Marzo 2015 - Pastoral Juvenil de Santo Domingo

Arquidiócesis de Santo Domingo
Arquidiócesis de Santiago
Diócesis de Barahona
Diócesis de Baní
Diócesis de Puerto Plata
Diócesis de San Pedro de Macorís
Diócesis de San Francisco de Macorís
Diócesis de Mao-Monte Cristi
Valor del Mes:
Solidaridad
Lema del Mes:
“Ayúdense mutuamente”
(Gal 6,2)
Plan de Pastoral
Marzo 2015
Créditos
Colaboradores:
P. Cristian Paulino P., P. Ángel Díaz GIL, Licda. María Teresa Paulino, Licda.
Thelma Altagracia Peña y P. Wiberto Adames, MSC (Diócesis de San Francisco
de Macorís), Rita Ceballos, P. Valerio Baines Sanz, OAR, y Daniel Lorenzo Vargas
Salazar (Santo Domingo).
Coordinación:
Eugenia López
Diagramación y Arte Final:
Jesús Pérez
Portadas:
Werner Olmos
Impresión:
Editora Amigo del Hogar
Manuel María Valencia No. 4
Santo Domingo, D. N. Tel.: 809.548.7594
Para contacto Vicaría de Pastoral,
Teléfono 809-682-0815, 809-221-3126 y 809-685-3141 ext., 261-262
Correo electrónico: [email protected]
Redes Sociales: www.facebook.com/VicariadePastoralSantoDomingo
Plan de Pastoral - Marzo 2015
Acción Significativa del Sector:
Campaña sobre los derechos y dignidad de la mujer
Acción Significativa Familiar:
Colecta del Sacrificio por familia.
Índice
Primera Parte:
Encuentros de Evangelización . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 4
Acción Significativa del Sector . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 12
Caminata Penitencial . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 18
Siete Dolores de la Virgen. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 24
Segunda Parte:
Celebraciones Dominicales, Lecturas de la Palabra
de cada día y Meditación diaria del Evangelio. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 30
Domingo de Ramos en la Pasión del Señor. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 88
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Ayúdense mutuamente
Primer Encuentro de Evangelización
Semana del 1-7 de Marzo
La mujer, testimonio de solidaridad
0.Orientaciones para este Encuentro:
Se coloca en un lugar destacado el lema
del mes y el título de este encuentro.
Se pueden colocar retratos de mujeres
que son símbolo de solidaridad entre
nosotros en nuestra historia y hoy. Se
pueden tener flores para entregarlas
a cada mujer. Se puede colocar una
imagen de la Virgen, modelo de mujer solidaria. Se puede preparar un
brindis en honor a las mujeres y proponerse a realizar algo por alguna
mujer maltratada o muy pobre.
1. Cantos de ambientación cuaresmales y de solidaridad
2.Oración: Se invita a una mujer que dirija la oración de invocación al
Espíritu Santo y presentando al Señor todas las mujeres solidarias.
3.Introducción
En este mes de marzo dentro de nuestro itinerario de evangelización de
este año dedicado a hacer nuestras las necesidades de los demás y a la
Vida Consagrada tenemos como valor a cultivar y resaltar es la solidaridad
con el lema “Ayúdense mutuamente” (Gal. 6,2).
Ya que el 8 de Marzo celebramos el Día Internacional de la Mujer nuestra
mirada solidaria se dirige hacia todas las mujeres que sufren maltrato
de cualquier tipo o viven en situaciones de indigencia. Al mismo tiempo,
aprendemos de ellas su testimonio de solidaridad hacia los suyos y hacia los
demás. Y, destacamos la vida y misión de las mujeres consagradas en los
Institutos Seculares. Iniciemos compartiendo entre nosotros:
• ¿Qué es solidaridad?
• ¿Cuándo podemos decir que una persona es solidaria?
• Pensemos en las mujeres de nuestra parroquia, de nuestro sector:
¿Conoces algún caso de mujeres que dan testimonio de solidaridad en tu
comunidad?
• ¿Conoces algún caso de maltrato a la mujer en nuestro país?
• ¿Qué se hace en el sector o en la parroquia a favor de las mujeres?
• ¿Qué podríamos hacer por la promoción de la dignidad y el respeto de la
mujer?
4- Escuchemos la Palabra: Juan 8,1-11.
Momento de silencio. Analicemos este Evangelio entre todos y todas
mirando las personas que intervienen, lo que dicen, lo que hacen, lo que
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Plan de Pastoral - Marzo 2015
nos enseña. Es importante descubrir cómo Jesús muestra la solidaridad con
esta mujer.
5. Para profundizar en el tema de hoy
En el tiempo de Jesús, el hombre era centro y la mujer le tocaba estar a su
alrededor obedeciéndolo en todo. Una de las leyes era que cuando una mujer
era sorprendida en adulterio el marido podía repudiarla públicamente y era
sentenciada a muerte colocándola en el parque y allí todos la apedreaban.
Es, precisamente, lo que estaba ocurriendo con esta mujer de la que nos
habla este Evangelio.
En esta situación interviene Jesús, que se enfrenta a todos los que
se creían santos, salvos y buenos y le da a esta mujer maltratada valor,
dignidad, y respeto. El la rescata, se solidariza con la mujer, la levanta, le
regala una vida nueva. Incluso los desafía, les reclama y los pone delante
de la sociedad que eran ellos mismos a mirarse a sí mismos y a reflexionar
sobre lo que ellos hacen, llevándolos al punto de ir retirándose uno a uno
hasta el último que quedaba.
Es interesante descubrir cómo Jesús ayuda a esta mujer haciéndose
solidario con ella. El no justifica ese pecado, pero busca liberarla de la
muerte a manos de sus acusadores. El da la mano a esta mujer, aunque le
invita a renunciar al pecado y empezar una vida nueva.
Ahora pensemos en silencio en la cantidad de mujeres que han sido
maltratadas, por diferentes causas y motivos. ¡Cuántas mujeres han muerto
porque en los destacamentos no hacen caso de su denuncia!
Hoy como Iglesia, como familia, como madres, padres, como sociedad en
general ¿qué estamos haciendo en nuestra comunidad, en el trabajo, en los
medios de comunicación para erradicar estos maltratos? ¿Qué tengo que
cambiar en mi persona para ayudar a tantas mujeres que reciben maltrato
de todas formas físico, psicológico, verbal, abandono, dejadez?
Es necesario resaltar que Jesús habla de la mujer con respeto y bondad,
manifestando con su intención acogerla y pedirle que se comprometa en
la instauración del reino de Dios en el mundo. En el Evangelio se expresa
la admiración de Jesús por la fe de algunas mujeres. Por ejemplo, en el
caso de la hemorroísa, a la que dice: «Tu fe te ha salvado» (Mc 5, 34).
Es un elogio que tiene gran valor, porque la mujer había sido objeto de la
segregación impuesta por la ley antigua. Jesús libera a la mujer también de
esa opresión social.
Al igual, la cananea merece esta alabanza de Jesús: «Mujer, grande es tu
fe» (Mt 15, 28). Se trata de un elogio que tiene un significado muy especial, si
pensamos que se dirige a una extranjera para el mundo de Israel. Podemos
recordar también la admiración que Jesús siente por la viuda que da lo único
que tiene (dos monedas) para el tesoro del templo (cf. Lc 21, 1-4); y su
aprecio por el servicio que recibe de María en Betania (cf. Mt 26, 6-13; Mc
14, 3-9; Jn 12, 1-8), cuyo gesto, como él mismo anuncia, se conocerá en
todo el mundo.
También en la historia de las primeras comunidades cristianas Pablo da
testimonio de la gran contribución que las mujeres dieron a la evangelización,
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Ayúdense mutuamente
comenzando por «Febe, nuestra hermana como la llama san Pablo:
“Recíbanla bien, como debe hacerse entre cristianos y santos hermanos, y
ayúdenla en todo lo que necesite, pues muchos están en deuda con ella, y
yo también”. (Rm 16, 1-2).
Son muchas las colaboradoras de los Apóstoles en Cencreas, en Roma
y en todas las comunidades cristianas. Son innumerables las mujeres
-religiosas y laicas- que a lo largo de los siglos han dado testimonio del
Evangelio y han transmitido la fe, ejerciendo un gran influjo en la creación de
un clima cristiano en la familia y en la sociedad.
El mayor ejemplo de solidaridad lo da la Virgen María, mujer servicial, no
se quedó sentada para que todos le sirvieran por ser la madre del Mesías
sino que “subió deprisa a la montaña a servir a su prima”. Ella se tiene por
esclava, servidora del Señor, y de cuantos tengan necesidad de su ayuda.
Otro modelo de solidaridad fue la Madre Teresa de Calcuta, sirvió a
los más desposeídos, los indigentes, los más necesitados. En la historia
de nuestra República se puede mencionar a María Trinidad Sánchez,
Concepción Bona, Manuela Diez esta ultima la madre de Juan Pablo Duarte,
a quien no le importó poner a la disposición de su hijo todos sus bienes por
el bien de su Patria.
6. Recordemos a mujeres dominicanas de ayer y de hoy que se han
distinguido por ser solidarias en su familia, en la Iglesia y en la sociedad.
En este momento, los que quieran pueden recordar a mujeres que
supieron ser solidarias y que son para nosotros ejemplos de solidaridad.
7. Oración final.
Como signo de solidaridad oremos de manera particular por todas
las mujeres, en especial las de nuestra comunidad. A cada petición
responderemos: Escúchanos Señor.
Lector/a l: «La fe es la fuerza del corazón». Oremos con todas las
mujeres que están luchando con valentía por su bienestar y el de los demás.
Oremos con todas las mujeres que, en sus familias, dan a la vida su verdadero
significado por el don de un amor gratuito, por las actitudes maternales que
ellas desarrollan cada día. Oremos también con las profesoras, educadoras
y todas aquellas comprometidas en el servicio a los demás.
Lector 2: “Señor, hazme un instrumento de Tu Paz”. Bendice a todas
las mujeres que trabajan cada día para llevar la paz a su comunidad, a sus
casas y en sus corazones. Dales la fuerza para continuar cambiando las
espadas en arados.
Lector 3: “Donde hay odio, ponga yo el Amor”. Oramos por todas las
mujeres que sufren discriminación de género, la desigualdad y el prejuicio.
Ayúdanos a ver y enfrentar la discriminación contra la mujer en cualquiera
de sus formas.
Lector 4: “Donde haya ofensa, ponga yo el Perdón”. Reconforta a
todas las mujeres que sufren el dolor de la guerra, la violencia y el abuso.
Que ellas puedan llegar a ser instrumentos de su propia reconciliación y
pacificación
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Plan de Pastoral - Marzo 2015
Lector 5: “Donde haya discordia, ponga yo la Unión”. Perdona a
todas las mujeres y hombres que han dejado que las diferencias alimenten
el odio y la discriminación. Que el ejemplo de su respeto por toda la creación
nos ayude a ver que todos somos responsables de nuestro mundo.
Lector 6: “Donde haya error, ponga yo la Verdad”. Reconforta a todas
las mujeres que luchan en las tinieblas del abuso, de la pobreza y de la
soledad. Que podamos traerlas a la luz, para reconocer su dolor y tratar de
eliminar la carga de vergüenza o incomodidad.
Lector 7: “Donde haya duda, que lleve yo la Fe”. Oramos por todas
las mujeres que viven con el temor de sus maridos, su hermano, su padre y
de otras personas. Ayúdalas a ser capaces de ser ellas mismas gracias a tu
amor eterno y a la fe.
Lector 8: “Donde haya desesperación, que ponga yo la Esperanza”.
Oramos por todas las mujeres que viven en la desesperación, la pobreza, la
violencia, la trata, la esclavitud y el abuso. Que la luz de tu amor les lleve la esperanza y que trabajemos para que a nuestro alrededor no se repitan esos hechos.
Lector 9: “Donde haya tristeza, que yo ponga la alegría”. Ayúdanos a
ver la fuerza y la bondad en cada mujer y cada hombre. Transforma nuestros
corazones para que celebremos el amor y la gracia en todas las personas.
Para concluir se reza el Padre Nuestro y Avemaría. Si se llevaron flores
se le entrega a cada mujer presente diciendo en voz alta en qué se descubre
su solidaridad. Luego se saluda a las mujeres presentes y se les felicita por
su testimonio de solidaridad.
Segundo Encuentro de Evangelización
Semana del 9-14 de Marzo
Mujeres consagradas al Señor y solidarias con su pueblo
en los Institutos Seculares
Orientaciones para el Encuentro: El
Objetivo de este encuentro es conocer más de
los Institutos Seculares Femeninos, su servicio
a la Iglesia y a la comunidad. Si en su Parroquia
o Sector hay alguna perteneciente a un Instituto
Secular pueden invitarla a la reunión. Colocar
el título del Encuentro en un lugar visible. Se
puede dramatizar el diálogo del inicio.
1. Canto: Cantando la Alegría de Vivir o El Compinche
2.Oración: Se invoca el Espíritu Santo para que nos de de su sabiduría,
nos inunde de su amor y discernimiento para comprender el mensaje y
ponerlo en práctica.
3. Para empezar: dos personas leen el siguiente diálogo que tienen una madre
que es profesora y catequista en su comunidad y su hija sobre los Institutos
Seculares, uno o una lee donde dice Lector 1 y el otro o la otra Lector 2.
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Ayúdense mutuamente
Lector 1: Hola Mami, ¿qué tal te fue en el trabajo?
Lector 2: Como todos los días, ¡Excelente! Sabes, es una bendición
trabajar con jóvenes como ustedes que tienen en la vida tanto por descubrir.
Lector 1: A propósito, Mami, de regreso a casa tuve la oportunidad de
conversar con una persona religiosa, a la que normalmente conocemos como
monjas; pero esta no llevaba puesto hábito, tu sabes mami la vestimenta que
ellas usan que la distingue de las personas común, vive en su casa y no en
un convento… pensé que tú como maestra y catequista a la vez, serías la
persona idónea para aclararme de que se trata.
Lector 2: Bueno hija puedo decirte que al igual que las monjas que
conocemos comúnmente, existen personas que también se consagran a
Dios y se agrupan en los llamados Institutos Seculares.
Lector 1: ¿Cómo? Explícame eso.
Lector 2: Vamos a intentarlo. Un Instituto es una asociación de personas
que se unen por un ideal común y una misión común. Secular viene de siglo
y quiere decir el que vive en el siglo. Se llama Instituto Secular a un grupo
de laicos y laicas que sin dejar el siglo, es decir el lugar y el ambiente social
donde viven, la profesión o el oficio que realizan o su tarea en la Iglesia se
unen para seguir juntos o juntas a Jesucristo consagrándose a El y a su
Padre inspirados por el Espíritu Santo. Se comprometen públicamente con
el Señor a través de una promesa o juramento especial de vivir en castidad,
pobreza y obediencia.
Lector 1: ¿Puedo tomar notas? Porque suena bastante interesante.
Lector 2: Claro que si mi cielo… como te decía, es una rama más del
gran árbol de la vida consagrada. Se trata de ser “luz para alumbrar a todas
las naciones” (Lc. 2, 32) como levadura en el mundo de hoy evangelizándolo
a través de su testimonio de vida cristiana y de fidelidad a su consagración
así como con su compromiso de transformar la sociedad con la fuerza
del Evangelio. Y, también, ofrecen su propia cooperación al servicio de la
comunidad eclesial, de acuerdo con su modo de vida secular
Lector 1: Pero, ¿qué significa que “viven en el mundo”? ¿Es que acaso
no todos vivimos en él?
Lector 2: Mira… Es conveniente explicar que la Iglesia entiende por el
mundo a la sociedad en que vivimos. Todas las personas como tú dices
vivimos en una sociedad, en el mundo. Antes de que existieran en la Iglesia
estos Institutos Seculares la persona que deseaba entregar totalmente, sin
dividir, su corazón al Señor, debía entrar en una Orden o Congregación
retirándose de la vida ordinaria de la gente. Ahora aquella persona que desee
puede consagrar su corazón a Dios por medio de los consejos evangélicos de
castidad, pobreza y obediencia y quiera seguir viviendo en la vida cotidiana
de la sociedad puede hacerlo permaneciendo como un laico más.
Lector 1: Pero, explíqueme otra vez para entender mejor
Lector 2: Fíjate bien que un miembro de un Instituto Secular es plenamente
laico y plenamente consagrado a Dios. Nada pierde su consagración por el
hecho de vivirse en medio del mundo, en las más variadas profesiones y
ambientes sociales. Nada pierde de su carácter secular, de su ser de laico,
por el hecho de estar consagrado a Dios, antes bien, se convierte –si es fiel a
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Plan de Pastoral - Marzo 2015
su vocación– en el laico ejemplar, en el modelo del comportamiento que debe
tener todo laico o seglar realmente cristiano, que aspira verdaderamente a
la santidad.
Lector 1: Entonces, ¿Cuál es su misión?
Lector 2: Es una pregunta muy importante. Hoy en día la mayor parte de
los campos de actividad humana que rigen el mundo y determinan para toda
la humanidad modelos de comportamiento se hallan en manos de los de los
laicos y laicas. Si en cada uno de esos campos de actividad existen personas
consagradas a Dios, que aman al Señor como amor único y exclusivo de su
vida y, a la vez, son plenamente competentes en el ejercicio de su profesión,
la cual la ven como un instrumento para realizar el Reino de Dios y así
ordenar todas las realidades humanas según Dios, entonces ciertamente el
mundo será renovado y trasformado por el poder redentor de Cristo.
Lector 1: Y, ¿no pueden tener obras y casas propias de su Instituto?
El apostolado de institutos seculares incluye todo el estilo de vida de
los miembros en sus oficios, profesiones o en el servicio a los demás. En
algunas ocasiones, ayudan en actividades parroquiales o diocesanas.
Algunos tienen vida en comunidad, otros están formados por miembros que
viven con sus propias familias, otros por miembros que viven solos, otros
combinan en sí mismos diversas posibilidades. Algunos tienen obras propias
de apostolado, como escuelas o diferentes servicios de acuerdo a su propio
carisma. Otros no las tienen
Lector 1: ¿Y el estar así fuera de un convento y sin una ropa que la distinga
no les pone en riesgo de descarriarse, de que le falten el respeto, porque
ellas visten así igual que nosotros, digo, con unas ropas muy decentes?
Lector 2: Aunque no vivan en un convento ellas no están solas, porque
están asociadas entre ellas estableciendo fuertes lazos de comunión. Tienen
un Equipo que les dirige; se reúnen con los otros miembros de la asociación
local, regional y nacional, para compartir días de recogimiento y retiro, para
formarse más y mejor, para celebrar su vida y su fe. También suelen reunirse
para socializar al igual que en conferencias nacionales e internacionales.
Les ayuda mucho que tienen su propia regla de vida, como si fueran unos
estatutos por el que se guían y que establecen una fuerte vida de oración
unida a su acción en mundo para así ser levadura en la masa.
Lector 1: Por lo visto en la vida secular el hábito no es imprescindible?.
Lector 2: Muchas de ellas no llevan ningún distintivo religioso y así viven
su consagración a Dios en medio del mundo. Las hay que lo llevan o tienen
un distintivo propio. Pero, en general se trata de vivir como una laica más,
pero con una consagración especial.
Lector 1: Y, ¿sólo son mujeres? ¿Cuántos Institutos Seculares Femeninos
hay en el país?
Lector 2: Hay Institutos Seculares masculinos y femeninos. En este
encuentro de hoy sólo hablamos de los femeninos. En otro mes hablaremos
de los masculinos. Aquí tenemos 5 femeninos que son: el Instituto Secular
Altagraciano, las altagracianas, fundado en el país en el 1951 con presencia
en Santo Domingo, La Vega; Santiago y Pedernales; las Hermanas Marianas
de Schoenstatt que están en el Santuario de Schoenstatt en La Victoria, en
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Ayúdense mutuamente
Santo Domingo y Tenares; la Filiación Cordimariana en Santo Domingo; las
Oblatas Misioneras de María Inmaculada en Santo Domingo, Hato Mayor e
Higuey y las Voluntarias de Don Bosco en Santo Domingo.
Lector 1: Y ¿cómo se comunica con ellas una joven que esté interesada?
Lector 2: Mira al final del Encuentro y encontrarás sus direcciones y
teléfonos.
4. Para dialogar entre nosotros
Después de escuchar esta entrevista sería bueno que compartamos
entre nosotros.
• ¿Qué son los institutos seculares?
• ¿Conoces a alguien que pertenezca o haya pertenecido a un instituto
secular?
• ¿Cómo es su estilo de vida?
• ¿Cuáles atributos caracterizan una persona que pertenece a un instituto
secular?
• ¿Cómo podríamos dar a conocer estos Institutos Seculares?
5. Escuchemos la Palabra: Juan 17,14-21.
Momento de silencio. Compartamos respondiendo esta pregunta: ¿Cómo
se aplica este Evangelio a los que se consagran al Señor en los Institutos
Seculares?
6. Profundicemos la palabra de Dios con esta meditación.
El texto que acabamos de escuchar del evangelista San Juan es una
expresión de especial solidaridad de Jesús con sus discípulos; es el clamor
que Jesús hace al Padre por todos aquellos que habiendo sido llamados
a vivir la palabra permanezcan bajo la protección del Padre ya que los del
mundo se ensañarán contra aquellos que viven la verdad.
Jesús viviendo en carne propia las vicisitudes que por los hombres sufrió
reclama la asistencia divina para que los que lo siguen puedan permanecer
en el Padre. Esta gracia divina solo se puede conseguir guardando sus
preceptos. Nadie puede llegar al Padre si no se aparta de la vida pecaminosa
que la carne reclama, los placeres, el libertinaje, los vicios, la envidia, los
rencores, la inmundicia.
Es importante reconocer que sólo no podemos hacerlo, necesitamos la
compañía del Espíritu Santo para tener la fortaleza que tuvo Jesús para resistir
las ofertas tentadoras del rey del mal. El firme propósito de no pecar. Saber
que a diario tenemos que recurrir a su amparo divino, que está en su palabra,
para decirle que no al mundo y continuar acercándonos más y más a él.
Son muchas las personas que lo dejan todo para seguir al señor, a
través del servicio a los demás. Entre ellos se pueden citar: sacerdotes,
consagrados, consagradas, miembros de instituciones seculares entre
otros, que viviendo la Palabra de Dios se deciden a llevar el mensaje
mediante los diferentes servicios que realizan, como el de criar y proteger
niños huérfanos, el cuidado de personas envejecientes, de educar, brindar
asistencia a personas enfermas, entre otras.
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Plan de Pastoral - Marzo 2015
Estos viven en el mundo pero no son participes de su desenfreno banal;
sino son un fiel testimonio de que Jesús vive y da vida en abundancia. Estas
personas hacen realidad el valor de la solidaridad.
7. Oremos por los Institutos Seculares
Nos colocamos en círculo y nos tomamos de la mano. Se hacen peticiones
por todas las mujeres consagradas pertenecientes a los Institutos Seculares.
Pedimos por su fidelidad a la vocación y al carisma recibido. Oramos para
que haya más vocaciones para estos Institutos. Concluimos con el Padre
Nuestro y Ave María. Se concluye con esta oración.
Dios y Señor nuestro, protector de todo lo creado, cercano a los que en ti
confían, bajo tu amparo ponemos las acciones y las vidas de todos los que han
decidido proclamar tu nombre con su ejemplo de vida. Dales la fortaleza para
continuar anunciando tu reino siendo la levadura que fermenta el crecimiento
de tu reino. Aumenta el surgimiento de vocaciones a tu servicio y ayúdalos
a permanecer fieles a ti. A nosotros danos la gracia de seguir su ejemplo y
trabajar para que cada día haya más personas consagradas a tu servicio.
Canto final: Alma Misionera
DIRECCIONES DE INSTITUTOS SECULARES
1. Altagracianas, Nuestra Señora de la Altagracia (ISA)
CASA: Apartado Postal 2176. Calle Amalia Francisca, Esq. Lorenzo
Despradel, Sector los Prados, Santo Domingo, Distrito Nacional.
Tel.: 809-227-5407 / Fax: 809-548-6103
[email protected]
2. Filiación Cordimariana
COMUNIDAD: Calle Parmenio Troncoso de la Concha No. 21,
(Callejón Regina) Ciudad Colonial, Santo Domingo, D.N. Tel.: 809-689-0898
4. Oblatas Misioneras de María Inmaculada (OMM)
Apartado Postal 136, Calle 4, No. 58, Ensanche Las Américas,
Santo Domingo Este, Provincia Santo Domingo.
Tel. y Fax: 809-596-7946 • E-mail: [email protected]
5. Schoenstatt, Hermanas de María de Schoenstatt (HMS)
Casa Central y de formación (Casa Ita Pater). Prolongación Padre
Páez s/n., Distrito Municipal La Victoria, Municipio Santo Domingo Norte,
Provincia Santo Domingo.
Tel.: 809-222-8006 / 809-222-8009
[email protected]
6. Voluntarias de Don Bosco
[email protected]
Tel.: 809-696-9702
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Ayúdense mutuamente
Tercer Encuentro de Evangelización
Semana del 16-21 de Marzo
Acción significativa del Sector
Campaña de solidaridad con
nuestras mujeres. Desfile por sus
derechos y dignidad.
La acción significativa del mes de
marzo está dedicada a los derechos
y dignidad de la mujer. Proponemos
un día de campaña en toda la comunidad donde reflexionemos sobre la
realidad de la vida de las mujeres y nos comprometemos a promover el
cuidado de la vida de la mujer.
Se puede organizar un Desfile por los derechos y dignidad de la mujer.
Escoja un lugar céntrico o significativo en su comunidad. Invite a sus amigos
y amigas e invite a la comunidad. Se prepara el lugar del encuentro con
letreros que motiven la campaña. Cuando lleguen todos los participantes
motive la celebración siguiendo la siguiente propuesta:
Orientación para este Desfile: Se ambienta con música cristiana,
letreros, mural y una vela grande. Se preparan carteles con estas frases: 1Por los derechos y la dignidad de las mujeres; 2- Somos gente de fe, por eso
cuidamos y respetamos la vida de la mujer; 3- Si la mujer avanza el mundo
también; 4- María, madre de Jesús, mujer de fe firme acompaña a tu pueblo;
5- Dios creó a la mujer a su imagen y semejanza.
Mural con carteles con nombres de mujeres. Título del mural: Dios creó
a la mujer a su imagen y semejanza. Nombre de mujeres: Ana, María,
Rosa, Antonia, Altagracia, Francisca, Alba, Rita, Rafaela, Rocío, Carmen,
Mercedes, Sonia, Maribel, Maritza, etc. Según van llegando mujeres van
colocando sus nombres en el mural.
1.Canción: Nuestra fe no puede descansar
2. Oración inicial: Una mujer invoca el Espíritu Santo y entrega al Señor
este Desfile.
3. Primera parada: La mujer fue creada por Dios a su imagen y semejanza
Lectura: Gn 1,26-31.
Meditación: Este primer relato afirma que Dios creó al ser humano,
hombre y mujer los creó; y esta creación fue a imagen y semejanza de Dios;
ambos, hombre y mujer, fueron creados al mismo tiempo y ambos fueron
bendecidos y a ambos les fue entregado todo cuanto existe.
Este relato bíblico tiene una afirmación incuestionable: el dador de la vida
es Dios. Dios ha creado, ha formado al hombre y a la mujer.
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Plan de Pastoral - Marzo 2015
Canto: sobre la dignidad humana
4. Segunda parada: Dios quiere la igualdad y el respeto entre
hombres y mujeres.
Lectura: Gálatas 3,26-28
Meditación: Vivimos en una cultura machista y patriarcal donde tanto
hombres como mujeres aprendemos a vernos como contrarios y no como
compañeros y compañeras de camino. Somos formados con una mentalidad
que nos impide reconocernos, mujeres y hombres, como personas con igual
dignidad y derechos. Declaramos que mujeres y hombres como seres
humanos somos iguales en derechos y deberes. Mujeres y hombres
como seres humanos son iguales en derecho y dignidad.
Canto sobre la igualdad o sobre la fraternidad.
5. Tercera parada: Las mujeres construyeron la historia de la salvación
Lectura: Éxodo 1,15-22
Meditación: Muchas mujeres estuvieron construyendo la historia de
salvación en el Primer Testamento. Sus nombres y sus acciones no siempre
son mencionados. Les traemos algunos nombres. Les invitamos a leer los
textos y profundizar en sus vidas.
- Las parteras Puá y Sifrá: defensoras de la vida. Estas mujeres arriesgan
su vida a favor del cuidado de la vida. Se enfrentan al faraón, toman
decisiones, se comprometen. Lea Ex 1,8-22.
- Miriam: las mujeres que caminan con el pueblo en su liberación, animan,
guían, celebran la victoria. Es considerada profetisa: denuncia a opresión
y anuncia la liberación. Lea Ex 15,20.
- Joldá: profetisa que rema contra la corriente. Se opone a la reforma de
Josías. Lea 2Re 22,14-20.
- Débora y Yael: mujeres luchadoras. Débora fue jueza y profetisa. Este
texto es de los primeros documentos escritos del Antiguo Testamento.
Lea Jue 4 y 5.
- Rut y Noemí: enfrentan dificultades y recuperan leyes importantes. Lea Rt 1-4.
- Rajab: Mujer en los antepasados de Jesús. Lea Jue 2 y 6,17.22-25),
Muchas mujeres han marcado la historia con sus luchas, nos toca a
nosotras hoy continuar construyendo el camino con fuerza vital.
Canción: sobre la mujer
6. Cuarta parada: La Iglesia entiende a la mujer en igual dignidad que el
hombre, pues ambos han sido creados a imagen y semejanza de Dios.
Lectura: Lucas 8, 1-2.
“La Iglesia también hace un llamado a contribuir en la promoción humana
y cristiana de la mujer, de manera que empodere de su misión y se eliminen
13
Ayúdense mutuamente
las condiciones de marginación y exclusión. En ese sentido se señala la
necesidad de capacitación para la realización de su misión en la comunidad
eclesial y en el mundo (Documento de Puebla, 849).
También la Iglesia se preocupa por la situación de violencia que sufren
mujeres de todas las edades y hace un llamado a tomar conciencia de esta
situación.
“En esta hora de América Latina y El Caribe, urge tomar conciencia de
la situación precaria que afecta la dignidad de muchas mujeres. Algunas,
desde niñas y adolescentes, son sometidas a múltiples formas de violencia
dentro y fuera de casa: tráfico, violación, servidumbre y acoso sexual;
desigualdades en la esfera del trabajo, de la política y de la economía;
explotación publicitaria por parte de muchos medios de comunicación social,
que las tratan como objeto de lucro.” (Documento de Aparecida, 48).
Especialmente, en la última Conferencia del Episcopado latinoamericano
y caribeño, se hace un llamado al reconocimiento de la dignidad y la
participación de las mujeres.
“La antropología cristiana resalta la igual dignidad entre varón y mujer,
en razón de ser creados a imagen y semejanza de Dios. El misterio de la
Trinidad nos invita a vivir una comunidad de iguales en la diferencia. En
una época de marcado machismo, la práctica de Jesús fue decisiva para
significar la dignidad de la mujer y su valor indiscutible: habló con ellas
(cf. Jn 4, 27), tuvo singular misericordia con las pecadores (cf. Lc 7,36-50;
Jn 8,11), las curó (cf.Mc 5, 25-34), las reivindicó en su dignidad (cf. Jn 8,
1-11), las eligió como primeras testigos de su resurrección (cf. Mt 28, 9-10),
e incorporó mujeres al grupo de personas que le eran más cercanas (cf.
Lc 8, 1-3). La figura de María, discípula por excelencia entre discípulos, es
fundamental en la recuperación de la identidad de la mujer y de su valor
en la Iglesia. El canto del Magnificat muestra a María como mujer capaz
de comprometerse con su realidad y de tener una voz profética ante ella”.
(Documento de Aparecida, 451).
7. En el punto final del Desfile: María, portadora de la Buena Noticia y
profetiza del pueblo de Israel (Lc 1,46-56)
Lectura: Lucas 1,46-56
La leen todas las mujeres presentes
Proclama mi alma la grandeza del Señor, se alegra mi espíritu en Dios, mi
salvador; porque ha mirado la humillación de su esclava.
Desde ahora me felicitarán todas las generaciones, porque el Poderoso
ha hecho obras grandes por mí: su nombre es santo, y su misericordia llega
a sus fieles de generación en generación.
El hace proezas con su brazo: dispersa a los soberbios de corazón, derriba
del trono a los poderosos y enaltece a los humildes, a los hambrientos los
colma de bienes y a los ricos los despide vacíos.
Auxilia a Israel, su siervo, acordándose de la misericordia -como lo había
prometido a nuestros padres- en favor de Abrahán y su descendencia por
siempre.
14
Plan de Pastoral - Marzo 2015
Proclama final:
Una de las mujeres presentes destaca sus derechos y dignidad. También,
puede hacerlo un hombre. Luego se leen los nombres del mural y se añaden
otros nombres que la gente recuerde.
Oración final: Se hacen peticiones por el reconocimiento de la dignidad
de las mujeres. Se concluye con el Padre Nuestro y Ave María.
Canto: María del pueblo
Semana del 22-28 de Marzo
Celebremos el Día del Niño por nacer
SI A LA VIDA, NO AL ARTICULO 110 DEL NUEVO CODIGO PENAL
Orientaciones
para
este
Encuentro: Colocar en un lugar
visible una imagen de la Virgen
en el momento de la Anunciación.
Colocar el título de este Encuentro
en un lugar visible. Se pueden
colocar fotos de niños recién
nacidos y de madres embarazadas. Se invita de manera especial a las
madres embarazadas del Sector y a las que participan en la Pastoral
Materno-Infantil.
1. Canto: Por amor o un canto sobre la Vida
2. Invocación del Espíritu Santo.
3. Para comenzar
El 9 de Enero del 2001 el Senado de la República dictó la Ley que declara
el 25 de Marzo de cada año como el Día del Niño por nacer con el objetivo
de que se valorara y se defendiera la vida del niño que está el vientre de
la madre. En esa misma Ley se ordenaba al Ministerio de Educación y de
Salud preparar diferentes actividades con esta finalidad.
