TEMA 13 PRÓSTATA Antonio M. Paredes Ramírez

Antonio M. Paredes Ramírez
I.E.S. La Fuensanta
Córdoba
TEMA 13
PRÓSTATA
1
Antonio M. Paredes Ramírez
I.E.S. La Fuensanta
Córdoba
ANATOMÍA
Una gran cantidad del líquido del esperma es elaborado por la próstata,
glándula que rodea a la parte inicial de la uretra en donde envía su secreción. Está
abrazada por el músculo esfínter externo de la uretra (Fig. 1) (Fig. 2)
La próstata tiene forma de
castaña con el vértice hacia abajo y la
base hacia arriba (Fig. 3); está
constituida por un conjunto de glándulas
que proceden de brotes epiteliales del
seno urogenital formadas durante la vida
embrionaria (Fig. 4)
Su cara anterior, corta,
que mira al mismo tiempo hacia abajo está emplazada por detrás de la porción inferior
de la sínfisis del pubis, de la que está
separada por el plexo pudendo; entre
la próstata y el pubis se extienden los
ligamentos pubeoprostáticos. Las
caras laterales de la próstata limitan
con los bordes internos de los
músculos elevadores del ano y con
los plexos vesicales, los cuales
ocupan sobre todo el canal formado
entre la cara superior de la próstata y
la vejiga urinaria. La cara dorsal o posterior está
en contacto con la cara anterior del recto, de la
que se halla únicamente separada por una
pequeña cantidad de tejido conjuntivo laxo;
presenta a menudo un surco medio poco
profundo, que separa incompletamente dos
lóbulos laterales poco manifiestos. La cara
superior, conocida con el nombre de base, es la
2
Antonio M. Paredes Ramírez
I.E.S. La Fuensanta
Córdoba
más extensa, se relaciona con la vejiga, está
inclinada algo hacia delante y es cóncava. La porción
anterior de la misma tiene fuertes conexiones con el
fondo vesical.
En la próstata pueden distinguirse
cuatro partes: un istmo, un lóbulo medio y dos
lóbulos laterales. El istmo es la porción situada por
delante de la uretra. El lóbulo medio es la porción
posterosuperior, que queda por detrás de la uretra
entre los conductos eyaculadores que le sirven de
límites. El resto del órgano son los lóbulos laterales.
En el interior de la próstata está en el interior de un estuche fibroso, el
cual es una verdadera celda, formada por varias láminas de tejido conjuntivo; estas
láminas fibrosas la rodean por delante, por los lados y por detrás (Fig. 5). La lámina
posterior es la de mayor entidad, y suele denominarse aponeurosis prostatoperitoneal,
porque desde el vértice de la glándula abraza su cara posterior y por arriba se fija en el
peritoneo (Fig. 6) (Fig. 7).
3
Antonio M. Paredes Ramírez
I.E.S. La Fuensanta
Córdoba
FISIOLOGÍA.
La próstata secreta un líquido alcalino claro de aspecto lechoso que
contiene ácido cítrico, calcio, fosfatasa ácida, una enzima coagulante y una
profibrinolisina. Durante la eyaculación, la cápsula de la glándula prismática se contrae
de manera simultánea con las contracciones del conducto deferente y vesículas
seminales, de manera que el líquido fluido y lechoso de la glándula prostática se une a
la masa del semen. La característica alcalina esencial del líquido prostático puede ser
muy importante para una buena fertilización del óvulo, pues el líquido del conducto
deferente es relativamente ácido debido a la presencia de productos terminales del
metabolismo de los espermatozoides y, en consecuencia, inhibe la fertilidad de éstos.
También las secreciones vaginales son de tipo muy ácido (pH de 3.5 a 4.0) El esperma
no logra su mejor motilidad hasta que el pH de los líquidos vecinos se eleva hasta 6 o
6.5. En consecuencia, es probable que el líquido prostático neutralice la acidez de las
demás secreciones después de la eyaculación y aumente considerablemente la motilidad
y fertilidad de los espermatozoides.
4
Antonio M. Paredes Ramírez
I.E.S. La Fuensanta
Córdoba
HISTOLOGÍA.
La próstata es de consistencia firme y está rodeada por una cápsula fina,
que contiene tejido conectivo y
fibras
lisas.
El
parénquima
prostático está compuesto de un
gran
número
de
glándulas
individuales que desembocan por
conductos separados en la uretra
prostática y están dentro de un
estroma, que es una mezcla de
músculo liso y tejido conectivo
fibroso (Fig. 8).
