment of Pulmonary Arterial Hypertension. N Engl J Med 2004;351:1425-36. Gerhard-Paul Diller, MD; Michael A. Gatzoulis, MD, PhD. 10. Pulmonary Vascular Disease in Adults With Congenital Heart Disease. (Circulation. 2007;115:1039-1050). Presentation, survival prospects, and predictors of death in 11. Eisenmenger syndrome: a combined retrospective and case–control study. European Heart Journal (2006) 27, 1737–1742. Tijssen, Erik Thaulow, Michael A Gatzoulis and Barbara J M Mulder 12. Peter M Engelfriet, Marielle G J Duffels, Thomas Möller, Eric Boersma, Jan G P. Pulmonary arterial hypertension in adults born with a heart septal defect: the Euro Heart Survey on adult congenital heart disease. Heart 2007;93;682687. Tom Adriaenssens1, Marion Delcroix2, Kristien Van Deyk1, and 13. Werner Budts. 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Guglielmone, Ramiro Sanatorio Curuzú Cuatía SRL Corrientes –Argentina RIESGO DE CANCER EN LOS ESTUDIOS DIAGNOSTICOS EMISORES DE RADIACIONES IONIZANTES VISION DESDE LA CARDIOLOGIA CLINICA Los métodos diagnósticos que utilizan radiaciones ionizantes (RI), que incluye a los rayos X y gamma, han progresado de una manera fantástica en los últimos años. Este desarrollo ha llevado a un incremento en el número de equipos, y en la cantidad de estudios realizados. El uso médico de las radiaciones ionizantes son la principal causa de exposición a radiaciones generada por el hombre (Gráfico 1). Los cardiólogos somos los principales responsables en el incremento de la utilización de RI ya que prescribimos más del 50% de los estudios diagnósticos, y dos tercios de la radiación recibida por paciente por año. En el 2006 se informó un aumento de 600% en el aumento de RI médicas respecto a los años '80, de los cuales corresponden a la cardiología el 60% de los estudios de radiología y el 85% de los de medicina nuclear. Y más importante aún es que se ha superado la cantidad media de RI natural de la tierra. Es decir, el solo hecho de vivir en éste planeta nos expone a diferentes radiaciones ionizantes provenientes del sol, tierra, y atmósfera de 2.4 mSv (miliSevert) / año, pero la radiobiología médica nos expone a 3.2 mSv / año / per cápita cuándo en 1987 era de 0.5 mSv / año en los Estados Unidos (2) (Gráfico 2). Los rayos X y gamma han sido clasificados como carcinogénicos por la Agencia Internacional de Investigación de Cáncer, de la Organización Mundial de la Salud (4). En el 2006, el Consejo Nacional Investigaciones, de la Academia Nacional de Estados Unidos publicó el Beir VII (1)(Biologic Effects of Ionizing Radiation), que es la actualización más completa realizada por expertos internacionales sobre los riesgos en la salud de las RI de bajo nivel, son las que se hallan entre 0 y 100 mSv, y es el rango que se utiliza en medicina. Desarrollaron un modelo de riesgo lineal en el que no hay umbral de riesgo cero, incluso a muy bajas dosis de radiación el riego de desarrollar cáncer existe (lineal-nothershold). El mecanismo por el cual se produce el cáncer no es bien conocido. Las RI tienen suficiente energía como para alterar las estructuras moleculares de las células, incluyendo el ADN. PAG 25 SOCIEDAD DE CARDIOLOGIA DE CORRIENTES SOCIEDAD DE CARDIOLOGIA DE CORRIENTES GRAFICO 1 GRAFICO 2 TABLA 1 79% de las radiaciones ionizantes producidas por el hombre son rayo X médicos y medicina nuclear. Extraído del Beir VII (1). Incremento de 600% de 1987 a 2006. El 60% de los estudios radiológicos y 85% de los de medicina nuclear corresponden a cardiología (3). Dosis efectiva y sus equivalentes en Rx de tórax antero-posterior (3). GRAFICO 3 Representación de risgo de cáncer y la dosis de radiación. MRI:resonancia magnética, US: ultrasonido, TC: tomografía computada. Adaptado de