Como se ha introducido el aborto llamándolo “interrupción del aborto” en
el artículo 110 de la Ley que aprueba el nuevo Código Penal es necesario
como cristianos celebremos ese Día del Niño por nacer y nos pronunciemos
a favor de la vida y apoyemos el recurso de inconstitucionalidad presentado
por la Fundación Matrimonio Feliz con el apoyo de la Conferencia del
Episcopado Dominicano y de otras instituciones.
En este mes de Marzo que promovemos el valor de la solidaridad
hagámonos solidarios con aquellos que están en el seno materno y, sobre
todo, con aquellos que quiere negársele la vida amparados en una Ley
que viola el artículo 37 de la Constitución de la República que establece el
respeto a la vida desde su concepción hasta su muerte.
15
Ayúdense mutuamente
4.Conozcamos la Ley 25-01 promulgada por el Poder Ejecutivo el
primero de Febrero del 2001
La Cámara de los Diputados dictó esta ley el 29 de Marzo del 2000 y el
Senado la aprobó el 9 de Enero del 2001 y fue promulgada el 1º. de Febrero
del 2001.
Las razones para establecer este Día del Niño por nacer son las siguientes:
a) El niño ha sido destacado como un sujeto digno de una especial atención,
particularmente en la Declaración de Ginebra del 1924, sobre los
Derechos del Niño, en la Declaración de los Derechos del Niño, adoptada
por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 20 de noviembre de
1959 y en la Convención sobre los Derechos del Niño, aprobada por la
Asamblea General de las Naciones Unidas del 20 de noviembre del 1989.
b) La razón de esta atención especial es que “el niño, por su falta de madurez
física y mental, necesita protección y cuidado especiales, incluso la debida
protección legal, tanto antes como después del nacimiento” (Preámbulo
de dicha Convención).
c) Especialmente en su etapa prenatal, el niño es un ser de extrema fragilidad
e indefenso y tal, como lo señala la Convención sobre los Derechos del
Niño, depende de la natural protección brindada por su madre, por lo que
para el pleno y armonioso desarrollo de su personalidad, necesita crecer
en el seno de la familia, en un ambiente de felicidad, amor y compresión;
d) La vida, el mayor de los dones, tiene un valor inviolable y una dignidad
irrepetible, razón por la cual la Constitución de la República la declara
derecho fundamental de carácter absoluto, y los Códigos Penal y Civil
de la República Dominicana establecen disposiciones que la protegen
desde su concepción.
e) Es deber de los Poderes del Estado contribuir, mediante la adopción de
políticas de defensa, reconocimiento y promoción del valor sustantivo de
la gestación de la vida;
f) Es apropiado y es necesario consignar un día al niño por nacer, con la
finalidad de propiciar la reflexión sobre el importante papel que representa
la mujer embarazada en el destino de la humanidad y el valor de la vida
humana que porta en su seno.
Se eligió el 25 de Marzo para este Día del Niño por nacer por ser “la fecha
en que la Cristiandad celebra la Anunciación a la Virgen María, en virtud de
que el nacimiento más celebrado en el mundo por cristianos y no cristianos
es la del Niño Jesús, cuyo momento de concepción coincide con dicha fecha”.
5. Comentemos sobre el significado y las causas de este Día del Niño
por nacer
• ¿Qué importancia tiene este Día del Niño por nacer?
• ¿Cuáles son las razones para celebrarlo?
• ¿Por qué el Ministerio de Educación y de Salud no promueven más este Día?
• ¿Cómo se puede combinar esta Ley y la nueva que da paso al aborto?
• ¿Qué podríamos hacer para que se celebre más este Día?
16
Plan de Pastoral - Marzo 2015
6. Leamos la Palabra: Lucas 1,26-38
Momento de silencio. ¿Qué nos dice esta Lectura sobre el Día del Niño
por Nacer?
7. Celebremos el Día del Niño por nacer apoyando el recurso de
inconstitucionalidad presentado por la Fundación Matrimonio Feliz.
La Fundación Matrimonio Feliz, en fecha 23 de enero del 2015 ha solicitado
al Tribunal Constitucional, declarar Inconstitucional algunos elementos del
texto alterno que fue incluido en el Código Penal a raíz de las observaciones
del presidente de la República, en las que solicitada despenalizar el aborto
en ciertas circunstancias. Concretamente, la acción está dirigida contra la
expresión “salvo lo dispuesto en el artículo 110”, así como el artículo 110 y su
párrafo del Código Penal (Ley 550-14) aprobado, por las siguientes razones:
• Por no cumplir con el debido proceso de aprobación y por no enviarse a la
Cámara de Senadores para su discusión y aprobación antes de ser promulgada
por el Poder Ejecutivo, según establece la Constitución Dominicana.
• Por ser violatorio de la Constitución de la República Dominicana en su
artículo 37, que consagra el Derecho a la Vida desde la concepción hasta la
muerte.
El martes 27 de enero, nuestro Cardenal López Rodríguez expresó su apoyo
decidido a esta institución indicando: “Me identifico con su decisión y la apoyo
totalmente. Quiera Dios que esta apelación a su elevada instancia encuentre
un eco favorable en sus importantísimas deliberaciones y decisiones”.
El interés de la Fundación Matrimonio Feliz y de los sectores de la
sociedad que le apoyan es reclamar el cumplimiento de la Constitución
Dominicana y el respeto a la vida humana.
La doctrina de la Iglesia Católica sostiene la defensa de la vida tanto de la
madre gestante como de la criatura en su vientre. La vida de un ser humano
es sagrada independientemente de las condiciones en las que haya sido
concebido y de sus condiciones de salud. El Derecho a la Vida es el principal
de todos los derechos humanos, el aborto intencional, en cualquier situación
posible, constituye un atentado contra este don sagrado.
Nuestros pastores en nombre del Pueblo de Dios, también han expresado
su apoyo total a la medida según consta en el comunicado de la Conferencia
del Episcopado Dominicano, el pasado jueves 29 de enero. Los Obispos nos
hacen la invitación a que nos unamos:
- En oración para que el Espíritu Santo ilumine a los Honorables
Magistrados del Tribunal Constitucional y sean guardianes celosos de los
valores consagrados en nuestra Carta Magna.
- Nos manifestemos públicamente en apoyo incondicional a esta iniciativa
de la Fundación Matrimonio Feliz.
Por esa razón es importante que hagamos una cadena de oración para
que los jueces del Tribunal Constitucional hagan valer la Constitución y
defiendan la Vida del niño por nacer.
Y, que de todas nuestras comunidades y parroquias redactemos y
firmemos una Carta que diga:
17
Ayúdense mutuamente
Fecha_______________
Dr. Ray Guevara y Jueces del Tribunal Constitucional
Santo Domingo,
Su Despacho.
Nosotros, los abajo firmantes apoyamos el recurso de
inconstitucionalidad sometido por la Fundación Matrimonio Feliz, en
contra la expresión “salvo lo dispuesto en el artículo 110”, así como el
artículo 110 y su párrafo del Código Penal (Ley 550-14) aprobado, por las
siguientes razones:
• Por no cumplir con el debido proceso de aprobación y por no enviarse
a la Cámara de Senadores para su discusión y aprobación antes de
ser promulgada por el Poder Ejecutivo, según establece la Constitución
Dominicana.
• Por ser violatorio de la Constitución de la República Dominicana en su
artículo 37, que consagra el Derecho a la Vida desde la concepción
hasta la muerte.
Firmas con cédula
Esas Cartas se entregan en las Parroquias quienes las enviarán a
las Vicarías de Pastoral para ser enviadas a Matrimonio Feliz y así sean
depositadas en la Secretaría del Tribunal Constitucional.
8.Oremos
Se canta: Virgen Santa, Señora Nuestra o alguna canción sobre la
Anunciación. Todos se colocan alrededor del cuadro de la Virgen y se ora por
los niños que se gestan en el seno de sus madres y por ellas para que cuiden
su hijo como el mejor regalo de Dios. Se pueden poner las embarazadas en
el medio y orar por ellas imponiéndoles las manos. Se concluye con el Padre
Nuestro y Ave María.
Caminata Penitencial 2015
“Fortalezcamos nuestros corazones contra la indiferencia” (St. 5,7)
Orientaciones para la caminata: Les proponemos algunas ideas para su realización:
a) Elegir un lugar que tenga resonancia
en la Comunidad, para el punto de
partida. Pudiera realizarse en conjunto
una o dos parroquias vecinas o también
que cada grupo de peregrinos se unan
en un punto antes de llegar a la meta.
Conocer el trayecto de la caminata y que
18
Plan de Pastoral - Marzo 2015
marquen previamente los lugares de las paradas principales.
b)Elegir un Equipo Coordinador de la Actividad integrado por
delegaciones de las parroquias o comisiones participantes.
c) Organice con tiempo un Equipo de Orden General para toda la
caminata, un equipo de primeros auxilios, vehículo con altoparlante. Si
es posible, adquieran un buen amplificador con un buen alto parlante
para un vehículo para la animación del trayecto y apoyar al Equipo de
Orden. Es bueno que este vehículo se mueva del principio hasta el final,
acompañar la caminata y asegurar el orden.
d).Asegúrese que cada equipo de comunidad tenga su material de trabajo,
su Biblia, su linterna, su libro de cantos, el Vía Crucis, sus encargados de
orden, un encargado de primeros auxilios.
e). En el camino harán las paradas en los lugares previamente elegidos.
Pero, permanecerán siempre unidos. El Equipo Encargado hará su propia
lectura y oración en cada parada. Cuando termine lo correspondiente a la
parada, el grupo empieza a caminar hasta la próxima parada.
f). Al llegar, sería bueno que la comunidad que se visita salga a recibir el
grupo y que se tenga un momento de encuentro.
g). Cada comunidad debe prever el transporte para el regreso. Pedir
ayuda a los hermanos o instituciones que tienen vehículos.
1. Saludo de inicio
El párroco o el encargado principal de la Caminata saluda a todos los
participantes con estas palabras:
Hermanos y hermanas, el Señor, que nos acoge a todos esté con
ustedes. Hoy el Señor nos ha reunido en esta Cuaresma 2015, en el Año
que el Plan Nacional de Pastoral dedica a la solidaridad, haciendo suyas
las necesidades de todos, especialmente de los más pobres, con el lema:
Amor y solidaridad camino de santidad. Y en este Año en que reconocemos
y valoramos la Vida Consagrada en nuestra Iglesia.
Toda nuestra vida cristiana es un camino de fe, de esperanza y de amor.
Pero, en este camino tenemos una gran tentación que es la de acomodarnos
en nuestro mundo y caer en la indiferencia que me lleva a olvidarme de los
demás y quedarme en lo mío sin importarme el sufrimiento de los demás.
Como nos recuerda el Papa Francisco en su Mensaje para esta Cuaresma
2015 con el lema: “Fortalezcan sus corazones” (St. 5,7) nosotros como
cristianos estamos llamados a superar y combatir esa indiferencia que “ha
alcanzado hoy una dimensión mundial, hasta tal punto que podemos hablar
de una globalización de la indiferencia” (Introducción).
La Cuaresma es un tiempo de renovación especial del amor de Dios
en nosotros y desde nosotros. Por eso, el Papa nos pide vivirla como un
camino de formación del corazón, pidiendo insistentemente: “Señor, haz
nuestro corazón semejante al tuyo”. Sólo así “tendremos un corazón fuerte y
misericordioso, vigilante y generoso, que no se deje encerrar en sí mismo y
no caiga en el vértigo de la globalización de la indiferencia” (no.3).
Con ese deseo sincero vivamos esta Caminata Penitencial que iniciamos
invocando el Espíritu Santo.
19
Ayúdense mutuamente
Espíritu Santo/ ven sobre nosotros/ Ayúdanos a vivir esta Caminata
Penitencial como un camino de renovación interior/ Danos un corazón
semejante al de Jesús/ un corazón misericordioso como el suyo/ abierto a
Dios y que sienta los sufrimientos de los más pobres de nuestro pueblo. /
Fortalece nuestro caminar de hoy y de siempre/ Guíanos por los caminos del
amor que nos llevan a Dios y a los hermanos y hermanas.
4. Inicio de la Caminata:
Se van llamando a los Sectores y comunidades que saldrán en ese
momento, dejando unos 3 minutos entre Sector y Sector.
Canto: Camina pueblo de Dios.
5. Mientras se va caminando hacia la Primera Parada
Como nos dice el Papa Francisco también nosotros podemos caer en
el pecado de la indiferencia que está azotando al mundo. Hagamos ahora
en silencio un examen de conciencia de nuestros pecados en los que se
manifiesta la indiferencia.
Luego se hacen estas peticiones de perdón. Se responde: Ten piedad
Señor de mí por mi indiferencia.
• Por nuestra falta de amor a los que rodean
• Por las veces que no soy cercano a los demás, especialmente, de los
más necesitados.
• Por las veces que no tenemos compasión con los más necesitados
• Por las veces que nos acomodamos y sólo pensamos en nuestros bienes
y en nuestro futuro
• Por las veces que pasamos de largo frente al hombre y a la mujer heridos
y maltratados en diferentes lugares y situaciones
• Perdón, Señor, por nuestros egoísmos, nuestra falta de solidaridad, por
la dureza de nuestros corazones.
• Perdón, Señor, por nuestras intolerancias.
• Perdón, Señor, por nuestras comodidades riquezas y apegos.
• Perdón, Señor, por nuestros orgullos y por menospreciar a los demás.
• Perdón, Señor, por nuestros individualismos.
• Perdón, Señor, por no descubrirte en el pobre.
(Se pueden añadir otras peticiones de perdón).
Se reza el Yo confieso….
Cantos pidiendo perdón como: Hoy perdóname, hoy por siempre…. Sí
me levantaré. Piedad, Señor, Piedad. Perdona a tu pueblo Señor.
Se hace esta petición 10 veces: Uno dice: Señor haz mi corazón
Todos responden: semejante al tuyo.
Al final finalizar se reza el Gloria al Padre. Se puede hacer varias veces
esta oración.
6. Primera parada: “Si un miembro sufre, todos sufren con él” (1 Cor
12,26)
20
Plan de Pastoral - Marzo 2015
Lectura: 1 Corintios 12,21-27
Reflexionemos con el Papa: “Quien es de Cristo pertenece a un solo cuerpo
y en Él no se es indiferente hacia los demás. «Si un miembro sufre, todos sufren
con él; y si un miembro es honrado, todos se alegran con él» (1 Co 12,26).
La Iglesia es communio sanctorum (comunión de los santos) porque
en ella participan los santos, pero a su vez porque es comunión de cosas
santas: el amor de Dios que se nos reveló en Cristo y todos sus dones. Entre
éstos está también la respuesta de cuantos se dejan tocar por ese amor.
En esta comunión de los santos y en esta participación en las cosas
santas, nadie posee sólo para sí mismo, sino que lo que tiene es para todos.
Y puesto que estamos unidos en Dios, podemos hacer algo también por
quienes están lejos, por aquellos a quienes nunca podríamos llegar sólo con
nuestras fuerzas, porque con ellos y por ellos rezamos a Dios para que todos
nos abramos a su obra de salvación.
7. Mientras se va caminando hacia la Segunda Parada
Oremos para que el Señor nos ayude a sentir como nuestras las
necesidades y los dolores de los demás. A cada petición digamos: Señor
quítanos la indiferencia
• Señor con tu caridad rompe esa cerrazón mortal en sí mismos de la
indiferencia.
• Haz que aprendamos de la misericordia de tu Iglesia con los más necesitados.
• Revístenos de tu bondad y misericordia
• Permítenos ser como Tú , siervos de tu Padre y de los demás.
• Lávanos los pies para que como tus Apóstoles aprendamos a servir a los
demás como Tú.
• Haz que tengamos parte contigo y así podamos servir con un corazón
misericordioso a los más pobres.
• Haz que al recibir la Eucaristía nos convirtamos en cuerpo tuyo en el que
nos duele el sufrimiento de todo el Cuerpo.
• Que en nuestra Iglesia no haya lugar para la indiferencia.
(Se pueden añadir otras peticiones).
Cantos posibles: Amar es entregarse y otros sobre el amor fraterno.
Se puede rezar el Rosario y entre cada misterio se reza la oración por un
corazón misericordioso. Se hace esta petición 10 veces:
Uno dice: Señor haz mi corazón
Todos responden: Semejante al tuyo.
Al final finalizar se reza el Gloria al Padre. Se puede hacer varias veces
esta oración.
8. Segunda parada: “¿Dónde está tu hermano?” (Gn 4,9).
Lectura: Génesis 4,1-12
Reflexionemos con el Papa:
“Lo que hemos dicho para la Iglesia universal es necesario traducirlo en
la vida de las parroquias y comunidades. En estas realidades eclesiales ¿se
21
Ayúdense mutuamente
tiene la experiencia de que formamos parte de un solo cuerpo? ¿Un cuerpo
que recibe y comparte lo que Dios quiere donar? ¿Un cuerpo que conoce a
sus miembros más débiles, pobres y pequeños, y se hace cargo de ellos?
¿O nos refugiamos en un amor universal que se compromete con los que
están lejos en el mundo, pero olvida al Lázaro sentado delante de su propia
puerta cerrada? (cf. Lc 16,19-31).
Por otra parte, toda comunidad cristiana está llamada a cruzar el umbral
que la pone en relación con la sociedad que la rodea, con los pobres y
los alejados. La Iglesia por naturaleza es misionera, no debe quedarse
replegada en sí misma, sino que es enviada a todos los hombres.
Esta misión es el testimonio paciente de Aquel que quiere llevar toda la
realidad y cada hombre al Padre. La misión es lo que el amor no puede callar.
La Iglesia sigue a Jesucristo por el camino que la lleva a cada hombre, hasta
los confines de la tierra (cf.Hch 1,8). Así podemos ver en nuestro prójimo al
hermano y a la hermana por quienes Cristo murió y resucitó. Lo que hemos
recibido, lo hemos recibido también para ellos. E, igualmente, lo que estos
hermanos poseen es un don para la Iglesia y para toda la humanidad.
Queridos hermanos y hermanas, cuánto deseo que los lugares en los que se
manifiesta la Iglesia, en particular nuestras parroquias y nuestras comunidades,
lleguen a ser islas de misericordia en medio del mar de la indiferencia”.
Canto: Con nosotros está y no le conocemos
9. Mientras se va caminando hacia la Tercera Parada
• Se entonan cantos del amor hacia los demás.
• Se hace esta oración de acción de gracias por los que saben dónde están
sus hermanos y los cuidan con amor diciendo: Gracias, Señor, por los
que tienen misericordia.
• Por los que reciben y hacen fructificar plenamente lo que Dios les da.
• Por la Iglesia del cielo que intercede por nosotros.
• Gracias por los santos, que ya contemplan y gozan, gracias a que,
con la muerte y la resurrección de Jesús, vencieron definitivamente la
indiferencia, la dureza de corazón y el odio.
• Gracias por la comunión con los santos que encontraron su plenitud en
Dios, en la cual el amor vence la indiferencia.
• Gracias porque hasta que esta victoria del amor no inunde todo el mundo,
los santos caminan con nosotros.
• Gracias porque nosotros participamos de los méritos y de la alegría de los
santos, así como ellos participan de nuestra lucha y nuestro deseo de paz
y reconciliación.
• Gracias porque su alegría por la victoria de Cristo resucitado es para
nosotros motivo de fuerza para superar tantas formas de indiferencia y
de dureza de corazón. (Se pueden añadir otras oraciones de acción de
gracias). Canto: Somos un pueblo que camina
Se pueden rezar algunas estaciones del Viacrucis. Se intercambia con
la oración por un corazón misericordioso. Se hace esta petición 10 veces:
Uno dice: Señor haz mi corazón
22
Plan de Pastoral - Marzo 2015
Todos responden: semejante al tuyo.
Al final finalizar se reza el Gloria al Padre. Se puede hacer varias veces esta
oración.
10. Tercera parada: “Fortalezcan sus corazones” (St. 5,8).
Lectura: Santiago 5, 7-12.
Reflexionemos con el Papa:
También como individuos tenemos la tentación de la indiferencia.
Estamos saturados de noticias e imágenes tremendas que nos narran el
sufrimiento humano y, al mismo tiempo, sentimos toda nuestra incapacidad
para intervenir. ¿Qué podemos hacer para no dejarnos absorber por esta
espiral de horror y de impotencia?
En primer lugar, podemos orar en la comunión de la Iglesia terrenal y
celestial. No olvidemos la fuerza de la oración de tantas personas.
En segundo lugar, podemos ayudar con gestos de caridad, llegando
tanto a las personas cercanas como a las lejanas, gracias a los numerosos
organismos de caridad de la Iglesia. La Cuaresma es un tiempo propicio para
mostrar interés por el otro, con un signo concreto, aunque sea pequeño, de
nuestra participación en la misma humanidad.
Y, en tercer lugar, el sufrimiento del otro constituye un llamado a la
conversión, porque la necesidad del hermano me recuerda la fragilidad de mi
vida, mi dependencia de Dios y de los hermanos. Si pedimos humildemente
la gracia de Dios y aceptamos los límites de nuestras posibilidades,
confiaremos en las infinitas posibilidades que nos reserva el amor de Dios.
Y podremos resistir a la tentación diabólica que nos hace creer que nosotros
solos podemos salvar al mundo y a nosotros mismos.
Para superar la indiferencia y nuestras pretensiones de omnipotencia,
quiero pedir a todos que este tiempo de Cuaresma se viva como un camino
de formación del corazón, como dijo Benedicto XVI (Ct. enc. Deus caritas est,
31). Tener un corazón misericordioso no significa tener un corazón débil. Quien
desea ser misericordioso necesita un corazón fuerte, firme, cerrado al tentador,
pero abierto a Dios. Un corazón que se deje impregnar por el Espíritu y guiar por
los caminos del amor que nos llevan a los hermanos y hermanas. En definitiva,
un corazón pobre, que conoce sus propias pobrezas y lo da todo por el otro.
Por esto, queridos hermanos y hermanas, deseo orar con ustedes a Cristo
en esta Cuaresma: “Fac cor nostrum secundum Cor tuum”: “Haz nuestro
corazón semejante al tuyo” (Súplica de las Letanías al Sagrado Corazón de
Jesús). De ese modo tendremos un corazón fuerte y misericordioso, vigilante
y generoso, que no se deje encerrar en sí mismo y no caiga en el vértigo de
la globalización de la indiferencia.
Canto: Purifícame, lávame.. Otros cantos de fortaleza en el Señor.
11. Mientras se va caminando hacia la Iglesia o lugar de llegada
a) Hagamos ahora la oración por un corazón misericordioso en forma
de Rosario. Se hace esta petición 10 veces:
Uno dice: Señor haz mi corazón.
23
Ayúdense mutuamente
Todos responden: semejante al tuyo.
Al finalizar se reza el Gloria al Padre. Se puede hacer varias veces esta
oración.
b) Cantos penitenciales
c) Oremos por la Vida Consagrada: Se hacen peticiones por los
consagrados y consagradas para que tengan siempre un corazón
misericordioso y sean testimonio de amor para los más pobres.
d) Cantos penitenciales.
e) Se reza el Credo
12. Llegada a la meta final
La comunidad visitada sale al encuentro de los peregrinos y se hace un
momento de saludo mutuo. El párroco o un Delegado suyo recibe a los que
llegan con gozo. Y todos repiten las palabras conclusivas del mensaje del Papa
Francisco: “Haz nuestro corazón semejante al tuyo”, para tener “un corazón
fuerte y misericordioso, vigilante y generoso, que no se deje encerrar en
sí mismo y no caiga en el vértigo de la globalización de la indiferencia”.
13. Celebración Eucarística o Celebración de la Palabra.
Oración de los Dolores de la Virgen
27 de Marzo 2015
Madre Dolorosa, ayúdanos a ser solidarios y solidarias
con quienes sufren
Orientaciones para esta Celebración: Se organiza en
forma de procesión por las calles del sector, con 7 paradas
ya seleccionadas; en cada parada se coloca el título del
dolor correspondiente y una imagen de la Virgen. Es
importante que sean mujeres las que dirijan cada dolor. Se
puede invitar a la gente que vaya vestida de luto. Es bueno
prever bocina para que se oiga bien.
1. Motivación en el lugar de inicio
Animador/a: Este día lo dedicamos a María de manera especial. Se recuerdan
los momentos más difíciles y dolorosos de su vida como mujer, madre, discípula y
misionera solidaria. Momentos de dolor, de sufrimiento, de resistencia. Se valora
especialmente su fortaleza para continuar la vida con esperanza, sin perder la
paz, la fe y la esperanza que siempre mantuvo con espíritu firme. Se recuerdan
sus momentos de silencio y soledad. Pensar en los dolores de María, mujer
sencilla, nos recuerda lo extraordinario de su ser porque nada la detuvo.
Acompañar el dolor de María, mujer, madre discípula y misionera, ante
el sufrimiento vivido por la muerte violenta de su hijo, ante la violencia la
muerte vivida por tantos hijos e hijas suyos que hoy padecen marginación
y las consecuencias de estas muertes ante el proyecto iniciado por Jesús.
Como gente de fe, amor y solidaria, este Viernes de Dolores acompañamos
a María sin perder la esperanza. Para los cristianos y las cristianas, la vida
24
Plan de Pastoral - Marzo 2015
no acaba con la muerte, el bien triunfa, la verdad resplandece. La fe nos
hace libres, nos compromete con los demás y tiene como meta la felicidad
del ser humano, de todo ser humano.
El sufrimiento no volvió violento su corazón. No se desesperó, sino que
infundió consuelo a su Hijo en todo momento. Luego, En los momentos
difíciles, Ella animó al grupo de hombres y mujeres que seguían a Jesús
después de su muerte. Así luego aparece junto a los discípulos y discípulas
en oración anunciando la buena noticia de la resurrección.
Cantamos: Dolorosa de pie ante la cruz
Se inicia el camino hacia la próxima parada.
Primer dolor
El anuncio del sufrimiento: “una espada traspasará tu corazón”.
Invocación: Madre Dolorosa, ayúdanos a ser solidarios
y solidarias con quienes sufren
Lectura Lucas 2, 33-35.
Mensaje:
Simeón habla a María sobre el futuro de Jesús, y le advierte sobre lo
que como madre vivirá ante su Hijo. Le dice: “Una espada te atravesará
tu corazón”. La experiencia profunda del amor supone el sentir con el otro.
María siente el dolor de su Hijo. Se le anuncia que el proyecto de Dios no
será fácil. Ese sentir el dolor del Hijo le lleva a solidarizarse con Él, y les
llevará a solidarizarse con todos sus hijos e hijas que están en el dolor, en la
cruz, en la humillación y en la miseria.
Oración:
Presentamos las situaciones de dolor de las personas que amamos. Los
que quieran las presentan a María. Presentemos a las madres con el corazón
traspasado por diferentes causas. Ante cada situación decimos: Madre
Dolorosa, ayúdanos a ser solidarios y solidarias con quienes sufren.
Canto: Amar es entregarse
Se inicia el camino hacia la próxima parada.
Segundo dolor
María, mujer migrante, sin casa, sin cobijo
Invocación: Madre Dolorosa, ayúdanos a ser
solidarios y solidarias con quienes sufren.
Lectura Mateo 2. 13-15.
Mensaje:
María y su familia tuvieron que dejar su casa
y su tierra para proteger sus vidas. Presentamos
25
Ayúdense mutuamente
el dolor de tantas familias que tienen que abandonar a quienes aman para
buscar trabajos y mejorías en sus vidas. Por tantos hermanos y hermanas
que se van hacia “el norte”; por tantos hermanos y hermanas del país vecino
que vienen hasta aquí buscando mejoría.
Por tantas familias en el mundo que son desplazadas de tus tierras por
causa de las guerras y por causa de la pobreza. Y después de presentar
ese dolor, nos solidarizamos con todos los desplazados de sus tierras,
comenzando por quienes tenemos más cerca.
Oración:
Presentamos a María el dolor de tantas familias separadas porque
algunos de los suyos tuvieron que emigrar a otro país. Pidamos por nuestros
hermanos haitianos que viven fuera de su tierra y por el dolor de muchos
a quienes se le niegan los documentos que tenían. Ante cada situación
decimos: Madre Dolorosa, ayúdanos a ser solidarios y solidarias con
quienes sufren.
Canto: Ven con nosotros a caminar. Se inicia el camino hacia la próxima parada.
Tercer dolor
María, madre en busca de su hijo con amor inagotable
Invocación: Madre Dolorosa, ayúdanos a ser solidarios y solidarias
con quienes sufren.
Lectura Lucas 2, 41-47.
Mensaje:
María vive la angustia de pensar que su hijo se había perdido. María
entiende y es solidaria con todas esas mamás que ven a sus hijos alejarse
del hogar, ir por “otros caminos, volver a casa a cualquier hora, distanciarse
de la familia… María es solidaria porque también sintió la despedida de su
Hijo que se fue a cumplir su misión.
¿Somos las madres de hoy capaces de confiar en nuestros hijos para
dejarlos actuar con libertad? ¿Qué pasos tenemos que dar para crecer en
libertad, confianza y amor para con los otros? ¿Están nuestros hijos perdidos
en los vicios, en las malas prácticas de negocios, en el sexo egoísta, en la
haraganería, en la delincuencia?
Oración:
Presentamos las situaciones de dolor de tantas familias que sufren por
los hijos que se han alejado del camino de Dios. Pidamos para que vuelvan
al encuentro del Señor. Ante cada situación decimos: Madre Dolorosa,
ayúdanos a ser solidarios y solidarias con quienes sufren.
Canto: María, tú que velas junto a mí. Se inicia el camino hacia la próxima
parada.
26
Plan de Pastoral - Marzo 2015
Cuarto dolor
María, un corazón traspasado por el dolor de su Hijo
Invocación: Madre Dolorosa, ayúdanos a ser solidarios y solidarias
con quienes sufren.
Lectura: Lucas 23, 27-28
Mensaje:
Jesús está siendo maltratado, violentado, humillado, golpeado. María estuvo firme junto a él acompañándole en el dolor, en la
humillación. La fuerza de su fe no le permitió desfallecer, le mantuvo en pie. También le mantuvo en pie la fuerza de la comunidad,
representada por las mujeres que le acompañaban, el saberse
parte de un grupo, de una familia, de un proyecto de vida.
Jesús y María no estuvieron solos en el camino de la cruz;
esta escena nos recuerda la solidaridad de aquellas mujeres;
y cuando no se puede hacer otra cosa, aún nos queda ser solidarios con
nuestra presencia, el llanto y la oración.
Oración:
Presentamos las situaciones de dolor de tantas mujeres que sufren
violencia, por tantos hombres y mujeres que sufren la falta de oportunidades,
de alimentos, de salud, de sustento; por tantas familias que viven en la miseria
económica. Al presentar estas situaciones, pedimos fuerzas para solidarizarnos
con ellas y buscarles solución. Ante cada situación decimos: Madre Dolorosa,
ayúdanos a ser solidarios y solidarias con quienes sufren.
Canto: Ven con nosotros a caminar. Se inicia el camino hacia la próxima parada.
Quinto dolor
María ante la cruz
Invocación: Madre Dolorosa, ayúdanos a ser solidarios
y solidarias con quienes sufren.
Lectura: Jn 19, 25-27
Mensaje:
María se encuentra ante la cruz, ante la dura realidad de ver la muerte
de su hijo. María confía en la misión de su Hijo. Junto a la cruz con otras
discípulas, María se mantiene firme en la Fe, porque le desbordaba el amor
ante su hijo y ante su pueblo.
El amor de la comunidad que le acompaña en ese momento, es parte
fundamental para mantener renovado y vivo el Sí que dio a Dios. A pesar
de que muchos pensaron que había fracasado la misión, María y las otras
discípulas mantienen viva la esperanza.“El dolor compartido es menos
doloroso”, por eso sigue siendo necesario solidarizarnos con el dolor de
27
Ayúdense mutuamente
los demás, como lo hizo María con su Hijo y como lo hicieron quienes le
acompañaban al pie de la cruz.
Oración:
Presentamos las situaciones de dolor de tantas madres que están
al pie de la cruz de sus hijos enfermos, atribulados por el desempleo, la
desigualdad social que hay en nuestro pueblo y por tantos otros males. Ante
cada situación decimos: Madre Dolorosa, ayúdanos a ser solidarios y
solidarias con quienes sufren.
Canto: Dios te salve María estrella de la luz, qué sola quedaste al pie de la Cruz
Se inicia el camino hacia la próxima parada.
Sexto dolor
María y otras mujeres se encuentran con el dolor de la cruz
Invocación: Madre Dolorosa, ayúdanos a ser solidarios
y solidarias con quienes sufren.
Lectura Mc. 15, 42-46
Mensaje:
María se encuentra ante el misterio de la muerte como paso a la vida.
Como discípula sufre la separación de quien ha sido maestro y guía del
proyecto de Dios. Como madre sufre el dolor de ver morir al hijo de sus
entrañas. La esperanza en la Fe le fortalece para vivir la experiencia del
corazón traspasado de dolor, la experiencia del amor infinito que tiene que
prepararse para aprender a caminar y acompañar a su comunidad.
El entierro de su Hijo… de su amigo… de quien le ha amado tanto…
silencio y paz. Sentir el dolor es necesario, porque sólo lo siente quien
en verdad ha amado. Pero gracias a nuestra experiencia de Fe sabemos
que la muerte no es el final. Creemos en la resurrección. Creemos en la
resurrección de Cristo, en nuestra propia resurrección y en que también
nuestro país resucitará a una vida de desarrollo.
Oración:
Hagamos un minuto de silencio. Pidamos por las familias que sufren ante
el dolor de la muerte de quienes aman. Pidamos mantener firme la esperanza.
Renovar la fe. Pidamos perdón por las veces en que no hemos acompañado
a las familias que sufren, por las veces en que nos acomodamos, por las
veces que no hemos sido solidarios y solidarias. Pidamos la fuerza de la
esperanza renovada en el amor de Dios. A cada invocación digamos: Madre
Dolorosa, ayúdanos a ser solidarios y solidarias con quienes sufren.
Canto: Madre de nuestro pueblo.
Se inicia el camino hacia la próxima parada.
28
Plan de Pastoral - Marzo 2015
Séptimo dolor
María sepulta a su hijo
Invocación: Madre Dolorosa, ayúdanos a ser solidarios
y solidarias con quienes sufren.