El corte transverso de la
próstata (Fig. 9)muestra que la luz de la
uretra prostática tiene forma de V, con la
punta en sentido anterior. La porción de
la pared posterior de la uretra que
sobresale hacia delante, para que el
orificio tenga forma de V en el corte
transverso, se llama cresta uretral. Las
dos porciones posterolaterales de la V
constituyen los senos uretrales (Fig. 10).
En las tres regiones
concéntricas alrededor de la uretra están
distribuidas glándulas prostáticas
tubuloalveolares, compuestas de tres
partes: las más pequeñas de ellas son las
mucosas, en el tejido periuretral y son
importantes en relación con la hiperplasia
prostática benigna en ancianos, porque
precisamente muestran hipertrofia hasta
formar nódulos adenomatosos (Fig. 11). Las
glándulas submucosas están dispuestas en el anillo de tejido alrededor de la zona
5
Antonio M. Paredes Ramírez
I.E.S. La Fuensanta
Córdoba
periuretral. Las glándulas
principales que generan
casi toda la secreción están
situadas en la porción
externa y mayor de la
próstata. Las glándulas
mucosas se abren en
diversos puntos, alrededor
del calibre interior de la
uretra, pero los conductos de las glándulas mucosas y principales, desembocan en el
borde posterior de los senos uretrales (Fig. 12)
Los conductos eyaculadores subdividen de manera imperfecta la próstata
en tres lóbulos, a su vez
subdivididos de manera irregular
en lobulillos compuestos de
unidades secretoras
tubuloalveolares, que producen su
secreción y que están adaptados
para almacenarla, por lo que
tienen una imagen dilatada. El
epitelio secretor de la próstata
está excesivamente plegado, razón por la que sus unidades secretoras se llenan con un
volumen notable de secreción almacenada. Esta disposición, junto con la presencia de
un estroma fibromuscular, es decir, tejido conectivo denso ordinario, mezclado con
músculo liso entre los lobulillos, hace que la próstata tenga una imagen microscópica
característica.
El epitelio de las unidades secretoras y sus conductos suele ser cilíndrico
alto. Entre estas células altas están distribuidas regularmente otras de menor tamaño,
aplanadas o redondeadas. Las células cilíndricas altas tienen un complejo de Golgi
notable entre su núcleo y su borde luminal. A veces se identifican concreciones
calcificadas dentro del orificio central de las unidades secretoras prostáticas,
particularmente en cortes de la glándula de ancianos. Por debajo del epitelio existe una
lámina propia fibrosa, en la que se observan abundantes capilares.
6
Antonio M. Paredes Ramírez
I.E.S. La Fuensanta
Córdoba
CITOLOGÍA.
Si bien casi nunca se realiza la punción-aspiración de la próstata normal,
se obtienen células esencialmente normales de la mayoría de los pacientes con
hiperplasia prostática benigna. Las células de la glándula prostática forman láminas
cohesivas aplanadas y se presentan de tamaño y configuración uniformes, con núcleos
redondos centrales, un citoplasma claro y bordes celulares bien delimitados; esto les
imparte un aspecto de panal de abejas. Los nucleolos son minúsculos, muy difíciles de
ver o faltan por completo, aunque pueden observarse cromocentros. El tamaño uniforme
de los núcleos pequeños y los nucleolos minúsculos o ausentes son características
importantes de las células glandulares normales.
Las células mioepiteliales pueden ser identificadas por sus pequeños
núcleos fusiformes hipercromáticos, los que se encuentran comúnmente dentro de las
láminas de células glandulares o como núcleos aislados dispersos en el fondo del frotis.
Las células cúbicas o cilíndricas de los conductos prostáticos forman
conglomerados pequeños; dentro de ellos, se aprecia con claridad la estructura de las
células individuales. Por lo general, las células muestran una superficie plana, que
corresponde a la luz del conducto; en comparación con las células glandulares, poseen
un citoplasma claro algo más opaco, pero los núcleos son de tamaño y configuración
similares.
Contaminantes celulares comunes.
El material aspirado de la próstata por vía transrectal con aguja fina
puede contener células de los órganos adyacentes, a veces como resultado de errores del
procedimiento durante la aspiración. Las células de la mucosa rectal y de las vesículas
seminales son las que aparecen con mayor frecuencia.