E. Picano (3). RIESGO ESTIMADO EN ESTUDIOS DE DIAGNOSTICO POR IMAGENES La cantidad de radiación absorbida por diferentes órganos y tejidos del organismo se expresa en mSv (mili Severt) (5). Para que los médicos y la comunidad en general comprendan mejor el monto de la radiación en los diferentes métodos diagnósticos, se compara con la radiografía simple de tórax postero-anterior, siendo 1 mSv equivalente a 50 Rx. Así, una tomografía computada de abdomen o una perfusión miocárdica con Tc99 sestamibi emiten un nivel de radiación de 10 mSv, equivalentes a 500 Rx, lo que implica un riesgo de desarrollar un cáncer sólido maligno en los próximos 10 ó 20 años de 1 en 2000. Una TCMC equivale a 700 - 1000 Rx y una perfusión con talio a 1000 Rx, que PAG 26 implica un riesgo de desarrollar cáncer de 1 en 1000 (Gráfico 3 y Tabla 1). Einstein Aj (6) estudió el riesgo de cáncer asociado a la TCMC de 64 detectores en estudios de angiografía coronaria y arco aórtico, y reporta una dosis efectiva de 15 mSv para la angiografía coronaria en hombres y 21 mSv en mujeres con equipos estándar, siendo menor si se utiliza equipamiento moderno con modulador de dosis regulada por electrocardiograma. El riesgo de desarrollar cáncer sería para mujeres de 20 años de 0.7% (1 en 143), particularmente alto para una mujer joven; y para 60 años de 0.22% (1 en 466). En el hombre a los 20 años el riesgo el risego calculado es de 0.99% (1 en 1007), y de 1 en 1241 para un paciente de 60 años con TCMC estándar. PAG 27 SOCIEDAD DE CARDIOLOGIA DE CORRIENTES SOCIEDAD DE CARDIOLOGIA DE CORRIENTES GRAFICO 4 Dosis acumulada en un paciente cardiológico moderno. TCMC: tomografía computada multicortes. Coro: coronariografía convencional. Stents: múltiples Stent. Stents, y a los 3 meses repetir la camara gamma de control, en todo este proceso recibiría una dosis efectiva de 79 mSv, equivalentes a 3.950 Rx de tórax (Gráfico 4). ¿ALARMA O ADVERTENCIA? Coles DR (7) y colaboradores, de Bristol Heart Institute, Reino Unido, estudiaron la dosis efectiva de radiación de la TCMC con 12 y 16 detectores y la compararon con la angiografía convencional. En la agiografía coronaria por TCMC la dósis media efectiva fue de 14,2 mSv con 12 detectores (equivalentes a 600 Rx) y 15,3 mSv con 16 detectores (equivalentes a 700 Rx), y solo 5,6 mSv con la angiografía convencional (equivalentes a 280 Rx). Barrington Gonzalez (8), de la Universidad de Oxford, analizó en 15 paíes diferentes métodos diagnósticos que utilizan rayos X. En el Reino Unido causan un riesgo acumulado de cáncer a los 75 años de 0.6%, lo que equivale a 700 casos por año. Siendo los órganos más afectados en el hombre la vejiga, colon y leucemia, mientras que en la mujer el pulmón y mama. Otros países como Estados Unidos tiene un riesgo atribuible de 0.9% (5.695 casos / año), Alemania 1.5% (2.049 casos / año), Australia 1.3% (431 casos / año), y el país que mayor riesgo tiene es Japón con 3.2% (7.587 casos / año) y mayor cantidad de estudios radiológicos realiza anualmente cada 1.000 habitantes. Un paciente coronario moderno de 45 años que consulta por dolor precordial podría realizarse primero una cámara gamma con Tc99 sestamibi y luego una TCMC, confirmando la presencia de enfermedad coronaria significativa continúa con la etapa terapéutica de coronariografía convencional e implante de múltiples PAG 28 Lo expuesto anteriormente parece alarmante si no se analiza la información en detalle desde el aspecto médico, epidemiológico, y ético. La mayoría de las veces, sino todas, los médicos indicamos un estudio diagnóstico teniendo en cuenta el beneficio sobre la patología y eventuales reacciones adversas o complicaciones a corto plazo (por ejemplo la alergia al yodo, ateroembolia o disección en una