Lectura: Jn 19, 38-42
Mensaje:
Quienes hemos vivido la experiencia de la muerte
de un ser querido, sabemos lo que significa la vuelta a
la casa después del entierro. Se siente una profunda
sensación de soledad, un vacío indescriptible. El dolor de
la ausencia en profundo. Podemos imaginar lo que sintió
María al llegar a casa después del entierro. Pero María
también se encontraba afectada por la persecución a los
discípulos y con el compromiso de dar respuesta a todos
los que creyeron en el mensaje de Jesús y que al verlo
crucificado comenzaron a tener miedo y se escondían o
huían.
Nos unimos a ese momento a tantas mujeres que viven hoy situaciones
de persecución, inclusive por quienes algún día estuvieron a su lado. Tantas
mujeres que viven el abandono y la violencia. Tantas personas que sufren
porque no le encuentran sentido a la vida.
Oración
Hagamos un minuto de silencio. Sólo nos queda el silencio lleno de
esperanza en la manifestación del Padre, que no dejará a su Hijo en la
muerte. Reconozcamos la acción de Nicodemo, un político de su tiempo que
aunque no se unió públicamente a Jesús, colaboraba con él.
Pidamos por nuestros políticos para que luchen, junto al pueblo y a cada
uno de nosotros y nosotras, para salir de la sepultura económica, social
y cultural en que están sepultados millones de hermanos dominicanos y
dominicanas, y que trabajen para que logremos una verdadera seguridad
ciudadana, que impida la muerte de tanta gente que muere de miseria y de
falta de atención médica primaria, de tantas persona que mueren en manos
de los delincuentes y de los que les persiguen.
Conclusión: Hemos acompañado a María en sus grandes dolores.
Junto a Ella hemos recordado los dolores de nuestras madres de hoy y de
nuestro pueblo. Pero, nuestra oración nos hace mirar hacia la victoria de
Dios. El dolor no es la última palabra. La victoria de Dios se realiza en su
Hijo Resucitado que también nos hace victoriosos con El. La cruz es camino
de victoria cuando se carga como y con Jesús desde el amor al Padre y la
solidaridad fraterna. Por eso llenos de esperanza unimos nuestras manos y
nuestros corazones para decirle al Padre: Padre nuestro.
Canto final: Dios te salve María, estrella de la luz que sola quedaste al pie
de la Cruz.
29
Ayúdense mutuamente
Lecturas Dominicales y Diarias
Marzo 2015
Las lecturas están tomadas del Calendario Litúrgico de la Conferencia
del Episcopado Dominicano 2015
1
II Domingo de Cuaresma
II Semana de la Liturgia de las Horas
Morado
La transfiguración de Jesús, signo de solidaridad
Orientaciones para esta Celebración: Se puede pintar una montaña con un sol o con la figura de
Jesús transfigurado. Presentar signos que expresen
transfiguración, es decir, signos de vida de nuestra
comunidad. -Colocar una sábana blanca o cortina
un letrero que diga: “Este es mi Hijo amado, escúchenlo.”
Monición ambiental
Hermanos y hermanas: En este día iniciamos el mes de Marzo dedicado
al valor de la solidaridad con el lema de “Ayúdense mutuamente” (Gal 6,2).
Durante este mes cuaresmal nuestra mirada se dirige a las mujeres pobres,
especialmente, las maltratadas y denigradas y, también, a las mujeres
consagradas al Señor en los Institutos Seculares siguiendo a Cristo en
medio de la sociedad en que viven.
En este Segundo Domingo de Cuaresma siempre la Liturgia nos presenta
la transfiguración del Señor frente a unos discípulos que se entristecieron
y desanimaron ante el anuncio de la pasión. Así, El se hizo solidario con
ellos, les mostró la victoria final de modo anticipada y les hizo ver que El es
el prometido en el Antiguo Testamento, y les permitió oír la declaración del
Padre sobre El, cómo su Hijo amado.
También, hoy en medio de nuestras tristezas personales, comunitarias y
sociales sabemos que en El podemos lograr la transformación de nuestras
vidas, de nuestras familias y de nuestra sociedad. El sigue solidario con
nosotros en cada momento, ayudándonos a seguir luchando, aunque haya
tantas voces y tantas circunstancias que digan lo contrario.
Con los ojos fijos en Jesús, dejémonos transfigurar por El escuchando su
Palabra y gozando su presencia en esta Eucaristía y cada día de nuestras
vidas. Con gran esperanza y alegría aclamemos al Hijo amado del Padre
que llega a nosotros a presidir esta Eucaristía a través de su ministro.
Primera Lectura: Génesis 22,1-2. 9-13.15-18
Abraham muestra su obediencia al Padre Dios con su disponibilidad de
sacrificar a su hijo que Dios no permitió. Así sin saberlo se hizo anuncio
30
Plan de Pastoral - Marzo 2015
profético de la solidaridad del Padre con nosotros que por liberarnos llegó al
extremo de no impedir la muerte de su propio Hijo en la Cruz. Escuchemos.
Lectura del libro del Génesis
En aquellos días, Dios puso a prueba a Abrahán, llamándole: - “¡Abrahán!”
Él respondió: - “Aquí me tienes.”
Dios le dijo: “Toma a tu hijo único, al que quieres, a Isaac, y vete al país de
Moria y ofrécemelo allí en sacrificio, en uno de los montes que yo te indicaré.”
Cuando llegaron al sitio que le había dicho Dios, Abrahán levantó allí el
altar y apiló la leña, luego ató a su hijo Isaac y lo puso sobre el altar, encima
de la leña. Entonces Abrahán tomó el cuchillo para degollar a su hijo; pero el
ángel del Señor le gritó desde el cielo: “¡Abrahán! Abrahán!”
Él contestó: - “Aquí me tienes.” El ángel le ordenó: - “No alargues la mano
contra tu hijo ni le hagas nada. Ahora sé que temes a Dios, porque no te has
reservado a tu hijo tu único hijo.”
Abrahán levantó los ojos y vio un carnero enredado por los cuernos en
la maleza. Se acercó, tomó el carnero y lo ofreció en sacrificio en lugar de
su hijo. El ángel del Señor volvió a gritar a Abrahán desde el cielo: - “Juro
por mí mismo -oráculo del Señor-: Por haber hecho esto, por no haberte
reservado tu hijo único, te bendeciré, multiplicaré a tus descendientes
como las estrellas del cielo y como la arena de la playa. Tus descendientes
conquistarán las puertas de las ciudades enemigas. Todos los pueblos del
mundo se bendecirán con tu descendencia, porque me has obedecido.”
Palabra de Dios.
Salmo Responsorial: Sal 115.
R/ Caminaré en presencia del Señor, en el país de la vida.
Tenía fe, aun cuando dije: “¡Qué desgraciado soy!” Mucho le cuesta al
Señor la muerte de sus fieles. R/
Señor, yo soy tu siervo, siervo tuyo, hijo de tu esclava: rompiste mis
cadenas. Te ofreceré un sacrificio de alabanza, invocando tu nombre,
Señor. R/
Cumpliré al Señor mis votos en presencia de todo el pueblo, en el atrio de
la casa del Señor, en medio de ti, Jerusalén. R/
Segunda Lectura: Romanos 8, 31b-34
San Pablo reconoce con gran entusiasmo la gran solidaridad de Cristo
con nosotros, que nos hace fuertes frente a cualquier adversidad y nos hace
libres de todo miedo. Escuchemos.
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos
Hermanos: Si Dios está con nosotros, ¿quién estará contra nosotros?
El que no perdonó a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros,
¿cómo no nos dará todo con él? ¿Quién acusará a los elegidos de Dios?
¿Dios, el que justifica? ¿Quién condenará? ¿Será acaso Cristo, que murió,
más aún, resucitó y está a la derecha de Dios, y que intercede por nosotros?
Palabra de Dios.
31
Ayúdense mutuamente
Aclamación: En el esplendor de la nube se oyó la voz del Padre: “Éste
es mi Hijo, el amado; escúchenlo”
Evangelio: Marcos 9, 2-10
Jesús al descubrir la tristeza que ocasionó en sus discípulos el anuncio
de su pasión se hizo solidarios con ellos mostrándoles su gloria, dejándose
ver transfigurado y haciéndoles oír el testimonio de los grandes testigos del
Antiguo Testamento y sobre todo la voz de su Padre que lo declara como su
Hijo Amado. Escuchemos.
Lectura del santo evangelio según san Marcos
En aquel tiempo, Jesús se llevó a Pedro, a Santiago y a Juan, subió
con ellos solos a una montaña alta, y se transfiguró delante de ellos. Sus
vestidos se volvieron de un blanco deslumbrador, como no puede dejarlos
ningún batanero del mundo.
Se les aparecieron Elías y Moisés, conversando con Jesús. Entonces
Pedro tomó la palabra y le dijo a Jesús: - “Maestro, ¡qué bien se está aquí!
Vamos a hacer tres tiendas, una para ti, otra para Moisés y otra para Ellas.”
Estaban asustados, y no sabía lo que decía: Se formó una nube que los
cubrió, y salió una voz de la nube: - “Éste es mi Hijo amado; escúchenlo”
De pronto, al mirar alrededor, no vieron a nadie más que a Jesús, solo
con ellos. Cuando bajaban de la montaña, Jesús les mandó: - “No cuenten
a nadie lo que han visto, hasta que el Hijo del hombre resucite de entre los
muertos.” Esto se les quedó grabado, y discutían qué querría decir aquello
de “resucitar de entre los muertos”. Palabra del Señor.
Meditación
El acontecimiento de la transfiguración tiene como objetivo revelar a
Jesús como el Hijo de Dios; eso hace la voz que se escucha desde la
nube: confirma la identidad de Jesús enalteciendo su figura; y así, Jesús
se constituye para el mundo en el Mesías y el Salvador.
La presencia de Jesús en medio de Moisés y Elías, es la manifestación
clara de que Jesús, como el Hijo de Dios, se convierte en la síntesis de la
ley y los profetas, Jesús en medio de estos dos personajes lleva a plenitud
todo lo dicho en el antiguo testamento. Él es la nueva ley, Él es el nuevo y
único profeta, misión ésta que lo llevó a la cruz.
Jesús y su Palabra, avalados ahora por el Padre, se convierten en la
LEY NUEVA, la ley del amor, de la esperanza y del perdón, no producto
de efímeros sentimientos, ni de lo espectacular de sus vestidos, ni mucho
menos a partir de una gloria pasajera; sino por su adhesión incondicional
al Padre, que lo constituye en el Señor de nuestra historia personal, en el
Salvador del mundo y en la alegría, siempre viva, de ver cumplido en la
historia el plan divino de la salvación. También, la Transfiguración del Señor, anticipa y prefigura el acontecimiento pascual, que por el camino de la cruz introducirá a Cristo en la
gloria definitiva, camino que empezó el domingo pasado en el desierto,
que atravesará la montaña de la transfiguración, la purificación del templo,
32
Plan de Pastoral - Marzo 2015
el desprecio que tuvo que sufrir siendo la luz del mundo, para encontrarse
luego con su muerte, a imagen del trigo que cae en tierra para dar vida a
través de su propia resurrección.
Con el evento de la transfiguración Jesús comunica a Santiago, Pedro
y Juan, el camino de la cruz que debía recorrer, pero no un camino lleno
de penumbras y tristezas, sino un camino lleno de luz, que tiene como fin
la pascua y desde luego la fundamentación de la fe en el corazón de sus
apóstoles. Finalmente, la transfiguración del Señor nos recuerda el compromiso
de vivir el contenido de nuestro bautismo; y desde esta perspectiva dos
signos son comunes al bautismo y a la transfiguración: la luz y la vestidura
blanca; la luz es signo de Cristo glorificado que nos impone un deber, ser
luz en medio del mundo, y la vestidura nos recuerda nuestra dignidad de
cristianos pues somos sacerdotes, profetas y reyes.
Así pues, queridos hermanos y hermanas, nos queda como misión
transfigurarnos a nosotros mismos para ser capaces de transformar
el mundo, transformar el mundo del secuestro en ambiente de libertad;
transformar el rostro descompuesto de nuestra patria sumergida en
la violencia, en un rostro que hable de vida, de ilusiones, de retos y
esperanzas; transformar, nuestros contextos que irrespetan los derechos
humanos en escenarios propicios para enaltecer la dignidad humana;
transformar nuestro egoísmo e individualismo en una solidaridad práctica
con los más necesitados y con la patria.
Oración de los fieles:
Quien preside: Oremos al Padre de la misericordia y pidámosle que
escuche la oración de su pueblo: Señor, ayúdanos a transformar nuestra
vida y nuestra patria.
1. Por la Iglesia. Para que nos haga descubrir lo mucho que Dios nos quiere,
y nos sintamos hijos e hijas amados y amadas por el Padre. Oremos.
2. Pedimos por las personas que tienen miedo al dolor, por quienes sólo
piensan en los placeres y en gozar, para que se encuentren con Dios que
da sentido a sus vidas. Oremos.
3. Para que Dios inspire sentimientos de solidaridad a los que tienen riquezas
y les lleve a compartir sus bienes con los más necesitados. Oremos.
4.Por quienes tienen el poder en República Dominicana, para que se
preocupen de buscar solución a la violencia, corrupción, inseguridad y
miseria, trabajando por el desarrollo material y personal, Oremos.
5. El día de la Transfiguración se celebra la Vida Consagrada Contemplativa;
para que el Señor dé valentía a los y las llamadas a esa vida de retiro y
oración, para que sean el pulmón que aliente a toda la Iglesia. Oremos.
6.Para que el Señor nos conceda un buen tiempo, nuestros campos
produzcan frutos abundantes para poder repartirlos entre todos los
Dominicanos y Dominicanas. Oremos.
Quien preside: Padre santo, que entregaste a tu Hijo para salvarnos,
fortalécenos en la obediencia a la fe, para que seamos transfigurados con Él
en la luz de la gloria, por Jesucristo, nuestro Señor.
33
Ayúdense mutuamente
2
Lunes
Morado
Lectura del libro del profeta Daniel 9, 4-10
En aquellos días, imploré al Señor mi Dios, e hice esta confesión:
“Señor Dios grande y terrible, que guardas la alianza y eres leal con los
que te aman y cumplen tus mandamientos. Hemos pecado, hemos cometido
crímenes y delitos; hemos sido perversos y rebeldes y nos hemos apartado
de tus mandatos y preceptos. No hicimos caso a tus siervos los profetas,
que hablaban en tu nombre a nuestros reyes, a nuestros príncipes, padres
y terratenientes.
Tú, Señor, eres justo; nosotros en cambio, hombres de Judá y habitantes
de Jerusalén, nos sentimos hoy avergonzados; así como todos los israelitas,
tanto los que están cerca, como los que están lejos en los países a los que
tú los arrojaste por haberse rebelado contra ti.
Nos sentimos, Señor, avergonzados, lo mismo que nuestros reyes,
príncipes y antepasados, porque hemos pecado contra ti. Pero el Señor,
nuestro Dios, es misericordioso y clemente, aunque nos hayamos rebelado
contra él y no hayamos escuchado su voz ni practicado las leyes que nos dio
por medio de sus siervos los profetas”. Palabra de Dios
Salmo Responsorial: 78
R/ “Señor, no nos trates como merecen nuestros pecados.”
No recuerdes para castigarnos las culpas de otros tiempos; compadécete
pronto de nosotros, porque estamos extenuados en la miseria. R.
Ayúdanos, Dios salvador nuestro, por la gloria de tu nombre; líbranos y
borra nuestros pecados, por tu nombre. R.
Llegue hasta ti el lamento del cautivo, con el poder de tu brazo salva a
los condenados a muerte. Y nosotros, que somos tu pueblo y ovejas que tú
apacientas, te daremos gracias eternamente, cantaremos tus alabanzas de
generación en generación. R.
Lectura del santo evangelio según san Lucas 6, 36-38
En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: “Sean misericordiosos como
su Padre es misericordioso. No juzguen, y no serán juzgados; no condenen,
y no serán condenados; perdonen, y se les perdonará. Den, y se les dará:
una buena medida, generosa, colmada, remecida, rebosante. La medida
que usen, la usarán con ustedes”. Palabra del Señor
Meditación
La primera lectura de hoy refleja una especie de liturgia penitencial, en
la que el profeta Daniel se expresa con pesar y arrepentimiento ante Dios
en nombre de la comunidad arrepentida. Dicho arrepentimiento brota del
corazón de un pueblo que reconoce la fidelidad de Dios a la Alianza y cuyo
amor por los suyos se muestra en el perdón, porque Dios es misericordioso.
34
Plan de Pastoral - Marzo 2015
La comunidad cristiana está llamada hoy no sólo a reconocerse pecadora
y a confiar en la disposición del Señor para perdonar al que se arrepiente,
sino también a reflejar el perdón de Dios a los demás. De ahí que no basta
lamentarse por las desgracias públicas y políticas que tenemos, como si
no tuviésemos que avergonzarnos incluso de nosotros mismos, es decir,
de nuestros pecados. Es necesario aprender de la actitud misericordiosa
de Dios ante el pecador arrepentido y hacer nosotros lo mismo.
En ese sentido se entienden las palabras de Jesús en el evangelio de
este día: “sean compasivos como su Padre es compasivo”. La misericordia
y el perdón son dos cualidades que identifican ampliamente el actuar de
Dios para con los hombres. Es necesario, por tanto, ser reflejo de Dios hoy
siguiendo su modo de ser.
Es necesario poner en práctica lo que nos propone Jesús: ser
compasivos y perdonar a los demás como Dios es compasivo y nos
perdona a nosotros. ¿De veras tenemos un corazón compasivo? ¡Cuántas
ocasiones tenemos, al cabo del día, para mostrarnos tolerantes, para
saber olvidar, para no juzgar ni condenar, para no guardar rencor, para ser
solidarios; para ser generosos, como Dios lo ha sido con nosotros! Esto es
más difícil que hacer un poco de ayuno o abstinencia.
Ahí tenemos un buen examen de conciencia para ponernos en línea
con los caminos de Dios y con el estilo de Jesús. Es un examen que duele.
Tendríamos que salir de esta Cuaresma con mejor corazón, con mayor
capacidad de perdón, solidaridad y tolerancia.
3
Martes
Morado
Lectura del libro del profeta Isaías 1,10.16-20
Oigan la palabra del Señor, príncipes de Sodoma, escucha la enseñanza
de nuestro Dios, pueblo de Gomorra: “Lávense, purifíquense, aparten de mi
vista sus malas acciones. Cesen de obrar mal, aprendan a obrar bien; busquen
el derecho, enderecen al oprimido; defiendan al huérfano, protejan a la viuda.
Entonces, vengan y litigaremos dice el Señor. Aunque sus pecados sean como
púrpura, blanquearán como nieve; aunque sean rojos como escarlata, quedarán
como lana. Si saben obedecer, lo sabroso de la tierra comerán; si rehúsan y se
rebelan, la espada los comerá. Lo ha dicho el Señor. Palabra de Dios.
Salmo Responsorial: 49
R/ Al que sigue buen camino le haré ver la salvación de Dios
No te reprocho tus sacrificios, pues siempre están tus holocaustos ante
mí, pero no aceptaré un becerro de tu casa, ni un cabrito de tus rebaños. R.
¿Por qué recitas mis preceptos y tienes siempre en la boca mi alianza, tú
que detestas mi enseñanza y te echas a la espalda mis mandatos? R.
Esto haces, ¿y me voy a callar? ¿Crees que soy como tú?; El que me
ofrece acción de gracias, ése me honra; al que sigue buen camino le haré
ver la salvación de Dios.” R.
35
Ayúdense mutuamente
Lectura del santo evangelio según san Mateo 23,1-12
En aquel tiempo, Jesús habló a la gente y a sus discípulos,
diciendo: “En la cátedra de Moisés se han sentado los escribas y los
fariseos: hagan y cumplan lo que les digan; pero no hagan lo que
ellos hacen, porque ellos no hacen lo que dicen. Ellos lían fardos
pesados e insoportables y se los cargan a la gente en los hombros,
pero ellos no están dispuestos a mover un dedo para empujar. Todo
lo que hacen es para que los vea la gente: alargan las filacterias y
ensanchan las franjas del manto; les gustan los primeros puestos en
los banquetes y los asientos de honor en las sinagogas; que les hagan
reverencias por la calle y que la gente los llame maestros. Ustedes en
cambio, no se dejen llamar maestro, porque uno solo es su maestro,
y todos ustedes son hermanos. Y no llamen padre suyo a nadie en la
tierra, porque uno solo es su Padre, el del cielo. No se dejen llamar
consejeros, porque uno solo es su consejero, Cristo. El primero entre
ustedes será su servidor. El que se enaltece será humillado, y el que
se humilla será enaltecido. Palabra del Señor
Meditación
Tanto la primera lectura como el evangelio de hoy insisten en la
hipocresía religiosa, y la respuesta que dan las dos lecturas es la sencillez
y la solidaridad. El profeta Isaías enfrenta al pueblo pecador y lo compara
con Sodoma y Gomorra que fueron destruidas por sus pecados y falta de
arrepentimiento. Ahora será la palabra del Señor la que se encargará de
purificar al pueblo pecador para que se convierta y vuelva sus corazones
a Dios. En efecto, el culto que se ofrece a Dios debe traducirse en una
conversión personal y comunitaria, una vida dedicada al Señor y a los
hermanos, capaz de acercarse al que sufre y de liberar a los oprimidos. No
hay conversión a Dios, no hay culto agradable al Señor, que no pase por
la solidaridad con el hermano más necesitado.
Esa misma línea de pensamiento sigue el evangelio de hoy en el
cual Jesús recrimina a los fariseos y letrados hipócritas, ya que fingen
cualidades y sentimientos contrarios a los que verdaderamente viven.
Antiguamente la palabra “hipócrita” designaba al actor que utilizaba una
máscara o disfraz para representar una personalidad ajena a la suya y
su objetivo era deleitar al público. La forma de practicar la religión de
los fariseos era hipocresía, ya que lo que buscaban no era una estrecha
relación con Dios, sino la vanagloria personal, por eso les gustaba que les
hicieran reverencias por las calles. Es precisamente lo que Jesús denuncia
en este día.
Esta denuncia de Jesús no debemos verla dirigida únicamente a los
dirigentes del pueblo de Dios, es decir, a los pastores de la Iglesia; más
bien debemos verla como una advertencia para todos, como un llamado a
vivir con sinceridad nuestra relación con el Señor. Pues, aunque a veces
fallen los pastores del pueblo de Dios, como humanos que son, eso no
nos da la razón para abandonar la Iglesia, la fe o la práctica religiosa como
36
Plan de Pastoral - Marzo 2015
hacen algunos. Por el contrario, es necesario afianzarnos cada día más
en la práctica de una religión basada en la verdad revelada por Dios en su
Palabra.
4
Miércoles
Morado
Lectura del libro del profeta Jeremías 18,18-20
Dijeron: “Vengan, maquinemos contra Jeremías, porque no falta la ley
del sacerdote, ni el consejo del sabio, ni el oráculo del profeta; vengan, lo
heriremos con su propia lengua y no haremos caso de sus oráculos.” Señor,
hazme caso, oye cómo me acusan. ¿Es que se paga el bien con mal, que
han cavado una fosa para mí? Acuérdate de cómo estuve en tu presencia,
intercediendo en su favor, para apartar de ellos tu enojo. Palabra de Dios.
Salmo Responsorial: 30
R/ Sálvame, Señor, por tu misericordia
Sácame de la red que me han tendido, porque tú eres mi amparo. A tus
manos encomiendo mi espíritu: tú, el Dios leal, me librarás. R.
Oigo el cuchicheo de la gente, y todo me da miedo; se conjuran contra mí
y traman quitarme la vida. R.
Pero yo confío en ti, Señor, te digo: “Tú eres mi Dios.” En tu mano están
mis azares: líbrame de los enemigos que me persiguen. R.
Lectura del santo evangelio según san Mateo 20,17-28
En aquel tiempo, mientras iba subiendo Jesús a Jerusalén, tomando aparte
a los Doce, les dijo por el camino: “Miren, estamos subiendo a Jerusalén, y el
Hijo del hombre va a ser entregado a los sumos sacerdotes y a los escribas, y
lo condenarán a muerte y lo entregarán a los gentiles, para que se burlen de él,
lo azoten y lo crucifiquen; y al tercer día resucitará.” Entonces se le acercó la
madre de los Zebedeos con sus hijos y se postró para hacerle una petición. Él
le preguntó: “¿Qué deseas?” Ella contestó: “Ordena que estos dos hijos míos
se sienten en tu reino, uno a tu derecha y el otro a tu izquierda.” Pero Jesús
replicó: “No saben lo que piden. ¿Son capaces de beber el cáliz que yo he de
beber?” Contestaron: “Lo somos.” Él les dijo: “Mi cáliz lo beberán; pero el puesto
a mi derecha o a mi izquierda no me toca a mí concederlo, es para aquellos
para quienes lo tiene reservado mi Padre.” Los otros diez, que lo habían oído,
se indignaron contra los dos hermanos. Pero Jesús, reuniéndolos, les dijo:
“Saben que los jefes de los pueblos los tiranizan y que los grandes los oprimen.
No será así entre ustedes: el que quiera ser grande entre ustedes, que sea su
servidor, y el que quiera ser primero entre ustedes, que sea su esclavo. Igual
que el Hijo del hombre no ha venido para que le sirvan, sino para servir y dar
su vida en rescate por muchos.” Palabra del Señor.
Meditación
Para un verdadero profeta es difícil ser fiel a su misión, ya que muchas
veces tiene que pronunciar lo que la gente no desea escuchar. El caso
37
Ayúdense mutuamente
de Jeremías no es la excepción. Para él hubiese sido más conveniente
estar del lado de los ‘profetas’ oficiales, los cuales pronunciaban oráculos
halagadores para los poderosos y el pueblo en general. Sin embargo, hoy
vemos al profeta acudir a Dios pidiendo auxilio ante el pavor de la muerte
que traman en su contra aquellos por quienes había intervenido ante el
Señor. Este texto se enmarca dentro de las llamadas “confesiones de
Jeremías”, las cuales se convierten en una escuela de oración a la hora de
desvelar las angustias personales del hombre ante Dios. Es una dolorosa
experiencia existencial la que vive el profeta. La palabra del Señor ya no
resuena dulcemente en sus oídos, sino que se ha convertido para él en
“oprobio y desprecio todo el día”. Ese es el precio de la fidelidad a la misión
recibida de parte de Dios.
En ese sentido de la fidelidad a la misión encomendada, podemos ver
el anuncio de la pasión que hace Jesús a sus discípulos: es ya el tercero
de los tres anuncios. Jesús se dirige a Jerusalén y sabe que allí puede
encontrar la muerte, ya que ha denunciado las viejas instituciones y estas
están dispuestas a hacer lo que sea para salir de Él, están decididas a
acallarle para siempre; pero el amor y la fidelidad a la misión son más
fuertes: Jesús sabe que no puede desviarse del plan trazado por el Padre,
ya que de él depende la salvación de todos los hombres.
Finalmente, es bueno destacar la astucia de Jesús al aprovechar la
ocasión de la petición de los primeros puestos que hacen los hijos de
Zebedeo para adoctrinar a sus discípulos respecto a la actitud de servicio
que han de tener. En efecto, la constitución de la Iglesia ha de ser diversa
a la de las sociedades civiles, es decir, mientras en estas últimas se vive
en una lucha de poder, en la Iglesia lo que debe primar es el servicio. En la
comunidad cristiana no debe entenderse la autoridad en el sentido de las
sociedades civiles (dominando), sino como un sinónimo de servicialidad,
en donde sus miembros se preocupan los unos por los otros sin importar el
cargo que ocupen; por eso, con mucha razón, decía el Papa Francisco en
la misa de inicio de su pontificado: “mucha gente piensa, equivocadamente,
que el ser Papa representa un poder”; y añadía: “el papado representa un
poder, pero el poder del servicio”.
También en la sociedad civil el poder que se otorga por la democracia,
por las elecciones, es para servir. Y por ello todo cristiano y cristiana debe
ponerse al servicio de los demás. En este mes de la solidaridad no nos
queda más que recordar el deber de ser solidarios en el servicio a las
personas más necesitadas, como Jesús nos pide en el Evangelio de hoy.
5
Jueves
Morado
Lectura del libro del profeta Jeremías 17,5-10
Así dice el Señor: “Maldito quien confía en el hombre, y en la carne
busca su fuerza, apartando su corazón del Señor. Será como un cardo
en la estepa, no verá llegar el bien; habitará la aridez del desierto, tierra
38
Plan de Pastoral - Marzo 2015
salobre e inhóspita. Bendito quien confía en el Señor y pone en el Señor su
confianza. Será un árbol plantado junto al agua, que junto a la corriente echa
raíces; cuando llegue el estío no lo sentirá, su hoja estará verde; en año de
sequía no se inquieta, no deja de dar fruto. Nada más falso y enfermo que
el corazón: ¿quién lo entenderá? Yo, el Señor, penetro el corazón, sondeo
las entrañas, para dar al hombre según su conducta, según el fruto de sus
acciones.” Palabra de Dios
Salmo Responsorial 1:
R/. Dichoso el hombre que ha puesto su confianza en el Señor
Dichoso el hombre que no sigue el consejo de los impíos, ni entra por la
senda de los pecadores, ni se sienta en la reunión de los cínicos; sino que
su gozo es la ley del Señor, y medita su ley día y noche. R/.
Será como un árbol plantado al borde de la acequia: da fruto en su sazón
y no se marchitan sus hojas; y cuanto emprende tiene buen fin. R/.
No así los impíos, no así; serán paja que arrebata el viento. Porque el Señor
protege el camino de los justos, pero el camino de los impíos acaba mal. R/.
Lectura del santo evangelio según san Lucas 16,19-31
En aquel tiempo, dijo Jesús a los fariseos: “Había un hombre rico que
se vestía de púrpura y de lino y banqueteaba espléndidamente cada día. Y
un mendigo llamado Lázaro estaba echado en su portal, cubierto de llagas,
y con ganas de saciarse de lo que tiraban de la mesa del rico. Y hasta los
perros se le acercaban a lamerle las llagas. Sucedió que se murió el mendigo,
y los ángeles lo llevaron al seno de Abrahán. Se murió también el rico, y lo
enterraron. Y, estando en el infierno, en medio de los tormentos, levantando
los ojos, vio de lejos a Abrahán, y a Lázaro en su seno, y gritó: “Padre Abrahán,
ten piedad de mí y manda a Lázaro que moje en agua la punta del dedo y
me refresque la lengua, porque me torturan estas llamas.” Pero Abrahán le
contestó: “Hijo, recuerda que recibiste tus bienes en vida, y Lázaro, a su vez,
males: por eso encuentra aquí consuelo, mientras que tú padeces. Y además,
entre nosotros y ustedes se abre un abismo inmenso, para que no puedan
cruzar, aunque quieran, desde aquí hacia ustedes, ni puedan pasar de ahí
hasta nosotros.” El rico insistió: “Te ruego, entonces, padre, que mandes a
Lázaro a casa de mi padre, porque tengo cinco hermanos, para que, con
su testimonio, evites que vengan también ellos a este lugar de tormento.”
Abrahán le dice: “Tienen a Moisés y a los profetas; que los escuchen.” El rico
contestó: “No, padre Abrahán. Pero si un muerto va a verlos, se arrepentirán.”
Abrahán le dijo: “Si no escuchan a Moisés y a los profetas, no harán caso ni
aunque resucite un muerto.”“ Palabra del Señor
Meditación
La primera lectura de hoy nos presenta el contraste entre las dos
actitudes básicas del hombre: triunfo o fracaso. Ambos dependen de cómo
actúe el hombre. En términos religiosos, el profeta Jeremías nos habla
de bendición o maldición. En otras palabras, cada uno decide el camino
39
Ayúdense mutuamente
a seguir ante Dios, quien se limita a juzgar las acciones de los hombres.
De ahí que el hombre está llamado a ser sensato y a poner en Dios su
confianza como lo expresa el salmo primero que leemos en este día:
“Dichoso el hombre que ha puesto su confianza en el Señor”.
También en el evangelio de hoy podemos notar que las actitudes ante
Dios reflejan el final de la vida del hombre. Así queda expresado claramente
en el evangelio de este día. Jesús contrapone la dispar suerte final del rico
Epulón y el pobre Lázaro. Pero, ojo, este final no se debe a la condición social
de cada uno, sino a sus actitudes personales. El rico no se condena por el
hecho de ser rico, ni tampoco el pobre se salva por ser pobre. El destino final
de cada uno depende de la forma en que han vivido ante Dios: el primero no
teme a Dios y tiene el dinero como su sumo bien, en él ha puesto su confianza
y ha dejado a Dios de lado; mientras que el segundo está abierto a Dios y
espera en su salvación, sabe que Dios hace justicia a los pobres de espíritu.
La parábola también nos recuerda que la manera de vivir ante Dios
depende de nuestro comportamiento con los demás, sobre todo de esa actitud
en el uso de los bienes que se nos han dado. Lo que condena al rico es la
indiferencia ante el pobre que tiene a la puerta todos los días. La solidaridad
con el necesitado es la respuesta a la presencia de Dios en nuestras vidas:
esa es la justicia y el ayuno que Dios quiere en esta Cuaresma.
Esta parábola debe enseñarnos que no debemos colocar nuestra
confianza en los bienes materiales, en las riquezas, ya que puede resultar
peligroso al final de nuestras vidas; ellas nos pueden llevar al olvido de
Dios, a no escuchar su palabra y endurecer nuestro corazón al momento
de compartir con los más necesitados.
6
Viernes
Morado
Lectura del libro del Génesis 37,3-4.12-13a.17b-28
José era el preferido de Israel, porque le había nacido en la vejez, y le
hizo una túnica con mangas. Al ver sus hermanos que su padre lo prefería
a los demás, empezaron a odiarlo y le negaban el saludo. Sus hermanos
trashumaron a Siquén con los rebaños de su padre.
Israel dijo a José: “Tus hermanos deben estar con los rebaños en Siquén;
ven, que te voy a mandar donde están ellos.”
José fue tras sus hermanos y los encontró en Dotán. Ellos lo vieron desde
lejos. Antes de que se acercara, maquinaron su muerte.