7
Antonio M. Paredes Ramírez
I.E.S. La Fuensanta
Córdoba
► Células de la mucosa rectal.
Las células características del epitelio rectal son mucho más grandes que
las células normales de origen prostático. En los frotis existen dos tipos principales de
epitelio colónico: Las células cilíndricas altas con citoplasma opaco y las células
caliciformes distendidas que poseen un característico citoplasma claro ocupado por
mucina. Los núcleos de los dos tipos celulares son redondos o ligeramente elongados y
pueden contener nucleolos pequeños. Las células epiteliales del colon pueden aparecer
aisladas o en grupos compuestos de células cilíndricas o de una mezcla de células
cilíndricas y caliciformes.
Las células del epitelio rectal suelen formar grandes láminas aplanadas
cohesivas que adoptan aspecto de panal de abejas. En estas láminas a veces se observan
estructuras glandulares revestidas por células cilíndricas altas. En la periferia de las
láminas, las células epiteliales pueden disponerse en empalizada.
► Células de las vesículas seminales.
Las células de las vesículas seminales (Fig. 13)son más grandes que las
de la glándula prostática
normal y poseen una forma
ovalada, triangular o
cilíndrica. Estas células,
que suelen formar
conglomerados pequeños o
también presentarse en
forma aislada, poseen un
citoplasma ligeramente
vacuolado que contiene un
pigmento pardo-amarillento característico distribuido en gránulos gruesos. Sus núcleos
constituyen el rasgo más característico de estas células; éstos son de tamaño variable y
en ocasiones pueden ser de 4 a 8 veces mayor que los núcleos de las células prostáticas
normales, reflejando esto último en el contenido poliploide de ADN (Fig. 14).
8
Antonio M. Paredes Ramírez
I.E.S. La Fuensanta
Córdoba
A veces, los núcleos poseen contornos irregulares y suelen presentar una
hipercromasia difusa sin ninguna textura cromatínica. En ocasiones, la cromatina se
distribuye en grumos gruesos y aparecen nucleolos prominentes. Las células aspiradas
de las vesículas seminales a menudo se acompañan de espermatozoides y sus
precursores, macrófagos que contienen las cabezas de espermatozoides fagocitados y
cuerpos esferoidales eosinófilos de secreciones espesadas.
Las células de las vesículas seminales son una fuente importante de error
diagnóstico potencial puesto que se las puede confundir con células de las un cáncer
anaplásico. El pigmento citoplasmático y la presencia de espermatozoides suele permitir
una fácil identificación (Fig. 15)
► Células uroteliales.
Es posible que se produzca la penetración accidental de la aguja en la
uretra y estos determina la aspiración de células uroteliales que pueden aparecer de dos
tamaños: las grandes células superficiales aplanadas a menudo con más de un núcleo
(células de Dogiel o células en paraguas) y las células uroteliales elongadas más
pequeñas de las capas más profundas del epitelio.
► Células pavimentosas.
Las células pavimentosas de los aspirados prostáticos pueden tener su
origen en el revestimiento epitelial de la uretra o en los infartos de la próstata que sufren
9
Antonio M. Paredes Ramírez
I.E.S. La Fuensanta
Córdoba
una metaplasia pavimentosa. Las células pavimentosas de metaplasia forman láminas o
conglomerados compuestos de células mucho mayores que las de la glándula prostática
normal y poseen abundante citoplasma poligonal basófilo de límites nítidos que a
menudo muestra prolongaciones citoplasmáticas. Los núcleos son grandes y granulares
u contienen nucleolos voluminosos
Cuerpos amiláceos.
Los alvéolos prostáticos, especialmente en hombres ancianos, suelen contener
cuerpos amiláceos de distintas formas y tamaños, a menudo hasta de 2 mm de diámetro.
Suelen aparecer como cuerpos laminados concéntricos y se cree que se forman por
precipitación de las sustancias de secreción alrededor de fragmentos celulares. Pueden
calcificarse en parte.
(Fig. 16)(Fig. 17)
10
Antonio M. Paredes Ramírez
I.E.S. La Fuensanta
Córdoba
HISTOPATOLOGÍA.