arteriografía) pero no pensamos en el largo plazo. Y lo que es peor aún es que la comunidad médica en general desconoce la problemática de las RI en cada estudio que prescribe, y esto lo demostró Shiralkar (9) con un cuestionario realizado a médicos, el 97% de los médicos encuestados infraestimaron la dosis de radiación en diferentes estudios, el 5% desconocía que el ultrasonido no utiliza RI, de igual manera que el 8% para la resonancia magnética. El Beir VII (1), y el Colegio Americano de Radiologos (2) (American College of Radiology) informan el riesgo de los estudios diagnósticos médicos, especialmente los cardiológicos. Pero llamativa y paradójicamente, la Aociación Americana del Corazón (American Heart Association) (10), en una publicación de expertos de éste año, relativiza dicho riesgo basándose en que el riesgo de contraer cáncer maligno en algún momento de la vida, en los Estados Unidos, es del 41% y el riesgo de muerte por cáncer de 21%, y cuestiona la incidencia de un agregado de 0.05% de riesgo sobre otro mayor de 21%. Entonces uno se pregunta, ¿cuándo es significativo un riesgo de 1/1000? La Royal Society del Reino Unido, en 1983, establece que no es inaceptable si: a) el paciente conoce el riesgo, b) si recibe un beneficio significativo, y c) si se ha realizado todo lo razonable para disminuir el riesgo (11, 12). Pero en este análisis de riesgos y beneficios no debemos olvidar cuántas vidas se salvan con los diferentes estudios diagnósticos o terapéuticos emisores de radiaciones. Y este es el aspecto más importante que debemos razonar, ya que nos lleva a dos principios básicos de la medicina: 1) el beneficio por sobre el riesgo, y 2) uso racional de recursos médicos. Afortunadamente disponemos de recursos diagnósticos que no emiten RI como el ultrasonido y la resonancia magnética nuclear (RMN), por ende no inducen ningún riesgo de cáncer. Deberíamos optar en primer lugar por éstos métodos y utilizar los que emiten RI en los casos que son indispensables. Hoy deberíamos valorar el riesgo de cáncer atribuible a largo plazo, especialmente en paciente jóvenes y mujeres, por ejemplo al momento de decidir entre una cámara gamma (775 Rx) ó eco estrés (0 Rx) en la unidad de dolor de pecho. También deberíamos poner en la balanza de la decisión cuando tenemos que optar por una angiografía convencional de alguna parte del cuerpo (280 Rx) vs TCMC (750 Rx) vs RMN (0 Rx) si la situación clínica implica igual rédito diagnóstico. El paciente o familiar debe ser informado del riesgo biológico de las radiaciones, especialmente en los de alto nivel, a través del consentimiento informado, y eventualmente participar en la opción entre uno u otro estudio (11, 13). El uso racional de recursos también implica la prescripción adecuada por el médico clínico, poner especial atención en no repetir estudios innecesarios, así como en el riesgo aditivo de estudios múltiples (14, 15). CONCLUSIONES Todo riesgo evitable más allá del propio riesgo inherente a vivir la vida, es significativo. Los expertos advierten del aumento exponencial de las RI médicas y sus riesgos. Es un aspecto que debería formar parte de la educación médica desde la universidad y residencias para tomar conciencia e incluir en los algoritmos de decisiones de cada patología. Deberíamos anteponer los recursos diagnósticos sin RI en el árbol de decisiones. La radiología no es mala, permite curar y prolonga la vida, si se usa adecuadamente. La comunidad médica en general, y los cardiólogos en especial, deberíamos pensara en el riesgo de cáncer atribuible al estudio que vamos a prescribir. Los expertos advierten, tengámoslo en cuenta antes de que suenen las alarmas. BIBLIOGRAFIA Comittee to Assess Health Risk from Exposure to Low Levels of 1. 