Se decían unos a otros: “Ahí viene el de los sueños. Vamos a matarlo y
a echarlo en un aljibe; luego diremos que una fiera lo ha devorado; veremos
en qué paran sus sueños.”
Oyó esto Rubén, e intentando salvarlo de sus manos, dijo: “No le quitemos
la vida.” Y añadió: “No derramen sangre; échenlo en este aljibe, aquí en la
estepa; pero no pongan las manos en él.”
Lo decía para librarlo de sus manos y devolverlo a su padre. Cuando
llegó José al lugar donde estaban sus hermanos, lo sujetaron, le quitaron la
40
Plan de Pastoral - Marzo 2015
túnica con mangas, lo cogieron y lo echaron en un pozo vacío, sin agua. Y
se sentaron a comer. Levantando la vista, vieron una caravana de ismaelitas
que transportaban en camellos goma, bálsamo y resina de Galaad a Egipto.
Judá, propuso a sus hermanos: “¿Qué sacaremos con matar a nuestro
hermano y con tapar su sangre? Vamos a venderlo a los ismaelitas y no
pondremos nuestras manos en él, que al fin es hermano nuestro y carne
nuestra.” Los hermanos aceptaron. Al pasar unos comerciantes madianitas,
tiraron de su hermano, lo sacaron del pozo y se lo vendieron a los ismaelitas
por veinte monedas. Estos se llevaron a José a Egipto. Palabra de Dios.
Salmo Responsorial 104:
R/ “Recuerden las maravillas que hizo el Señor”
Llamó al hambre sobre aquella tierra: cortando el sustento de pan; por
delante había enviado a un hombre, a José, vendido como esclavo. R/
Le trabaron los pies con grillos, le metieron el cuello en la argolla, hasta
que se cumplió su predicción, y la palabra del Señor lo acreditó. R/.
El rey lo mandó desatar, el señor de pueblos le abrió la prisión, lo nombró
administrador de su casa, señor de todas sus posesiones. R/.
Lectura del santo evangelio según san Mateo 21,33-43.45-46
En aquel tiempo, dijo Jesús a los sumos sacerdotes y a los ancianos del
pueblo: “Escuchen otra parábola: Había un propietario que plantó una viña,
la rodeó con una cerca, cavó en ella un lagar, construyó la casa del guarda,
y la arrendó a unos labradores y se marchó de viaje. Llegado el tiempo de la
vendimia, envió sus criados a los labradores, para percibir los frutos que le
correspondían. Pero los labradores, agarrando a los criados, apalearon a uno,
mataron a Otro, y a Otro lo apedrearon. Envió de nuevo otros criados, más
que la primera vez, e hicieron con ellos lo mismo. Por último les mandó a su
hijo, diciéndose: “Tendrán respeto a mi hijo.” Pero los labradores, al ver al hijo,
se dijeron: “Éste es el heredero: vengan, lo matamos y nos quedamos con su
herencia.” Y, agarrándolo, lo empujaron fuera de la viña y lo mataron. Y ahora,
cuando vuelva el dueño de la viña, ¿qué hará con aquellos labradores?”
Le contestaron: “Hará morir de mala muerte a esos malvados y arrendará
la viña a otros labradores, que le entreguen los frutos a sus tiempos.”
Y Jesús les dice: “¿No han leído nunca en la Escritura: “La piedra que
desecharon los arquitectos es ahora la piedra angular. Es el Señor quien lo
ha hecho, ha sido un milagro patente?” Por eso les digo que se les quitará
a ustedes el reino de Dios y se dará a un pueblo que produzca sus frutos.”
Los sumos sacerdotes y los fariseos, al oír sus parábolas, comprendieron
que hablaba de ellos. Y, aunque buscaban echarle mano, temieron a la
gente, que lo tenía por profeta. Palabra del Señor.
Meditación
Las lecturas de hoy reflejan dos sentimientos que generalmente van
unidos en quienes lo albergan en su interior: odio y envidia. En la primera
lectura la envidia que sienten los hermanos de José, por ser el “favorito” de
41
Ayúdense mutuamente
Jacob, termina convirtiéndose en odio. Y llevados por esos sentimientos
venden a su hermano como esclavo. De igual modo, en el evangelio
vemos a unos viñadores homicidas que rechazan a los enviados del amo
para quedarse con lo suyo. Nuevamente vemos la envidia que lleva a la
avaricia y finalmente a una mala voluntad (odio) que termina en la muerte
del hijo del amo, es decir, del heredero.
En el caso de José se puede notar claramente la acción de Dios que
actúa en favor de los hombres a lo largo de la historia salvífica, ya que
gracias a esta mala acción de sus hermanos, él será su salvador, pues,
estaban a punto de morir por la hambruna que azotó la región de Palestina
años más tarde. Se cumple así el conocido refrán que dice que “Dios
escribe derecho en renglones torcidos”.
Aunque no es nuestro objetivo señalar el significado alegórico de los
diferentes actores o elementos de la parábola de hoy, es bueno señalar
que el hijo representa a Cristo, el cual es matado en las afueras de la
viña (Israel). Su muerte traerá el castigo a este pueblo, pues, la viña será
entregada a un pueblo que produzca el fruto esperado.
En la actualidad debemos aprender a desterrar de nuestros corazones
los malos sentimientos que nos impiden aceptar a los enviados de Dios
y escuchar su palabra que nos llama a una verdadera conversión y a
producir el fruto que de ella se deriva. El odio, la avaricia, la envidia son
sentimientos contrarios al plan de Dios para con nosotros y, por tanto, no
permiten que participemos de los bienes de su reino. Mientras que el amor,
la solidaridad, el altruismo son valores que construyen el reino de Dios.
7
Sábado
Morado
Se puede hacer la conmemoración de Santas Perpetua y Felicidad
Lectura del libro del profeta Miqueas 7, 14-15.18-20
Señor, Dios nuestro, pastorea a tu pueblo con tu bastón, al rebaño de
tu heredad, que vive solitario entre malezas y matorrales silvestres; que
lo pastoreen como antes en Basán y en Galaad; como cuando saliste de
Egipto te haré ver maravillas. ¿Qué Dios hay como tú, que absuelva de la
culpa y pase por alto la rebeldía del resto de su heredad, que no mantenga
por siempre su cólera, porque se complace en ser bueno? De nuevo se
compadecerá de nosotros y sepultará nuestras culpas. Tú arrojarás al fondo
del mar nuestros pecados; así manifestarás tu fidelidad a Jacob, y tu amor
a Abrahán, como lo prometiste a nuestros antepasados, desde los tiempos
remotos. Palabra de Dios.
Salmo Responsorial: 102
R/ “El Señor es compasivo y misericordioso.”
Bendice al Señor, alma mía, y todo mi ser a su santo nombre. Bendice al
Señor, alma mía, no te olvides de sus beneficios. R.
42
Plan de Pastoral - Marzo 2015
Él perdona todos tus pecados y cura todas tus enfermedades. Él rescata
tu vida del sepulcro, y te colma de amor y de ternura. R.
No está siempre acusando ni guarda rencor eternamente; no nos trata
como merecen nuestros pecados, ni nos paga de acuerdo con nuestras
culpas. R.
Como la altura del cielo sobre la tierra, así es su amor con los que lo
respetan; y como está lejano el oriente del poniente, así aleja de nosotros
nuestros crímenes. R.
Lectura del santo evangelio según san Lucas 15, 1-3.11-32
En aquel tiempo, se acercaban a Jesús los recaudadores de impuestos
para Roma y los pecadores a escucharlo. Y los fariseos y los escribas
murmuraban: “Este anda con pecadores y come con ellos”.
Jesús les dijo entonces esta parábola: “Un hombre tenía dos hijos. El
menor dijo a su padre: “Padre, dame la parte de la herencia que me toca”. Y
el Padre les repartió los bienes.
A los pocos días, el hijo menor recogió sus cosas, partió a un país lejano y allí
despilfarró toda su fortuna viviendo como un libertino. Cuando lo había gastado
todo, sobrevino una gran escasez en aquella región, y el muchacho empezó
a pasar necesidad. Entonces fue a servir a casa de un hombre de aquel país,
quien lo mandó a sus campos a cuidar cerdos. Para llenar su estómago, habría
comido hasta el alimento que daban a los cerdos, pero no se lo permitían.
Entonces reflexionó y se dijo: “¡Cuántos trabajadores de mi padre tienen pan
de sobra, mientras que yo aquí me muero de hambre! Me pondré en camino,
volveré a casa de mi padre y le diré: Padre, pequé contra el cielo y contra ti. Ya
no merezco llamarme hijo tuyo; trátame como a uno de tus jornaleros”.
Se puso en camino hacia la casa de su padre. Cuando aún estaba lejos,
su padre lo vio y, profundamente conmovido, salió corriendo a su encuentro,
lo abrazó y lo cubrió de besos. El hijo empezó a decirle: “Padre, pequé contra
el cielo y contra ti; ya no merezco llamarme hijo tuyo”. Pero el padre dijo a sus
criados: “Traigan en seguida el mejor vestido y pónganselo; pónganle también
un anillo en el dedo y sandalias en los pies. Tomen el ternero gordo, mátenlo
y celebremos un banquete de fiesta, porque este hijo mío estaba muerto y ha
vuelto a la vida; estaba perdido y lo hemos encontrado”. Y comenzaron la fiesta.
Su hijo mayor estaba en el campo. Cuando vino y se acercó a la casa, al
oír la música y los cantos, llamó a uno de los criados y le preguntó qué era lo
que pasaba. El criado le dijo: “Ha regresado tu hermano, y tu padre ha matado
el ternero gordo, porque lo ha recobrado sano”. El se enojó y no quería entrar.
Su padre salió y trataba de convencerlo, pero el hijo le contestó: “Hace
ya muchos años que te sirvo sin desobedecer jamás tus órdenes, y nunca
me diste un cabrito para celebrar una fiesta con mis amigos. Pero llega ese
hijo tuyo, que se ha gastado tus bienes con prostitutas, y le matas el ternero
gordo”. El padre le respondió: “Hijo, tú siempre estás conmigo, y todo lo mío
es tuyo. Pero tenemos que alegrarnos y hacer fiesta, porque este hermano
tuyo estaba muerto y ha revivido, estaba perdido y ha sido encontrado”.
Palabra del Señor.
43
Ayúdense mutuamente
Meditación
Si algo caracteriza a Dios es el amor y la misericordia, de eso no cabe
la menor duda. El apóstol Juan señala que “Dios es amor”, y el salmista
apunta que “el Señor es compasivo y misericordioso, lento a la cólera y rico
en clemencia”. Ésta es la gran noticia que recibimos en este día: el amor
misericordioso de Dios, que es padre y pastor de su pueblo y fiel a las promesas
hechas a los antepasados, se manifiesta en el perdón. El profeta Miqueas lo
sabe y por eso recuerda el pasado glorioso en que Dios hacía maravillas en
favor de su pueblo. Es una forma de “mea culpa” en la que el profeta reconoce
humildemente los pecados del pueblo e implora la misericordia de Dios.
En el evangelio vemos también manifiesto el amor misericordioso de Dios
Padre. Jesús, por medio de la llamada parábola del hijo pródigo, nos presenta
el corazón misericordioso de Dios, así justifica su accionar con los marginados
de la salvación; es decir, los publicanos y pecadores que se acercaban a Él
para escucharle, por lo que era criticado por los letrados y fariseos.
Esta parábola es una especie de síntesis de la vida interior del ser humano,
en donde convergen sentimientos contrarios: fidelidad e infidelidad, gracia y
pecado, huida y retorno, obediencia y desobediencia, etc. Es la lucha interna
a la que se refiere San Pablo cuando dice que hace el mal que no quiere y
no hace el bien que quiere. El hijo infiel representa al hombre que se aleja
de Dios empujado por un sentimiento negativo de autonomía o mayoría de
edad, pero luego se arrepiente y retorna a la casa paterna como quien no
goza de ningún derecho. Sin embargo, el Padre lo recibe con mucha alegría,
con los brazos abiertos y hace una fiesta por su regreso.
En otro orden nos encontramos con un hermano resentido, envidioso y
egoísta. Es la actitud de aquel que está siempre en la casa paterna pero no
conoce a su padre; por tanto, no puede disfrutar de lo que tiene a su disposición.
Es necesario que hoy celebremos la misericordia de Dios; que no
seamos creyentes resentidos, celosos porque Dios trata bien a los
pecadores. En efecto, la celebración eucarística está llamada a ser una
fiesta en la que se manifieste claramente la fraternidad de los hermanos
reconciliados entre sí y con el Padre.
8
III Domingo de Cuaresma
III Semana de la Liturgia de las Horas
Morado
Comienzan los ritos de purificación de los Catecúmenos.
Día Internacional de la Mujer.
El culto verdadero y completo al Señor implica la
solidaridad
Orientaciones para este Domingo: Colocar el título de
este Domingo. Recordar que hoy es el Día Internacional
de la Mujer. Destacar a las mujeres con algún distintivo;
reconocimiento de las mujeres consagradas en un Instituto
44
Plan de Pastoral - Marzo 2015
Secular y a mujeres que son solidarias en la comunidad. Se pueden colocar
un rumbo de piedras para simbolizar la destrucción del Templo y sobre ellas
una Imagen de Cristo, como el nuevo y verdadero Templo. O, también, se
llevan en las ofrendas las piedras y la imagen de Jesucristo.
Monición de entrada
Hermanos y hermanas: En este Tercer Domingo de Cuaresma
continuamos este camino de oración intensa, de sacrificio y de compartir
con los más pobres que nos lleva a la Pascua marcado por el valor de la
solidaridad con el lema. “Ayúdense mutuamente”.
En este día, que celebramos el Día Internacional de la Mujer nuestra mirada
se dirige hacia ellas reconociendo y bendiciendo a Dios por su dignidad, sus
grandes aportes, sus derechos y sus deberes. Con amor solidario recordemos
hoy a tantas mujeres que sufren maltratos verbales y físicos, desprecio y
discriminación en nuestro mundo, especialmente en nuestro país. Demos un
aplauso a todas las mujeres llenos de amor hacia ellas.
También, recordemos con amor agradecido a las mujeres consagradas
a Dios en los Institutos Seculares que con tanta generosidad sirven y se
entregan a nuestro país. Se nos recuerda en la Palabra de hoy que el nuevo
Templo es Jesucristo y que el verdadero culto que damos al Padre con El,
por El y en El implica tenerlo como nuestro Único Dios y amar al prójimo que
se muestra con acciones solidarias y justas.
Oremos al Padre por las mujeres de nuestro pueblo al mismo tiempo que
pidamos que hombres y mujeres sepamos ser solidarios y solidarias unos
con otros. Dispongámonos a participar de esta celebración como verdaderos
seguidores de Cristo en Espíritu y verdad, recibiéndolo a El que llega a
presidir esta Celebración a través de su ministro.
Primera Lectura: Éxodo 20, 1-17
En el decálogo del Sinaí, Dios descubre a su pueblo Israel un nuevo
camino de rendirle culto a El que está centrado en el amor a Él como el Único
Señor de su pueblo y en el amor al prójimo en unas relaciones solidarias y de
respeto mutuo. Escuchemos.
Lectura del libro del Éxodo
En aquellos días, el Señor pronunció las siguientes palabras: “Yo soy el Señor, tu Dios, que te saqué de Egipto, de la esclavitud. No tendrás otros dioses
frente a mí. No te harás ídolos, figura alguna de lo que hay arriba en el cielo, abajo en la tierra o en el agua debajo de la tierra. No te postrarás ante ellos, ni les
darás culto; porque yo, el Señor, tu Dios, soy un dios celoso: castigo el pecado
de los padres en los hijos, nietos y biznietos, cuando me aborrecen. Pero actúo
con piedad por mil generaciones cuando me aman y guardan mis preceptos.
No pronunciarás el nombre del Señor, tu Dios, en falso. Porque no dejará
el Señor impune a quien pronuncie su nombre en falso.
Fíjate en el sábado para santificarlo. Durante seis días trabaja y haz tus
tareas, pero el día séptimo es un día de descanso, dedicado al Señor, tu Dios:
no harás trabajo alguno, ni tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu esclavo, ni tu esclava,
45
Ayúdense mutuamente
ni tu ganado, ni el forastero que viva en tus ciudades. Porque en seis días hizo
el Señor el cielo, la tierra y el mar y lo que hay en ellos. Y el séptimo día descansó: por eso bendijo el Señor el sábado y lo santificó. Honra a tu padre y a tu
madre: así prolongarás tus días en la tierra que el Señor, tu Dios, te va a dar.
No matarás. No cometerás adulterio. No robarás. No darás testimonio
falso contra tu prójimo. No codiciarás los bienes de tu prójimo; no codiciarás
la mujer de tu prójimo, ni su esclavo, ni su esclava, ni su buey, ni su asno, ni
nada que sea de él.” Palabra de Dios.
Salmo Responsorial: 18
R/ Señor, tú tienes palabras de vida eterna.
La ley del Señor es perfecta y es descanso del alma; el precepto del
Señor es fiel e instruye al ignorante. R/
Los mandatos del Señor son rectos y alegran el corazón; la norma del
Señor es límpida y da luz a los ojos. R/
La voluntad del Señor es pura y eternamente estable; los mandamientos
del Señor son verdaderos y enteramente justos. R/
Más preciosos que el oro, más el oro fino; más dulces que la miel de un
panal que destila. R/
Segunda Lectura: 1 Corintios 1,22-25
En Cristo crucificado está nuestra fuerza y nuestra sabiduría que nos
hace ser solidarios con todos los que sufren a nuestro alrededor en quienes
El está vivo y presente. Escuchemos.
Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios
Hermanos: Los judíos exigen signos, los griegos buscan sabiduría; pero
nosotros predicamos a Cristo crucificado: escándalo para los judíos, necedad
para los gentiles; pero, para los llamados -judíos o griegos-, un Mesías que
es fuerza de Dios y sabiduría de Dios.
Pues lo necio de Dios es más sabio que los hombres; y lo débil de Dios
es más fuerte que los hombres. Palabra de Dios.
Aclamación Jn 3, 16
Tanto amó Dios al mundo que entregó a su Hijo único. Todo el que cree
en El tiene vida eterna.
Evangelio: Juan 2,13-25
Jesús se indigna y actúa frente al uso del Templo como un negocio al
servicio de unos pocos desvirtuando su función de ser lugar de encuentro
con Dios y anuncia que su Cuerpo Resucitado será el nuevo y verdadero
Templo al que entramos si vivimos una verdadera unión con Dios que implica
la solidaridad fraterna. Escuchamos.
Lectura del santo evangelio según san Juan
Se acercaba la Pascua de los judíos, y Jesús subió a Jerusalén. Y encontró
en el templo a los vendedores de bueyes, ovejas y palomas, y a los cambistas
sentados; y, haciendo un azote de cordeles, los echó a todos del templo,
46
Plan de Pastoral - Marzo 2015
ovejas y bueyes; y a los cambistas les esparció las monedas y les volcó
las mesas; y a los que vendían palomas les dijo: -”Quiten esto de aquí; no
conviertan en un mercado la casa de mi Padre.” Sus discípulos se acordaron
de lo que está escrito: “El celo de tu casa me devora.” Entonces intervinieron
los judíos y le preguntaron: - “¿Qué signos nos muestras para obrar así?”
Jesús contestó:- “Destruyan este templo, y en tres días lo levantaré.” Los
judíos replicaron: “Cuarenta y seis años ha costado construir este templo, ¿y
tú lo vas a levantar en tres días?” pero él hablaba del templo de su cuerpo. Y,
cuando resucitó de entre los muertos, los discípulos se acordaron de que lo
había dicho, y dieron fe a la Escritura y a la palabra que había dicho Jesús.
Mientras estaba en Jerusalén por las fiestas de Pascua, muchos creyeron en
su nombre, viendo los signos que hacía; pero Jesús no se confiaba con ellos,
porque los conocía a todos y no necesitaba el testimonio de nadie sobre un
hombre, porque él sabía lo que hay dentro de cada hombre. Palabra del Señor.
Oración de los Fieles:
Quien preside: Siguiendo el ejemplo de Jesús, el Señor, que en el
desierto se entregaba a la oración, oremos también nosotros con insistencia
al Padre diciéndole: Bendice y fortalece a las mujeres de nuestro pueblo.
1. Por quienes pusiste al frente de nuestra Iglesia, para que promoviendo el
verdadero culto a Ti en espíritu y en verdad sepan reconocer la dignidad
y el trabajo de la mujer en la Iglesia y en la sociedad. Oremos.
2. Por los que gobiernan el mundo para que velen para que los derechos de
las mujeres sean respetados y que se supere toda discriminación social
contra ellas. Oremos.
3. Por las mujeres que sufren cualquier agresión verbal y física; que están
en situaciones de pobreza, marginación y discriminación para que
descubran y trabajen por su dignidad. Oremos.
4. Por esta Asamblea, para que infundas en nosotros el amor solidario por
todas las mujeres, trabajemos con ellas y crezca el respeto a su dignidad
y a sus derechos. Oremos.
5. Por las mujeres cristianas para que sean testimonio de Cristo entre sus
hermanas, sepan organizarse y ser solidarias entre ellas. Oremos.
Quien preside: Padre, escucha estas súplicas que te presentamos. Bendice
a nuestras mujeres y a todas las personas e instituciones que trabajan por la
verdadera dignidad de ellas y haz que sepamos hombres y mujeres colaborar
con la realización de tu Reino en nuestra patria. Por Jesucristo Nuestro Señor.
9
Lunes
Morado
Lectura del segundo libro de los Reyes 5,1-15a
En aquellos días, Naamán, general del ejército del rey sirio, era un hombre
que gozaba de la estima y del favor de su señor, pues por su medio el Señor
había dado la victoria a Siria. Era un hombre muy valiente, pero estaba
47
Ayúdense mutuamente
enfermo de lepra. En una incursión, una banda de sirios llevó de Israel a
una muchacha, que quedó como criada de la mujer de Naamán, y dijo a su
señora: “Ojalá mi señor fuera a ver al profeta de Samaria: él lo libraría de su
enfermedad. Naamán fue a informar a su señor: La muchacha israelita ha
dicho esto y esto. El rey de Siria le dijo: “Ven, que te doy una carta para el rey
de Israel. Naamán se puso en camino, llevando tres quintales de plata, seis
mil monedas de oro y diez trajes. Presentó al rey de Israel la carta, que decía
así: “Cuando recibas esta carta, verás que te envío a mi ministro Naamán
para que lo libres de su enfermedad. Cuando el rey de Israel leyó la carta,
se rasgó las vestiduras, exclamando: ¿Soy yo un dios capaz de dar muerte
o vida, para que éste me encargue de librar a un hombre de su enfermedad?
Fíjense bien, y verán cómo está buscando un pretexto contra mí.”
El profeta Eliseo se enteró de que el rey de Israel se había rasgado las
vestiduras y le envió este recado: “¿Por qué te has rasgado las vestiduras?
Que venga a mí y verá que hay un profeta en Israel.”
Naamán llegó con sus caballos y su carroza y se detuvo ante la puerta de
Eliseo. Eliseo le mandó uno a decirle: “Ve a bañarte siete veces en el Jordán,
y tu carne quedará limpia. Naamán se enfadó y decidió irse, comentando:
“Yo me imaginaba que saldría en persona a verme, y que, puesto en pie,
invocaría al Señor, su Dios, pasaría la mano sobre la parte enferma y me
libraría de mi enfermedad. ¿Es que los ríos de Damasco, el Abana y el Farfar,
no valen más que toda el agua de Israel? ¿No puedo bañarme en ellos y
quedar limpio? Dio media vuelta y se marchaba furioso. Pero sus siervos se
le acercaron y le dijeron: “Señor, si el profeta te hubiera prescrito algo difícil, lo
harías. Cuanto más si lo que te prescribe para quedar limpio es simplemente
que te bañes. Entonces Naamán bajó al Jordán y se bañó siete veces, como
había ordenado el profeta, y su carne quedó limpia como la de un niño. Volvió
con su comitiva y se presentó al profeta, diciendo: “Ahora reconozco que no
hay dios en toda la tierra más que el de Israel. Palabra de Dios.
Salmo Responsorial: 41
R/ Mi alma tiene sed del Dios vivo: ¿cuándo veré el rostro de Dios?
Como busca la cierva corrientes de agua, así mi alma te busca a ti, Dios mío. R.
Tiene sed de Dios, del Dios vivo: ¿cuándo entraré a ver el rostro de Dios? R.
Envía tu luz y tu verdad: que ellas me guíen y me conduzcan hasta tu
monte santo, hasta tu morada. R.
Que yo me acerque al altar de Dios, al Dios de mi alegría; que te dé
gracias al son de la cítara, Dios, Dios mío. R.
Lectura del santo evangelio según san Lucas 4,24-30
En aquel tiempo, dijo Jesús al pueblo en la sinagoga de Nazaret: “Les
aseguro que ningún profeta es bien mirado en su tierra. Les garantizo que
en Israel había muchas viudas en tiempos de Elías, cuando estuvo cerrado
el cielo tres años y seis meses, y hubo una gran hambre en todo el país;
sin embargo, a ninguna de ellas fue enviado Elías, más que a una viuda
de Sarepta, en el territorio de Sidón. Y muchos leprosos había en Israel en
tiempos del profeta Eliseo; sin embargo, ninguno de ellos fue curado, más
48
Plan de Pastoral - Marzo 2015
que Naamán, el sirio. Al oír esto, todos en la sinagoga se pusieron furiosos
y, levantándose, lo empujaron fuera del pueblo hasta un barranco del monte
en donde se alzaba su pueblo, con intención de despeñarlo. Pero Jesús se
abrió paso entre ellos y se alejaba. Palabra del Señor.
Meditación
En la primera lectura se nos habla de Naamán quien es un oficial sirio
que ha recibido un beneficio del Señor por medio de su profeta Eliseo.
Naamán pertenece a la clase alta, a la clase gobernante y goza del favor
del rey. Cuando se entera, por medio de una esclava israelita, de que
podría ser sanado de su lepra, el trámite se hace por vía diplomática de rey
a rey; el rey sirio solicita al rey judío la sanación para Naamán, la repuesta
del rey de Israel sospechar que el rey sirio busca un pretexto para atacarlo.
Pero no se dan cuenta que tienen que fijarse en alguien que no posee
ni los títulos ni la importancia social y política del resto de actores, pero que
sí posee el carácter de mediador entre Dios y el pueblo, Eliseo.
Dios se vale de los humildes para hacer grandes cosas. Dios quiere
que nosotros no seamos autosuficiente ni vanidoso, sino humildes.
La felicidad verdadera no se encuentra ni en el poder ni en las grandezas,
ni en el dinero ni en la fama, sino en la adhesión a los valores perennes del
reino. El Señor ha escogido lo necio y débil del mundo para confundir a los
sabios y poderosos y fuertes.
En el Evangelio, podíamos decir que Jesús está haciendo una homilía a
esta primera lectura de hoy, y la está haciendo en su pueblo, Nazaret, donde
todos le conocen: acusa a sus conciudadanos que no han sabido captar los
signos de los tiempos. La viuda y el general, ambos paganos, favorecidos
por los milagros de Elías y de Eliseo, sí supieron reconocer la actuación
de Dios. Una vez más, en labios de Jesús, la salvación se anuncia como
universal, y son precisamente unos no judíos los que saben reaccionar bien
y convertirse a Dios, mientras que el pueblo elegido le hace oídos sordos.
No les gustó nada a sus oyentes lo que les dijo Jesús: lo empujaron
fuera del pueblo con la intención de despeñarlo por el barranco. La primera
homilía en su pueblo, que había empezado con admiración y aplausos,
acaba casi en tragedia. Ya desde el principio de su predicción se comienza
a ver el final del camino: la muerte en la cruz.
10
Martes
Morado
Lectura del libro del profeta Daniel 3,25.34-43
En aquellos días, Azarías se detuvo a orar y, abriendo los labios en medio del
fuego, dijo: “Por el honor de tu nombre, no nos desampares para siempre, no rompas
tu alianza, no apartes de nosotros tu misericordia. Por Abrahán, tú amigo; por Isaac,
tu siervo; por Israel, tu consagrado; a quienes prometiste multiplicar su descendencia
como las estrellas del cielo, como la arena de las playas marinas. Pero ahora,
Señor, somos el más pequeño de todos los pueblos; hoy estamos humillados por
49
Ayúdense mutuamente
toda la tierra a causa de nuestros pecados. En este momento no tenemos príncipes,
ni profetas, ni jefes; ni holocausto, ni sacrificios, ni ofrendas, ni incienso; ni un sitio
donde ofrecerte primicias, para alcanzar misericordia. Por eso, acepta nuestro
corazón contrito y nuestro espíritu humilde, como un holocausto de carneros y toros
o una multitud de corderos cebados. Que éste sea hoy nuestro sacrificio, y que sea
agradable en tu presencia: porque los que en ti confían no quedan defraudados.
Ahora te seguimos de todo corazón, te respetamos y buscamos tu rostro, no nos
defraudes, Señor. Trátanos según tu piedad, según tu gran misericordia. Líbranos
con tu poder maravilloso y da gloria a tu nombre, Señor.” Palabra de Dios.
Salmo Responsorial 24.
R/ “Señor, recuerda tu misericordia”
Señor, enséñame tus caminos, instrúyeme en tus sendas: haz que camine
con lealtad; enséñame, porque tú eres mi Dios y salvador. R/.
Recuerda, Señor, que tu ternura y tu misericordia son eternas; acuérdate
de mí con misericordia, por tu bondad, Señor. R/.
El Señor es bueno y es recto, y enseña el camino a los pecadores; hace
caminar a los humildes con rectitud, enseña su camino a los humildes. R/
Lectura del santo evangelio según san Mateo 18,21-35
En aquel tiempo, se adelantó Pedro y preguntó a Jesús: “Señor, si mi
hermano me ofende, ¿cuántas veces le tengo que perdonar? ¿Hasta siete
veces?” Jesús le contesta: “No te digo hasta siete veces, sino hasta setenta
veces siete. Y les propuso esta parábola: ” Se parece el reino de los cielos
a un rey que quiso ajustar las cuentas con sus empleados. Al empezar a
ajustarlas, le presentaron uno que debía diez mil talentos. Como no tenía con
qué pagar, el señor mandó que lo vendieran a él con su mujer y sus hijos y
todas sus posesiones, y que pagara así. El empleado, arrojándose a sus pies,
le suplicaba diciendo: “Ten paciencia conmigo, y te lo pagaré todo.” El señor
tuvo lástima de aquel empleado y lo dejó marchar, perdonándole la deuda.
Pero, al salir, el empleado aquel encontró a uno de sus compañeros que le
debía cien denarios y, agarrándolo, lo estrangulaba, diciendo: “Págame lo que
me debes.” El compañero, arrojándose a sus pies, le rogaba, diciendo: “Ten
paciencia conmigo, y te lo pagaré.” Pero él se negó y fue y lo metió en la cárcel
hasta que pagara lo que debía. Sus compañeros, al ver lo ocurrido, quedaron
consternados y fueron a contarle a su señor todo lo sucedido. Entonces el señor
lo llamó y le dijo: “¡Siervo malvado! Toda aquella deuda te la perdoné porque
me lo pediste. ¿No debías tú también tener compasión de tu compañero, como
yo tuve compasión de ti?” Y el señor, indignado, lo entregó a los verdugos
hasta que pagara toda la deuda. Lo mismo hará con ustedes mi Padre del
cielo, si cada cual no perdona de corazón a su hermano.” Palabra del Señor.
Meditación
Hoy hemos hecho nuestra esa hermosa oración penitencial que el libro
de Daniel pone en labios de Azarías, uno de los tres jóvenes condenados en
Babilonia al horno de fuego, por no querer adorar a los ídolos falsos y ser
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Plan de Pastoral - Marzo 2015
fieles a su fe. Azarías reconoce el pecado del pueblo: «estamos humillados a
causa de nuestros pecados»; expresa ante Dios el arrepentimiento: «acepta
nuestro corazón arrepentido como un holocausto de carneros y toros»; y el
deseo de cambio: «ahora te seguimos de todo corazón, buscamos tu rostro».
Sobre todo expresa su confianza en la bondad de Dios: «no nos
desampares, no rompas tu alianza, no apartes de nosotros tu misericordia...
trátanos según tu piedad, según tu gran misericordia». Para ello no duda en
buscar la intercesión (la «recomendación») de unas personas que sí habían
gozado de la amistad de Dios: los patriarcas Abrahán, Isaac y Jacob (Israel).
Perdonar siete veces o setenta veces siete exige una explicación. Perdonar
de todo corazón al que ha hecho el mal es un acto interior; siempre y con todos
hay que liberarse del espíritu de venganza: “oren por los que los persiguen”.
Hay también otro perdón en el que se restablecen las relaciones con el
culpable, poniendo en ello toda la confianza que podamos después de tal
experiencia; ese perdón sólo es posible si el otro ha reparado el daño en
la medida de sus posibilidades. Si no se diera esto último, sería resignarse
frente al mal y una negación de la justicia.
Se oye hablar del peso del odio y de rencores que los más diversos
pueblos tienen acumulado uno contra otro, muchas veces debido a
conflictos de religiones; el mundo necesita que le enseñen a perdonar. No
sabemos perdonar porque no conocemos bien todo lo que Dios nos ha
perdonado a nosotros y cuan grande es su misericordia.
La parábola describe la relación de los seres humanos con Dios y con
los demás. La deuda de diez mil monedas de oro, impagable, en todo caso,
simboliza la situación de toda persona a quien Dios perdona por pura gracia.
La otra deuda, la más pequeña, representa la nuestra, la que nosotros sí
podemos perdonar, pero nos negamos a ello. Así nos van a tratar los demás,
y así nos va a tratar Dios. Eso lo decimos y hasta lo pedimos en el Padre
Nuestro. Así se juntan en este tiempo dos realidades importantes: nuestra
pobreza y la generosidad de Dios, nuestro pecado y su amor perdonador.
11
Miércoles
Morado
Lectura del Libro del Deuteronomio 4, 1.5-9
En aquellos días, habló Moisés al pueblo diciendo: “Y ahora, Israel, escucha
las leyes y los preceptos que les enseño a practicar, para que vivan y entren
a tomar posesión de la tierra que les da el Señor, Dios de sus antepasados.