PATOLOGÍA NO TUMORAL:
•
PROSTATITIS AGUDA
•
PROSTATITIS CRÓNICA
•
PROSTATITIS GRANULOMATOSA
•
HIPERPLASIA PROSTÁTICA
► Hiperplasia
En la hiperplasia glandular benigna es aparente la naturaleza nodular de
la lesión. Las glándulas están aumentadas de tamaño y el epitelio se dispone formando
papilas que contienen un eje fibrovascular llamativo. Las células superficiales son de
cúbicas a cilíndricas, y las células basales están aplanadas.
En la hiperplasia de células basales, las células basales de los acinos
proliferan hasta que rellenan las luces.
► Adenomiomatosis.
Se hallan territorios glandulares focales, en parte atróficos y en parte
hiperplásicos, así como una hiperplasia del estroma fibromuscular.
► Prostatitis.
En la prostatitis crónica inespecífica (Fig. 18)hay, histológicamente,
infiltrados focales de células
redondas. La forma crónica
recidivante muestra
preferentemente un cuadro de
inflamación intersticial con
infiltrados de células redondas y de granulocitos.
En la forma granulomatosa (Fig. 19) (Fig. 20)se
observan los típicos granulomas (a menudo, con
11
Antonio M. Paredes Ramírez
I.E.S. La Fuensanta
Córdoba
granulocitos eosinófilos y células gigantes polinucleadas). La inflamación purulenta
(Fig. 21)es de tipo intersticial e intracanalicular.
►Carcinoma prostático.
Se admite una posible célula basal atípica como célula a partir de la cual
se origina la neoplasia. En los primeros estadios del carcinoma de próstata de esta célula
tumoral se formaría una estructura histológica uniforme (glandular o sólida). Los
tumores avanzados muestran estructuras mixtas. Pueden diferenciarse cuatro formas de
crecimiento:
I.
Adenocarcinoma altamente diferenciado.
II.
Adenocarcinoma poco diferenciado.
12
Antonio M. Paredes Ramírez
I.E.S. La Fuensanta
Córdoba
III.
Carcinoma cribiforme.
IV.
Carcinoma sólido anaplásico.
CITOPATOLOGÍA.
1) Prostatitis.
► Prostatitis aguda.
Los frotis muestran un exudado purulento que se caracteriza por la
presencia de neutrófilos, macrófagos y algunas láminas pequeñas de células epiteliales
vacuoladas en proceso de necrosis. En ocasiones, las células epiteliales reactivas pueden
poseer núcleos grandes y nucleolos conspicuos. Mientras que la presencia de nucleolos
en las células epiteliales prostáticas es de gran importancia en el diagnóstico de un
carcinoma de próstata, la presencia de un exudado purulento y de necrosis debe impedir
el diagnóstico falso de carcinoma.
Su cuadro clínico es el propio de una inflamación. El diagnóstico se realiza por
la historia clínica y el tacto rectal. En caso de necesitar citología se realiza un masaje
prostático en donde se evidencia un fondo inflamatorio, con predominio de
polinucleares en diferentes grados de conservación y junto a ellos moderada o nula
cantidad de células glandulares prostáticas con fenómenos degenerativos.
► Prostatitis crónica inespecífica.
Es más frecuente que la anterior. Hay que diferenciarla de la hiperplasia
adenomatosa que va acompañada con frecuencia de un infiltrado inflamatorio
linfocitario. Aquí lo que domina el cuadro es el componente inflamatorio aunque
pueden aparecer placas de células glandulares análogas a las de la hiperplasia.
Las células inflamatorias son en su gran mayoría linfocitos y células
plasmáticas, macrófagos mononucleares con citoplasma vacuolado y macrófagos
gigantes multinucleados de tipo por cuerpo extraño. Las células epiteliales suelen
disponerse en láminas pequeñas con núcleos de distribución uniforme. En ocasiones, los
núcleos de las células epiteliales aparecen algo agrandados y la configuración habitual
de los conglomerados celulares está alterada.
13
Antonio M. Paredes Ramírez
I.E.S. La Fuensanta
Córdoba
► Prostatitis granulomatosa específica.
Los frotis típicos de la prostatitis tuberculosa poseen masas necróticas y
conglomerados de
células epiteloides
elongadas que se
acompañan de
células gigantes de
tipo Langhans. El
diagnóstico debe
confirmarse
bacteriológicamente.
(Fig. 22) (Fig. 23) (Fig. 24)
Es la menos frecuente pero más interesante desde el punto de vista citológico. El
cuadro citológico viene dado por la presencia de abundantes células glandulares
prostáticas que se presentan aisladas o agrupadas en placas compactas y que con
frecuencia muestran aumento de tamaño y de la actividad nuclear, llegando a presentar
nucléolos prominentes.