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La regulación de la protección radiológica y la 15. función de las autoridades de salud. Organización Panamericana de la Salud, Salud en las Américas. Rev Panam Salud Publica 2006;20(2/3):188-97. PAG 29 AUTORES Dr. Manzolillo, Héctor Santiago SOCIEDAD DE CARDIOLOGIA DE CORRIENTES GRANDES PERSONALIDADES DE LA MEDICINA MODERNA RENE THEOPHILE HYACINTHE LAENNEC ¿Podríamos imaginarnos la actividad médica cotidiana sin un estetoscopio? Hoy trataremos sobre René Théophile Hyacinthe Laennec. Se trata de un hombre de pequeño tamaño físico pero de un gigantesco impacto en la medicina de todos los tiempos. Médico de origen francés que Nació en Quimper, Francia en 1781 y murió en 1826 de tuberculosis. Pasó la adolescencia en Nantes en casa de un tío médico. A los 19 años de edad, becado, viajó a París a la Escuela Médica para iniciar los estudios de medicina, en los que pronto se distinguió. Fue alumno de Corvisart, médico personal de Napoleón y de Dupuytren. Una vez graduado, trabajó en el Hospital Necker donde fue nombrado médico en 1816, a los 35 años de edad. Fue en este lugar donde pudo observar y tratar numerosos pacientes con tuberculosis. También creó un método novedoso el método anatomo clínico, según el cual comprobaba el cadáver los hallazgos auscultatorios realizados en vida. Fue en este entorno cuando no se resignó a la imposibilidad de auscultación cardíaca por los medios convencionales de la época (colocando el oido sobre el tórax del paciente) en una paciente obesa y, recordando un juego de su niñez, enrolló un papel y colocó un extremo en el oído y el otro en la región precordial consiguiendo su objetivo con particular claridad. Poco tiempo después en 1819 publica "De l’auscultation médiate ou traité du diagnostic des maladies des poumons et du coeur fondé principalement sur ce nouveau moyen d’exploration" en donde describió el estetoscopio como un cilindro de madera, cedro o ébano, de cuatro centímetros de diámetro y treinta de largo, perforado por un agujero de seis milímetros de anchura y ahuecado en forma de embudo en uno de sus extremos. En dicha obra, que causó gran sensación en París, describió los sonidos que oyó con el estetoscopio, creó nuevos términos como pectoriloquia, egofonía, crepitación, estertor y detalló enfermedades no conocidas hasta entonces. Incasable patólogo no siguió el consejo de los profesionales encumbrados de la época que le pedían se alejase de los cadáveres de tuberculosos, de los cuales se contagia. Describe detalladamente la lesión en su dedo índice de la mano derecha cercenado por una cierra durante un examen de una vértebra con lesiones tuberculosas. Aún no había sido descubierto el bacilo responsable, y se discutía el origen de la enfermedad. Laennec era férreo defensor de una teoría unitaria que explicara todos los hallazgos anatomopatológicos y anatomoclínicos. Si bien tubo una vida corta dado que vivió 45 años, su contribución a la medicina fue inmensa dado que marcó la historia de la Medicina en tres campos sumamente importantes ella: 1. La invención del estetoscopio, 2. La delimitación de cuadros semiológicos de enfermedades cardíacas y pulmonares y 3. La descripción de lesiones anátomo-patológicas. Persona recordada por sus contemporáneos como “increíblemente polifacético, era buen filólogo (filología: Ciencia que estudia la lengua y la literatura de un pueblo a través de los textos escritos), músico, cazador, dibujante, grabador y administrador, además de ser un genio médico y un hombre bueno”. Sin dudas una de las personalidades mas importantes de la medicina moderna. BIBLIOGRAFIA Profiles in Cardiloogy volume 1, Willis Hurst, C Richard Conti. PAG 31
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