Miren, les he enseñado leyes y preceptos como el Señor mi Dios me
mandó, para que los pongan en práctica en la tierra a la que van a entrar
para tomar posesión de ella. Obsérvenlos y pónganlos en práctica; eso los
hará sabios y sensatos ante los demás pueblos, que al oír todas estas leyes
dirán: “Esta gran nación es ciertamente un pueblo sabio y sensato”.
En efecto, ¿qué nación hay tan grande que tenga dioses tan cercanos a ella,
como lo está el Señor nuestro Dios siempre que lo invocamos? Y ¿qué nación
51
Ayúdense mutuamente
hay tan grande que tenga leyes y preceptos tan justos como esta ley que yo les
promulgo hoy? Pero presta atención y no te olvides de lo que has visto con tus ojos;
recuérdalo mientras vivas y cuéntaselo a tus hijos y a tus nietos”. Palabra de Dios.
Salmo Responsorial: 147
R/ “Glorifica al Señor, Jerusalén.”
Glorifica al Señor, Jerusalén, alaba a tu Dios, Sión. Que él refuerza los
cerrojos de tus puertas y bendice a tus hijos en medio de ti. R.
Él envía a la tierra sus órdenes, veloz va corriendo su mensaje; hace caer
la nieve como lana y esparce la escarcha como ceniza. R.
Manifiesta su palabra a Jacob, sus leyes y decretos a Israel. Con ningún
pueblo actuó así, ni les dio a conocer sus decretos. R.
Lectura del santo evangelio según san Mateo 5, 17-19
En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: “No crean que he venido
a abolir la ley o los profetas; no he venido a abolir, sino a dar plenitud. Les
aseguro que antes pasarán el cielo y la tierra, que deje de cumplirse hasta la
más pequeña letra de la ley.
Por lo tanto, el que descuide uno de estos preceptos menos importantes
y enseñe a hacer lo mismo a los demás, será el menos importante en el
Reino de los cielos. Pero el que los cumpla y enseñe, será grande en el
Reino de los cielos”. Palabra del Señor.
Meditación
Moisés exhorta a las personas de su pueblo a que vivan según la
voluntad de Dios, que cumplan la parte que les toca en la Alianza que han
firmado con Dios: tienen que vivir según sus mandamientos. La Alianza se
concreta en normas de vida.
Se lo dice en tono positivo: ¡qué afortunado es un pueblo como el de
Israel, que tiene un Dios tan cercano, un Dios que le dirige su palabra, que
le orienta, que le enseña su sabiduría! Eso no lo tiene ningún otro pueblo.
Siguiendo esos caminos que Dios le señala, caminos que son en verdad
justos y sensatos, el pueblo llegará a la felicidad y a la vida.
Jesús, en el evangelio de hoy, lo primero que aclara es que no ha venido
a abolir la ley ni los profetas, es decir, los textos proféticos.
Sirve también su afirmación para responder a las falsas acusaciones
que le hacían sus enemigos, respecto a que no cumplía la Ley y enseñaba
a sus apóstoles a hacer lo mismo, (por no hacer las abluciones, por
arrancar espigas en sábado, por comer con pecadores, etc.).
Esto puede entenderse de dos maneras: por una parte, implicando que
no se está cumpliendo la Ley. Porque había muchos, en tiempo de Jesús,
que ya habían encontrado la manera de cumplir la ley sólo de manera
externa, sin fijarse en el sentido que la animaba (por ejemplo cuando
critican que Jesús cure en sábado), y otros habían encontrado la manera
de aprovecharse de las ‘lagunas’ de la ley (por ejemplo los que daban
dizque como ofrenda al templo lo que debían dar a sus padres). Así pues, el
52
Plan de Pastoral - Marzo 2015
‘cumplimiento’ del que habla Jesús puede entenderse como una manera de
cumplir de veras lo que pide la ley, sin escapes, sin vueltas, sin pretextos.
Por otra parte lo de ‘cumplimiento’ podría también entenderse de otro
modo, y de hecho en muchas traducciones se usa ese término: plenitud. En
este sentido, Jesús da a entender que la Ley tal como está establecida aún
no ha alcanzado la plenitud a la que estaba destinada, y que Él va a darle.
Con relación a los profetas, lo de cumplimiento se entiende porque
Jesús cumplió lo que estaba escrito de Él...
12
Jueves
Morado
Lectura del profeta Jeremías 7, 23-28
Así dice el Señor: “Esta fue la orden que di a mi pueblo: Si obedecen mi
voz, yo seré su Dios y ustedes serán mi pueblo; sigan fielmente el camino
que yo les he mandado para que sean felices. Pero ellos no escucharon
ni hicieron caso; siguieron las inclinaciones de su corazón endurecido; me
dieron la espalda y no la cara.
Desde el día en que sus antepasados salieron de Egipto hasta hoy les
envié a mis siervos, los profetas. Pero no me obedecieron ni me hicieron caso,
sino que endurecieron su corazón y fueron peores que sus antepasados.
Cuando les comuniques todo esto, no te escucharán; cuando los llames,
no te responderán Entonces les dirás: Esta es la gente que no escuchó la
voz del Señor su Dios y no quiso escarmentar. La sinceridad se ha perdido,
se la han arrancado de la boca. Palabra de Dios.
Salmo Responsorial: 94
R/ “Ojalá escuchen hoy la voz del Señor: no endurezcan su corazón.”
Vengan, cantemos alegres al Señor, aclamemos a la Roca que nos salva.
Entremos en su presencia dándole gracias, aclamándolo con cantos. R.
Entremos, postrémonos para adorarlo, arrodillémonos ante el Señor, que
nos ha hecho. Porque él es nuestro Dios y nosotros su pueblo, ovejas que él
apacienta. ¡Ojalá escuchen hoy su voz! R.
“No endurezcan su corazón como en Meribá, como el día de Masá en el
desierto: cuando me tentaron sus antepasados y me pusieron a prueba, a
pesar de haber visto mis obras”. R.
Lectura del santo evangelio según san Lucas 11, 14-23
En aquel tiempo, Jesús estaba expulsando un demonio que era mudo.
Cuando salió el demonio, habló el mudo y la gente quedó maravillada.
Pero algunos dijeron: “Expulsa a los demonios con el poder de Satanás, el
príncipe de los demonios”.
Otros, para ponerlo a prueba, le pedían una señal milagrosa. Pero Jesús,
que conocía sus malas intenciones, les dijo: “Todo reino dividido por luchas
internas va a la ruina y se derrumba casa por casa. Si también Satanás
está dividido contra sí mismo, ¿cómo mantendrá su reino? Ustedes dicen
53
Ayúdense mutuamente
que yo expulso los demonios con el poder de Satanás. Ahora bien, si yo
expulso los demonios con el poder de Satanás, sus hijos, ¿con qué poder
los expulsan? Por eso ellos mismos serán sus jueces. Pero si yo expulso los
demonios con el poder de Dios, entonces es que el reino de Dios ha llegado
a ustedes. Cuando un hombre fuerte y bien armado custodia su palacio, sus
bienes están seguros. Pero si viene otro más fuerte que él y lo vence, le quita
las armas en que confiaba y reparte el botín. El que no está conmigo, está
contra mí; y el que no recoge conmigo, desparrama”. Palabra del Señor.
Meditación
En el evangelio de hoy, Jesús presenta la vida cristiana como un
combate. “¡El que no está conmigo, está contra mí!”. A menudo, por
desgracia, somos cristianos “a medias”, en una gran mezcla de actitudes
positivas y negativas. Esto lo reprochaba ya Jeremías a los fieles de su
época, en una queja muy amarga porque no le hacen caso ni le escuchan:
Escuchen mi voz: Yo seré su Dios y ustedes serán mi pueblo.
Es una de las expresiones más perfectas de la “Alianza”. Una pertenencia
recíproca: yo soy tuyo, tú eres mío. En este contexto de amor recíproco
tendrán que ser interpretadas todas las invitaciones del texto a seguir. Ello
hace tanto más graves las tibiezas y los rechazos. Siempre el mismo lazo entre
la “fidelidad” a Dios y la “alegría”. No es para tomarlo en un sentido material.
El que tiene conciencia de haber hecho todo lo que estaba de su parte,
¿no disfruta ya en este mundo de una muy íntima “felicidad” espiritual?
Dios espera “mi rostro”... cara a cara. Como los que se quieren. Y yo
me aparto de Él. Como los que no se quieren. Sin duda, Tú podrías HOY
repetirme esas palabras.
¡Esas cosas no pasaban sólo en los tiempos de Jeremías! Perdónanos.
-No me escucharon. Endurecieron su corazón.
El tema de estar a la escucha, es esencial. “Escuchar”. Escuchar a
Dios. Cuatro veces esta palabra se repite en este Salmo.
Efectivamente, Tú no nos hablas sólo en la misa o en la oración. Hay
una Palabra que debo escuchar durante todas mis jornadas, en mi vida
cotidiana, en mi trabajo, en las personas, en mis encuentros, en mis
responsabilidades, en los acontecimientos. Pero, con frecuencia, no sé
escucharte allí. Concédeme esa atención que me falta, Señor.
El momento y las circunstancias son idóneas para que Jesús deje claro
que ante Él, nadie puede permanecer neutral, o se le acepta y se le sigue
radicalmente, o simplemente no se le acepta.
13
Viernes
Morado
Lectura del libro del profeta Oseas 14, 2-10
Así dice el Señor: “Conviértete, Israel, al Señor tu Dios, pues tu culpa te
ha hecho caer. Busquen las palabras apropiadas y conviértanse al Señor;
54
Plan de Pastoral - Marzo 2015
díganle: “Perdona todos nuestros pecados y acepta el pacto; como ofrenda
te presentamos las palabras de nuestros labios. Asiria no nos salvará, no
volveremos a montar a caballo, y no llamaremos más dios nuestro a la obra
de nuestras manos, pues en ti encuentra compasión el huérfano”.
Yo sanaré su infidelidad, los amaré gratuitamente, pues ha cesado mi ira.
Seré como rocío para Israel; él florecerá como el lirio, y echará raíces como
los árboles del Líbano. Se extenderán sus ramas, tendrá el esplendor del
olivo, y como el del Líbano será su perfume.
El Señor volverá a ser su protector, volverán a cultivar el trigo, florecerán
como la parra, y serán famosos como el vino del Líbano. Efraín no tendrá
ya nada que ver con los ídolos. Yo escucho su plegaria y cuido de él; yo soy
como un ciprés siempre joven, y de mí proceden todos tus frutos. ¿Quién
es tan sabio como para entender esto? ¿Quién tan inteligente como para
comprenderlo? Los caminos del Señor son rectos, por ellos caminan los
inocentes, y en ellos tropiezan los culpables”. Palabra de Dios.
Salmo Responsorial: 80.
R/ “Yo soy el Señor, Dios tuyo: escucha mi voz.”
Oigo un lenguaje desconocido para mí; yo quité la carga de sus hombros,
y sus manos quedaron libres de peso, clamaste en la aflicción y te libré. R.
Te respondí escondido en la tormenta, te puse a prueba junto a las aguas
de Meribá. Escucha, pueblo mío, que doy testimonio contra ti. ¡Ojalá me
escucharas, Israel! R.
No tendrás un dios extraño, no adorarás a un dios extranjero. Yo soy el
Señor, tu Dios, que te saqué de la tierra de Egipto. R.
¡Ojalá me escuchara mi pueblo y siguiera Israel mi camino! Yo alimentaría
a Israel con lo mejor del trigo, lo saciaría con miel silvestre. R.
Lectura del santo evangelio según san Marcos 12, 28-34
En aquel tiempo, uno de los escribas se acercó a Jesús y le preguntó:
“¿Cuál es el primero de todos los mandamientos?” Jesús le respondió:
“El primero es: Escucha, Israel: El Señor, nuestro Dios, es el único Señor;
amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda
tu mente y con todas tus fuerzas. El segundo es éste: Amarás a tu prójimo
como a ti mismo. No hay otro mandamiento mayor que éstos”.
El escriba replicó: “Muy bien, Maestro. Tienes razón, cuando dices que el
Señor es único y no hay otro fuera de él; y que amarlo con todo el corazón,
con todo el entendimiento y con todas las fuerzas, y amar al prójimo como a
uno mismo vale más que todos los holocaustos y sacrificios”. Jesús, viendo
que había hablado sensatamente, le dijo: “No estás lejos del reino de Dios”.
Y nadie se atrevió a hacerle más preguntas. Palabra del Señor.
Meditación
La predicación del profeta Óseas, termina con una especie de liturgia
penitencial. Primero tenemos la invitación a la conversión y la bella plegaria
del Israel convertido. Después se ofrece la respuesta de Yahvé. Es el doble
55
Ayúdense mutuamente
retorno que acaba en aquella intimidad de amor, que a lo largo de todo el
libro del profeta ha sido representada por el amor conyugal.
La conversión, el arrepentimiento es un presupuesto para que el
hombre pueda ser salvado, presupuesto que muy bien recoge el dicho
agustiniano: “Quien te creó sin ti, no te salvará sin ti”. Los judíos han hecho
una dramática experiencia de la lejanía de Dios. Pero ahora Yahvé no
espera que Israel ofrezca dones, sino que se dé él mismo. La fe en el
Dios Salvador significa orientar toda la vida hacia él. Israel ha de estar
dispuesto a asignar un nuevo fin a su vida volviendo de nuevo a Dios
y abandonando lo que antes centraba su existencia: “Perdona del todo
nuestra culpa; acepta el don que te ofrecemos, el fruto de nuestros labios.
Nuestra salvación no está en Asiria ni en montar a caballo, no volveremos
a llamar dios nuestro a las obras de nuestras manos” (vv 3-4). Las armas,
las alianzas, los ídolos, los tres elementos en los cuales se había apoyado,
no serán ya su fuerza.
La respuesta del Señor, en el evangelio de hoy, representa el triunfo del
amor, del cual Oseas era el gran teólogo y poeta. Gracias a la pregunta de
este buen letrado sabemos a cuál de las numerosas normas que tenían los
judíos le daba más importancia Jesús.
La respuesta es clara y resumida: «amarás al Señor tu Dios... amarás a
tu prójimo como a ti mismo: no hay mandamiento mayor que estos».
Los dos mandamientos no se pueden separar. Toda la ley se resume
en una actitud muy positiva: amar. Amar a Dios. Amar a los demás. Esta
vez la medida del amor al prójimo es muy cercana y difícil: «como a ti
mismo».. Pues así quiere Jesús que amemos a los demás. Y en este año
2015, y en este mes de marzo, el amor debe ser sobre todo de solidaridad
con las personas más necesitadas.
14
Sábado
Morado
Lectura del libro del profeta Oseas 6, 1-6
Vamos a volver al Señor: él, que nos despedazó, nos sanará; él, que
nos hirió, nos vendará. En dos días nos sanará; al tercero nos resucitará; y
viviremos delante de él. Esforcémonos por conocer al Señor: su amanecer
es como la aurora, y su sentencia surge como la luz. Bajará sobre nosotros
como lluvia temprana, como lluvia tardía que empapa la tierra. « ¿Qué haré
de ti, Efraín? ¿Qué haré de ti, Judá? Su piedad es como nube mañanera,
como rocío de madrugada que se evapora. Por eso los herí por medio de los
profetas, los condené con la palabra de mi boca. Quiero misericordia, y no
sacrificios; conocimiento de Dios, más que holocaustos.»”. Palabra de Dios.
Salmo Responsorial: 50
R/ “Quiero misericordia y no sacrificios”
Ten piedad de mí, Dios mío, por tu amor, por tu inmensa compasión,
borra mi culpa; lava del todo mi maldad, limpia mi pecado. R.
56
Plan de Pastoral - Marzo 2015
No es el sacrificio lo que te complace, y si ofrezco un holocausto no
lo aceptarías. El sacrificio que Dios quiere es un espíritu arrepentido: un
corazón arrepentido y humillado tú, Dios mío, no lo desprecias. R.
Favorece a Sión por tu bondad, reconstruye las murallas de Jerusalén;
entonces te agradarán los sacrificios prescritos, holocaustos y ofrenda perfecta. R.
Lectura del santo evangelio según san Lucas 18, 9-14
En aquel tiempo, a algunos que, teniéndose por justos, se sentían seguros
de sí mismos y despreciaban a los demás, dijo Jesús esta parábola: «Dos hombres subieron al templo a orar. Uno era fariseo; el otro, un publicano. El fariseo,
erguido, oraba así en su interior: “¡Oh Dios!, te doy gracias, porque no soy
como los demás: ladrones, injustos, adúlteros; ni como ese publicano. Ayuno
dos veces por semana y pago el diezmo de todo lo que tengo.” El publicano,
en cambio, se quedó atrás y no se atrevía ni a levantar los ojos al cielo; sólo se
golpeaba el pecho, diciendo: “¡Oh Dios!, ten compasión de este pecador.” Les
digo que éste bajó a su casa justificado, y aquél no. Porque todo el que se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido.»”. Palabra del Señor.
Meditación
La parábola que expone Jesús, nos presenta dos posiciones opuestas
del hombre frente a Dios, una es simbolizada por el fariseo, “la soberbia”. La
otra posición opuesta, simbolizada por el publicano, es la de una profunda
humildad. Cuando hablamos de una persona soberbia nos referimos a
quienes se presentan ante los demás como quien hace todo bien, grande,
importante y se compara como superior a las demás personas. Así la
persona soberbia se presenta también como orgullosa. Es el caso de
fariseo de la parábola de Jesús: no conoce el amor de Dios y se encuentra
alejado de Él. Presume porque es rico, sabio o famoso, pero ignora la
profundidad de su pobreza y de su ruina, porque no ha conocido a Dios.
La humildad, es una actitud que nace del conocimiento de las propias
limitaciones y que lleva a obrar sin orgullo: La humildad permite reconocer
los propios errores. Así es, como el publicano, que con esta actitud de
profunda humildad, hace un reconocimiento sincero de sus faltas, él se mira
interiormente a sí mismo y lo hace con verdad y honestidad, entonces se
sabe pecador, y por lo mismo, se reconoce necesitado del perdón de Dios.
El sentimiento de humildad del publicano, lo hace abrirse a sí mismo, y
busca apoyarse en la infinita misericordia de Dios, así es como dice: “¡Dios
mío, ten piedad de mí, que soy un pecador!”.
Somos humildes, cuando no nos fijamos en los demás y no los
juzgamos, sino que nos solidarizamos con las personas, sus vidas y sus
necesidades, sean del tipo que sean, ya materiales ya espirituales.
Mantengámonos humildes, Dios nos va a enriquecer con los beneficios
de su gracia y de su amor y así podremos ser solidarios con los demás.
La parábola presenta sólo dos personajes, y por eso se nos hace
incómoda, porque no nos consideramos ni como el fariseo, porque no
somos tan orgullosos, ¿o sí lo somos?; ni tampoco nos consideramos del
57
Ayúdense mutuamente
todo como el publicano, porque a veces sí nos reconocemos pecadores,
pero tampoco tan grandes pecadores.
Bueno en ese relato ponemos un tercer personaje: me pongo a mí
mismo, a mí misma. Soy yo, quien ahora lee la parábola. En mi corazón
no está ni sólo el fariseo ni sólo el publicano, sino sucesivamente uno y
otro, o bien ambos al mismo tiempo. Está el deseo de ser una persona
agradable a Dios, una persona que de vez en cuando se cree superior a
los otros; vienen, a continuación, momentos en los que, por gracia, se me
concede advertir qué lejos estoy de los sentimientos de Cristo, y, entonces,
ya ni siquiera me atrevo a levantar los ojos al cielo. La vida cristiana es,
y más en este tiempo de Cuaresma, una lucha, un combate, una carrera
para conseguir, «los mismos sentimientos de Cristo Jesús», el cual no
vino a aplastarnos con su superioridad, sino a hacerse solidario, pobre y
pequeño, para que nosotros pudiéramos ser justificados.
15
IV Domingo de Cuaresma (Domingo Laetare o de la Alegría)
IV Semana de la Liturgia de las Horas
Rojo o Morado
18º Aniversario de la Ordenación Episcopal de Mons. Francisco
Ozoria Acosta, Obispo de la Diócesis de San Pedro de Macorís.
23º Aniversario de la dedicación de la Catedral de La Vega
Por puro amor solidario de Jesús estamos salvados
Orientaciones: Se puede colocar una cruz en
un estandarte con una luz encendida. Se coloca
el título de este Domingo. Se puede colocar un
listado de buenas obras solidarias que podemos
hacer por los más pobres. Se pueden preparar
papelitos con esas obras y repartirlos para
realizarlos en la Cuaresma. Motivar para la
Colecta del Sacrificio de la próxima Semana.
Monición de entrada
Hermanos y hermanas: Estamos ya en el Cuarto Domingo de nuestro
camino cuaresmal hacia la Pascua en el que deseamos cultivar el amor y
solidaridad como camino de santidad con el lema: “Ayúdense mutuamente”.
Nuestros ojos están fijos en Jesús que nos mostró hasta lo último su amor
solidario hacia nosotros hasta entregar su vida en una cruz y cargar con
nuestros sufrimientos y nuestros pecados.
En El se muestra el amor del Padre, quien siempre nos ama y nos acerca a su
luz, para que tengamos vida y vida eterna en abundancia. Así llenos de ese amor
podemos hacer las buenas obras por los más pobres en los que se muestra nuestra
solidaridad. Recordemos que en este mes se nos pide recordar a las mujeres pobres,
abandonadas y maltratadas y hacerles sentir nuestra solidaridad hacia ellas.
Nos sirven de ejemplo las mujeres consagradas al Señor y a su pueblo
en los Institutos Seculares que viviendo en medio del mundo trabajan por el
Reino de verdad, de justicia, de luz y de paz.
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Plan de Pastoral - Marzo 2015
Con ánimo agradecido al Padre por tanto amor iniciemos nuestra
Celebración acogiendo con nuestro canto a Jesucristo que llega a través de
su ministro y quien realizará su obra salvadora en medio de nosotros.
Primera Lectura: 2 Crónicas 36, 14-16. 19-23
A pesar del pecado de su pueblo que los llevó a la destrucción del país
y su destierro a Babilonia, el Señor sale en ayuda a su pueblo enviándole a
Ciro, que sacará a su pueblo de la opresión. Es decir, que su última palabra
será de perdón y misericordia para los suyos.
Lectura del segundo libro de las Crónicas
En aquellos días, todos los jefes de los sacerdotes y el pueblo multiplicaron
sus infidelidades, según las costumbres abominables de los gentiles, y
mancharon la casa del Señor, que él se había construido en Jerusalén.
El Señor, Dios de sus padres, les envió desde el principio avisos por
medio de sus mensajeros, porque tenía compasión de su pueblo y de su
morada. Pero ellos se burlaron de los mensajeros de Dios, despreciaron
sus palabras y se mofaron de sus profetas, hasta que subió la ira del Señor
contra su pueblo a tal punto que ya no hubo remedio.
Los caldeos incendiaron la casa de Dios y derribaron las murallas de
Jerusalén; pegaron fuego a todos sus palacios y destruyeron todos sus
objetos preciosos. Y a los que escaparon de la espada los llevaron cautivos
a Babilonia, donde fueron esclavos del rey y de sus hijos hasta la llegada
del reino de los persas; para que se cumpliera lo que dijo Dios por boca del
profeta Jeremías: “Hasta que el país haya pagado sus sábados, descansará
todos los días de la desolación, hasta que se cumplan los setenta años.”
En el año primero de Ciro, rey de Persia, en cumplimiento de la palabra del
Señor, por boca de Jeremías, movió el Señor el espíritu de Ciro, rey de Persia, que
mandó publicar de palabra y por escrito en todo su reino: “Así habla Ciro, rey de
Persia: “El Señor, el Dios de los cielos, me ha dado todos los reinos de la tierra. Él
me ha encargado que le edifique una casa en Jerusalén, en Judá. Quien de entre
ustedes pertenezca a su pueblo, ¡sea su Dios con él, y suba!”. Palabra de Dios.
Salmo Responsorial: Sal 136,
R/ Que se me pegue la lengua al paladar si no me acuerdo de ti.
Junto a los canales de Babilonia nos sentamos a llorar con nostalgia de
Sión; en los sauces de sus orillas colgábamos nuestras cítaras.
Allí los que nos deportaron nos invitaban a cantar; nuestros opresores, a
divertirlos: “Cántennos un cantar de Sión”. R/
¡Cómo cantar un cántico del Señor en tierra extranjera! Si me olvido de ti,
Jerusalén, que se me paralice la mano derecha. R/
Que se me pegue la lengua al paladar si no me acuerdo de ti, si no pongo
a Jerusalén en la cumbre mis alegrías. R/
Segunda Lectura: Efesios 2, 4-10
Por pura gracia, es decir, por puro amor Dios ha salido en nuestra ayuda
y nos ha salvado en Jesús, quien cargó solidariamente nuestros pecados.
Nos toca ahora a nosotros hacer lo mismo a favor de todos y de todas dedicándonos a las buenas obras. Escuchemos.
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Ayúdense mutuamente
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Efesios
Hermanos: Dios, rico en misericordia, por el gran amor con que nos amó,
estando nosotros muertos por los pecados, nos ha hecho vivir con Cristo
-por pura gracia están salvados-, nos ha resucitado con Cristo Jesús y nos
ha sentado en el cielo con él.
Así muestra a las edades futuras la inmensa riqueza de su gracia, su bondad
para con nosotros en Cristo Jesús. Porque están salvados por su gracia y
mediante la fe. Y no se debe a ustedes, sino que es un don de Dios; y tampoco
se debe a las obras, para que nadie pueda presumir. Pues somos obra suya.
Nos ha creado en Cristo Jesús, para que nos dediquemos a las buenas obras,
que él nos asignó para que las practicásemos. Palabra de Dios.
Aclamación Jn 3, 16
Tanto amó Dios al mundo que entregó a su Hijo único.
Todo el que cree en él tiene vida eterna.
Evangelio: Juan 3, 14-21
La solidaridad de Dios con la humanidad llegó al extremo al entregar a su
Hijo para que tuviéramos vida levantándolo en la Cruz para que todo el que
crea en El tenga vida eterna y camine en su Luz. Escuchemos.
Lectura del santo evangelio según san Juan 3, 14-21
En aquel tiempo, dijo Jesús a Nicodemo: - “Lo mismo que Moisés elevó
la serpiente en el desierto, así tiene que ser elevado el Hijo del hombre, para
que todo el que cree en él tenga vida eterna. Tanto amó Dios al mundo que
entregó a su Hijo único para que no perezca ninguno de los que creen en él,
sino que tengan vida eterna.
Porque Dios no mandó su Hijo al mundo para juzgar al mundo, sino para
que el mundo se salve por él. El que cree en él no será juzgado; el que no
cree ya está juzgado, porque no ha creído en el nombre del Hijo único de
Dios. El juicio consiste en esto: que la luz vino al mundo, y los hombres
prefirieron la tiniebla a la luz, porque sus obras eran malas.
Pues todo el que obra perversamente detesta la luz y no se acerca a la
luz, para no verse acusado por sus obras.
En cambio, el que realiza la verdad se acerca a la luz, para que se vea
que sus obras están hechas según Dios.” Palabra del Señor.
Oración de los Fieles:
Quien preside: Oremos al Señor, que no desea la muerte del pecador,
sino que se convierta y viva, y pidámosle que tenga misericordia de su
pueblo. A cada petición respondemos: Padre, ayúdanos a realizar las
buenas obras de tu Reino.
1.Por el Papa y los Obispos, por los sacerdotes y diáconos, por los
consagrados y consagradas: para que muestren el amor solidario y
salvador de Jesucristo con sus buenas obras. Oremos.
2.Por los Consagrados y Consagradas en los Institutos Seculares, para
que fieles a su vocación hagan presente este amor del Padre al mundo
trabajando por su Reino. Oremos.
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Plan de Pastoral - Marzo 2015
3.Por quienes gobiernan y tienen el poder en República Dominicana,
para que realicen buenas obras a favor de las mujeres más pobres, las
abandonadas y las maltratadas trabajando por el bien común. Oremos.
4. Por los más pobres que nosotros para que encuentren en nosotros la
solidaridad y el amor misericordioso del Padre por ellos y ellas.
5. Por esta Comunidad aquí reunida para que se nos pegue la lengua al
paladar si no realizamos las buenas obras del Reino. Oremos.
6. Para que el Señor siga llamando a muchos jóvenes, muchachos y
muchachas para la vida Consagrada y para el sacerdocio, y respondan
con valentía y generosidad. Oremos
Quien preside: Dios bueno y fiel, que en tu Hijo elevado sobre la cruz, nos
curas de las heridas del pecado, escucha nuestras oraciones y concédenos
que, renovados en el espíritu, podamos corresponder a los dones de tu
amor realizando las buenas obras solidarias a favor de los más pobres.. Por
Jesucristo, nuestro Señor.
Aviso: Recordemos que el próximo Domingo realizaremos la COLECTA
DEL SACRIFICIO CUARESMAL a favor de los más pobres. Cada sobre
mínimo 100 pesos. Si no los tengo yo lo pido a los de mi casa y vecinos.
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Lunes
Morado
Lectura del libro del profeta Isaías 65, 17-21
Así dice el Señor: “Miren, yo voy a crear un cielo nuevo y una tierra nueva; lo
pasado no se recordará ni se volverá a pensar a ello, sino que habrá alegría y
gozo eterno por lo que voy a crear. Pues convertiré en gozo a Jerusalén y a sus
habitantes en alegría; me gozaré por Jerusalén y me alegraré por mi pueblo, y
ya no se oirán en ella llantos ni lamentos. Ya no habrá allí niños que mueran al
nacer ni ancianos que no completen sus años, pues será joven quien muera a
los cien años, y a quien no llegue a ellos se le tendrá por maldito. Construirán
casas y vivirán en ellas, plantarán viñas y comerán sus frutos”. Palabra de Dios.
Salmo Responsorial: 29
R/ “Te ensalzaré, Señor, porque me has librado”
Yo te alabo, Señor, porque me has librado, no has dejado que mis
enemigos se rían de mí. Tú, Señor, me libraste del abismo, me reanimaste
cuando estaba a punto de morir. R.
Canten al Señor, fieles suyos, den gracias a su santo nombre. Porque su
enojo dura un instante, pero su bondad, toda la vida: por la tarde nos domina
el llanto, por la mañana todo es alegría. R.
Escucha, Señor, ten compasión de mí, Señor, ven en mi ayuda. Tú
cambiaste mi luto en danzas. Señor, Dios mío, te daré gracias por siempre. R.
Lectura del santo evangelio según san Juan 4, 43-54
En aquel tiempo salió Jesús de Samaria y continuó su viaje hacia Galilea.
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Ayúdense mutuamente
El mismo Jesús había declarado que un profeta no es bien considerado en
su propia tierra.
Cuando llegó a Galilea, los galileos lo recibieron bien, pues también ellos
habían estado en Jerusalén por la fiesta de la pascua y habían visto todo lo
que Jesús hizo en aquella ocasión.
Jesús visitó de nuevo Caná de Galilea, donde había convertido el agua
en vino. Había allí un funcionario del rey, que tenía un hijo enfermo en
Cafarnaúm. Cuando se enteró de que Jesús venía de Judea a Galilea, salió
a su encuentro para suplicarle que fuera a su casa y sanara a su hijo, que
estaba a punto de morir. Jesús le dijo: “Si no ven signos y prodigios son
incapaces de creer”. Pero el funcionario insistía: “Señor, ven pronto, antes
de que muera mi hijo”. Jesús le dijo: “Regresa a tu casa; tu hijo ya está bien”.
El hombre creyó en lo que Jesús le había dicho, y se fue. Cuando regresa­
ba a su casa, le salieron al encuentro sus criados para darle la noticia de que
su hijo estaba bien. Entonces él les preguntó a qué hora había comenzado la
mejoría. Los criados le dijeron: “Ayer, a la una de la tarde, se le quitó la fiebre”.
El padre comprobó que la mejoría de su hijo había comenzado en el
mismo momento en que Jesús le había dicho: “Tu hijo está curado”; y
creyeron en Jesús él y todos los suyos. Este segundo signo lo hizo Jesús al
llegar de Judea a Galilea. Palabra del Señor.
Meditación
La Cuaresma es un tiempo para el perdón; por tanto es un buen tiempo
para el Sacramento de la Reconciliación. Ya falta poco para la Semana
Santa y sería muy bueno buscar una oportunidad para confesarse. El
Sacramento de la Reconciliación es un gran regalo para nosotros, pero
hay mucha gente que no lo reconoce como tal. Mis queridos hermanos y
hermanas, aprovechemos de este gran don que Jesús mismo nos dio, Él
perdona todas nuestras ofensas. ¡IMAGINATE! a través de su entrega en la
cruz, Jesús perdona nuestros pecados. Este sacramento es un encuentro
con el Dios de Amor que nos invita a experimentar la profundidad de su
misericordia. Escucha a lo que dice en la primera lectura de hoy: “Voy
a crear un cielo nuevo y una tierra nueva; ya no recordaré lo pasado, lo
olvidaré de corazón.” El sacramento de la reconciliación es para hacernos
nuevos y para que hagamos una tierra nueva.
Estas palabras de la primera lectura recuerdan una historia de Santa
Margarita María que tiene que ver con el Sacramento de la Reconciliación.
Margarita era una monja que vivió en el siglo 17 tenía unas visiones y
encuentros personales con Jesús; se lo contó a su superiora que no la creyó
y le mandó a confesarse. El confesor no la creyó y le puso como penitencia
que la próxima vez que se le apareciera Jesús, le preguntara cuál había
sido el mayor pecado que él, el confesor, había cometido. Cuando Margarita
María fue a confesarse la siguiente ocasión, el confesor le preguntó si había
tenido ese encuentro con Jesús; al responderle afirmativamente, el confesor
le preguntó si Jesús le había dicho cuál era su mayor pecado. Margarita
le contestó que Jesús le había dicho: “Como ya se lo confesó, ya me he
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Plan de Pastoral - Marzo 2015
olvidado del pecado”. Y esto hizo que el confesor creyera en esas apariciones
de Jesús. Eso nos ha dicho la primera lectura: “Ya no recordaré lo pasado.”