Los frotis nos muestran además un importante componente inflamatorio donde
destacan células epitelioides y elementos gigantes y multinucleados propios de esta
prostatitis.
14
Antonio M. Paredes Ramírez
I.E.S. La Fuensanta
Córdoba
2) Hiperplasia prostática:
Consiste en un aumento del tamaño o de la consistencia de la glándula
que determina trastornos en la micción por compresión uretral.
Histología
Se caracteriza por presentarse en la zona central de la próstata y mostrar
una proliferación de elementos ductales y acinares.
Puede afectar tanto a estructuras glandulares como al tejido conectivo y
muscular, dando, en cada caso, lugar a manifestaciones clínicas y microscópicas
específicas.
Cuando la hiperplasia es preferentemente glandular, la próstata aumenta
ostensiblemente de tamaño y su tacto es blando y homogéneo. En ocasiones, sobre este
cuadro descrito encontramos nódulos aislados de mayor consistencia que plantean
problemas de diagnóstico diferencial y que se puncionarán.
15
Antonio M. Paredes Ramírez
I.E.S. La Fuensanta
Córdoba
Cuando la hiperplasia se desarrolla con afectación preferentemente
fibromuscular, la próstata es dura y firme con nodulaciones claramente palpables y su
tacto se asemeja al de la glándula neoplásica.
CITOLOGÍA
En los casos de hiperplasia estromal, el material obtenido es muy escaso y en
ocasiones totalmente insuficiente para su diagnóstico. El estudio de los frotis muestra la
presencia de una sustancia de fondo serosa o serohemorrágica sobre la que encontramos
mayor o menor cantidad de elementos celulares, dependiendo del tipo de hiperplasia,
que se presentan generalmente agrupadas en placas, que constituyen verdaderos trozos
de tejido y muestran bordes netos y bien definidos. Los elementos que los integran
suelen ser monomorfos de núcleos redondos u ovales.
Las células predominantes en los frotis son aquellas de estirpe epitelial;
Éstos típicamente se disponen en láminas monoestratificadas y en conglomerados: El
aspecto morfológico de las láminas es el característico de las células glandulares
benignas: las láminas son cohesivas y constan de células poligonales estrechamente
adheridas unas a otras con un
citoplasma pálido bien delimitado que
les imparte un aspecto en panal de
abejas (Fig. 25). Los pequeños
núcleos centrales redondeados de estas
células se distribuyen uniformemente
sin agrupamiento o superposición. Los
núcleos poseen una cromatina
finamente granular dispersa con pocos
cromocentros y nucleolos invisibles.
Estas láminas de células suelen
presentar bordes bien definidos con pocas o ninguna célula en la periferia.
Ocasionalmente, es posible observar los núcleos hipercromáticos ovales o elongados
pequeños despropósitos de citoplasma, correspondientes a las células mioepiteliales, en
el interior de algunas láminas o en su periferia (Fig. 26).
16
Antonio M. Paredes Ramírez
I.E.S. La Fuensanta
Córdoba
Las secreciones prostáticas condensadas, denominadas cuerpos
amiláceos, se identifican
fácilmente en los frotis como
grandes masas basófilas o
anfófilas, ovales o
redondeadas, que por lo general
presentan una estructura
laminar concéntrica. A veces,
los cuerpos amiláceos se
encuentran rodeados por
macrófagos o células tuboalveolares benignas.
En ocasiones pueden encontrarse algunas células pavimentosas benignas
que corresponden a focos de metaplasia. También pueden presentarse células
inflamatorias, principalmente linfocitos, células plasmáticas y neutrófilos que reflejan
una reacción inflamatoria crónica. A veces, los frotis contienen pequeños fragmentos de
estroma prostático compuesto por células fusiformes alargadas con núcleos elongados;
polos nucleares aguzados o terminados en punta sugieren fibroblastos, mientras que
polos redondeados o romos son más propios de la célula muscular lisa.
3) Carcinoma Prostático
Se manifiesta por un mayor o menor síndrome prostático.
A la palpación, en fases iniciales, encontramos nódulos de tamaño variable y
consistencia dura. El tumor va aumentando de tamaño hasta ocupar toda la próstata o
invadir estructuras vecinas.
Su incidencia es elevada siendo una de las causas más frecuentes de muerte por
cáncer en el varón adulto.