Participemos, celebremos el sacramento de la reconciliación para que
Dios no se acuerde de nuestro pasado, de nuestros pecados, y para que
nos conceda su fuerza, su gracia para cambiar nuestra vida y no volver a
repetir los mismos pecados del pasado.
17
Martes
Morado
Lectura del libro del profeta Ezequiel 47, 1-9.12
En aquellos tiempos, el ángel me llevó a la entrada del templo, y vi que
debajo del umbral, por el lado oriental hacia el que mira la fachada del templo,
brotaba una corriente de agua. El agua descendía por el lado derecho del
templo hasta la parte sur del altar. Me hizo salir por el pórtico norte y dar la
vuelta por fuera hasta el pórtico exterior que mira hacia oriente, y vi que las
aguas manaban desde el costado derecho.
El hombre salió en dirección este con un cordel de medir en la mano,
midió quinientos metros y me hizo atravesar el agua, que me llegaba hasta
los tobillos; midió otros quinientos metros y me hizo atravesar el agua, que
me llegaba hasta las rodillas; midió todavía otros quinientos metros y me
hizo atravesar al agua, que me llegaba hasta la cintura; midió por fin otros
quinientos metros y la corriente de agua era ya un torrente que no pude
atravesar, pues había crecido al punto que sólo a nado se podía atravesar.
Entonces me dijo: “¿Has visto, hijo de hombre?” Después me ordenó
que regresara a la orilla del torrente, y al regresar vi que junto al torrente
en las dos orillas había muchos árboles. Y me dijo: “Estas aguas fluyen
hacia oriente, bajan al Arabá y desembocan en el mar Muerto, cuyas aguas
quedarán saneadas. Por donde pase este torrente, todo ser viviente que
en él se mueva vivirá. Habrá abundancia de peces, porque las aguas del
mar Muerto quedarán saneadas cuando llegue este torrente. Junto a las
dos orillas del torrente cre­cerá toda clase de árboles frutales; sus hojas no
se marchitarán ni sus frutos se acabarán. Cada mes darán frutos nuevos,
porque las aguas que los riegan manan del santuario. Sus frutos servirán de
alimento y su follaje de medicina”. Palabra de Dios.
Salmo Responsorial: 45
R/ “El Señor de los ejércitos está con nosotros, nuestro alcázar
es el Dios de Jacob.”
Dios es nuestro refugio y fortaleza, nuestro auxilio oportuno en el peligro. Por eso
no tememos, aunque tiemble la tierra y las montañas se desplomen en el mar. R.
Los canales de un río alegran la ciudad de Dios, la más santa morada del
Altísimo. Dios está en medio de ella, no puede ser destruida; Dios la socorre
al despuntar la aurora. R.
El Señor todopoderoso está con nosotros, nuestra defensa es el Dios de
Jacob. Vengan a ver las obras del Señor, los prodigios que hace en la tierra. R.
63
Ayúdense mutuamente
Lectura del santo evangelio según san Juan 5, 1-3a. 5-16
Era un día de fiesta para los judíos cuando Jesús subió a Jerusalén.
Hay en Jerusalén, cerca de la puerta llamada de las Ovejas, una piscina
que llaman en hebreo Betesda, con cinco pórticos. En estos pórticos había
muchos enfermos recostados en el suelo: ciegos, cojos y paralíticos. Había
entre ellos un hombre que llevaba treinta y ocho años inválido. Jesús, al
verlo allí tendido, y sabiendo que llevaba mucho tiempo, le preguntó:
“¿Quieres quedar sano?” Le respondió el enfermo: “Señor, no tengo a nadie
que me ayude a entrar en la piscina cuando se mueve el agua. Mientras
trato de llegar yo, otro se me ha adelantado”. Jesús le dijo: “Levántate, toma
tu camilla y camina”. Al momento el hombre quedó sano, tomó su camilla
y comenzó a caminar. Aquel día era sábado. Por eso los judíos le dijeron
al que había sido sanado: “Hoy es sábado y no te está permitido llevar tu
camilla”. Pero él contestó: “El que me sanó me dijo: “Toma tu camilla y
camina”“. Ellos le preguntaron: “¿Quién es ese hombre que te dijo: “Toma tu
camilla y camina?” “Pero él no conocía ni sabía quién lo había sanado, pues
Jesús había desaparecido entre la muchedumbre que se había reunido allí.
Más tarde, Jesús se encontró con él en el templo y le dijo: “Has sido sanado,
no vuelvas a pecar más, pues podría sucederte algo peor”.
El hombre fue a informar a los judíos que era Jesús quien lo había sanado.
Jesús hacía obras como ésta en sábado; por eso lo perseguían los judíos.
Palabra del Señor.
Meditación
El evangelio de hoy nos sitúa en una piscina, la piscina de la misericordia
de Dios en la cual se curaban algunos enfermos. Allí había un paralítico
que llevaba mucho tiempo enfermo, 38 años.
Lo primero que resalta el evangelista es que Jesús lo miró, es decir, se
fijó en él y se interesó por su situación, por eso se enteró que llevaba 38
años allí. El primer paso de la solidaridad es mirar la situación de quienes
están a nuestro lado, y después interesarse por esa situación.
A continuación Jesús habla con el enfermo, le pregunta si quiere
curarse. El paralítico le presenta su situación: no tiene a nadie que le
ayude, está solo.
No, no está solo, porque allí está Jesús. Como en nuestras vidas,
muchas veces pensamos que estamos abandonados o abandonadas, y
no es así, porque el Señor siempre está cerca de nosotros.
Y la Palabra de Cristo es sanadora: “Levántate, toma tu camilla y
camina”. “Levántate”, es decir, ¡estás curado!
“Toma tu camilla”, o sea, eres libre, puedes valerte por ti mismo.
“Camina”, es decir, ponte en camino, empieza a vivir de nuevo.
Y así debe ser nuestra solidaridad ante las necesidades de los demás,
curar, hacer valerse por sí mismos y ayudar a vivir una vida mejor.
La primera lectura nos ha hablado de lo mismo: el agua purificadora. En
el evangelio, el agua de la piscina es superada en eficacia por la Palaba de
Cristo, por su presencia.
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Plan de Pastoral - Marzo 2015
El agua descrita por el profeta Ezequiel también es purificadora y da
vida por cualquier lugar que pasa. Y esa agua sale del templo.
Esa agua es el mismo Dios, es su gracia que transforma y purifica, y
esa agua debemos ser todos nosotros y nosotras que al salir del templo
debemos purificar a las demás personas, ayudándolas a salir de su
postración, de su pecado y de su pobreza. Como Jesús, nos debemos
solidarizar con los más necesitados para darles vida nueva y salud.
¿En qué forma me acerco a las personas necesitadas y me intereso
por ayudarlas? ¿Durante esta cuaresma cómo ha sido mi camino de
conversión y solidaridad?
18
Miércoles
Morado
54º Aniversario de la Ordenación Presbiteral de Nicolás de Jesús
Cardenal López Rodríguez , Arzobispo Metropolitano de Santo
Domingo y Mons. Jesús Maria de Jesús Moya, Obispo Emérito de
San Francisco de Macorís
Lectura del libro del profeta Isaías 49, 8-15
Así dice el Señor: “Te respondo cuando me necesitas, te auxilio el día en
que te salvo, pues te formé y te constituí mediador del pueblo para restaurar
el país, para repartir las tierras devastadas, para decir a los cautivos:
“¡Salgan!” a los que están en tinieblas: “¡Déjense ver!” A lo largo de los
caminos pastarán, en todos los montes resecos tendrán pastos. No pasarán
hambre ni sed, el viento sofocante y el sol no les hará daño, pues el que se
compadece de ellos los guiará, y los conducirá hacia manantiales de agua.
Convertiré en caminos mis montañas y se nivelarán mis senderos.
¡Miren! Vienen todos de lejos, unos del norte y del poniente, otros de la
región de Sinín. Griten, cielos, de gozo; salta, tierra, de alegría; montañas,
rompan en aclamaciones, que el Señor consuela a su pueblo, se apiada de
sus pobres. Sión decía: Me ha abandonado Dios, el Señor me ha olvidado”.
¿Acaso olvida una madre a su niño de pecho, y deja de querer al hijo de sus
entrañas? Pues aunque ella se olvide, yo no te olvidaré”. Palabra de Dios.
Salmo Responsorial: 144
R/ “El Señor es clemente y misericordioso.”
El Señor es clemente y misericordioso, paciente y rico en amor. El Señor
es bondadoso con todos, a todas sus obras se extiende su ternura. R.
El Señor es fiel a todas sus palabras, leal en todas sus acciones. El Señor
sostiene a todos los que caen y levanta a los que desfallecen. R.
El Señor es fiel en todo lo que hace, leal en todas sus acciones. El Señor
está cerca de los que lo invocan, de todos los que lo invocan sinceramente. R.
Lectura del santo evangelio según san Juan 5, 17-30
En aquel tiempo dijo Jesús a los judíos: “Mi Padre no cesa nunca de
trabajar; por eso yo trabajo también en todo tiempo”. Esta afirmación provocó
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Ayúdense mutuamente
en los judíos un mayor deseo de matarlo, porque no sólo no respetaba el
sábado, sino además decía que Dios era su propio Padre, y se hacía igual a
Dios. Jesús continuó diciendo: “Yo les aseguro que el Hijo no puede hacer
nada por su cuenta; él hace únicamente lo que ve hacer al Padre; lo que hace
el Padre, eso también hace el Hijo. Pues el Padre ama al Hijo y le manifiesta
todas sus obras; y le manifestará todavía cosas mayores, de modo que
ustedes mismos quedarán maravillados. Porque, así como el Padre resucita
a los muertos, dándoles la vida, así también el Hijo da la vida a los que quiere.
El Padre no juzga a nadie, sino que le ha dado al Hijo todo el poder de juzgar.
Y quiere que todos den al Hijo el mismo honor que dan al Padre. El que no
honra al Hijo, tampoco honra al Padre que lo envió. Yo les aseguro que quien
acepta lo que yo digo y cree en el que me envió, tiene la vida eterna; no
sufrirá un juicio de condenación, sino que ha pasado de la muerte a la vida.
Les aseguro que está llegando la hora, mejor aún, ha llegado ya, en que
los muertos oirán la voz del Hijo de Dios, y todos los que la oigan, vivirán.
Pues así como el Padre tiene el poder de dar la vida, ha dado al Hijo ese
mismo poder. Y le ha dado también autoridad para juzgar, porque es el Hijo
del hombre. No se admiren de lo que les estoy diciendo, porque llegará el
momento en que todos los muertos oirán su voz, y saldrán de los sepulcros.
Los que hicieron el bien, resucitarán para la vida eterna; pero los que hicieron
el mal, resucitarán para su condenación.
Yo no puedo hacer nada por mi cuenta. Juzgo según lo que Dios me dice,
y mi juicio es justo, porque no pretendo actuar según mi voluntad, sino que
cumplo la voluntad del que me envió”. Palabra del Señor.
Meditación
El texto del evangelio de hoy es continuación del leído ayer. Y el
contenido también es para aclarar lo del milagro de la curación del
paralítico.
Recordemos que persiguen a Jesús y quieren matarlo. Jesús no tiene
miedo, no se calla, al contrario, con lo que dice hoy le van a perseguir más.
Y es que si el milagro está hecho en sábado, y por tanto no podía hacerlo
Jesús, ni mandar al curado a llevar su camilla; ahora dice que Dios está
trabajando siempre, y por eso Él debe trabajar todo el tiempo. Para Cristo
no hay tiempo de descanso como no lo hay para el Padre Dios.
Con estas palabras está diciendo que es igual que el Padre y que se
puede trabajar el sábado, dos motivos para matarle. Pero no tiene miedo
de decir la verdad y de actuarla. Jesús es Dios, es nuestro Dios, debemos
aceptarlo como tal en nuestras vidas y tener un encuentro personal con
Él, como Él lo tiene con el Padre. Aceptemos a Cristo en nuestras vidas
y aceptémoslo sin condiciones. Él nos ayudará a perder el miedo para
defender la fe y defender a las personas.
La escena del evangelio, en la que Jesús pierde el miedo y dice lo que
no esperaban los fariseos, nos lleva a plantearnos muchas experiencias
personales cuando una palabra, un comportamiento, una iniciativa nos
rompe los esquemas y nos desplaza. Salir del universo que conocemos
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Plan de Pastoral - Marzo 2015
y donde nos sentimos seguros (aunque no salvados, pues preferimos la
seguridad a la salvación, a la libertad) hace que nos llenemos de alarma y
de miedo. Nos acostumbramos a vivir en la rutina, que llegamos a pensar
que no hay otro modo posible de vida.
Hay personas que funcionan o funcionamos así también hoy. Sus teorías
y sus principios son su alimento exclusivo. Mientras, Dios está trabajando
y encendiendo luz y fuego para desenmascarar la tiniebla que nos rodea.
La palabra de Dios pone el dedo donde nosotros no nos atrevemos a tocar.
Dios habla al corazón. Dios cuestiona los pilares en los que nos apoyamos.
Consciente o inconscientemente las personas nos ponemos unas reglas de
convivencia que consisten en admitir «intocables» en nuestra existencia.
Personas que dan «por supuesto» que hay cosas en su vida «que no se
tocan»; relaciones de pareja o entre amigos que dan «por supuesto» que
«hay temas que no se tocan» para poder seguir manteniendo la relación.
De esta manera funcionan entre nosotros muchas cosas: a base de no
tocar los temas delicados y peligrosos. Así no funciona Jesús, enfrenta el
tema que debe enfrentar, aunque le lleve a la persecución y a la muerte.
Conectando con la primera lectura, Jesús es ese que va a venir a soltar
las cadenas de los cautivos y a iluminar las tinieblas; él atrae a gente de todas
partes hacia Dios. Nosotros, sus seguidores somos sus continuadores; nos
corresponde hacer presente su misión, seguir liberando a tantos cautivos
de nuestro tiempo, cautivos de tantas cosas y dependencias.
19
Solemnidad de San José, Esposo de la Virgen María
Jueves
Blanco
2º Aniversario del inicio del ministerio del Papa Francisco
Lectura del libro segundo de Samuel 7,4-5a.12-14a.16
En aquellos días, recibió Natán la siguiente palabra del Señor: “Ve y dile a
mi siervo David: “Esto dice el Señor: Cuando tus días se hayan cumplido y te
acuestes con tus padres, afirmaré después de ti la descendencia que saldrá
de tus entrañas, y consolidaré su realeza. Él construirá una casa para mi
nombre, y yo consolidaré el trono de su realeza para siempre. Yo seré para
él padre, y él será para mí hijo. Tu casa y tu reino durarán por siempre en mi
presencia; tu trono permanecerá por siempre.” Palabra de Dios.
Salmo Responsorial: 88
R/ “Su linaje será perpetuo”
Cantaré eternamente las misericordias del Señor, / anunciaré tu fidelidad
por todas las edades. / Porque dije: “Tu misericordia es un edificio eterno, /
más que el cielo has afianzado tu fidelidad.” R.
Sellé una alianza con mi elegido, / jurando a David, mi siervo: / “Te fundaré
un linaje perpetuo, / edificaré tu trono para todas las edades.” R.
Él me invocará: “Tú eres mi padre, / mi Dios, mi Roca salvadora.” / Le
mantendré eternamente mi favor, / y mi alianza con él será estable. R.
67
Ayúdense mutuamente
Lectura de la carta de san Pablo a los Romanos 4,13.16-18.22
Hermanos: No fue la observancia de la Ley, sino la justificación obtenida por
la fe, la que obtuvo para Abrahán y su descendencia la promesa de heredar el
mundo. Por eso, como todo depende de la fe, todo es gracia; así, la promesa
está asegurada para toda la descendencia, no solamente para la descendencia
legal, sino también para la que nace de la fe de Abrahán, que es padre de todos
nosotros. Así, dice la Escritura: “Te hago padre de muchos pueblos.”
Al encontrarse con el Dios que da vida a los muertos y llama a la existencia
lo que no existe, Abrahán creyó. Apoyado en la esperanza, creyó, contra
toda esperanza, que llegaría a ser padre de muchas naciones, según lo
que se le había dicho: “Así será tu descendencia.” Por lo cual le valió la
justificación. Palabra de Dios.
Lectura del santo evangelio según san Mateo 1,16.18-21.24ª
Jacob engendró a José, el esposo de María, de la cual nació Jesús,
llamado Cristo.
El nacimiento de Jesucristo fue de esta manera: María, su madre, estaba
desposada con José y, antes de vivir juntos, resultó que ella esperaba un
hijo por obra del Espíritu Santo. José, su esposo, que era justo y no quería
denunciarla, decidió repudiarla en secreto. Pero, apenas había tomado esta
resolución, se le apareció en sueños un ángel del Señor que le dijo: “José, hijo
de David, no tengas reparo en llevarte a María, tu mujer, porque la criatura
que hay en ella viene del Espíritu Santo. Dará a luz un hijo, y tú le pondrás por
nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de los pecados.” Cuando José se
despertó, hizo lo que le había mandado el ángel del Señor. Palabra del Señor.
Meditación
Hoy, celebramos la Solemnidad de San José. José es el hombre
escogido por Dios para cuidar de su propio Hijo y de la Virgen María. San
José tiene el nombre del famoso soñador –José, el hijo de Jacob– que
fue escogido por Dios para proveer a su pueblo en su necesidad, (Gn 3750). Entonces, San José tiene la misma responsabilidad, de proveer por
la familia de Dios, como cualquier hombre de familia y como su famoso
antepasado. Y como el famoso José del Antiguo Testamento, Dios se
comunicaba con éste José a través de sus sueños. María no compartió el
mensaje que recibió del ángel del Señor, ella dejó todo en las manos de
Dios. María sabía que José era un hombre de oración, y que el mismo Dios
hablaría con él. Fue así que San José llegó a entender todo lo que Dios
quería de él. Justamente, en el Evangelio de hoy, se escucha la historia
de cómo el ángel del Señor le habla a José en su sueño, informándole de
su misión en el plan de Dios: “José, hijo de David, no dudes en recibir en
tu casa a María, tu esposa, porque ella ha concebido por obra del Espíritu
Santo. Dará a luz un hijo y tú le pondrás el nombre de Jesús.” Primero, José
recibe la afirmación que Dios es parte de todo lo que está pasando – y que
no tiene que dudar – y a la vez le dice: “TU LE PONDRÁS EL NOMBRE DE
JESÚS.” Un hombre que tiene el derecho de ponerle nombre a un bebé, es
68
Plan de Pastoral - Marzo 2015
su padre. Entonces, el mismo Dios quiere que la gente vea a Jesús como
el hijo de José. Eso quiere decir que José es un hombre que vive como
Dios quiere… y que Dios puso su confianza en él.
Hoy, celebramos a San José como el Esposo de María, que no solamente
tuvo que mantener económicamente a Jesús y a María, sino al hombre que
tenía que estar presente brindándoles amor, apoyo, ternura, buen ejemplo,
todo lo que es parte de ser un buen esposo y papá; y así, José junto con
María, la madre, pudo darle a Jesús una buena formación, tanto en la fe
como en la vida. Fue a las rodillas de San José que Jesús aprendió a
ser un hombre de Dios. Y María, como mujer, supo que podía confiar en
José. Qué bueno sería si los hombres de nuestra sociedad tomaran a San
José, como patrón, para saber cómo ser buenos esposos y padres. Lo
primero que tendrían que hacer para seguir el ejemplo de José es tener
una relación profunda con Dios a través de la oración. Esto es lo que todos
nosotros debemos de aprender de San José –no solamente los hombres–
la importancia de la oración para saber lo que Dios quiere de nosotros. San
José, Esposo de la Santísima Virgen María, ¡ruega por nosotros!
20
Viernes
Morado
Lectura del libro de la Sabiduría 2, 1a.12-22
Los malvados reflexionando equivocadamente dicen: “Pongamos trampas al
justo, porque nos resulta insoportable y se opone a nuestra forma de actuar; nos
echa en cara que no hemos cumplido la ley y nos reprocha las faltas contra la
educación recibida; presume de conocer a Dios y se proclama a sí mismo hijo del
Señor. Es un reproche contra nuestros pensamientos, y sólo verlo nos molesta.
Pues lleva una vida distinta de los demás y va por caminos muy diferentes;
nos considera moneda falsa, se aparta de nosotros como si fuéramos impu­ros;
proclama dichosa la suerte de los justos y presume de tener a Dios por Padre.
Veamos si es verdad lo que dice, comprobemos cómo le va al final. Porque si el
justo es hijo de Dios, él lo asistirá y lo librará de las manos de sus adversarios.
Probémoslo con ofensas y tortura: así veremos hasta dónde llega su paciencia
y comprobaremos su resistencia. Condenémoslo a una muerte deshonrosa,
pues, según dice, Dios lo librará”. Así piensan, pero se equivocan, pues los
ciega su maldad. Ignoran los secretos de Dios, no con­fían en el premio de la
virtud, ni creen en la recompensa de los intachables. Palabra de Dios.
Salmo Responsorial: 33
R/ “El Señor está cerca de los atribulados.”
El Señor se enfrenta con los malhechores, para borrar de la tierra su recuer­
do. Cuando uno grita, el señor lo escucha y lo libra de todas sus angustias. R.
El Señor está cerca de los que sufren y salva a los que están desconsolados.
Muchas son las desgracias del justo, pero de todas lo libra el Señor. R.
El cuida de todos sus huesos, ni uno solo se romperá. Porque el Señor
redime a sus siervos, y no serán castigados los que se refugian en él. R.
69
Ayúdense mutuamente
Lectura del santo evangelio según san Juan 7, 1-2.10.25-30
Después de algún tiempo, Jesús andaba por Galilea. Evitaba estar en
Judea, porque los judíos buscaban la ocasión para matarlo. Ya estaba cerca
la fiesta judía de las tiendas de campaña. Más tarde, cuando sus parientes
subieron a la fiesta, subió también Jesús, pero en privado, no públicamente.
Ante esto, algunos de los que vivían en Jerusalén se preguntaban: “¿No es
éste el hombre al que quieren matar? Resulta que está hablando en público y
nadie le dice ni una palabra. ¿Es que habrán reconocido nuestros jefes que es
en realidad el Mesías? Pero, por otra parte, cuando aparezca el Mesías, nadie
sabrá de dónde viene; y éste sabe­mos de dónde es”. Al oír estos comentarios,
Jesús, que estaba enseñando en el templo, levantó la voz y afirmó: “¿De
manera que me conocen y saben de dónde soy? Sin embargo, yo no he venido
por mi propia cuenta, sino que he sido enviado por el que dice la verdad, y a
quien ustedes no conocen. Yo sí lo conozco, porque vengo de él y es él quien
me envió”. Intentaron entonces dete­nerlo, pero nadie se atrevió a hacerlo,
porque todavía no había llegado su hora. Palabra del Señor.
Meditación
La lectura del libro de la Sabiduría es muy actual, bueno, debería ser
muy actual: los verdaderos creyentes tenemos la obligación de vivir y
demostrar la fe y si lo hacemos, esto nos lleva a tener enemigos, gente
que nos critique, personas que no estén de acuerdo con nuestro vivir. Si
queremos estar bien con todo el mundo, estar a la moda, hacer lo que se
hace… no estaremos viviendo bien la fe.
Los hombres y mujeres que afirman conocer un poco a Dios y vivir
consistentemente como hijos e hijas, resultan bichos raros y aburridos para
los no creyentes, así como para los que toman su religión sólo como una
serie de obligaciones externas y de ritos religiosos, y esto sucede en nuestra
República Dominicana. No hay lugar para cristianos convencidos, que van
contra corriente, ya que su modo de vida altera las formas establecidas de la
sociedad. Ello irrita a los no creyentes y éstos quieren probar la fe de los que
ponen su confianza en Dios. Uno tiene que acomodarse, o si no… La persona
que expresa sus quejas en el Libro de la Sabiduría era una de esas personas
molestas y que suelen aburrir. Jesús también lo fue. ¿Y nosotros, qué?
En el evangelio de hoy vemos a Jesús buscado y perseguido a muerte por lo
judíos, “no puede andar libremente por Judea”. Más tarde, sube en peregrinación
hacia Jerusalén: “Solamente después de que sus hermanos subieron a la fiesta,
entonces Él también subió, no manifestándose, sino de incógnito”.
Cuando reconocen a Jesús en medio de ellos, se arma una discusión
sobre si es el Mesías o no lo es. En definitiva, el tema de hoy nos lleva a
plantearnos quién es Jesús para nosotros y qué supone nuestra fe en Él.
¿Molestamos los católicos en nuestro mundo y sociedad? ¿Nos critican por
nuestra manera de vivir? Porque de criticarnos algo en este tiempo, será por el
vivir, por lo que hacemos, no por lo que decimos ni porque vamos o no vamos a
la Iglesia. Y hoy, a nuestra sociedad, al mundo en general, le molestan las personas que piensan, que tienen conciencia de la realidad y tratan de cambiarla.
70
Plan de Pastoral - Marzo 2015
Hoy debemos ser solidarios con los más necesitados y necesitadas, pero no
solidarios sólo de asistencialismo, es decir de ayudas puntuales, sino solidarios
y solidarias con la situación de tantas personas marginadas, necesitadas, sin
lo necesario para el desarrollo personal y familiar. Seguro que si nos metemos
en esa solidaridad, vamos a molestar. Pero no debemos tener miedo, porque
Cristo está de nuestra parte y con nosotros, como Él lo está con el Padre.
El Padre Dios, envió a Cristo a cambiar el mundo; Cristo nos ha elegido
a nosotros y nosotras para continuar su misión.
21
Sábado
Morado
Lectura del libro del profeta Jeremías 11, 18-20
En aquel tiempo dijo Jeremías: “El Señor todopoderoso me lo hizo saber
y comprendí. Entonces me hiciste descubrir sus intenciones. Yo era como un
cordero manso llevado al matadero; no sabía lo que conspiraban contra mí.
“¡Destruyamos el árbol cuando aún tiene savia; arranquémoslo de la tierra
de los vivos, y que nadie se acuerde más de su nombre!”
Pero tú, Señor todopoderoso, juzgas rectamente, y examinas el interior
del hombre y sus intenciones; haz que yo pueda ver tu venganza sobre ellos,
porque a ti he confiado mi causa”. Palabra de Dios.
Salmo Responsorial: 7
R/ “Señor, Dios Mío, a ti me acojo.”
Señor, Dios mío, en ti busco refugio, sálvame de mis perseguidores y
líbrame; no sea que me destrocen como leones, de cuyas fauces nadie
puede escapar. R.
Júzgame, Señor, según mi rectitud, según la inocencia que hay en mí.
Que termine la maldad de los malvados; da tu apoyo al inocente, tú que
examinas el corazón y las entrañas, tú que eres un Dios justo. R.
Dios es mi escudo, él salva a los honrados. Dios es un juez justo, siempre
alerta para el castigo. R.
Lectura del santo evangelio según san Juan 7, 40-53
En aquel tiempo, algunos de los que habían escuchado a Jesús
comenzaron a decir: “Seguro que éste es el Profeta”. Otros decían: “Este
es el Mesías”. Otros, por el contrario: “¿Acaso va a venir el Mesías de
Galilea? ¿No afirma la Escritura que el Mesías tiene que ser de la familia de
David y de su mismo pueblo, de Belén?” Había pues, una gran división de
opiniones acerca de Jesús. Algunos querían detenerlo, pero nadie se atrevió
a hacerlo. Los guardias fueron donde estaban los sumos sacerdotes y los
fariseos, y éstos les preguntaron: “¿Por qué no lo han traído?” Los guardias
respondieron: “Nadie ha hablado jamás como lo hace este hombre”.
Los fariseos les dijeron: “¿También ustedes se han dejado engañar? ¿No
se dan cuenta de que ninguno de nuestros jefes ni los fariseos han creído
en él? Lo que ocurre es que esta gente, que no conoce la ley, se halla bajo
71
Ayúdense mutuamente
la maldición”. Uno de ellos, Nicodemo, el mismo que en otra ocasión había
ido a ver a Jesús, intervino y dijo: “¿Acaso nuestra ley permite condenar a
alguien sin haberlo oído previamente para saber qué ha hecho?” Los otros
le contestaron: “¿También tú eres de Galilea? Investiga las Escrituras y
llegarás a la conclusión de que jamás ha surgido un profeta en Galilea”. Y
después de esto, cada uno regresó a su casa. Palabra del Señor.
Meditación
Durante este tiempo de la Cuaresma, la Iglesia nos invita a mirar muy
de cerca cómo estamos progresando en la fe. En el Evangelio de hoy
nos encontramos con personas que están en diferentes etapas de su fe.
Vamos a ver con cuales de ellas nos identificamos.
Primero: Están los que llegaron a creer en Jesús después de escucharle
y experimentar los prodigios que Él realizó, lo reconocen no solamente
como un profeta, sino como “El profeta”.
Después vienen los que afirman que Jesús “es el Mesías”. No con
un simple “Yo creo”, sino que ellos estaban viendo que las profecías del
Antiguo Testamento que se tratan del Salvador, se cumplen en Jesús.
Por siglos, la gente estaba esperando que Dios cumpliera su promesa de
enviar a un Salvador.
Pero, hay otro grupo de gente que, a pesar de haber visto todo lo que
Jesús ha hecho, quieren descalificarlo porque aparentemente no cumple
con lo que “está escrito”: que el Mesías tiene que venir de Belén, de la
familia del Rey David y no de Galilea. Ellos no saben la verdad, que Jesús
en si ES de la familia de David pero están buscando pretextos para no
aceptarle como Mesías. Tristemente, todavía hay gente que son así; se
fijan en cualquier tontería para decir que “Dios no existe”, por no tener que
cumplir con lo que son los deberes de un Cristiano. No quieren escuchar,
entonces buscan cualquier manera de justificarse.
Los guardias son una otra clase de gente: Ellos tienen sus órdenes de
apresar a Jesús, pero no lo hacen. Regresan sin cumplir la tarea porque hasta
ellos se dan cuenta que este hombre tienen “algo” diferente”, pero no deciden
seguirle, no hacen NADA. (¿Cuántas veces, a pesar de que somos gente de
fe, y de haber sido tocados por el Señor, en vez de buscar de Él, simplemente
dejamos las inquietudes para poder seguir en lo mismo?). Finalmente, tenemos el grupo de la gente educada que ha llegado a estar muy cómoda en
su entorno. Ya no quieren que nadie cambie el sistema que han desarrollado
para el beneficio de ellos mismos, y por eso, rechazan a Jesús.
Los Sumo Sacerdotes y los Fariseos, terminan burlándose de su
compañero Nicodemo que toma un paso más en su fe. Él está en duda e
invita a los demás a mantener una actitud abierta, pidiéndoles que cumplan
con su propia ley de escuchar al acusado antes de juzgarlo. ¿Cuántas
veces cerramos nuestros corazones ANTES de escuchar lo que el otro o
la otra tienen que decir? Falta una semana hasta la Semana Santa, qué
estemos en una actitud de escucha a la Palabra del Señor, y también a los
que nos enseñen a caminar en la verdad.
72
Plan de Pastoral - Marzo 2015
22
V Domingo de Cuaresma
I Semana de la Liturgia de las Horas
Morado
Sólo si morimos a nosotros mismos podemos dar frutos de
solidaridad
Orientaciones para esta celebración:
Se puede presentar una semilla con tierra, simbolizando la semilla que
muere para dar frutos o una cruz, símbolo del autor de la vida y de la salvación
eterna. Se coloca en un lugar visible el título de este
Domingo. Se entonan cantos sobre el amor generoso a
los demás.
Monición ambiental:
Hermanos y hermanas: En este Domingo Quinto de
Cuaresma realizamos la Colecta del Sacrificio que es
una forma práctica de practicar la solidaridad con nuestros hermanos más
pobres, ya que los fondos obtenidos sirven para ayudas y proyectos a los
más desfavorecidos de nuestras Iglesias Locales.
Esta solidaridad de los bienes está animada por una solidaridad mayor
que estamos llamados a realizar siguiendo a Jesús, que por amor a nosotros,
con gritos, con lágrimas y con sangre, obedeció al Padre logrando así sellar
la Nueva y Eterna Alianza de Dios con su pueblo y del pueblo con su Dios.
Sólo en la medida que estemos dispuestos a morir como la semilla que
cae en tierra podremos dar los frutos de vida y de salvación que necesitan
nuestras familias y nuestra sociedad.
Ya cercana la Celebración de la Pascua, de muerte y resurrección de
Cristo, pidamos el don de la obediencia al Padre en toda ocasión y en especial
cuando nos pide vivir el amor solidario con aquellos que están a nuestro lado.
Cantando recibimos a Jesucristo que por nosotros entregó su vida y que
viene a presidir esta Eucaristía, memorial de su muerte y resurrección.
Primera lectura: Jer 31,31-34
Jeremías nos habla de la Nueva Alianza entre Dios y su pueblo, que
se realizó en la Cruz con la sangre de Jesucristo, que se hizo solidario
con nosotros y nos reconcilió con el Padre perdonando nuestros pecados.
Escuchemos.
Lectura del libro del profeta Jeremías
“Miren que llegan días -oráculo del Señor- en que haré con la casa de
Israel y la casa de Judá una alianza nueva. No como la alianza que hice
con sus padres, cuando los tomé de la mano para sacarlos de Egipto: ellos
quebrantaron mi alianza, aunque yo era su Señor -oráculo del Señor-.
Sino que así será la alianza que haré con ellos, después de aquellos días
-oráculo del Señor-: Meteré mi ley en su pecho, la escribiré en sus corazones;
yo seré su Dios, y ellos serán mi pueblo. Y no tendrá que enseñar uno a su
73
Ayúdense mutuamente
prójimo, el otro a su hermano, diciendo: “Reconoce al Señor.” Porque todos me
conocerán, desde el pequeño al grande -oráculo del Señor- cuando perdone
sus crímenes y no recuerde sus pecados.” Palabra de Dios.
Salmo Responsorial: 50
R/ Oh, Dios, crea en mí un corazón puro
Misericordia, Dios mío, por tu bondad, por tu inmensa compasión borra
mi culpa; lava del todo mi delito, limpia mi pecado. R.
Oh Dios, crea en mí un corazón puro, renuévame por dentro con espíritu
firme; no me arrojes lejos de tu rostro, no me quites tu santo espíritu. R.
Devuélveme la alegría de tu salvación, afiánzame con espíritu generoso:
enseñaré a los malvados tus caminos, los pecadores volverán a ti. R.
Segunda Lectura: Hebreos 5,7-9
La solidaridad de Jesucristo con la humanidad le costó gritos, lágrimas y
sangre, Lo mismo nos costará a nosotros si queremos ayudar de verdad a
nuestro pueblo. Escuchemos.
Lectura de la Carta a los Hebreos
Cristo, en los días de su vida mortal, a gritos y con lágrimas, presentó
oraciones y súplicas al que podía salvarlo de la muerte, cuando en su
angustia fue escuchado. Él, a pesar de ser Hijo, aprendió, sufriendo, a
obedecer. Y, llevado a la consumación, se ha convertido para todos los que
le obedecen en autor de salvación eterna. Palabra de Dios.
Evangelio: San Juan 12,20-33
Jesús nos enseña con su Palabra y con su testimonio que vivir el amor
solidario implica hacer la voluntad del Padre hasta la cruz, hasta caer en tierra
y morir para dar frutos. El nos invita a recorrer su mismo camino. Escuchemos.
Lectura del santo evangelio según San Juan
En aquel tiempo, entre los que habían venido a celebrar la fiesta había
algunos griegos; éstos, acercándose a Felipe, el de Betsaida de Galilea, le
rogaban: “Señor, quisiéramos ver a Jesús.”
Felipe fue a decírselo a Andrés; y Andrés y Felipe fueron a decírselo a
Jesús. Jesús les contestó: “Ha llegado la hora de que sea glorificado el Hijo
del hombre. Les aseguro que si el grano de trigo no cae en tierra y muere,
queda infecundo; pero si muere, da mucho fruto. El que se ama a sí mismo
se pierde, y el que se aborrece a sí mismo en este mundo se guardará para la
vida eterna. El que quiera servirme, que me siga, y donde esté yo, allí también
estará mi servidor; a quien me sirva, el Padre lo premiará.
Ahora mi alma está agitada, y ¿qué diré?: Padre, líbrame de esta hora. Pero
si por esto he venido, para esta hora. Padre, glorifica tu nombre.” Entonces
vino una voz del cielo: “Lo he glorificado y volveré a glorificarlo.”
La gente que estaba allí y lo oyó decía que había sido un trueno; otros
decían que le había hablado un ángel. Jesús tomó la palabra y dijo: “Esta voz
no ha venido por mí, sino por ustedes. Ahora va a ser juzgado el mundo; ahora
74
Plan de Pastoral - Marzo 2015
el Príncipe de este mundo va a ser echado fuera. Y cuando yo sea elevado
sobre la tierra atraeré a todos hacia mí.” Esto lo decía dando a entender la
muerte de que iba a morir. Palabra del Señor.
Oración de los fieles:
Quien preside: Pidamos la misericordia del Padre para que compadecido
de su pueblo escucha nuestras plegarias diciéndole: Padre que te
obedezcamos como Jesús hasta dar nuestra vida.
1.- Por la Iglesia, para que a ejemplo de Cristo, aún con lágrimas y con gritos,
sepamos ser solidarios entregando nuestra vida como Jesús a favor de
los más pobres. Oremos.
4. Por quienes gobiernan el mundo, principalmente República Dominicana,
para que renunciando a sí mismos sean capaces de dar frutos de justicia,
de solidaridad y de paz para sus pueblos. Oremos.
3.- Para que el Redentor del mundo, que experimentó en la cruz el sufrimiento
y la angustia, se compadezca de los que sufren, les dé fortaleza, alivie
sus sufrimientos, y nosotros contribuyamos a su mejoría. Oremos.
5.-Por los consagrados y consagradas, especialmente las que pertenecen a
los Institutos Seculares, para que se conviertan en la semilla del Reino que
se hace presente para ayudar a los más pobres y necesitados. Oremos.
6.- Para que cada uno de nosotros y nosotras muramos a nuestros pecados,
a la comodidad, a la falta de solidaridad y resucitemos a la vida de
compromiso personal y social. Oremos.
7.- Para que vivamos la próxima Semana Santa con fe y devoción y nos
sirva para convertirnos en semilla de una nueva Iglesia y nueva sociedad.
Oremos.
Quien preside: Padre lleno de misericordia, concédenos que, no
tengamos miedo a los sufrimientos para entregarnos totalmente a Ti y a
nuestros hermanos. Haznos capaces de obedecerte hasta la entrega total
por nuestros hermanos y hermanas más empobrecidos y maltratados. Por
Jesucristo, nuestro Señor.
23
Lunes
Morado
Se puede hacer conmemoración de Santo Toribio de Mogrovejo, Obispo
Patrono de los Obispos de América Latina y el Caribe
Lectura del libro del profeta Daniel 13, 1-9.15-17.19-30.33-62
En aquel tiempo vivía en Babilonia un hombre llamado Joaquín, casado
con Susana, hija de Quelcías, mujer muy bella y temerosa de Dios. Sus
padres eran virtuosos y habían educado a su hija según la ley de Moisés.
Joaquín era muy rico y tenía una huerta contigua a su casa, donde solían
reunirse los judíos, porque era estimado por todos. Aquel año habían sido
designados jueces dos ancianos del pueblo; eran de aquellos de quienes
había dicho el Señor: “En Babilonia, la iniquidad salió de ancianos elegidos
75
Ayúdense mutuamente
como jueces, que pasaban por guías del pueblo”. Estos frecuentaban la casa
de Joaquín y los que tenían litigios que resolver acudían ahí a ellos. Hacia
el mediodía, cuando toda la gente se había retirado ya, Susana entraba a
pasear en la huerta de su marido. Los dos viejos la veían entrar y pasearse
diariamente, y se encendieron de pasión por ella, pervirtieron su corazón
y cerraron sus ojos para no ver al cielo ni acordarse de lo que es justo. Un
día, mientras acechaban el momento oportuno, salió ella, como de ordinario,
con dos muchachas de su servicio, y como hacía calor, quiso bañarse en la
huerta. No había nadie allí, fuera de los viejos, que la espiaban escondidos.
Susana dijo a las doncellas: “Tráiganme jabón y perfumes, y cierren las
puertas de la huerta mientras me baño”. Apenas salieron las muchachas, se
levantaron los dos viejos, corrieron hacia donde estaba Susana y le dijeron:
“Mira: las puertas de la huerta están cerradas y nadie nos ve. Nosotros
ardemos en deseos de ti. Consiente y entrégate a nosotros. Si no, te vamos
a acusar de que un joven estaba contigo y que por eso despachaste a las
doncellas”.
Susana lanzó un gemido y dijo: “No tengo ninguna salida; si me entrego a
ustedes, será la muerte para mí; si resisto, no escaparé de sus manos. Pero
es mejor para mí ser víctima de sus calumnias, que pecar contra el Señor”.
Y dicho esto, Susana comenzó a gritar. Los dos viejos se pusieron a gritar
también y uno de ellos corrió a abrir la puerta del jardín. Al oír los gritos en el
jardín, los criados se precipitaron por la puerta lateral para ver qué sucedía.
Cuando oyeron el relato de los viejos, quedaron consternados, porque jamás
se había dicho de Susana cosa semejante. Al día siguiente, todo el pueblo
se reunió en la casa de Joaquín, esposo de Susana, y también fueron los
dos viejos, llenos de malvadas intenciones contra ella, para hacer que la
condenaran a morir. En presencia del pueblo dijeron: “Vayan a buscar a
Susana, hija de Quelcías y mujer de Joaquín”.
Fueron por Susana, quien acudió con sus padres, sus hijos y todos sus
parientes. Todos los suyos y cuantos la conocían, estaban llorando. Se
levantaron entonces los dos viejos en medio de la asamblea y pusieron sus
manos sobre la cabeza de Susana. Ella, llorando, levantó los ojos al cielo,
porque su corazón confiaba en el Señor. Los viejos dijeron: “Mientras nosotros
nos paseábamos solos por la huerta, entró ésta con dos criadas, luego les
dijo que salieran y cerró la puerta. Entonces se acercó un joven que estaba
escondido y se acostó con ella. Nosotros estábamos en un extremo de la huerta,
y al ver aquella infamia, corrimos hacia ellos y los sorprendimos abrazados.
Pero no pudimos sujetar al joven, porque era más fuerte que nosotros; abrió
la puerta y se nos escapó. Entonces detuvimos a ésta y le preguntamos quién
era el joven, pero se negó a decirlo. Nosotros somos testigos de todo esto”.
La asamblea creyó a los ancianos, que habían calumniado a Susana, y la
condenaron a muerte. Entonces Susana, dando fuertes voces, exclamó: “Dios
eterno, que conoces los secretos y lo sabes todo antes de que suceda, tú
sabes que éstos me han levantado un falso testimonio. Y voy a morir sin haber
hecho nada de lo que su maldad ha tramado contra mí”.
El Señor escuchó su voz. Cuando llevaban a Susana al sitio de la
ejecución, el Señor hizo sentir a un muchacho, llamado Daniel, un santo
76
Plan de Pastoral - Marzo 2015
impulso de ponerse a gritar: “Yo no soy responsable de la sangre de esta
mujer”. Todo el pueblo se volvió a mirarlo y le preguntaron: “¿Qué es lo que
estás diciendo?” Entonces Daniel, de pie en medio de ellos, les respondió:
“Israelitas, ¿cómo pueden ser tan ciegos? Han condenado a muerte a una
hija de Israel, sin haber investigado y puesto en claro la verdad. Vuelvan
al tribunal, porque ésos le han levantado un falso testimonio”. Todo el
pueblo regresó de prisa y los ancianos dijeron a Daniel: “Ven a sentarte en
medio de nosotros y dinos lo que piensas, puesto que Dios mismo te ha
dado la madurez de un anciano”. Daniel les dijo entonces: “Separen a los
acusadores, lejos el uno del otro, y yo los voy a interrogar”.
Una vez separados, Daniel mandó llamar a uno de ellos y le dijo: “Viejo
en años y en crímenes, ahora van a quedar al descubierto tus pecados
anteriores, cuando injustamente condenabas a los inocentes y absolvías a
los culpables, contra el mandamiento del Señor: No matarás al que es justo
e inocente. Ahora bien, si es cierto que los viste, dime debajo de qué árbol
estaban juntos”. El respondió: “Debajo de una acacia”. Daniel le dijo: “Muy
bien. Tu mentira te va a costar la vida, pues ya el ángel ha recibido de Dios
tu sentencia y te va a partir por la mitad”. Daniel les dijo que se lo llevaran,
mandó traer al otro y le dijo: “Raza de Canaán y no de Judá, la belleza te
sedujo y la pasión te pervirtió el corazón. Lo mismo hacían ustedes con las
mujeres de Israel, y ellas, por miedo, se entregaban a ustedes. Pero una
mujer de Judá no ha podido soportar la maldad de ustedes. Ahora dime,
¿bajo qué árbol los sorprendiste abrazados?”
El contestó: “Debajo de una encina”. Replicó Daniel: “También a ti tu
mentira te costará la vida. El ángel del Señor aguarda ya con la espada en
la mano, para partirte por la mitad. Así acabará con ustedes”. Entonces toda
la asamblea levantó la voz y bendijo a Dios, que salva a los que esperan en
él. Se alzaron contra los dos viejos, a quienes, con palabras de ellos mismos,
Daniel había convencido de falso testimonio, y les aplicaron la pena que ellos
mismos habían maquinado contra su prójimo. Para cumplir con la ley de
Moisés, los mataron, y aquel día se salvó una vida inocente. Palabra de Dios.
Salmo Responsorial: 22.
R/ “Aunque camine por cañadas oscuras, nada temo, porque tú vas conmigo”
El Señor es mi pastor, nada me falta; en verdes praderas me hace reposar
y hacia fuentes tranquilas me conduce para reparar mis fuerzas. R. /
Por ser un Dios fiel a sus promesas, me guía por el sendero recto; así,
aunque camine por cañadas oscuras, nada temo, porque tú estás conmigo.
Tu vara y tu cayado me dan seguridad. R. /
Tú mismo me preparas la mesa, a despecho de mis adversarios; me
unges la cabeza con perfume y llenas mi copa hasta los bordes. R. /
Tu bondad y tu misericordia me acompañarán todos los días de mi vida;
y viviré en la casa del Señor por años sin término. R. /
Lectura del santo evangelio según san Juan 8, 1-11
En aquel tiempo, Jesús se retiró al monte de los Olivos y al amanecer
se presentó de nuevo en el templo, donde la multitud se le acercaba; y él,
77
Ayúdense mutuamente
sentado entre ellos, les enseñaba. Entonces los escribas y fariseos le llevaron
a una mujer sorprendida en adulterio, y poniéndola frente a él, le dijeron:
“Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en flagrante adulterio. Moisés nos
manda en la ley apedrear a esas mujeres. ¿Tú qué dices?” Le preguntaban
esto para ponerle una trampa y poder acusarlo. Pero Jesús se agachó y se
puso a escribir en el suelo con el dedo. Pero como insistían en su pregunta,
se incorporó y les dijo: “Aquel de ustedes que no tenga pecado, que le tire la
primera piedra”. Se volvió a agachar y siguió escribiendo en el suelo. Al oír
aquellas palabras, los acusadores comenzaron a escabullirse uno tras otro,
empezando por los más viejos, hasta que dejaron solos a Jesús y a la mujer,
que estaba de pie, junto a él. Entonces Jesús se enderezó y le preguntó:
“Mujer, ¿dónde están los que te acusaban? ¿Nadie te ha condenado?” Ella
le contesto: “Nadie, Señor”. Y Jesús le dijo: “Tampoco yo te condeno. Vete y
ya no vuelvas a pecar”. Palabra del Señor.
Meditación
La Palabra de Dios de hoy nos presenta dos casos similares: la
acusación de adulterio a dos mujeres. Una es culpable, otra inocente; pero
en las dos se demuestra la misericordia de Dios.
En el Antiguo Testamento es común ver la defensa por parte de Dios de
quien es justo. Por ello, el caso presentado por el profeta Daniel es para
seguir probando que Dios siempre defiende a quien hace el bien. Hoy nos
lo ha contado con una novelita o una parábola donde el bien triunfa sobre
el mal por la intervención de Dios en boca de un muchacho.
El evangelio de hoy nos cuenta cómo le ponen una trampa a Jesús; una
trampa ya que debe elegir entre la Ley y la Justicia. Según los fariseos y
escribas cualquiera que fuera la respuesta les daría motivos para acusarlo.
Cuando le hacen la pregunta, Jesús se pone a escribir en el suelo. No
sabemos qué escribió, ni interesa; sencillamente se toma tiempo, no para
pensar la respuesta, sino que da tiempo a los acusadores para que se
planteen ellos el tema. Como insisten en la pregunta, Jesús les devuelve
la pregunta, la situación; es decir, les hace tomar a ellos la decisión de si
la condenan o no. Pero quien la condene es porque él no tiene pecado.
Y los acusadores se van, huyen. Todo esto tiene muchas aplicaciones
y consecuencias para nuestra vida.
Nos recuerda lo de “la paja en el ojo ajeno y la viga en el propio”.
Estamos acostumbrados y acostumbradas a juzgar y hasta a condenar
a los demás, “es que tenemos pruebas para decir lo que decimos”; Jesús
nos invita a mirar nuestra vida, nuestras faltas, nuestros pecados, nuestras
malas acciones, más que mirar la vida de los demás.
Todos se fueron, todos, no quedó sino Jesús y la mujer. Es que todos y
todas somos pecadores, tenemos nuestra vida para mirar y mejorar
Se quedan Jesús y la mujer. Debemos quedarnos solos ante Jesús,
y esperar su respuesta, su misericordia, porque no vino a condenar sino
a salvar. El diálogo con la mujer pecadora es uno de los más bonitos,
profundos y misericordiosos del Evangelio.
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Plan de Pastoral - Marzo 2015
Interesante esta postura de Jesús: no le aprueba el pecado pero tampoco
se le quita importancia, como si no hubiera pasado nada. Jesús reconoce que
ella ha pecado, y le invita a la conversión, al cambio, a no volver a pecar. La
misericordia de Jesús le salvó la vida a la mujer de dos maneras: de la pena de
muerte que le querían aplicar sus acusadores y también de arruinar el resto de su
vida, al ofrecerle el perdón de Dios que da fuerza interna para no volver a pecar.
Ese es Jesús con cada uno de nosotros y nosotras. Aquí aparece la
misericordia de Dios ante nuestros pecados, y nuestro compromiso por
cambiar: También a nosotros nos dice: “no peques más”. Estamos a
tiempo del sacramento del perdón que nos lleva al cambio a la mejoría a
no volver a caer en lo mismo.
24
Martes
Morado
Lectura del libro de los Números 21,4-9
En aquellos días, desde el monte Hor se encaminaron los hebreos hacia
el mar Rojo, rodeando el territorio de Edom. El pueblo estaba extenuado
del camino, y habló contra Dios y contra Moisés: “¿Por qué nos has sacado
de Egipto para morir en el desierto? No tenemos ni pan ni agua, y nos da
náusea ese pan sin cuerpo.” El Señor envió contra el pueblo serpientes venenosas, que los mordían,
y murieron muchos israelitas. Entonces el pueblo acudió a Moisés, diciendo:
“Hemos pecado hablando contra el Señor y contra ti; reza al Señor para que
aparte de nosotros las serpientes.” Moisés rezó al Señor por el pueblo, y el Señor le respondió: “Haz una
serpiente venenosa y colócala en un estandarte: los mordidos de serpientes
quedarán sanos al mirarla.” Moisés hizo una serpiente de bronce y la colocó
en un estandarte. Cuando una serpiente mordía a uno, él miraba a la
serpiente de bronce y quedaba curado. Palabra de Dios
Salmo Responsorial: 101
R/. Señor, escucha mi oración, que mi grito llegue hasta ti
Señor, escucha mi oración, que mi grito llegue hasta ti; no me escondas
tu rostro el día de la desgracia. Inclina tu oído hacia mí; cuando te invoco,
escúchame en seguida. R/.
Los gentiles temerán tu nombre, los reyes del mundo, tu gloria. Cuando
el Señor reconstruya Sión y aparezca en su gloria, y se vuelva a las súplicas
de los indefensos, y no desprecie sus peticiones. R/.
Quede esto escrito para la generación futura, y el pueblo que será creado
alabará al Señor. Que el Señor ha mirado desde su excelso santuario, desde
el cielo se ha fijado en la tierra, para escuchar los gemidos de los cautivos y
librar a los condenados a muerte. R/.
Lectura del santo evangelio según san Juan 8,21-30
En aquel tiempo, dijo Jesús a los fariseos: “Yo me voy y me buscarán
y morirán por su pecado. Donde yo voy no podrán venir ustedes.” 79
Ayúdense mutuamente
Y los judíos comentaban: “¿Será que va a suicidarse, y por eso dice: “Donde
yo voy no podrán venir ustedes”?”
Y él continuaba: “Ustedes son de aquí abajo, yo soy de allá arriba: ustedes
son de este mundo, yo no soy de este mundo. Con razón les he dicho que
morirán por sus pecados: pues, si no creen que yo soy, morirán por sus
pecados.” Ellos le decían: “¿Quién eres tú?” Jesús les contestó: “Ante todo, eso mismo que les estoy diciendo.
Podría decir y condenar muchas cosas en ustedes; pero el que me envió
es veraz, y yo comunico al mundo lo que he aprendido de él.” Ellos
no comprendieron que les hablaba del Padre. Y entonces dijo Jesús:
“Cuando levanten al Hijo del hombre, sabrán que yo soy, y que no hago
nada por mi cuenta, sino que hablo como el Padre me ha enseñado.
El que me envió está conmigo, no me ha dejado solo; porque yo hago
siempre lo que le agrada.” Cuando les exponía esto, muchos creyeron
en él. Palabra del Señor
Meditación
Las dos lecturas de hoy hablan de las consecuencias del rechazo de
Dios. La primera nos dice que alejarse de Dios lleva a la muerte tanto
física como espiritual. El Evangelio nos habla de morir en el pecado por no
aceptar a Cristo.
En el Evangelio de hoy vemos cómo Jesús comienza a hablar de su
próxima partida: “Yo me voy…”. Y esta partida de Jesús tiene graves
consecuencias: “Yo me voy y ustedes me buscarán y morirán en su
pecado”. ¿Podemos vivir sin Dios? ¿Hacia dónde vamos sin poner a Cristo
en el centro de nuestra vida? El Evangelio nos presenta a un grupo de
personas que están con Jesús, hablan con Él pero no lo reconocen ni lo
aceptan como Dios, es decir no les supone nada para sus vidas
Jesús se presenta como Dios, “yo soy de arriba”. ¿De dónde somos
nosotros? ¿Qué es lo que nos preocupa? ¿Somos del mundo, vivimos para
el mundo, nos preocupamos de algo más que de las cosas mundanas?
Jesús ha venido a transformar la situación de este mundo, a liberarlo.
Por eso nos pone el ejemplo de que va a ser levantado.
La muerte, esa muerte que estamos ya próximos a celebrar, va a ser
motivo de liberación, de salvación, de perdón. Pero hay que aceptarla,
hay que mirar a la cruz, como nos ha enseñado la primera lectura. Mirar a
Jesús es aceptarlo como Dios, como Salvador, es aceptar su mensaje y
poner todo el esfuerzo en cumplirlo.
Y así como debemos mirar a la cruz, y encontrarnos en ella con
Cristo; también debemos encontrarnos con Él en los miles y millones de
crucificados y crucificadas que hay en el mundo. Mirar a la cruz de Cristo
nos llevará a solidarizarnos con quienes e nuestro lado están siendo
crucificados, están sufriendo y pasándolo peor que nosotros.
Nos servirá de poco mirar a la cruz de madera o metal y no mirar a la
cruz humana que tenemos cerca.
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Plan de Pastoral - Marzo 2015
25
Solemnidad: La Anunciación del Señor
Miércoles
Blanco
50º Aniversario de la Ordenación Presbiteral de Mons. Rafael
Leónidas Felipe Núñez, Obispo de Barahona y Mons. Fabio
Mamerto Rivas Santos, Obispo Emérito de Barahona. Día Nacional
del Niño por nacer
Lectura del libro del profeta Isaías 7,10-14; 8,10
En aquel tiempo, el Señor habló a Acaz: “Pide una señal al Señor, tu Dios:
en lo hondo del abismo o en lo alto del cielo.” Respondió Acaz: “No la pido, no
quiero tentar al Señor.” Entonces dijo Dios: “Escucha, casa de David: ¿No les
basta cansar a los hombres, que cansan incluso a mi Dios? Pues el Señor,
por su cuenta, les dará una señal: Miren: la virgen está encinta y da a luz un
hijo, y le pondrá por nombre Emmanuel, que significa “Dios-con-nosotros”.
Palabra de Dios.
Salmo Responsorial: 39
R/ “Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad”
Tú no quieres sacrificios ni ofrendas, / y, en cambio, me abriste el oído; /
no pides sacrificio expiatorio, / entonces yo digo: “Aquí estoy.” R.
“-Como está escrito en mi libro- / para hacer tu voluntad.” / Dios mío, lo
quiero, / y llevo tu ley en las entrañas. R.
He proclamado tu salvación / ante la gran asamblea; / no he cerrado los
labios: / Señor, tú lo sabes. R.
No me he guardado en el pecho tu defensa, / he contado tu fidelidad
y tu salvación, / no he negado tu misericordia y tu lealtad / ante la gran
asamblea. R.
Lectura de la carta a los Hebreos 10,4-10
Hermanos: Es imposible que la sangre de los toros y de los machos
cabríos quite los pecados. Por eso, cuando Cristo entró en el mundo dijo:
“Tú no quieres sacrificios ni ofrendas, pero me has preparado un cuerpo; no
aceptas holocaustos ni víctimas expiatorias. Entonces yo dije lo que está
escrito en el libro: “Aquí estoy, oh Dios, para hacer tu voluntad.”
Primero dice: “No quieres ni aceptas sacrificios ni ofrendas, holocaustos
ni víctimas expiatorias”, que se ofrecen según la Ley. Después añade: “Aquí
estoy yo para hacer tu voluntad. “Niega lo primero, para afirmar lo segundo.
Y conforme a esa voluntad todos quedamos santificados por la oblación del
cuerpo de Jesucristo, hecha una vez para siempre. Palabra de Dios.
Lectura del santo evangelio según san Lucas 1,26-38
A los seis meses, el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de
Galilea llamada Nazaret, a una virgen desposada con un hombre llamado
José, de la estirpe de David; la virgen se llamaba María. El ángel, entrando
en su presencia, dijo: “Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo.” Ella
se turbó ante estas palabras y se preguntaba qué saludo era aquél.
81
Ayúdense mutuamente
El ángel le dijo: “No temas, María, porque has encontrado gracia ante
Dios. Concebirás en tu vientre y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre
Jesús. Será grande, se llamará Hijo del Altísimo, el Señor Dios le dará el
trono de David, su padre, reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y
su reino no tendrá fin.” Y María dijo al ángel: “¿Cómo será eso, pues no
conozco a varón?”
El ángel le contestó: “El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y la fuerza del
Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el Santo que va a nacer se llamará
Hijo de Dios. Ahí tienes a tu pariente Isabel, que, a pesar de su vejez, ha
concebido un hijo, y ya está de seis meses la que llamaban estéril, porque
para Dios nada hay imposible.” María contestó: “Aquí está la esclava del
Señor; hágase en mí según tu palabra.” Y la dejó el ángel. Palabra del Señor.
Meditación
La profecía de la Virgen que da a luz es una de las más importantes de
la Sagrada Escritura, pues con ella se vislumbra la mirada de Dios a su
pueblo y la intervención directa para cambiar la mentalidad y el corazón
del pueblo de Israel. Ésta profecía surge en un momento de incertidumbre
entre Asiria, la nación más poderosa, y el reino de Israel y el de Arán, los
cuales intentan unirse para luchar contra Asiria.
El profeta Isaías entiende que el rey debe confiar en la Alianza y en la
protección de Yavhé, antes de unirse a extranjeros. Observando la falta
de fe del rey ofrece esta profecía: “Mira la virgen que está encinta y dará
a luz un hijo y le pone por nombre Emmanuel’’. Esto significa que Dios ha
decidido no confiar en los descendientes de David, quienes no han podido
guiar al pueblo por el camino del bien.
Lucas concreta el anuncio profético de Isaías con la anunciación del
Ángel Gabriel a María sobre la encarnación de Dios en su vientre virginal,
para cumplir su promesa de Salvación.
Dios elige una joven sencilla, humilde, llena de fe, y valiente para venir
a la tierra y compartir con nosotros el plan de Salvación.
María asume con responsabilidad la misión de colaborar con Dios en su
plan de salvar a la humanidad, aportando su cuerpo para que Dios anide
en él, sin importar el momento histórico de su actualidad. Ella misma se
denomina la esclava, la servidora del Señor.
Hoy María representa el modelo de mujeres valientes que respetan la
vida, que confían en Dios plenamente y tienen la certeza de los profetas
de hoy que nacerán de las mujeres que esperan en Dios, para que Él siga
actuando en su plan de Salvación.
A esta fiesta no le damos la importancia que tiene. Aunque la titulamos
Solemnidad, normalmente la consideramos una fiesta de María. Sí, es una
fiesta de la Virgen, pero es una de las fiestas más importantes del Señor;
y por tanto debería ser una de las fiestas más importantes de la Iglesia
y de la humanidad. Para algunos santos esta fiesta, junto con la de la
Resurrección son las dos más importantes de la historia de Salvación.
Hoy celebramos la ENCARNACIÓN DEL HIJO DE DIOS.
82
Plan de Pastoral - Marzo 2015
Dios se hace carne, Dios se hace como nosotros y nosotras, Dios se
hace humano, es la solidaridad total con la humanidad. Este misterio no
lo podemos entender, sólo lo aceptamos desde el amor inmenso de Dios.
Dios se hace humano para que la humanidad se eleve, se salve. En la
fiesta de la Encarnación debemos valorarnos mucho más: la humanidad,
el ser hombres y mujeres es tan importante que el mismo Dios asumió
nuestra humanidad. Y es también motivo para valorar a todos los seres
humanos, para preocuparnos de los más necesitados, de quienes no
tienen los mínimos necesarios para llevar una vida digna del ser humano.
Hoy es el día de la solidaridad de Dios con nosotros para que seamos
solidarios y solidarias con quienes están sufriendo en su humanidad.
26
Jueves
Morado
Lectura del libro del Génesis 17, 3-9
En aquellos días, Abrán cayó de bruces y Dios le dijo: “Esta es la alianza
que hago contigo: tú llegarás a ser padre de una muchedumbre de pueblos.
No te llamarás ya Abrán, sino que tu nombre será Abrahán, porque yo te hago
padre de una muchedumbre de pueblos. Te haré inmensamente fecundo; de
ti surgirán naciones; y reyes saldrán de ti. Establezco mi alianza contigo y tus
descendientes después de ti por siempre, como alianza perpetua. Les daré a
ti y a tus descendientes, la tierra en la que ahora peregrinas, toda la tierra de
Canaán, en posesión perpetua; y yo seré el Dios de tus descendientes”. Y el
Señor añadió: “Guardarás mi alianza tú y tus descendientes de generación
en generación”. Palabra de Dios
Salmo Responsorial: 104
“El Señor se acuerda de su alianza eternamente.”
Recurran al Señor y a su poder, busquen su rostro sin descanso.
Recuerden las maravillas que hizo, sus portentos y sus justas decisiones. R.
Descendencia de Abrahán, su siervo, hijos de Jacob, su elegido: el Señor
es nuestro Dios, en toda la tierra están en vigor sus decretos. R.
El se acuerda de su alianza eternamente, de la palabra que ha dado por
mil generaciones; del pacto concluido con Abrahán, y del juramento que hizo
a Isaac. R.
Lectura del santo evangelio según san Juan 8, 51-59
En aquel tiempo dijo Jesús a los judíos: “Yo les aseguro que el que pone en
práctica mi palabra, no morirá nunca”. Al oír esto, los judíos le dijeron: “Ahora
nos convencemos plenamente de que estás endemoniado. Tanto Abrahán
como los profetas murieron, y ahora tú dices: El que pone en práctica mi palabra
no experimentará la muerte para siempre. ¿Acaso eres tú más importante que
nuestro padre Abrahán? Tanto él como los profetas murieron, ¿por quién nos
tienes?” Jesús respondió: “Si yo me glorificara a mí mismo, mi gloria no valdría;
es mi Padre quien me glorifica, el mismo del que ustedes dicen: “Es nuestro
83
Ayúdense mutuamente
Dios”. En realidad no lo conocen; yo, en cambio, sí lo conozco. Y si dijera que
no lo conozco, sería tan mentiroso como ustedes. Pero yo lo conozco de veras
y pongo en práctica sus palabras. Abrahán, su padre, se alegró sólo con el
pensamiento de que iba a ver mi día; lo vio y se llenó de alegría”.
Entonces los judíos le dijeron: “¿De modo que tú, que aún no tienes
cincuenta años, has visto a Abrahán?” Jesús les respondió: “Les aseguro que
antes que Abrahán naciera, yo soy”. Entonces los judíos tomaron piedras para
tirárselas, pero Jesús se escondió y salió del templo. Palabra del Señor.
Meditación
Dios hace un pacto de alianza con Abrahán. Le cambia el nombre, con
lo que eso significa de misión específica: ahora no es Abrán, que significa
hijo de una persona importante, sino que es Abrahán, es decir, padre de
una gran cantidad de personas. Dios le promete descendencia numerosa,
a él que es ya viejo, igual que su mujer; y le promete la tierra de Canaán, a
él que no posee ni un palmo de tierra. Por parte de Dios no hay problema. Él
cumple sus promesas: «el Señor se acuerda de su alianza eternamente»,
como nos ha hecho repetir el salmo.
Pero Abrahán y sus descendientes tienen que guardar también su parte
de la Alianza, tienen que creer y seguir al único Dios. Yahvé será el Dios de
Israel, e Israel, su pueblo. Abrahán sí creyó, a pesar de todas las apariencias
en contra. ¿Quiénes eran los hijos de Abrahán en tiempo de Jesús? El
Evangelio de Juan leído hoy presenta un diálogo entre Jesús y los letrados,
los cuales se consideran hijos predilectos de Abrahán muy por encima de
los demás. Pero esos letrados no aceptan la predicación de Jesús.
¿Cómo podían aceptar que Jesús les diga que quien cumpla su palabra
no sufrirá muerte jamás? ¿Cómo entender esta promesa si consideran a
Jesús un mentiroso? Estas personas tenían un corazón duro que no les
permitía ver ni entender la verdad de las palabras de Jesús. Ellos piensan en
muerte física, en lo contemporáneo, en lo terrenal….Jesús quiere llevarlos
a mirar más allá del tiempo, a lo espiritual, quiere hacerles comprender que
él viene de Dios, que él es la promesa vida del Altísimo, que él y el Padre
son una misma cosa, eso lo demuestran sus obras, pero ellos están ciegos,
no pueden ver que están aferrados a sus tradiciones pasajeras.
Hoy día se presentan similares discusiones entre los que no quieren
acoger a Jesús en sus corazones y se aferran a lo temporal, a la vida fácil,
a la autosuficiencia, al egoísmo, al individualismo….
Cuantas personas se creen más importantes que las demás, que
tienen derecho al disfrute de todos los bienes del mundo, mientras que
una gran mayoría no tiene oportunidad para nada. Hoy Dios no es el Dios
de Abrahán, sino el Dios de todos los que acogen a su Hijo Jesús en su
corazón para ser herederos de la vida eterna.
Todos estamos llamados al cumplimiento de la Palabra de Dios en
nuestras vidas, a dejarnos empapar de ese mensaje de salvación que
Jesús tiene para todos los hombres y mujeres del mundo ya que él quiere
que todos sin excepción lleguen al conocimiento de la verdad.
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Plan de Pastoral - Marzo 2015
27
Viernes
Morado
Lectura del libro del profeta Jeremías 20, 10-13
En aquel tiempo oía el cuchicheo de la gente: “¡Terror por todas partes!