HISTOLOGÍA
Es característico su asentamiento en la zona periférica. La invasión del estroma,
la de la cápsula prostática y las estructura vecinas son elementos de diagnóstico y
pronóstico.
17
Antonio M. Paredes Ramírez
I.E.S. La Fuensanta
Córdoba
Se pierde el sentido de distribución radial de las glándulas y aparecen un gran
número de acinos y microacinos glandulares que no respetan la distribución típica de la
glándula.
CITOLOGÍA
Nos interesa no sólo el diagnóstico de benignidad o malignidad, sino el grado de
diferenciación del tumor:
► Carcinoma bien diferenciado.
Este grupo de tumores
presenta las mayores dificultades
diagnósticas y el diagnóstico diferencial con
una hiperplasia prostática puede ocasionar
grandes problemas (Fig. 27). Es en este
grupo de tumores que las células neoplásicas
se dispone en láminas aplanadas con un
patrón en panal de abejas. Estas células
difieren de las células benignas sólo por
sus núcleos ligeramente agrandados, algo
hipercromáticos y por la presencia de
nucleolos (Fig. 28). La búsqueda de
células aisladas con evidencias claras de
agrandamiento de los núcleos,
hipercromasia nuclear y nucleolos
visibles es obligatoria antes de que se
pueda efectuar un diagnóstico inequívoco de cáncer.
18
Antonio M. Paredes Ramírez
I.E.S. La Fuensanta
Córdoba
Los frotis muestran una sustancia de fondo serosa o serohemorrágica sobre la
que encontramos un patrón celular muy semejante al de la hiperplasia adenomatosa, con
mayor o menor número de placas de células glandulares de caracteres normales. Junto a
ellas observamos la presencia de formaciones acinares en ocasiones perfectamente
conservados y cuyos elementos muestran citoplasmas íntegros y bien definidos. Los
núcleos suelen presentar nucléolos prominentes.
Se observan pequeñas placas de bordes desflecados o simples acúmulos de
células glandulares que se van soltando de la placa, mostrando una disminución de la
cohesión estructural.
Estos elementos presentan núcleos muy discretamente aumentados de tamaño
pero frecuentemente nucléolados
Estos 4 factores: formación de accinos, discreta dispersión celular, ligero
aumento del tamaño nuclear y nucléolos claramente visibles, son las claves para el
diagnóstico.
► Carcinoma moderadamente diferenciado.
Es una forma de transición entre el anterior y el siguiente, por lo que sus
características variarán según la proximidad a cada uno de ellos.
Encontramos material celular abundante en donde llama la atención la cantidad
de elementos celulares aislados.
A mayor aumento los núcleos, generalmente desnudos, muestran un incremento
de tamaño, a veces doble. No aparecen monstruosidades pero la anisocariosis y los
nucléolos prominentes son frecuentes.
Los frotis contienen tanto láminas y conglomerados celulares como
células aisladas dispersas. El
patrón glanduliforme
microadenomatoso es tan
prominente como en los frotis
del carcinoma bien
diferenciado. Las células,
dispuestas en láminas o
conglomerados pequeños, y las
que yacen aisladas, varían de
acuerdo a forma y tamaño. Los núcleos son grandes e hipercromáticos con cromatina
distribuida en grumos gruesos y nucleolos de gran tamaño.(Fig. 29)
19
Antonio M. Paredes Ramírez
I.E.S. La Fuensanta
Córdoba
►Carcinoma poco diferenciado.
Es el de mayor grado de anaplasia. El cuadro citológico viene dado por una
sustancia frecuentemente hemorrágica sobre la que encontramos abundantes células
glandulares prostáticas que se presentan generalmente aisladas o en acúmulos que no
constituyen estructuras definidas y cuyos elementos muestran un marcado aumento de
tamaño y de la actividad nuclear, dando lugar a núcleos gigantescos, con marcada
anisocariosis y uno o más nucléolos evidentes.
Las células neoplásicas aparecen en su mayoría aisladas (Fig. 30)y forman pocos
conglomerados no se observan láminas grandes ni conglomerados celulares y no se
hace
evidente
el
patrón
microadenomatoso. Algunos de los
carcinomas poco diferenciados se
caracterizan
por
sus
células
neoplásicas pequeñas con escaso
citoplasma mal definido y núcleos
hipercromáticos
redondeados
u
ovales.(Fig. 30)
20