¡Denúncienlo, vamos a denunciarlo!” Todos mis familiares espiaban mi
traspié: “Quizá lo podamos engañar, lo vencemos y nos desquitamos de él”.
Pero el Señor está conmigo como un guerrero poderoso; mis perseguidores
caerán y no me vencerán, quedarán avergonzados por su fracaso, sufrirán
una humillación eterna e inolvidable.
¡Oh Señor todopoderoso, que examinas al justo, que ves el interior del
hombre y sus intenciones, haz que yo vea cómo te vengas de ellos, porque a
ti he confiado mi causa! Canten al Señor, alaben al Señor, que libró al pobre
del poder de los perversos. Palabra de Dios.
Salmo Responsorial: 17
R/ “En el peligro invoqué al Señor y me escuchó.”
Yo te amo, Señor, mi fuerza. El Señor es mi roca, mi defensa y el que me
libra. R.
Mi Dios, la peña en que me refugio y mi escudo, mi fuerza salvadora
y mi fortaleza. Invoco al Señor, digno de alabanza, y él me salva de mis
enemigos. R.
Los lazos de la muerte me envolvían, me asustaban torrentes destructores;
los lazos del abismo me apresaban, la muerte me tenía entre sus redes. R.
En mi angustia clamé al Señor, grité a mi Dios pidiendo auxilio. Él escuchó
mi voz desde su templo, mi grito llegó hasta sus oídos. R.
Lectura del santo evangelio según san Juan 10, 31-42
En aquel tiempo, los judíos volvieron a tomar piedras para tirárselas.
Jesús les dijo: “He hecho ante ustedes muchas obras buenas por encargo del
Padre. ¿Por cuál de ellas quieren apedrearme?” Le contestaron los judíos:
“No es por ninguna obra buena que queremos apedrearte, sino por haber
blasfemado. Pues tú, siendo hombre, te haces Dios”. Jesús les respondió:
“¿No está escrito en su ley: Yo les digo: ustedes son dioses? Pues, si la ley
llama dioses a aquellos a quienes fue dirigida la palabra de Dios, y lo que
dice la Escritura no puede ponerse en duda, entonces, ¿con qué derecho
me acusan de blasfemia sólo por haber dicho: “yo soy Hijo de Dios”, a mí, a
quien el Padre consagró y envió al mundo? Si no hago las obras de mi Padre,
no me crean, pero si las realizo, acepten el testimonio de las mismas aunque
no quieran creer en mí. De este modo reconocerán que el Padre está en mí
y yo en el Padre”. Así pues, intentaron de nuevo detener a Jesús, pero él
se les escapó de entre las manos. Jesús se fue de nuevo a la otra orilla del
Jordán, al lugar donde anteriormente había estado bautizando Juan, y se
quedó allí. Acudía a él mucha gente, que decía: “Es cierto que Juan no hizo
ningún signo, pero todo lo que dijo de éste era verdad”. Y en aquella región
muchos creyeron en él. Palabra del Señor.
85
Ayúdense mutuamente
Meditación
La lectura de Jeremías en el día de hoy nos habla de la confianza que
el profeta tiene en Dios, a pesar de lo mal que lo está pasando en su vida
personal. Jeremías levanta una oración de confianza en Dios: «el Señor
está conmigo... mis enemigos no podrán conmigo... el Señor libró la vida
del pobre de manos de los impíos».
Jeremías representa a tantas personas a quienes les toca sufrir en esta
vida, pero que ponen su confianza en Dios y siguen adelante su camino.
De tantas personas que pueden decir con el salmo de hoy: «en el peligro
invoqué al Señor y me escuchó».
En el evangelio, encontramos a Jesús siendo blanco de los judíos que
se resisten a creer en él, no les importan las buenas obras que realiza en
medio de ellos, la envidia no les permite ver a su Mesías Salvador, aquel
que vino por la salvación de los hombres. Sólo piensan en sus deseos de
perseguir al bien que representa Jesús.
Aunque Jesús les invita a ver las obras que él realiza, ellos se aferran
a que él es un mentiroso que se quiere hacer pasar por Dios. No tienen
ojos para ver que Dios está actuando en él, prefieren quitarlo del camino
aunque pierdan su bienestar y salvación.
Quieren asesinarlo porque no soportan que un hombre sencillo y
humilde pueda realizar las obras que Jesús realiza. Hoy día se dan los
mismos conflictos sociales, donde los poderosos odian a los humildes que
hablan y practican la justicia, luchando por la igualdad social.
En un mundo donde impera el poder económico y político, los pobres no
cuentan, sólo sirven para hacer a los ricos más ricos a costa de su sacrificio.
Cuántos crímenes injustos a lo largo de esta historia; desaparecidos,
encarcelados….a causa de querer un mundo más justo para todos.
Pidamos a Dios que, al igual que Él no abandonó a su Hijo, permanezca
junto a todos los hombres y mujeres que luchan por un mundo más justo para
todos y todas; y que nuestra fe en Cristo nos lleve a solidarizarnos con todas
las personas que lo están pasando mal y tienen necesidades que les impiden
poder llevar una vida digna de personas humanas; que nos solidaricemos
también con quienes están luchando por el bien de los demás.
La fe en Cristo o es práctica, y nos lleva a las acciones o es fe vacía.
Así como Jesús se defiende diciendo que “miren mis obras”, no dice que
vean lo bonito que hablo, sino sus acciones; también a los seguidores y
seguidoras de Jesús o se nos conoce por nuestras obras o no se conocerá
ni se construirá el Reino de Dios.
28
Sábado
Morado
Lectura de la profecía de Ezequiel 37,21-28
Así dice el Señor: “Yo voy a recoger a los israelitas por las naciones
adonde marcharon, voy a congregarlos de todas partes y los voy a repatriar.
86
Plan de Pastoral - Marzo 2015
Los haré un solo pueblo en su país, en los montes de Israel, y un solo rey
reinará sobre todos ellos. No volverán a ser dos naciones ni a desmembrarse
en dos monarquías. No volverán a contaminarse con sus ídolos y fetiches
y con todos sus crímenes. Los libraré de sus pecados y prevaricaciones,
los purificaré: ellos serán mi pueblo y yo seré su Dios. Mi siervo David será
su rey, el único pastor de todos ellos. Caminarán según mis mandatos y
cumplirán mis preceptos, poniéndolos por obra. Habitarán en la tierra que
le di a mi siervo Jacob, en la que habitaron sus padres; allí vivirán para
siempre, ellos y sus hijos y sus nietos; y mi siervo David será su príncipe
para siempre. Haré con ellos una alianza de paz, alianza eterna pactaré con
ellos. Los estableceré, los multiplicaré y pondré entre ellos mi santuario para
siempre; tendré mi morada junto a ellos, yo seré su Dios, y ellos serán mi
pueblo. Y sabrán las naciones que yo soy el Señor que consagra a Israel,
cuando esté entre ellos mi santuario para siempre.” Palabra de Dios
Responsorial: Jr 31,
R/. El Señor nos guardará como un pastor a su rebaño
Escuchen, pueblos, la palabra del Señor, anúncienla en las islas
remotas: “El que dispersó a Israel lo reunirá, lo guardará como un pastor a
su rebaño”. R/.
Porque el Señor redimió a Jacob, lo rescató de una mano más
fuerte. Vendrán con aclamaciones a la altura de Sión, afluirán hacia los
bienes del Señor. R/.
Entonces se alegrará la doncella en la danza, gozarán los jóvenes y los
viejos; convertiré su tristeza en gozo, los alegraré y aliviaré sus penas. R
Lectura del santo evangelio según san Juan 11,45-57
En aquél tiempo, muchos judíos que habían venido a casa de María, al
ver lo que había hecho Jesús, creyeron en él. Pero algunos acudieron a los
fariseos y les contaron lo que había hecho Jesús. Los sumos sacerdotes
y los fariseos convocaron el Sanedrín y dijeron: “¿Qué hacemos? Este
hombre hace muchos signos. Si lo dejamos seguir, todos creerán en
él, y vendrán los romanos y nos destruirán el lugar santo y la nación.” Uno de ellos, Caifás, que era sumo sacerdote aquel año, les dijo: “Ustedes
no entienden ni palabra; no comprenden que les conviene que uno muera
por el pueblo, y que no perezca la nación entera.”
Esto no lo dijo por propio impulso, sino que, por ser sumo sacerdote
aquel año, habló proféticamente, anunciando que Jesús iba a morir por
la nación; y no sólo por la nación, sino también para reunir a los hijos de
Dios dispersos. Y aquel día decidieron darle muerte. Por eso Jesús ya no
andaba públicamente con los judíos, sino que se retiró a la región vecina
al desierto, a una ciudad llamada Efraín, y pasaba allí el tiempo con los
discípulos. Se acercaba la Pascua de los judíos, y muchos de aquella región
subían a Jerusalén, antes de la Pascua, para purificarse. Buscaban a Jesús
y, estando en el templo, se preguntaban: “¿Qué les parece? ¿No vendrá a
la fiesta?” Los sumos sacerdotes y fariseos habían mandado que el que se
enterase de dónde estaba les avisara para prenderlo. Palabra del Señor
87
Ayúdense mutuamente
Meditación
Mañana comenzamos la semana Santa y en ella contemplaremos la
muerte, la entrega total de Jesús por su pueblo. Pero la muerte no es la última
palabra, no es el final. La primera lectura de hoy nos quiere animar para
entrar en la Semana Santa con esperanza. El profeta nos pone el programa
de Dios para la vida, un programa que es de salvación y de alegría:
- Dios quiere restaurar a su pueblo haciéndole volver del destierro,
- quiere unificar a los dos pueblos (Norte y Sur, Israel y Judá) en uno
solo: como cuando reinaban David y Salomón,
- lo purificará y le perdonará sus faltas,
- les enviará un pastor único, un buen pastor, para que los conduzca por
los caminos que Dios quiere, ya sabemos que Dios, por medio del profeta
Ezequiel se está refiriendo a Cristo,
- hará vivir a su pueblo en la tierra prometida,
- sellará de nuevo con ellos su alianza de paz,
- y pondrá su morada en medio de ellos.
La vida corporal que Jesús da a Lázaro es señal de la verdadera vida
que concede a quien cree en Él.
Ante la resurrección de Lázaro surge una doble reacción: la fe y la
incredulidad. La fe abre las puertas a la vida, la incredulidad la cierra.
Las autoridades religiosas deciden entonces actuar, temen que la
actividad de Jesús, sus signos prodigiosos, propicien un movimiento de
masas de carácter mesiánico, que haga peligrar el orden establecido.
Temen la represalia de los romanos. Para los sumos sacerdotes y fariseos
Jesús es un hombre peligroso. Caifás, con su sugerente idea, no es sino
un instrumento en las manos de Dios para proclamar solemnemente que
Jesús muere por el pueblo, para reunir a los hijos de Dios dispersos.
Jesús muere, se entrega por su pueblo; nosotros, seguidores y
seguidoras de Jesús debemos imitarlo en esa entrega a los demás, sobre
todo en la solidaridad con todas las personas que están sufriendo en
nuestra República Dominicana. Estamos a punto de entrar en la Semana
Santa, es la hora de la entrega de Jesús y de nuestra entrega a y por
los demás, sobre todo por los más necesitados. Esto nos pide el Plan de
Pastoral del País: entrega (amor y solidaridad) como camino de santidad.
29
Domingo de Ramos en la Pasión del Señor
II Semana Liturgia de las Horas
Rojo
Bendito seas Jesús que preferiste la gloria del Padre
antes que la gloria de este mundo.
Orientaciones para esta Celebración: Hoy tendremos la procesión con los
Ramos aclamando a Jesús como Rey victorioso. Este día se quiere que todos los
sectores de la Parroquia salgan desde sus sectores con sus ramos cantando y
alabando al Señor hacia el lugar donde se bendecirán los Ramos como recuerdo
88
Plan de Pastoral - Marzo 2015
de que ellos con su gente y con su acción
evangelizadora son el ramo más hermoso con
el que esta Iglesia Local quiere aclamar de
manera permanente al Señor. Deben llevar
un letrero con el nombre de su sector. Durante
la procesión irán juntos y se colocarán juntos
en la Eucaristía. Adornar el Templo con
abundantes ramos y palmas. Colocar el lema
del mes en un lugar visible. Seleccionar los
lectores de la pasión con antelación para que
ensayen la lectura con tiempo.
Primer momento:
Con un espíritu y mente renovada, aclamemos al Señor con alegría
Monición ambiental
Hermanos y hermanas, sean bienvenidos y bienvenidas a la solemne
celebración del Domingo de Ramos. Con ella iniciamos la Semana Santa,
que nos conduce a la Gran fiesta de la Pascua.
Después de habernos preparado durante la Cuaresma con nuestra
penitencia, obras de caridad y la oración, hoy nos reunimos para iniciar,
unidos con la Iglesia, la celebración anual de los misterios de la Pasión y
Resurrección de nuestro Señor Jesucristo, misterios que empezaron con la
entrada de Jesús a Jerusalén.
Proclamemos la victoria del Señor, acompañemos con fe y devoción
a nuestro Salvador en su entrada triunfal a la Ciudad Santa, para que
participando ahora de su cruz, podamos participar un día de su gloriosa
resurrección y de su vida. Acompañemos a Jesús como aquellas personas de
Jerusalén cantando y alabando a nuestro Dios y Señor que llega triunfante.
Escuchemos con atención la narración de aquel acontecimiento que nos
lo cuenta san Marcos.
Evangelio
+ Lectura del santo Evangelio según san Marcos 11,1-10
Se acercaban a Jerusalén, por Betfagé y Betania, junto al monte llamado
de los Olivos, y Jesús mandó a dos discípulos, diciéndoles: “Vayan a la
aldea de enfrente; y en cuanto entren, encontrarán un borrico atado, que
nadie ha montado todavía. Desátenlo y tráiganlo. Y si al­guien les pregunta
por qué lo hacen, contéstenle: “El Señor lo necesita”, y lo devolverá pronto.
Fueron y encontraron el borrico en la calle atado a una puerta y lo
soltaron. Algunos de los presentes les preguntaron: “¿Por qué tienen que
desatan el borrico?” Ellos contestaron como había dicho Jesús; y se lo
permitieron. Llevaron el borrico, le echaron encima los mantos, y Jesús se
montó. Muchos alfombraron el camino con sus mantos, otros con ramas
cortadas en el campo. Los que iban delante y detrás, gritaban: “Hosanna,
bendito el que viene en nombre del Señor: Bendito el reino que llega, el de
nuestro padre David. ¡Hosanna en el cielo!” Palabra del Señor.
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Ayúdense mutuamente
Breve homilía
Bendición de los ramos:
Oremos: Acrecienta, Señor, la fe de los que en Ti esperan y escucha las
plegarias de los que en ti acuden, para que quienes alzamos hoy los ramos
en honor de Cristo victorioso, permanezcamos en El dando fruto abundante
de buenas obras. Por nuestro Señor. Se rocía con agua bendita los ramos
en silencio .
Procesión con los ramos:
El que preside dice: Como la muchedumbre que aclamaba a Jesús,
acompañemos también nosotros con júbilo al Señor.
- Se inicia la procesión con este orden: el que lleva el incienso va delante;
le siguen el que lleva la Cruz adornada con ramos en medio de dos
ministros con velas encendidas, luego el sacerdote con el diácono y los
ministros y a continuación todos los fieles. Toda la asamblea va cantando.
- Cantos apropiados: Salmos 23; 46, himnos Cristo Rey, himnos de
alabanza a Cristo.
Llegada al Templo:
Al llegar al templo donde se va a realizar la celebración central, el que
preside, llamará a cada sector y comunidad invitándoles a que expresen
su aclamación al Señor. Luego, les preguntará sobre su deseo de seguir
adelante con su compromiso como Sector, con estas palabras: Párroco
(o quien preside): Levanten los ramos todos los coordinadores de
sectores y respondan estas preguntas:
- ¿Están dispuestos a seguir animando sus sectores promoviendo en ellos
la Nueva Evangelización?
- ¿Están dispuestos a coordinar y promover las diferentes actividades
parroquiales de nuestro Plan de Pastoral en sus sectores?
- ¿Están dispuestos a trabajar unidos a su párroco, a los demás sectores,
a las diferentes Comisiones Pastorales y a hacerlo en conjunto, para que
el Evangelio llegue a todos y a todas?
Párroco (o quien preside): Levanten sus ramos, ahora, todos los que
forman los diferentes sectores. (Si quiere puede llamarlos por su nombre).
Les pregunto:
- ¿Están dispuestos a seguir participando en las diferentes actividades del
Sector para unirnos más en el Señor y entre nosotros?
- ¿Están dispuestos a realizar las acciones significativas de evangelización
en sus familias y en su sector?
- ¿Están dispuestos a participar de la Eucaristía de los Domingos?
Párroco (o quien preside): El Señor les bendiga y les conceda ser fieles
hasta el final. Que todos y todas seamos en cada sector ramos vivos que
aclaman al Se­ñor y formemos su pueblo santo. Amén.
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Plan de Pastoral - Marzo 2015
Segundo momento: Inicio de la Pasión de Cristo
Primera Lectura: Isaías 50, 4-7
El profeta Isaías nos presenta el testimonio del Siervo que, aún en medio
del sufrimiento, fue fiel y obediente a su Dios para cumplir su misión solidaria
con la humanidad oprimida por el pecado, por la muerte y por cadenas
opresoras. Escuchemos.
Lectura del libro de Isaías
Mi Señor me ha dado una lengua de iniciado, para saber decir al abatido
una palabra de aliento. Cada mañana me espabila el oído, para que escuche
como los iniciados. El Señor me abrió el oído. Y yo no resistí ni me eché atrás:
ofrecí la espalda a los que me apaleaban, las mejillas a los que mesaban mi
barba; no me tapé el rostro ante ultrajes ni salivazos.
El Señor me ayuda, por eso no sentía los ultrajes; por eso endurecí el rostro
como pedernal, sabiendo que no quedaría defraudado. Palabra de Dios.
Salmo responsorial: Sal 21.
R./ Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?
Al verme, se burlan de mí, hacen visajes, menean la cabeza: “Acudió al
Señor, que lo ponga a salvo; que lo libre, si tanto lo quiere.” R.
Me acorrala una jauría de mastines, me cerca una banda de malhechores;
me taladran las manos y los pies, puedo contar mis huesos. R.
Se reparten mi ropa, echan a suertes mi túnica. Pero tú, Señor, no te
quedes lejos; fuerza mía, ven corriendo a ayudarme. R.
Contaré tu fama a mis hermanos, en medio de la asamblea te alabaré. Fieles
del Señor, alabadlo; linaje de Jacob, glorificadlo; temedlo, linaje de Israel. R.
Segunda Lectura: Filipenses 2, 6-11
Él apóstol Pablo nos invita a seguir a Jesús que, por nuestra salvación
fue humillado y despreciado por la gente. Por su obediencia, sin embargo,
venció y así por su amor solidario nos salvó su Padre. Escuchemos.
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Filipenses 2, 6-11
Cristo, a pesar de su condición divina, no hizo alarde de su categoría de
Dios; al contrario, se despojó de su rango y tomó la condición de esclavo,
pasando por uno de tantos. Y así, actuando como un hombre cualquiera, se
rebajó hasta someterse incluso a la muerte, y una muerte de cruz.
Por eso Dios lo levantó sobre todo y le concedió el “Nombre-sobre-todonombre”; de modo que al nombre de Jesús toda rodilla se doble en el cielo,
en la tierra, en el abismo, y toda lengua proclame: Jesucristo es Señor, para
gloria de Dios Padre. Palabra de Dios.
Aclamación antes del Evangelio Flp 2, 8-9
Cristo, por nosotros, se sometió incluso a la muerte, y una muerte de
cruz. Por eso Dios lo levantó sobre todo y le concedió el “Nombre-sobretodo-nombre”.
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Ayúdense mutuamente
Evangelio
Pasión de nuestro Señor Jesucristo según san Marcos 14, 1-15, 47
El Siervo de Yahvé presentado por el Profeta Isaías es Jesús, quien llegó
a una entrega total en la Cruz por puro amor a su Padre y en solidaridad
con nosotros. Escuchemos ahora el relato de la Pasión que nos presenta el
camino que recorrió Jesús hasta llegar a la muerte en el calvario, dejándonos
a la puertas de la resurrección.
Pasión de nuestro Señor Jesucristo según san Marcos 14, 1-15, 47.
Oración de los Fieles:
Quien preside: Con la confianza de que el Padre nos escucha, elevamos
nuestras oraciones pidiendo por las necesidades del mundo. A cada petición
respondemos: Padre, que prefiramos como Jesús tu gloria antes que la
gloria de este mundo.
1. Por la Iglesia, para que a ejemplo de Cristo prefiera la gloria del Padre
antes que la gloria de los poderosos de este mundo a la hora de ser
solidaria con los más pobres de la tierra. Oremos.
2. Por los gobernantes de todo el mundo, para que su corona sea el servicio
desinteresado y su solidaridad con los más pobres. Oremos.
3. Por los enfermos y todas las personas que sufren llevando una pesada
cruz de dolor, para que experimenten la bondad y cercanía de Dios y
nuestra solidaridad. Oremos.
4.Por quienes celebramos este Domingo de Ramos, para que seamos
consecuentes y fieles al Señor cuando hay gozo y cuando llega el dolor, los
ataques y las incomprensiones a nuestro trabajo de amor solidario. Oremos.
5. Por quienes en estos días van a viajar o se van de vacaciones; para que
conduzcan con prudencia evitando accidentes, no abusen del alcohol ni de
otras sustancias perniciosas, respeten su persona y las de los demás. Oremos.
Quien preside: Danos tu fuerza y tu amor para preferir siempre y en toda
circunstancia tu gloria antes que la gloria de los poderes de este mundo.
Ayúdanos a experimentar que sólo en Ti está nuestro triunfo verdadero. Por
Jesucristo nuestro Señor.
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Lunes Santo
Morado
Lectura del libro del profeta Isaías 42, 1-7
Este es mi siervo a quien sostengo, mi elegido en quien me complazco.
He puesto sobre él mi espíritu, para que manifieste el derecho a las
naciones. No gritará, no voceará ni clamará por las calles; no romperá la
caña resquebrajada, ni apagará la mecha que apenas arde. Manifestará
firmemente el derecho, y no se debilitará ni se cansará hasta implantarlo
en la tierra. Los pueblos lejanos anhelan su enseñanza. Así dice el Señor
Dios, que creó y desplegó el cielo, que extendió la tierra y su vegetación,
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Plan de Pastoral - Marzo 2015
que concede vida a sus habitantes, y aliento a los que se mueven en ella:
Yo, el Señor, te llamé según mi plan salvador; te tomé de la mano, te formé
y te hice mediador del pueblo y luz de las naciones, para abrir los ojos a los
ciegos, para sacar prisioneros de la cárcel, y del calabozo a los que viven en
tinieblas. Palabra de Dios.
Salmo Responsorial: 26
R/ “El Señor es mi luz y mi salvación.”
El Señor es mi luz y mi salvación, ¿a quién temeré? El Señor es mí
fortaleza, ¿quién me hará temblar? R.
Cuando los malvados se lanzan contra mí para devorarme, son ellos, mis
adversarios y enemigos, los que tropiezan y caen. R.
Aunque un ejército acampara contra mí, no temo; aunque me hicieran la
guerra, me sentiría seguro. R.
Espero gozar los bienes del Señor en la tierra de los vivos. Espera en el
Señor, sé fuerte, ten ánimo, espera en el Señor. R.
Lectura del santo evangelio según san Juan 12, 1-11
Seis días antes de la fiesta judía de la pascua, llegó Jesús a Betania,
donde vivía Lázaro, a quien había resucitado de entre los muertos. Ofrecieron
allí una cena en honor de Jesús. Marta servía y Lázaro era uno de los que
estaban a la mesa con él.
Entonces María se presentó con un frasco de perfume muy caro, casi
medio litro de nardo puro y ungió con él los pies de Jesús; después los
secó con sus cabellos. La casa se llenó con la fragancia del perfume. Judas
Iscariote, uno de los discípulos –el que lo iba a traicionar– protestó diciendo:
“¿Por qué no se vendió este perfume en trescientos denarios para repartirlo
entre los pobres?”
Si dijo esto, no fue porque le importaran los pobres, sino porque era
ladrón y, como tenía a su cargo la bolsa del dinero común, robaba de lo que
echaban en ella. Jesús le dijo: “Déjala en paz. Esto que ha hecho anticipa el
día de mi sepultura; además, a los pobres los tendrán siempre con ustedes;
a mí, en cambio, no siempre me tendrán”.
Un gran número de judíos se enteró de que Jesús estaba en Betania, y
fueron allá, no sólo para ver a Jesús, sino también para ver a Lázaro, a quien
Jesús había resucitado de entre los muertos. Los sumos sacerdotes tomaron
entonces la decisión de eliminar también a Lázaro, porque, por su causa,
muchos judíos se alejaban de ellos y creían en Jesús. Palabra del Señor.
Meditación
El profeta Isaías, describe la misión de Jesús, aunque el profeta no
se refiere directamente aún al Mesías; pero sí se le puede aplicar a él,
por ser Jesús el ungido, el enviado y quien puso en práctica todo lo que
Isaías había profetizado. Jesús hace realidad en su misión, como Mesías,
todo lo dicho por Isaías: sana enfermos, da la vista al ciego, camina con
los más necesitados, mostrando toda su compasión y misericordia por los
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Ayúdense mutuamente
que sufren, por los marginados, por los pobres, en conclusión, por los más
necesitados.
Hoy, al igual que ayer, Él sigue actuando a través de nosotros; lo hace
cada vez que somos capaces de tender las manos para levantar al caído,
para socorrer al necesitado. Por el bautismo hemos sido ungidos por el
Espíritu con el fin de continuar la misión de Jesús.
En este trozo del evangelio, Jesús, una vez más, nos muestra su misión,
al compartir con aquella humilde familia de Betania, por la cual sentía un
gran afecto, Marta, María y Lázaro a quien le devolvió a la vida después
de tres días de muerto.
Este milagro pone en peligro tanto la vida de Jesús como del mismo
Lázaro, pues por su testimonio, los más humildes creen y la fama de Jesús
se extendió, provocando mas enojo y furia a los fariseos y maestros de la
ley, quienes buscaban la manera de quitar del medio a Jesús.
Con el gesto de María de derramar perfume sobre Jesús, permite
que, aún en vida Jesús, se sienta ungido para la muerte, porque el amor
desborda el tiempo y el espacio. Frente a una eminente muerte que le
reservan los enemigos, Jesús, por un testimonio sencillo de amor, siente
la alegría de vivir. Y así también podemos ver que el pueblo, representado
esta vez por una mujer, se adhiere silenciosamente a los proyectos de
Dios.
En estos días de sacrificios, abstinencia y penitencia, ponemos en manos
de Dios tantas personas que viven sumergidas en la pobreza material y
espiritual, a los que viven en el olvido, a los excluidos, a los enfermos, en
definitiva a los que siempre estarán dándonos una oportunidad para que
nosotros le podamos hacer el bien, y ser solidarios como nos pide el Plan
de Pastoral. Que el fruto de nuestro sacrificio vaya en beneficio de los
pobres. Es misión de los cristianos y cristianas de este momento actual,
establecer lazos de solidaridad, de acogida y misericordia con quienes
más nos necesiten.
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Martes Santo
Morado
Lectura del libro del profeta Isaías 49, 1-6
Escuchen, habitantes de las islas; atiendan, pueblos lejanos: El
Señor me llamó desde el seno materno, desde las entrañas de mí madre
pronunció mi nombre. Convirtió mi boca en espada afilada, me escondió
al amparo de su mano; me transformó en flecha punzante y me guardó
en su aljaba. Me dijo: “Tú eres mi siervo, Israel, y estoy orgulloso de ti”.
Aunque yo pensaba: “En vano me fatigué, por nada e inútilmente gasté mis
fuerzas”. Sin embargo, el Señor defendía mi causa, mi Dios guardaba mi
recompensa.
Y ahora habla el Señor, aquél que desde el vientre me formó como siervo
suyo, para que le trajera a Jacob y le reuniera a Israel. ¡Tan valioso soy para
el Señor y en Dios se halla mi fuerza! Él dice: “No sólo eres mi siervo para
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Plan de Pastoral - Marzo 2015
restablecer las tribus de Jacob y traer a los sobrevivientes de Israel, sino
que te convierto en luz de las naciones para que mi salvación llegue hasta el
último rincón de la tierra”. Palabra de Dios.
Salmo Responsorial: 70
R/ “Mi boca contará tu salvación, Señor”
En ti, Señor, me refugio; que yo no quede avergonzado para siempre.
Líbrame, rescátame tú, que eres salvador; hazme caso y libérame. R.
Sé para mí una roca de refugio, una fortaleza donde me salve, pues tú eres
mi roca y mi fortaleza; Dios mío, rescátame de las manos del malvado. R.
Porque tú eres mi esperanza, Señor, en ti confío, Señor, desde mi juventud.
En ti me apoyaba antes de nacer, tú eres mi protector desde las entrañas de
mi madre. R.
Mi boca proclamará todo el día tu salvación, y tus actos liberadores. Desde
mi juventud. Dios mío, me has instruido, y yo he proclamado tus maravillas
hasta hoy. R.
Lectura del santo evangelio según san Juan 13, 21-33. 36-38
En aquel tiempo, estando Jesús a la mesa con sus discípulos, se conmovió
profundamente y declaró: “Les aseguro que uno de ustedes me va a entregar”.
Los discípulos comenzaron a mirarse unos a otros, preguntándose a quién
podría referirse. Uno de ellos, el discípulo al que Jesús tanto amaba, estaba
reclinado sobre el pecho de Jesús. Simón Pedro le hizo señas para que le
preguntara a quién se refería. El discípulo que estaba reclinado sobre el
pecho de Jesús le preguntó: “Señor, ¿quién es?” Le contestó Jesús: “Aquel
a quien yo dé el trozo de pan que voy a mojar en el plato”. Y, mojándolo, se
lo dio a Judas Iscariote, hijo de Simón. Cuando Judas recibió aquel trozo de
pan mojado, Satanás entró en él.
Jesús le dijo: “Lo que vas a hacer, hazlo cuanto antes”. Ninguno de
los que estaban a la mesa con Jesús entendió lo que había querido decir.
Como Judas era el que llevaba la bolsa del dinero, algunos pensaron que
le había encomendado que comprara lo necesario para la fiesta o que
diera algo a los pobres. Judas, después de recibir el trozo de pan mojado,
salió inmediatamente. Era de noche. Al salir Judas, dijo Jesús: “Ahora
va a manifestarse la gloria del Hijo del hombre, Dios será glorificado en
él. Y si Dios va a ser glorificado en el Hijo del hombre, también Dios lo
glorificará a él. Y lo va a ser muy pronto. Hijos míos, ya no estaré con
ustedes por mucho tiempo. Me buscarán, pero les digo ahora lo mismo
que ya dije a los judíos: “Adonde yo voy, ustedes no pueden venir”“. Simón
Pedro le preguntó: “Señor, ¿adónde vas?” Jesús le respondió: “Adonde
yo voy tú no puedes seguirme ahora; algún día lo harás”. Pedro insistió:
“Señor, ¿por qué no puedo seguirte ahora? Estoy dispuesto a dar mi vida
por ti”. Jesús le dijo: “¡De modo que estás dispuesto a dar tu vida por mí!
Te aseguro, Pedro, que antes que el gallo cante, me habrás negado tres
veces”. Palabra del Señor.
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Ayúdense mutuamente
Meditación
La primera lectura nos presenta la vocación de Isaías. Dios lo llama a
una entrega total. Por esa entrega de Isaías, esta vocación se poner como
ejemplo de la llamada de Dios a la Vida Consagrada.
Al igual que a Isaías, Dios sigue llamándonos a su servicio; nos ha
regalado el don maravilloso de la vida, vida recibida del seno de nuestras
madres, con el compromiso de dar vida y ponerle vida a todo lo que
hagamos. Esto es un motivo importante para animarnos a orar durante
estos días por todo tipo de vocaciones.
Oremos en este año de manera especial con los Consagrados y
Consagradas, para que con su testimonio y coherencia de vida estimulen
a muchachas y muchachos a descubrir su llamado. Oremos para que los
que han respondido a ese llamado que Dios les ha hecho, perseveren
firmes en su vocación y sean constantes en la oración.
Por nuestros jóvenes para que sean generosos y respondan con
valentía al llamado de Dios; que abran su corazón, sus oídos al mensaje
para que despierte en ellos el deseo de consagrarse al servicio de los más
necesitados.
Jesús pasa por muchos momentos difíciles en su vida pública. Uno de
ellos es la cena con los amigos más cercanos. Pronto el grupo quedaría
golpeado por la ausencia definitiva del maestro, y a ello se agregaría la
posibilidad permanente de traición de los propios discípulos; la traición no
es sólo patrimonio de Judas, lo es también de nosotros, los seguidores de
este momento histórico. También hoy se traiciona a Jesús, se traiciona al
hermano, a la familia, a los compromisos que hemos hecho con Dios y con
los demás. Se anida la traición en el alma de los llamados a ser dirigentes.
Es difícil comprender la profundidad de los sentimientos de Jesús,
en víspera de su muerte, e imaginar qué sentía su corazón cuando, a su
muerte irremediable, se agregó la humillación por la traición de sus propios
compañeros.
Hoy son muchas las causas traicionadas e incluso por quienes las
han liderado en su momento. Y es que la fidelidad, la honestidad y la
transparencia no son fáciles en cualquier proyecto humano. Hoy, como
ayer, nuestro pueblo ha sido engañado, traicionado por líderes corruptores
que los entregan a los poderes corruptos. Hoy hay muchos padres
traicionados, muchas mujeres traicionadas, muchas familias traicionadas,
congregaciones traicionadas por sus miembros, amigos traicionados por
sus amigos. Pero por la resistencia y la fe se abren camino en medio de
tantas traiciones y engaños.
Pedimos a Dios en estos días santos que nos dé la capacidad de ser
fieles al proyecto de vida que hemos elegido y que nos mantenga firmes
en la fe, la esperanza y en la solidaridad con los más necesitados y
necesitadas.
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